Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Sombras en la oscuridad por Yukikaze

[Reviews - 89]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Holaaa, muchisimas gracias a todos mis lectores y comentaristas.


¡Que disfrutéis del capitulo!

Llegada a Sierra Nevada

Naruto meció levemente a Natsumi, que se encontraba en sus brazos, para que despertara, la niña bostezo y abrió sus ojitos azules como el cielo

-Oto-chan-susurro la pequeña pelinegra-¿Ya hemos llegado?-preguntó con una voz que hizo derretir a todos sus tíos.

Natsumi era una niña muy inocente, sin malicia alguna, adoraba a sus padres y a todos sus tíos y primos aunque nunca los hubiera conocido en persona, sus padres, sobretodo su Oto-chan, le habían hablado mucho de todos sus tíos y ella con solo oír sus nombres ya los había aprendido a querer, había hablado muchas veces por teléfono con todos ellos y también con sus primos, Natsumi no entendía porque su padre rubio se reía cuando le preguntaba a Shisui si le gustaban las muñecas.

-Ya casi-respondió Naruto cuando sintió el bote que dio el avión al aterrizar en la pista, la niña se acomodo en los brazos del rubio y cerro sus ojitos nuevamente-No te duermas hija, ¿No querías conocer a todos tus tíos y primos?-preguntó, Natsumi abrió sus ojitos

-¿A todos?

-Todos, aunque Akira y Ryu están dormiditos, se pasaron toda la noche despiertos como tú, cuando lleguemos a la casa podrás dormir todo lo que quieras ¿De acuerdo cariño?

-Si-respondió sentándose en las rodillas de su padre y sintiendo dos pares de miradas sobre ella, Natsumi se giro lentamente para encontrarse con dos personas detrás de ellos, uno era muy parecido a su Papi con los cabellos largos y rubios, y los ojos azules como el mar y el otro tenía el cabello rojo como el fuego y los ojos verdes aguados.

Natsumi había visto antes a esas personas, en algunas fotos que su Papi le había enseñado, ¡Eran sus tíos!, Natsumi no sabía qué hacer, no tenía ni idea de cómo reaccionar, ella era un poco tímida.

Deidara viendo la indecisión en los ojos de su única sobrina, se sentó en el asiento libre que pertenecía a Sasuke que en estos momento hablaba sobre quien sabe que, con Itachi y Sai.

-Hola pequeña-saludo a su sobrina con una sonrisa

-Ho…la-dijo Natsumi un poco tímida, el pelirrojo sonrío a su sobrina y el acaricio los cabellos desde su posición detrás de ellos

-Hacía tiempo que deseaba conocerte Natsumi, Naruto habla mucho de ti-comentó el pelirrojo

-¿De mi?

-Por supuesto cariño-respondió Naruto-¿De quién iba a hablar si no es de mi hija?

-De mi hermanito-contesto Natsumi acariciando el vientre de Naruto por sobre la ropa, el rubio sonrío ante la inocencia de su hija, no sabía como había hecho para tener una hija con esos genes, pero esperaba que el próximo le saliera igual.

-No lo entiendo-murmuro Deidara-¿Acaso comiste algo extraño durante el embarazo?

-¡Por supuesto que no!, simplemente hago lindos bebés-dijo el rubio

-¿Tú solo?-preguntó Gaara alzando una ceja

-Bueno, el Teme también-acepto con renuncia mientras Deidara y Gaara se reían.

En ese momento un niño de cabellos negros y ojos grises apareció por el pasillo y se sentó sobre Deidara removiéndose un poco para acomodarse sobre él

-¿Estas cómodo?-preguntó el rubio, Shisui asintió sin ver la expresión de su padre y alzó su cabeza dejando ver sus ojos plateados, Naruto y Gaara lo observaron con ternura, era tan lindo…

-Tío Naru, ¿Puedo jugar con Natsumi?-preguntó observando a la pequeña quien le sonrío

-Está bien, pero no se muevan de aquí ¿Eh?-respondió el rubio levantándose del asiento y dejando a su hija allí, le hacía falta estirarse un poco

-No-respondieron ambos niños enseñando sus peluches favoritos, Shisui sacó a su querido Kyubi y Natsumi a un mapache gris que le había regalado su tío Gaara, al cual le había puesto el nombre de Shu.

