Crónicas de la Familia Uchiha por Ryoko_san

¿Quién malcrió a Sasuke?


El silencio era sofocante y la tensión palpable, el único sonido presente era el constante tic-tac del reloj de pared, el patriarca de la familia tenía una expresión severa en su rostro mientras estaba de pie frente al sillón en el cual se encontraban sentados su esposa y su hijo mayor, de 22 años.


-Es que no es posible –Comenzó a reñir el mayor –Sasuke cada día está más caprichoso y berrinchudo ¡es un completo inútil que ni vestirse solo puede! –Reprocho enojado.



-¡Eso no es cierto! –Exclamó Itachi –El puede… puede… ah… -Y no le llegaba alguna idea para poder defender a su hermano menor – él… ¡El puede ponerse los calcetines! –Dijo eufóricamente con una sonrisa.


-Sí, el se puede poner los calcetines y sin ayuda –Corroboró igual de contenta Mikoto.




Sin embargo sus sonrisas menguaron ante la reprobadora mirada que les lanzaba Fugaku.



-¡Pero se los pone al revés! ¡Con toda la costura de fuera! –Contraatacó –Y todo ¡TODO! Es por su culpa ¡Lo consienten demasiado! –Acuso lleno de ira.



-¡¿Nosotros?! –Preguntaron al unísono



-¡PUES SI! ¡¿QUIENES MÁS?!-Les gritó y los otros dos se encogieron en su asiento.





El patriarca soltó un cansado bufido y se dejo caer pesadamente en su sofá individual, el cual estaba enfrente del sillón, cerró los ojos y se paso la mano por la cara, después fijo su mirada en las dos personas que estaba regañando…




-Escuchen –Dijo en un tono más calmado y los otros dos mantenían su vista fija en el suelo –Sé que lo quieren mucho y procuran darle todas las comodidades que deseé para que no sufra, pero deben de ver que el ya es todo un jovencito de 16 años, ya no necesita que le partas su carne en trocitos antes de cenar Itachi –El aludido se mordió el labio en señal de tristeza - o que le prepares la bañera Mikoto –Y la mujer apretó sus manos sobre su regazo –Sasuke ya no es un bebe y necesita tener normas, reglas y valerse por sí mismo…



-Pero si yo no lo consiento… -Murmuro el de coleta.



-¿Ah, no? –Preguntó irónicamente Fugaku – ¿Porqué no le dices nada a Sasuke cuando entra a tu cuarto, deja un desorden y toma tu ropa?


-A pues porque… -Y entonces los ojos de Itachi brillaron –Se ve tannnnn lindo –Y sonrió estúpidamente.



-¿Ves? –Le dijo enojado su padre -¡Es tu ropa no de él! –Le señalo



-¡Pero si a él le gusta mi ropa no se la puedo quitar! –exclamó dramáticamente el más joven


-¡Pero no es porque le guste!! Si no porque toda su ropa esta sucia y en lugar de lavarla ¡¡va y usa la tuya, carajo!! –El patriarca ya se había levantado de su asiento y a dar vueltas por la sala como león enjaulado. –¡¡Ya no quiero que le prestes TU ropa!! ¡¿Entendido?!



-Per…



-¡NADA! –Gritó



-Pues bien, ya no le prestaré mi ropa… -Dijo serio, Mikoto lo miró sorprendida, no esperaba que su hijo aceptara tan rápido y Fugaku… bueno, Fugaku conocía bien a sus hijos, así que esa reacción taciturna por parte de Itachi le dio mala espina… de repente, una idea llego a su mente, así que con los ojos entrecerrados, volteó a ver a su primogénito y…



-Tampoco le comprarás ropa nueva… -Murmuro fríamente y entonces la calmada cara de Itachi se transformó a una alterada.




-¡¿Qué?! – Gritó horrorizado - ¡No, eso no es justo! ¡Yo puedo hacer lo que quiera con mi dinero! ¡Por eso trabajo! – Chilló desesperado.


-Pues justamente ese es el problema, el dinero que TU ganas es para que lo gastes en TI, tal vez algún regalo para tu madre o tu hermano, pero no ¿verdad? Tú recibes tu paga y vas con Sasuke y le compras todo lo que te pide ¡YA NO HAY ESPACIO EN SU CUARTO! ¡ENTIENDE QUE YA NO NECESITA OTRA PANTALLA DE PLASMA, NI OTRA CONSOLA DE VIDEOJUEGOS Y TAMPOCO NECESITA TODA ESA ROPA DE DISEñADOR!




-¡MAMA DILE ALGO! –Exclamo exasperado el de cabello largo.



-Fugaku no crees que estas exage…



-¡NO MIKOTO! ¡TU NO PUEDES OPINAR EN ESTO! ¡¡TU ESTAS IGUAL O PEOR QUE ITACHI!! –Reprocho furioso.



