Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Descubriéndonos por Grendel

[Reviews - 19]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

No mucho que decir, resubiendo el fic desde otra cuenta :D

 

Hoy el es peor día de mi vida.  

Abro la puerta y quedo pasmado. ¿Qué hace él aquí?  

-Hola Josh ¿Qué hacías?-me pregunta, no puedo evitar ponerme colorado, desviar mi cara hacia un lado y pensar una respuesta rápida y creíble.

Llegué del instituto cansado y desganado, hoy me fue horrible. Entro en mi habitación, pongo llave a la puerta y de un salto me tiro en mi cama, me estiro y pienso en él, en Alex. ¿Qué se sentirá? ¿Cómo será tenerlo en mis brazos y oler su fragancia, su masculinidad, rozar su piel con la mía con intenciones que no son amistosas, sino lujuriosas?  

Pienso en él, en como lo vi de reojo en las duchas del instituto y tuve que cambiar abruptamente el agua caliente a fría para que no notaran mi excitación, en realidad para que él no la notara. La verdad es que el resto de las personas no me importan, el único que me importa es él, con esos ojos tan hermosos, uno celeste y el otro azul, su cabello castaño y su boca rosada que cuando se enoja se vuelve ligeramente roja, y su cuerpo bastante desarrollado para alguien de nuestra edad, por algo es el capitán del equipo de fútbol del instituto.  

-Mierda-casi grito. Y si, otra vez me pasa que de solo pensarlo mis partes mas blandas comienzan a endurecerse y paseando con mi mano por mi torso, tan poco desarrollado al punto de parecer una nena, y  metiendo mi otra mano dentro de mi pantalón comienzo a soñar despierto que esas manos que me están tocando no son las mías, sino las suyas. La excitación se me sube más rápido de lo que quisiera, pero pensar en él me vuelve más libidinoso.  

Escucho lejanamente la voz de mi madre llamándome, seguro que es para comer, pero ahora tengo cosas mucho más importantes que hacer, como puedo y con la voz más clara que logro poner le grito que no quiero comer.  

Mi mente vuelve a concentrarse en él, en su cuerpo siendo obstáculo del agua de la ducha que marca perfectamente su cuerpo y de su mano acariciándose involuntariamente con el jabón. Mi mano se apura y con un gemido ahogado libero esa ansiedad, ese deseo que me mata a diario, al saber que lo tengo cerca y no puedo tenerlo como yo quisiera. Me levanto y me dirijo a mi baño, me limpio y me desnudo para cambiarme de ropa, busco un bóxer y una camiseta manga larga, nada mejor para poder estudiar tranquilo y solo en mi habitación.  

Escucho pasos acercándose a mi puerta y unos leves golpecitos en ella. Un poco irritado, le saco la llave a la puerta y abro.

-Mamá, no quie… ¿Alex?- me quedé de piedra  



Cerebro elaborando respuesta creíble... respuesta creíble elaborada:

-Eh, nada, estaba por comenzar el trabajo que nos mandaron hoy -Sonrío y me mira de arriba abajo repasando mi cuerpo y retardándose en esas zonas que tanto se inquietan con su presencia.

-¿Tanto apuro tenías que no te pusiste pantalones?

¿Me puede pasar algo peor?

-Jajaja, si no fuera tu amigo y no nos conociéramos de pequeños creería que intentas seducirme.-Me dice y se ríe. Si supiera la verdad…Me sonrojo y el hace caso omiso a mi reacción. Entra y deja su mochila en el piso alfombrado de mi habitación, va corriendo hacia mi cama y de un brinco se acuesta en ella. Yo lo miro, admirando ese cuadro, que nunca se me presenta de esa manera una imagen digna de un museo por ser la más bella del mundo: él recostado en mi cama, con un brazo colgando hacia un costado, con el otro abrazando mi almohada acostado boca abajo y mirándome con esos ojitos de cachorro que pone cuando me va a…

-Necesito pedirte algo…-Ya lo suponía

-¿Qué es ahora?- lo miro con cara seria y suspiro. No me puedo negar a tremenda belleza…  Se levanta y comienza a caminar por mi habitación, se que se hace el interesado, pero lo miro preocupado porque se acerca al lugar donde guardo cosas que no quisiera que nadie en el mundo viera, claro qué el cree que es un cajón de ropa más, le encanta revisar mis cosas, pero nunca llego hasta ese cajón.