Naruto suspiro mientras estiraba las piernas, había veces que ni él mismo lograba entenderse, si pasaba mucho tiempo de pie se cansaba, y si pasaba mucho tiempo sentado se agarrotaba.

Dejo a su hija jugando con su sobrino y tíos mientras daba un pequeño paseo, el avión ya había aterrizado, pero eso no le impedía caminar mientras todo el mundo buscaba su equipaje, ni siquiera se esforzó en buscarlo, después de todo Sasuke no le dejaría cargarlo así que…

Iba caminando por un pasillo bastante cerca de donde estaba su propio asiento cuando una mano atrapo la suya haciendo que se detuviera

-¿A dónde crees que vas Dobe?-preguntó Sasuke apresando su mano mientras fruncía el ceño

-A estirar un poco las piernas-respondió Naruto- ¡Y no me digas Dobe! ¡Teme!

-Tsk-musitó Sasuke tirando del rubio para que este cayera sentado sobre su regazo

-¿Qué haces?

-Ya estirarás la piernas luego-dijo mientras lo abrazaba protectoramente-la gente comenzará a salir, empujando a todo el mundo-explico pacientemente-¿Dónde está Natsu?

-Con Dei y Gaara, y Shisui, ¿Dónde están Sai e Itachi? Creía que estaban contigo

-Lo estaban, se fueron con los gemelos cuando el avión aterrizo

-Mm…-murmuro sin más sintiéndose un poco avergonzado cuando la gente pasaba mirándolos de arriba abajo por la extraña posición en la que se encontraban, intentó sentarse en el asiento de al lado, pero Sasuke no le dejó afirmando el agarre que mantenía sobre él.

Cuando la gente era escasa en el avión Sasuke dejó que Naruto volviera al pasillo y se puso de pie buscando su equipaje de mano, el rubio fue por su pequeña que jugaba sonriente con su primo

-Vamos Natsu, ¡Ya hemos llegado!-anuncio a su pequeña

-¿Enserio? ¡Qué bien! Ya era hora-comentó como si nada alzando sus bracitos para que Naruto la cargara, el rubio la tomo sin mucho esfuerzo, su hija no pesaba nada.

Shisui tomo la mano de Deidara mientras Itachi tomaba su equipaje de mano y Gaara fue a cargar a sus traviesos gemelos con Sai, no tenía ganas de despertarlos para que comenzarán con sus travesuras, además ya era bastante tarde y cuando se durmieron estaban muy cansados, dormirían hasta mañana por lo menos.

Natsumi bostezo en los brazos de Naruto y cuando ya todos estaban en el aeropuerto los únicos niños aún despiertos cayeron dormidos en los brazos de sus padres, había sido un día, y una noche muy dura, los niños no habían dormido y las baterías no duraban eternamente.

-¿Quieres que la lleve por ti?-le pregunto Sasuke a Naruto después de acomodar sus maletas en uno de los dos coches que habían alquilado

-No, soy perfectamente capaz de llevar a mi hija en brazos-contesto mordaz, ya estaba harto de que le tratarán como un invalido, sabía que lo hacían por su seguridad, pero es que cansaba que te preguntaran cada dos minutos si necesitabas ayuda.

Sasuke suspiro, cuando Naruto le rogó por ese viaje tendría que haber dicho que no, pero ese rubio de ojos azules tenía unas maneras de convencerlo…

OoOoOoOoO

Hacía dos días que Naruto había hablado con Deidara y Gaara sobre el viaje, pero aún no sabía cómo convencer a Sasuke de que lo dejara ir con tres meses de embarazo…hasta que una lucecita se le encendió en la cabeza, sonrío pícaramente y aquel día llevo a Natsumi con una de sus compañeras del jardín de infancia.

