Se Ha Perdido
¿Qué pasaría si perdieras algo que considerabas importante en tu vida? ¿Habría reemplazo? Exacto, el miembro más alto del grupo de K-Pop más famoso había perdido su celular, pero no era un celular cualquiera, iba más allá que un Nokia que rompía todo lo que tocaba, iba más allá de un lápiz que prestas y no lo vuelves a ver nunca más, iba más allá que sus nuevos zapatos importados de Italia…iba más allá de todo eso. Su celular, el cual poseía juegos, cámara, mp3, bluetooth, Wi-Fi, saldo hasta para el fin del mundo, etcétera; contenía el número de su adorable y lindo novio, JinKi, mejor conocido como Onew.
Ahora ya no tenía más ese celular, ¿Qué haría? ¿Esperar a que apareciese por sí sólo?
Aunque la oferta sonaba tentadora, nunca pasaría eso.
“Pequeño móvil del demonio, ¿Dónde rayos estás?” Lo había estado buscando todo el día, en la sala de estar, en la cocina, en su cuarto, en el cuarto de los demás miembros, pero no aparecía por ningún lado. Pero el problema ya estaba solucionado cuando JinKi entró con él en la mano.
“Minho-ah has perdido tu móvil de nuevo, esta es la décima vez en lo que va de la semana” sonrió. El menor lo imitó y tomó el celular. En ese mismo instante sonó el pequeño teléfono indicando que era un mensaje el que había entrado a la bandeja.
El pelinegro sonrió en sus adentros. El mensaje pertenecía a uno de sus hyungs favoritos, Changmin de dbsk; en él se podía leer “¿Podemos vernos hoy después de tu descanso?”.
Aceptaría a cualquier costo…entonces ¿Qué pasa con Onew?
Ya no le importaba tanto después de todo, ¿Qué ganaría estando con él?... ¿confianza? Ya la tenía desde que debutaron, ¿dinero? Ese lo obtenía de la empresa, ¿amor? Se lo podía dar Changmin…entonces, ¿Qué queda?...absolutamente nada.
Lo fue a ver, recurrió a las mentiras para poder sacarse a JinKi de encima…
“Minho-ssi, ¿estás preparado?” cada vez que escuchaba esa voz no podía contenerse.
“Changmin-hyung, ¿te gusta verme sufrir?” una pequeña sonrisa se dibujo en sus labios.
“¿Y qué pasa con Onew?” hay que recordar que tiene novio.
“¿Él? No es nada especial…no es como lo que tenemos tu y yo” y sus labios al fin se tocaron, se movían en un ritmo que marcaban sus corazones…uno latía por amor, amor a esa persona que ahora tenía en sus brazos, y el otro…bueno, no se puede hablar mucho de él…
¿Quién Es El tercero?
Uno, dos, tres…la cuenta ya la había perdido, y estar con la persona que amaba hacía que todo su mundo se pusiera al revés…nunca se había sentido tan feliz, hasta ahora.
Por el contrario, él que estaba en la peor situación era JinKi, quien sólo veía a su novio cuando ensayaban para un nuevo video musical. La relación que tenían se iba deteriorando poco a poco.
Él egoísta no era nadie, pero entonces, ¿Por qué suelen ocurrir las tristezas en las personas? Fácil, si Minho hubiera terminado antes con JinKi, ni uno moriría por la ausencia del otro, ni el otro moriría por cargo de conciencia.
El dilema aquí no era si se le era fiel a quien, el dilema era quien, y por su propia voluntad, había decidido cumplir eso a pie de la letra.
La relación es de dos…claro está. Pero ¿Qué sucede cuando el tercero en venir sobrando eres tú? No te queda más que aceptarlo, pero recordemos una cosa, tú no eres el protagonista de esta historia…ahora, recopilando de nuevo… ¿Qué pasaría si JinKi es el que viene sobrando en esta historia de dos? Él no lo sabe, no aún.
“Es cierto, créeme hyung” El menor de todos había hablado…que ironía: el menor explicándole al mayor.
“Taemin, eso no es cierto” El mismo se vendaba los ojos, no quería creer, no, ya lo creía, más no quería aceptar esa cruel realidad que lo llevaría al vacío de todo.