Buscando algo que decir… rápido, cerebro procesando más rápido la información, buscando algo que decir… algo que decir encontrado:

-¿Qué necesitas pedirme?- ¡¡¡No!!! me paro y con desesperación me acerco hasta él, ya abrió el cajón que olvidé cerrar con llave, y ya las vio, lo sé por su cara…

Si, puede empeorar más.

-¿Qué es esto?-Me mira y luego vuelve su cara al cajón, toma una revista, la pone frente a mi cara y me pregunta de vuelta- ¡¿Qué es esto?!- Lo miro con cara de derrota y me pongo a llorar… ahora todo está perdido.-Josh, contéstame, ¡¡¿¿ESTO ES UNA REVISTA PORNO GAY??!!- casi grita. Me caigo al suelo de rodillas y lloro, en silencio.

Escucho como tira la revista sobre las demás que hay en mi cajón.

-No puedo creerlo, ¿por qué nunca antes me lo dijiste? ¿Acaso no soy tu mejor amigo, acaso no somos amigos desde chicos?-Me pregunta con enfado y desesperación, caminando de un lado a otro de la habitación.- ¿Desde cuándo te pasa esto? La verdad no logro entenderlo, es que… no la verdad no puedo. ¡¡Explícamelo porque no lo entiendo!!-Me grita.  

-P-p-por fa-favor, no gri-tes- logro decir entre sollozos- mi m-mam-ma está abajo.

-No, no está, se fue cuando yo llegué, pero explícate Josh. ¡¡¡Ahora!!!

Me tomo mi tiempo hasta calmarme, ahora también él está más calmado, se sienta en mi cama y yo en el piso en el mismo lugar en el que caí arrodillado.- No sé cuando pasó, pero pasó, y no te lo dije para no perder tu amistad.-Creo que mi vida se esta acabando con esto..

-Ja, ahora estas perdiendo mi amistad, por ocultármelo por tanto tiempo, por no confiar en mi, mira-se para y dirige nuevamente al cajón- revistas porno gay, imágenes, fotos... ¿tuyas?

-¡¡¡NO!!! No mires más- me levanto y corro hasta él para alejarlo de mis secretos, de mi lado oscuro y sucio, de mi realidad que me separará de él. Le tomo una mano para sacarlo de ahí, pero al ser mas fuerte que yo me hala al suelo

-¡¡¡BASTA ALEX, NO MIRES MAS!!!- grito.-por favor Alex-digo en un hilo de voz,  derramando lágrimas nuevamente.

Está callado, se que las está viendo, fotos que me saque yo mismo desnudo o muy ligero de ropa y haciendo cosas sugerentes, otras son las fotos en las que estamos los dos, desde pequeños, montones de fotos nuestras que alguna vez llené de corazoncitos. Están las cartas que le escribí declarándole mi amor y nunca le mande, lo único que atino a hacer es irme de ahí, me levanto del suelo y cuando me dispongo a ir a la puerta para escapar, me toma del brazo, y me empuja al lado opuesto, corre hasta la puerta, la cierra con llave y se la guarda.

-No te vas a ir, hay muchas cosas que me tienes que explicar- y se acerca otra vez al cajón a revisar, lo único que pude hacer es acostarme en mi cama y llorar, lo más silencioso que pude.

Siento una mano que me mece lentamente, me despierto.

¿Todo fue un sueño?

Ruego que así sea y abro los ojos. Al lado mío está él mirándome enojado. Me siento lentamente en mi cama y me llevo una mano a mi cabeza, me duele después de tanto llorar. Me mira e inesperadamente me abraza. Me quedo estupefacto, después de bastante tiempo reacciono y lo rodeo con mis brazos, levanta su cabeza y me mira, se separa de mí y me pregunta:

-¿Por qué nunca me lo dijiste? ¿Por qué nunca me dijiste que yo…? Tu, tu entiendes.- me dice incómodo.