Sasuke llegó a casa un poco cansado, lo único que quería era ver a su esposo e hija para así recuperar el buen humor que solía perder todas las mañanas antes de ir a trabajar y recuperaba todas las tardes cuando volvía, pero cuál fue su sorpresa al no ver a su hija en la puerta esperándole como siempre lo hacía, frunció el ceño extrañado y abrió la puerta de su casa con sus llaves

-Naruto-llamó

-¡Estoy aquí!-oyó un gritó desde la otra punta de la casa, se dirigió a su habitación para encontrar a su esposo recostado sobre la cama con un libro en las manos, mordiendo una de las patillas de sus gafas de lectura, llevaba un short bastante corto y una camisa de manga larga, Sasuke frunció el ceño…algo tramaba, Naruto sabía perfectamente lo que le provocaba su postura de lectura y solo la utilizaba cuando realmente quería algo

-¿Dónde está Natsu?-preguntó sentándose en el borde de la cama para quitarse los zapatos

-Se fue con Matsuri y su mamá después del jardín-respondió Naruto dándose la vuelta para quedar boca abajo en el colchón, Sasuke lo miró atentamente perdiéndose en cada una de sus atractivas curvas ¡Lo estaba haciendo a propósito!

El azabache trepo por encima de la cama gateando hacia su esposo para colocarse encima de él, recostando su cabeza en el hombro de este

-¿Qué quieres Naruto?-susurro en su oído mientras besaba el lóbulo de su oreja

-Mm…nada-murmuro el rubio ahogando un gemido

-Mm ¿Nada?-continuo besándolo Sasuke bajando por su cuello-¿Seguro?

-Mm…Quizá…algo-volvió a murmurar entre suspiros, Naruto hacía esto para conseguir la aprobación de Sasuke para viajar, mientras no estuviera embarazado hacía lo que quería, pero cuando estaba en estado…Sasuke era como una Mamá osa con él y no le permitía absolutamente nada, además no le vendría nada mal disfrutar un poco…

-A ver, ¿El qué?-preguntó Sasuke rodando por la cama para acomodarse al lado del rubio, pero boca arriba

-Púes…verás, antes de ayer estuve hablando con Dei y Gaara, y los tres estábamos pensando en hacer un…viaje

-No-contesto rotundamente, Naruto frunció el ceño haciendo un puchero

-¡Oh vamos! Solo serán un par de meses y Natsumi tiene derecho a conocer a sus primos y tíos…será un viaje familiar

-¡Que no! Naruto, puede ser peligroso

-Pero…por fa…-rogó el rubio mientras se incorporaba en la cama soltando su libro para treparse sobre su marido poniendo una rodilla a cada lado de la cama

-¡No!-volvió a negar Sasuke, Naruto se acerco lentamente hacía su cabeza para besar su cuello mientras rogaba

-Por fa…Sasuke, si va a ir…Gaara y…él es…doctor-suplicaba Naruto haciendo pausas para besar su cuello

-Es peligroso…-explico pacientemente el Uchiha disfrutando de las caricias de su esposo

-Si me dejas ir…haré lo que tú quieras-murmuro besando el cuello de Sasuke con pasión, el Uchiha ya no pudo resistirse más, después de diez años de estar juntos Naruto sabía cada uno de sus puntos flacos…como el sexo para convencerlo de cosas que originalmente no haría.

El Uchiha rodo nuevamente sobre la cama colocando a su marido debajo de él, Naruto sonrío “Ya estaba en el bote”

-Eres tan perverso….sabes lo que me provocas y lo usas para tu beneficio…-murmuro Sasuke fundiendo sus labios con los de su esposo, Naruto sonrío a mitad del beso abriendo levemente su boca para que Sasuke la llenara con su lengua devorándola lentamente mientras la saboreaba

-Tú me lo enseñaste-susurro en el oído de Sasuke mientras este besaba su cuello y lo hacía gemir de placer, el Uchiha sabía dónde tenía que besar o acariciar para causarle un inmenso placer al rubio, ambos conocían al contrario de arriba abajo y a ambos les  encantaba hacerlo.

Las manos de Sasuke se deslizaron por debajo de la piel de Naruto acariciando cada centímetro de su piel provocando gemidos y jadeos de placer

-Debes…prometerme que no harás…nada peligroso-murmuro Sasuke librándose de la camisa blanca de su esposo para besar sus excitadas y erectas tetillas, Naruto gimió mientras intentaba hablar correctamente…aquel era su punto débil

-Mm…ahaaa…-Sasuke no le dejó responder, deslizo una de sus manos por debajo del short de Naruto acariciando su trasero hasta tomar su miembro y masturbarlo, las manos de Naruto se aferraron a las sabanas de la cama tirando de ellas e intentando no gritar de tanto placer-Yo…ahaaa…lo pro….meto-alcanzó a decir antes de gemir tomando los labios del Uchiha, deslizando sus brazos alrededor de su cuello.