“Yo los vi, vi a Minho hyung junto con Changmin hyung…Minho se ha estado burlando de ti” todos en SHINee sabían de esto, menos, claro, el que ha estado siendo engañado.
Quería aceptar que eso no era cierto, una mentira y ya…pero, pongámonos a pensar más a fondo, ¿Quién era realmente el que tenía la culpa aquí? ¿JinKi por no darse cuenta de que está relación se le estaba yendo de las manos? ¿Minho por no importarle lo que pudiera pasar en un futuro? ¿O Changmin por hacer tal proposición a Minho?
Tal vez todos sean culpables, tal vez ninguno lo sea, tal vez uno se burla de los demás, tal vez se tratan de burlar de los demás, pero sólo hacen empeorar la situación.
JinKi, quien en cada relación entregaba corazón y alma, estaba siendo engañado de la peor forma…sin embargo, no quiere aceptarlo.
“Son solo rumores” Sólo reía al recordar tal cosa que le dijo Taemin, pero en el fondo, y lo sabía muy bien, quería llorar, quería estar entre los brazos de esa persona a la que ya ni sabía si amaba, quería sentir ese calor que algún día perteneció sólo para él.
Un Juego Que Empieza A Funcionar
La sonrisa ya no vivía, se había acabado. Si reía era por compromiso, si respiraba era por inercia, si comía, no era porque necesitara del alimento, era porque lo obligaban. ¿Qué había hecho mal? ¿El enamorarse? No, simplemente no había respuesta. Si esa persona por la que había dado todo no estaba, entonces ¿de qué sirve hacer tales preguntas?
Felicidad era lo único que conocían, mas desconocían la desdicha del ser al que un día Minho amó, no realmente, pero tuvo y, aunque sea difícil de aceptar, tiene aún una relación.
Era hora de terminar con esta gran farsa que llevó a la depresión de una persona, la actitud, desde el principio, fue el producto de una diversión emocional. Una diversión de una persona no lo suficiente madura para aceptar que lo que hizo estuvo fuera de sus propios límites.
Al principio no pensaba dañarlo, nunca fue su intención hacer tal cosa, pero las incitaciones de Changmin se hacían cada vez más tentadoras, más que las de su propio novio.
“Hyung, ¿podemos hablar?” Eso que tenía que aclarar le quemaba la garganta, era como la mismísima lava recorrer todo su esófago.
“Dime…” JinKi estaba feliz, ya era hora de que hablaran como no lo hacían desde hace ya un tiempo atrás, aunque las palabras siguientes no serían lo que él esperaba.
“Te he extrañado tanto” ¿Comenzaría de nuevo con la gran mentira? Después de todo…dos son mejor que uno.
Un abrazo, un beso, dos, tres…se volvió un masoquista, si esta era la recompensa de todo el tiempo sin ningún tipo de contacto, se pelearía con el alto más seguido.
Se estaba arriesgando y de más, de los besos llegaron caricias, de las caricias llegaron tocamientos a partes privadas, pero no llegaron a nada más.
Todo empezaba a ser más claro con cada día que pasaba, Minho sólo buscaba a JinKi cuando había tenido una pelea con Changmin.
El maknae del grupo se daba cuenta de este juego manipulador que Minho estaba empezando a formar. La gente no aprende a ser egoísta…nada se aprende, todo se hereda.
Esto Se Debe Acabar
Esto ya es agotador, el que Minho sólo lo busque por compañía era cansado, sólo quería tener una relación como al principio, una donde el dialogo, las risas y sobre todo la confianza eran parte de un noviazgo digno de sólo ellos dos. Pero todo se estaba yendo por la borda, él ya no dormía bien, SHINee nunca estuvo tan mal como ahora.
Nadie reconocía al líder, el que un día con una sonrisa logró conquistar el corazón de varios de sus hyung –por no decir que todos- y sobre todo, también de dongsaengs; ya no era el mismo de antes.
Esto era un hoyo del que no podría salir, no si no estaba con la persona que amó, porque esto ya no era amor, era dependencia a sus caricias, besos, abrazos…si decidía dejarlo ir, entonces, ¿Qué le quedaría? Ya no habría más de esas cosas que un día lo hicieron sentir querido…amado.