-¿Pero cómo te atreves? Yo corrijo a Sasu_chan cuando es necesario –Afirmo seriamente.



-Para empezar, Sasuke, ya no es un niño para que le digas “Sasu_chan” –Le señaló el patriarca – Ahora, tú nunca, NUNCA corriges a Sasuke ¿O quieres que te recuerde la temporada en que TODOS nos hicimos vegetarianos solo por que el “niño” ya no quería comer carne? ¿O cuándo pintaste la casa de color verde limón porque a “Sasu_chan” quería ese color? ¿O cuando lo cambiaste de colegio solo porque al “nene” no le gustaba que su escuela tuviera ventanas tan grandes? ¿O cuándo…




-Ya, ya, quedo claro tu punto –Lo interrumpió Mikoto con las mejillas sonrojados por la vergüenza –Pero ¿recuerdas que un día lo regañe por no llevarle el agua caliente a Itachi? –Pregunto con una sonrisa orgullosa



-¿En serio? –Preguntó con una ceja alzada, luego volteó a ver a su hijo, quien ya había parado de llorar – E ¿Itachi, para que querías el agua caliente? –Preguntó intrigado el mayor.



-Es que la ropa de Sasu no se puede lavar con agua fría o se daña la tela… -Contestó el nombrado con una sonrisa de oreja a oreja pero al instante se dio cuenta de su error y entonces se escondió detrás de Mikoto.



-Ustedes… -Siseó encolerizado el patriarca, sus dientes rechinaban y sus puños estaban fuertemente cerrados –Son ¡UNA MALA INFLUENCIA PARA SASUKE! ¡Y LOS RESPONSABLES DE QUE ESE NIñO SEA TAN DEPENDIENTE DE USTEDES Y…






-¡Ya llegue familia! –Se escucho la cantarina voz del menor de los Uchiha desde el recibidor.



Al instante los ojos de Mikoto e Itachi brillaron con adoración y en un segundo ya estaban de pie listos para ir a su encuentro, pero las poderosas manos del mayor los detuvieron de su cometido, volviéndolos a plantar en el sillón.



Entonces ambos miraban con ansiedad en dirección a la entrada de la sala, esperando la deseada aparición de la luz de sus vidas. La puerta se abrió y una luz cegadora inundo la habitación (según Itachi y Mikoto, claro) y la más bella voz se escuchó (también, según Itachi y MIkoto).




-Hola, ¿Qué hacen aquí? – Preguntó con una hermosa sonrisa aquel joven de piel blanca y grandes ojos negros.


Hubo silencio por unos segundos y…





-¡Voy a prepararte la cena! –Exclamó rápidamente Mikoto

-¿Te dejaron tarea? ¿Quieres que te ayude a hacerla? –Le pregunto solícito Itachi mientras se levantaba y se dirigía hacia su hermano.



-Pues yo…



-Basta –Dijo el patriarca –Ustedes dos no van a ningún lado –Ordeno –Y tu Sasuke, vamos a hablar sobre… -Y de repente sus ojos se abrieron de par en par -¡¿Dónde están tus guantes?! –Preguntó alterado.


-¿Ah? –Y Sasuke se miró las manos confuso, luego recordó –Oh es cierto, es que ahorita no hace tanto frío a pesar de que en la mañana nevó, así que decidí no ponérmelos pero…



-¿No te das cuenta de que te puede dar una gripa? O peor aún ¡¿Una pulmonía?! –Dijo exaltado –Pronto, hay que hacerte entrar en calor -Lo cargo en brazos y luego se volteó a ver al resto de su familia -¡Rápido Mikoto, prepara un caldo de pollo con suficientes verduras! E ¡Itachi, ve por el auto y trae al doctor para que lo revise!



-Pero yo no me siento enfer…



-Tranquilo bebe, papá está aquí y te va a ayudar -Le dijo cariñosamente - ¿Y ustedes que esperan? ¡Muévanse que se nos muere!


-¡Sí, señor! –Exclamaron los otros dos e hicieron los que les fue asignado.


-Pero papá yo…



-¿Y te llevaste éstos zapatos en plena nevada? Te dije que te llevaras las botas, ¡Has de tener los pies helados! –Dijo aterrado -Lo mejor es que te metas a la cama – Subió rápidamente a la habitación del menor y lo acomodó en su cama –Te plancharé un par de calcetines para que se te calienten los pies pronto y…








Sasuke solo miraba sus familiares ir y venir por todos lados y a veces chocando entre ellos…




“Vaya… ¿Cómo se pondrán cuando les diga que mañana me voy de excursión escolar por dos semanas?” –pensó divertido.



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xD