Sasuke no se detuvo en ningún momento, mientras besaba a Naruto deslizaba lentamente el corto short que esta llevaba. El rubio desenredo sus brazos de alrededor de su cuello para desabrochar los botones de su blanca camisa de seda y tirarla lejos, atacando su cuello mientras intentaba gemir lo menos posible, pero no era fácil…no con Sasuke masturbándolo cada vez más rápido y fuerte, se sentía tan bien…los gemidos escapaban de su boca inevitablemente sin que pudiera detenerlos, estaba a punto de llegar al ansiado orgasmo cuando un frío dedo se introdujo en su entrada, gimió aferrándose al cuello del Uchiha al sentir la intromisión

-Ahaaa…Sasu…ke…

-Shh…-le susurro el Uchiha al oído besándole el lóbulo de la oreja e introduciendo otro dedo en su entrada, Naruto jadeo intentando pensar en otra cosa y no en el dolor que le causaba la intromisión, a pesar de haber pasado 10 años de sexo desenfrenado seguía siendo condenadamente estrecho y cada penetración dolía como el infierno, Sasuke movía sus dedos dentro de la entrada del rubio haciendo que este olvidara el dolor poco a poco hasta convertirlo en un molesto pinchazo, fue en ese momento que un tercer dedo se introdujo en su entrada

-Ahaaa…-gimió nuevamente sintiendo como Sasuke los movía en su interior, el Uchiha desenredo los brazos de Naruto de alrededor de su cuello y retiro los dedos de su entrada mientras besaba su vientre…donde crecía su segundo hijo.

Tiró sus pantalones contra la pared y abrió las piernas de su esposo posicionándose entre ellas…poco a poco fue introduciendo su miembro erecto de excitación, Naruto gemía apretando las sabanas fuertemente, dolía…dolía mucho, pero pronto se sentiría bien

-Mhmmm…duele-murmuro intentando respirar para relajarse

-Naruto…sigues siendo…tan…estrecho-susurro Sasuke introduciendo todo su miembro de una sola estocada, el rubio gritó incorporándose de golpe abrazando el cuello del Uchiha…había dolido y aún lo hacía

-Ahaaa…-gimió Naruto, la respiración de Sasuke cada vez era más agitada, se sentía tan bien cada vez que introducía su miembro en aquella entrada tan estrecha, sintiendo como las paredes de esta le apretaban fuertemente causándole un placer inmenso

-Eres…tan…delicioso…Naruto- el rubio se sonrojo mientras movía sus caderas al sentir que el dolor se había desvanecido dándole permiso al Uchiha de moverse, volvió a recostarse sobre la cama y gimió de placer durante largas horas sintiendo como Sasuke le penetraba una y otra vez, entrando y saliendo de su interior tan rápido y fuerte que los gemidos terminaron por convertirse en gritos de placer.

OoOoOoOoO

Sí, definitivamente había sido una manera de convencerle bastante…excitante, todavía podía recordarla con claridad, negó con la cabeza varias veces saliendo de su ensoñación y cerró el maletero del coche para sentarse con su esposo e hija en el asiento de atrás.

Naruto con Natsumi en su falda iba sentado en el medio, Sasuke iba a su lado contemplándolos en todo momento. Itachi iba delante guiando el camino mientras Deidara se sentaba al otro lado de Naruto con su hijo dormido en brazos.