Se sentía un miserable, ¿Cuándo es que empezó a disfrutar de la desdicha del otro? No, no la disfrutaba, la veía pero no hacía nada para detenerla. Su hyung estaba siendo lastimado y sabía muy bien que de él era la culpa, mas ahora ya no le importaba, no mientras siguiera con Changmin.
“Minho… ¿no es hora de que dejes a Onew a un lado?” Las opciones eran nulas, le decía o esto podría acabar de mala manera.
“Changmin hyung, te preocupas demasiado, JinKi es cómo un…la verdad no sé que es” sonrió, más el otro se limitó a asentir. El juego era un poco cruel…esto se estaba yendo de las manos. Esto ya no era un juego, era personal. Pero, ¿Por qué el menor se vengaría de Onew? ¿En realidad hay razones?
Habría que pensarlo bien después de todo…en realidad no sabía de que se preocupaba, al fin y al cabo, él no era el que estaba siendo engañado.
La humanidad se iba de poco en poco de sus cuerpos, ya no les interesaba más que la felicidad que cada uno recibía por parte del otro.
Quiere terminar con todo esto…pero no tiene la confianza de hacerlo. Si lo hacía, todo lo iba a perder…
“No se puede perder lo que nunca se tuvo” Y estaba ahí de nuevo, en posición fetal en su cama. Le daba vueltas al asunto día y noche…Minho era el que se burlaba de él, pero si lo aceptaba, y por más que lo intentaba, todo se iría…
Le parte el corazón ver a su hyung JinKi en esa situación, no le entraba en la cabeza porque alguien quisiera lastimarlo…pero, ¿habría razones para hacerlo?
Esto Ya Es Tarde
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“Hyung, hoy cumplimos tres meses de estar juntos” corrió para abrazarlo, pero JinKi estaba demasiado ocupado viendo su celular que no correspondió la acción. Había estado ocupado estos días que ya no se preocupaba tanto por su novio.
“Minho, ¿podemos hablar más tarde? Tengo muchos asuntos que atender” Y es que ser el líder de un grupo no era fácil, si alguien se equivocaba en algo él era el que pedía disculpas, si alguien no iba al ensayo él era el que volvía a pedir disculpas…en fin, era en él en quien recaía toda la culpa, pero también en sus logros lo felicitaban, le decían el buen líder que estaba siendo…todo tenía un balance.
“Pero hyung, yo quería pasar todo este día contigo” No quería que en su cumplimiento de este acontecimiento él mayor no la pasara con él.
“Lo siento, tengo algo importante que atender” Y se fue sin más, eso dolió en el corazón de Minho, eso le quebró lo que con tanto esmero reparó un día.
Así continuaron los días, lo que un día fue su novio hoy no era más que un espejismo en medio del desierto, un desierto que necesitaba agua, abundante agua que mojara el dolor de su corazón.
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Ahora se arrepentía de haberle hecho eso a Minho, pero no había sido su culpa, no del todo. Sabía que se había alejado…tal vez por eso es que se culpaba de no verle más.
“Si sólo hubiera estado más tiempo contigo Minho…” Sus reproches no ayudaban en mucho que digamos. La situación se empeoraba, lo que él vivía, si es que a esto se le puede llamar vida, era como ver uno de sus propios videoclips, esos con los que más se identificaba.
La suerte se había perdido en el mundo de supersticiones, nunca existió tal cosa, pero ahora, que estaba con Changmin, empezaba a creer en ella.
“Changmin-hyung, ¿acaso hice algo bueno en mi otra vida y por eso es que me aceptas?” una sonrisa, ese era el producto que se daba como resultado después de una larga sesión de besos y abrazos.
“Minho, aunque tu hubieras tenido otra vida y hayas hecho lo peor del mundo, yo te seguiría amando como lo he hecho hasta ahora” Las palabras de Changmin eran las más bastas para hacer sentir al menor en las nubes. El cielo ya no estaba arriba de ellos, a kilómetros de aquí; ahora vivían en él, estaban viviendo en un gran palacio de nubes, donde todo es más suave al contacto.
“Entonces, ¿fue suerte la que me ha tocado de ser correspondido?” No contestó, en vez de eso, tomó entre sus manos el rostro del menor y lo besó hasta que necesitaron del oxígeno.