Medito mi respuesta, no es fácil. Tardo menos de lo que quisiera  en contestarle -Por no perderte, prefiero tenerte cerca como amigo y sufrir por no poder ser más que eso, a no tenerte de ninguna forma.-Lo miro y aparto mi mirada rápidamente, no lo puedo tolerar.- Ser feliz e infeliz al mismo tiempo a ser totalmente infeliz. Seguro que ya viste todo lo del cajón - asiente lentamente, pero ¿por que ya no me mira enojado?- entonces entiendo que no quieras saber ya nada más con nuestra amistad ni conmigo ni nada. Lo único que te pido es que no le cuentes a nadie de esto, se que debe ser vergonzoso, pero no quiero perder a nadie más.-Digo ya comenzando de vuelta a llorar. - Por favor, ahora te pediría que me dejes solo Alex. Gracias por esos años de amistad…Pero, por favor, quiero estar solo.- Me acuesto en la cama y cierro los ojos fuertemente para intentar amortiguar el dolor de mi alma.

Oigo sus pasos en el suelo alfombrado y aprieto más los ojos, no quiero saber cuando se vaya, solo lograría hacer que mi corazón se rompa todavía más. Escucho un ruido seco poco perceptible, pero no abro los ojos de vuelta. Seguro ya se fue. Siento una mano pasar por mi cintura y abro los ojos como platos, las luces están apagadas, me giro y lo veo sentado en mi cama, con el brazo que me abrazó, me arrastra hacia él y se acuesta al lado mío. Me toma de las muñecas y lleva mis manos hacia arriba, sobre mi cabeza. Se encarama sobre mí y me mira con los ojos nublados.

-A-Alex, ¿que ha-haces?-Pregunto sorprendido, el se acerca lenta y delicadamente hacia mi cara y pienso un instante en dejarme llevar, pero algo me retiene en la realidad, conozco a la persona de la cual estoy totalmente enamorado, seguro que en este momento me quiere jugar una broma. El sigue mirándome con los ojos entreabiertos a unos centímetros de mi cara.-B-b-basta Alex, no es gracioso...

Me remuevo debajo de él pero el refuerza su agarre y con sus piernas aprieta las mías para inmovilizarme, junta mi mano con la otra y me las agarra con su mano derecha con mucha fuerza. Su mano izquierda baja lentamente acariciando mi brazo, pasando por mi pecho y llegando al borde del bóxer, pasa su mano por debajo de mi camiseta y con un dedo comienza a subir quemando mi piel.

-¿Quien dijo que es una broma?-Pregunta con una voz tremendamente sensual acariciándome la boca con su aliento mentolado. Me estremezco, la verdad es que es una sensación que calentaría a cualquiera, mi mejor amigo, mi amigo de la infancia sabe que me gusta y me está seduciendo. Eso es muy sucio.

-A-Alex- digo sonrojándome y mirando hacia otro lado, su dedo llega a mi pezón y comienza a rozarlo haciendo círculos, suspiro y siento su lengua en la base de mi cuello, comienza a subir marcando territorio entre besos y lamidas, me estoy calentando muy rápido, lo escucho decir que me las va a hacer pagar, sonrío, y me suelta de su agarre. Sube un poco más y se sienta sobre mi vientre.

-Josh, te portaste muy mal conmigo, ¿sabías?-dice con una sonrisa malvada y con sus ojos encendidos, asiento con la cabeza para seguirle el juego-ahora vas a tener que portarte bien conmigo, amiguito…-y diciendo esto comienza a desabrocharse la hebilla del cinturón y los pantalones, se baja de encima mío y se sienta en el borde de la cama.-Ven, ya que tanto te gusto, ahora convénceme para que tu me gustes…

Me paro, me arrodillo entre sus piernas y lentamente le bajo la ropa, pero le dejo el bóxer puesto, le saco los zapatos  y le saco los pantalones, comienzo a desabrocharle la camisa y a acariciar su pecho, lo oigo suspirar, todo se vuelve negro, pero siento un ruido apagado y lejano, pero es de la puerta, ¿mi mamá ya llegó? ¿Dónde está Alex? Me despierto súbitamente.

Fue un sueño, ¡¡¿¿Todo fue un maldito sueño??!!

 

 

 

 

Notas finales:

 

Bueno, se lo quiero dedicar a mi mamá y a mi papá que siempre me apoyaron (Mentira, ni lo saben), a mis amigos que siempre estuvieron conmigo apoyandome (Mentira, tampoco saben, excepto las yaoistas) y a mi terapeuta que no existe... Este fic va para ustedes :D

 

Recuerden que los fics se alimentan de reviews... No sean mala gente u.u


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).