Detrás de ellos iba otro coche, en él se encontraban Gaara, Sai y sus traviesos gemelos Ryu y Akira, Gaara suspiro, estaba harto de tanto viaje, quería llegar a casa y dormirse de una buena vez, contemplo su falda y acaricio los cabellos de Akira que iba sobre ella, Ryu estaba recostado en el asiento den medio con la cabeza recostada sobre el regazo de Sai, los dos estaban muertos de cansancio y Gaara se lo agradecía profundamente a Dios

-¿Cansado?-preguntó Sai girando su cabeza, Gaara asintió bostezando con una mano en la boca-¡Qué pena! Y yo que quería estrenar el dormitorio de la nueva casa contigo…tendré que pedirle a uno de mis hermanos que me presten uno de los tuyos-bromeo haciendo gestos con su boca

-Solo inténtalo sin que te maten, no me apetece ser padre soltero-le siguió el juego Gaara mientras recostaba su cabeza sobre la ventana del coche, el pelirrojo sintió como una mano le acariciaba la mejilla y sonrío sintiendo el calor que emanaba de esta perdiéndose por completo en el mundo de los sueños

-Aún falta un buen trecho…-murmuro Sai al ver como su esposo cerraba los ojos-…descansen

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::

La casa era grande…muy grande, de dos pisos exactamente, era una casa de madera que se encontraba bastante alejada del resto, pero aunque estuviera sobre la montaña más helada de Sierra nevada esta era cálida, ya que la casa tenía su propia calefacción y unas cuantas chimeneas.

La casa era de madera, las tablas eran lo único que se veía desde afuera, además de las ventanas y de algunos árboles completamente secos a causa del frío invernal que había en la montaña.

Al bajar del coche cada Namikaze…ahora Uchiha abrazo a sus hijos intentando trasmitirles algo de calor, hacía muchísimo frío, Sasuke cubrió a Naruto y Natsumi con todas las mantas polares que encontró en su maleta.

Sai se pegó todo lo que pudo a su esposo e hijo mientras mantenía calentito a Ryu que temblaba en sus brazos aún dormido, Itachi les tiró una manta por encima y se reunió con su familia, Deidara hacía tintinear sus diente abrazando a su hijo, restregando sus manos en la espalda de este para que se calentara, Itachi los envolvió en una manta polar y sacó la llave de la casa restregándose las manos intentando calentarlas un poco

-¡Date prisa Itachi!-exclamo Naruto sintiendo como sus manos se congelaban

-Ya va, haber…-murmuro el pelinegro introduciendo la llave en el hueco de la cerradura y haciéndola girar en el proceso.

La puerta se abrió con un crujido y atropellando a Itachi la familia Uchiha Namikaze entró dentro, todos suspiraron cálidamente al sentir el calor que emanaba la casa, al parecer los dueños habían dejado la calefacción encendida horas atrás

-No vuelvo a salir de aquí hasta que salga el sol-murmuro Naruto sacándose los zapatos para restregar sus pies en el piso alfombrado de un gris claro, estaba calentito

-¡Que gustito!-dijo Deidara haciendo lo mismo que su hermano menor

-Mm…es una alfombra térmica-dedujo Gaara al poner sus píes descalzos en la alfombra

-De hecho…casi todo en esta casa es térmico, las sábanas, las alfombras, algunas paredes…menos  las del baño claro está, sería peligroso para los niños-dijo Itachi cerrando la puerta de la casa cuando los conductores de los taxistas terminaron de traerles el equipaje

-Sí, nos ocupamos de eso-confirmo Sai-alguien se puso muy pesado con el tema-Naruto alzo una ceja y giro su rostro para observar a su marido fijamente, estaba claro quién era ese misterioso “alguien”, pero había de reconocer que esta vez no se había pasado un pelo, hacía mucho frío, sin tanta cosa térmica moriría congelado, además…los niños necesitaban estar calentitos.

Todos se dirigieron al comedor con sus hijos en brazos dejando allí las maletas

-Bueno, veamos…-murmuro Itachi sacando un pequeño plano de la casa, Sai, Sasuke e Itachi habían estado distribuyendo las habitaciones en el avión mientras sus esposos hablaban tranquilamente así que solo tenían que indicarles donde ir y podrían dormir toda la noche, ya todos bostezaban muertos de sueño

-La distribución es bastante fácil, esta casa solo posee tres pisos, este mismo, el sótano, que no vamos a usar para dormir y el piso superior, además de un cobertizo afuera y un garaje al lado de la casa al cual se puede acceder por la puerta de la cocina-explicó el pelilargo