Nunca Hubo Un Principio
Se caía, se desmoronaba, se acababa poco a poco….y la felicidad ¿Dónde quedó? Y el amor, ¿Cuándo se fue?...para empezar, ¿hubo amor desde un principio? Preguntas donde habría que buscar muy bien las respuestas, no se podían contestar por sí solas.
Moría poco a poco, el tiempo ya estaba definido en su vida, desde que empezó el todo de la gran nada, desde que la vida comenzó a ser una obligación y no una pasión, desde que el oxígeno comenzó a ser estorboso e impedir su gran muerte, desde que la venda fue quitada de sus ojos…
Esto se había acabado, no, nada hubo desde un principio, mas el mayor no quería aceptarlo, pero todo cambió desde que el río de lágrimas se hizo presente en sus propios ojos.
“Vamos Minho…es hora de que dejes a Onew” Las palabras se convertían en frases, las frases llegaban a dos pares de oídos…los de Minho…y los de JinKi.
Había ido para llevarle unas flores y, de alguna manera, “reconciliarse”, pero a medida que avanzaba la conversación eso se veía más lejano. Se vio como un estúpido, estando y sin poder hacer nada, no, bueno, si podía, pero el querer es poder y él ya no quería.
“Changmin hyung, ¿de qué te preocupas? Si al que quiero es a ti, no a ese intento de humano” ¿Ahora empezaban los insultos hacia su persona? Pero, tenía razón Minho, el intentaba ser un humano…pero sus esfuerzos se convertían en fracasos rotundos, y eso que eran esfuerzos.
Un impulso, había tenido un impulso para llegar en medio de esa charla y mirar a los ojos a esas dos personas que no odiaba, pero envidiaba por corresponderse entre sí. Cayó al suelo y no recuerda nada más.
Ahora, completamente seguro de que no estaba en el lugar ni en el mejor momento para su vida amorosa, pero ya lo sabía desde hace mucho, el aceptarlo es difícil, y más cuando eres una persona que no es digna de amar ni ser amada.
Todo era erróneo, simplemente todo, ya no había razón de seguir con esta farsa, ya no había razón de seguirse engañando a sí mismo…ya no había razón de seguir vivo…
Empezó a sentirse culpable cuando vio caer a JinKi estrepitosamente al suelo, sólo hasta entonces es cuando se preocupó por esa persona a la que un día le dijo “mi amor”.
“¿Así debía de acabar Minho?” Jonghyun entró en la habitación, que obscura, como el alma del mayor estaba, escondía todo el dolor y sufrimiento que un día entregó JinKi como única compañía.
“No, así no debió de haber acabado, lo siento” ¿con quién se disculpaba? ¿Con Jonghyun por ser su actitud así hacia JinKi? O ¿con JinKi por hacerle un daño profundo? Esto no debería de ser así, nada estaba hecho a como él quería, pero el destino no se rige por lo que quieres, se rige por tu actitud. Y le costó entenderlo.
“Sabes por lo que JinKi ha pasado… ¿ahora tu también le haces daño?” Sabía que el mayor había tenido estruendosas rupturas con varias personas en su pasado, él estuvo ahí para ofrecerle su hombro y que se sintiera a gusto el llorar…había sido su amigo desde antes…había sido todo para él. JinKi juraba y perjuraba el no volver a enamorarse, pero el corazón no sabe de palabras.
“La confianza es lo que primero enamora, pero si ya no hay eso, ¿Qué queda?” No entendía la propia pregunta de su dongsaeng, de todos modos no importaba, no ahora que habría que reparar el corazón lastimado de la persona que amaba, amó y siempre amará.
Era mejor dejar las cosas como estaban, no disculparse, no ir y decir palabras que no tenían sentido, no excusarse, porque en realidad ni le dolía el presenciar la imagen de su hyung desmoronarse. Minho nunca había sido cruel, pero él que empezó todo esto no fue él, sino el corazón por enamorarse de otra persona. Pero, ¿habría que ser así? ¿No decir nada y salir huyendo de lo que podría de pasar? Sólo tengo una palabra para describir a personas así…cobardes.