-La distribución es fácil-comenzó a hablar Sasuke-Hay siete habitaciones en esta casa, cuatro arriba y tres abajo…Deidara, Itachi y Shisui dormirán abajo, pueden usar las habitaciones como quieran, supongo que una o dos quedarán libres, depende de lo que quieran los niños

-Y el resto dormirá arriba, Sasuke y Naruto parte izquierda yo y Gaara derecha-finalizó Sai acomodando a Ryu en sus brazos, todos asintieron de acuerdo con la distribución y cada uno se dirijo a su respectiva habitación junto con sus hijos

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Naruto subió las escaleras lentamente, siendo seguido por Sasuke que vigilaba sus pasos y estaba preparado para detener la posible caída de su esposo e hija, Gaara y Sai iban delante de ellos un poco más rápido con sus gemelos en brazos.

Las escaleras llegaron a su final dando paso a un alargado pasillo con cinco puertas a los lados, dos de cada lado y una en el medio, Naruto se quedo en silencio de pie observando la parte izquierda que les tocaba

-¿Qué pasa?-le pregunto Sasuke deteniéndose en el pasillo

-Debería dejar que Natsumi duerma sola ¿No?-preguntó a Sasuke haciendo un puchero

-Ya sabes Naruto que la estamos acostumbrando a eso, si dejamos que duerma con nosotros lo hará hasta que cumpla los ocho-explico Sasuke abriendo la puerta de la habitación de al lado para que Naruto pasara junto con Natsumi.

La habitación estaba pintada de celeste claro con algunas nubes blancas como diseño, había una ventana bastante grande en la pared contraria a la puerta y debajo de esta se encontraba una cama de una sola plaza, el armario estaba empotrado contra la pared y también había un pequeño escritorio con una silla y algunos libros infantiles, era la habitación de un niño…

Sasuke abrió la cama retirando las sabanas blancas y azules para que Naruto recostara a Natsumi, el rubio lo hizo con renuncia arropando a su niña y dándole un beso en la frente, no le gustaba la idea de dejarla sola en un lugar que no conocía ¿Y si se despertaba de noche y se ponía a llorar por no saber donde estaba?

-Estará bien-le susurro Sasuke tomando su mano, Naruto suspiro resignado y observo como Sasuke se despedía de Natsumi besándole la frente

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Gaara suspiro mientras acomodaba a Akira en una de las camas que había en la habitación, ahora entendía porque habían decidido distribuir las habitaciones así, tres de ellas tenían camas de dos plazas, dos de ellas dos camas de una plaza y otras dos una cama sola, en el piso de abajo había una de cada tipo y en el de arriba dos de cama de dos plazas, una de una plaza y otra de dos camas de una plaza.

Arropo a su hijo con cariño bajo las sabanas blancas y verdes asegurándose de taparle cada parte de su cuerpo, Sai hacía lo mismo con Ryuuki en la cama de al lado, la habitación estaba pintada de un verde manzana, habían dos escritorios en ella y todo tipo de libros infantiles, el suelo estaba cubierto por una alfombra gris oscura que combinaba a la perfección con el resto de la habitación.

-Espero que no se inquieten al despertar-murmuro ya parado en la puerta del cuarto junto con Sai para cerrarla, el azabache negó con la cabeza y cerró la puerta para dirigirse a su habitación.

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Deidara entró en la habitación que había enfrente a la suya, esta estaba pintada de gris oscuro y su alfombra era azul igualmente oscura, se acerco a la cama y abrió las mantas sentando a su hijo levemente sin soltarlo

-Mm…Oto-chan-murmuro Shisui abriendo un ojo

-Shh…-le susurro Deidara al oído mientras lo acomodaba entre las sabanas y besaba su frente-duérmete cariño…dulces sueños-Shisui se removió un poco y finalmente se durmió.

Deidara cerró la puerta con un suspiro de alivio y cruzó el pasillo volviendo a su habitación, Itachi abría las mantas de la gran cama bostezando, había sido un día realmente cansado así que el rubio pelilargo apago la luz y se recostó en la cama mientras Itachi lo envolvía entre sus brazos

-Buenas noches-murmuraron ambos cerrando los ojos para dejarse atrapar por Morfeo

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Natsumi había dormido tres horas más en su propia habitación sin despertarse, pero por alguna extraña razón sus ojitos azules se abrieron en la oscuridad de la noche…observando cada rincón de la habitación asustada ¿Dónde estaba? ¿Y donde estaban sus papás?

Entonces la pequeña recordó lo que le había dicho su Oto-chan, debía estar en la casa de las vacaciones, en una de las habitaciones, seguro que sus papás estaban muy cerca de ella, la pequeña no le dio más importancia al tema y se giro en su cama dispuesta a dormirse, pero cuando iba a hacerlo sintió algo extraño…como una presencia, como si alguien la observara desde la oscuridad.

Natsumi se quedó inmóvil en su cama, sin mover un solo músculo…con miedo de girarse y encontrar a alguien detrás de ella, alguien a quien no conociera, el miedo comenzó a llenar sus células saliendo por sus poros.

Cuando la pequeña encontró el valor y la valentía suficiente para girarse y ver quién era, se dio cuenta de que no podía…no podía mover un solo músculo, aquello solo acrecentó su temor.

Natsumi podía sentir una respiración, una respiración que se acercaba cada vez más a ella, su corazón comenzó a acelerarse a medida que la presencia se acercaba…tenía miedo…mucho miedo.

Cuando la pequeña pudo sentir claramente la respiración en su nuca, se levantó de golpe encontrando en ese momento las fuerzas suficientes para moverse y gritar con toda la fuerza que tenían sus pulmones.

-OTO-SAN…OTO-CHAN

:::::::::::::::::::::::::::::::::::::

Sasuke y Naruto habían sido llevados por Morfeo hacía tiempo, pero fueron sacados rápidamente de su apacible mundo de los sueños cuando oyeron un grito de temor que indudablemente provenía de la boca de su pequeña.

Ambos abrieron los ojos saltando de la cama y corrieron hacía la habitación de su niña, Natsumi estaba sentada en la cama, tapada con las mantas, las lágrimas se deslizaban por sus mejillas mientras los llamaba desesperadamente.

Naruto se acerco a su hija tomándola entre sus brazos para reconfortarla, Sasuke se sentó al borde de la cama observando a su pareja e hija, su pequeña se aferraba con desespero a su esposo mientras lloraba asustada ¿Qué había asustado tanto a Natsumi para que se comportara de esa forma?

-Es…alguien…y-hablaba Natsumi entre sollozos

-Shh…no hay nadie aquí Natsu-decía Naruto intentando calmar a su pequeña, la niña se quedó en silencio mientras se aferraba a Naruto con desespero

-Nadie te hará daño…no tienes porque temer Natsumi-intentó calmarla Sasuke, su hija y esposo eran su punto débil y verla en aquel estado le inquietaba mucho, tomo a Natsumi de los brazos de Naruto y ambos abandonaron la habitación cerrando la puerta y apagando la luz para dirigirse con su hija a su habitación. Natsumi se refugió en los brazos de Sasuke sintiéndose así segura y protegida con sus dos papás

-¿Qué pasó?-Naruto y Sasuke giraron su rostro para encontrarse con sus hermanos mayores que observaban a Natsumi preocupados

-Ella…se despertó gritando, debe haber sido una pesadilla-explico Sasuke acariciando los cabellos de su hija en el proceso

-Vayan a dormir-dijo Naruto-estará bien…mañana hablamos-todos siguieron la recomendación del rubio más por cansancio que por otra cosa.

Sasuke y Naruto se dirigieron a su habitación con su hija en brazos, Naruto tomo a Natsumi y se recostó con ella en la cama mientras Sasuke apagaba la luz, el moreno se dirigió a la cama y se refugió entre sus sabanas encontrando entre ellas a su esposo e hija, los abrazo a ambos intentando trasmitirles seguridad y después de unos minutos los tres estuvieron completamente dormidos.

En ese momento ninguno podía saber que lo que había atemorizado a Natsumi no había sido un simple sueño, la pequeña tenía sus razones, aquella sombra que había visto en la oscuridad de su habitación era suficiente razón.

Notas finales:

¿Que os ha parecido?


¿Nunca os ha pasado eso de sentiros observados mientras dormís?


¿Os a gustado la forma en que Naru convenció a Sasu?


Proximo capitulo: Sucesos extraños



Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).