Nunca dudes que te amo por arelii-ierOo

La fiesta había comenzado hace media hora, al rededor sólo se podían escuchar el sonido de las botellas de Champagne y copas, los tacones de las damas, la música de fondo (obviamente AC DC, sin eso no podría llamar a esto MI fiesta), además de todo esto se escuchaban risas, risas de al menos un tercio de mis invitados rodeando a un hombre. ¿La razón? No, esta vez no era yo. La peste de esta noche llevaba por nombre Steve Rogers. En menos de una hora ya era el alma de la fiesta. Suficiente ya era que Fury me obligara a invitarlo. "No puedes celebrar la victoria de los vengadores sin todos los vengadores." Estúpido cíclope. Pero bueno, no estaba hablando del hombre de chocolate, sino del roba fiestas Rogers. Jamás creí que un anciano me quitara el protagónico, sí ya sé que nadie se esperaba que volviera de su sueño de princesa de 70 años y nos salvara de un dios con mal carácter y su ejército de cucarachas. Pero eso no le da razones para arrebatarme lo que es mío. 

No tenía alternativa, debía entrar a ese circulito de fans patriotas y hacerme notar. Al acercarme vi al capi con un traje de gala del ejército de los 40's, tal vez Coulson se lo había conseguido para la ocasión. Cuando mencioné la idea de la fiesta, Steve no estaba muy animado, bueno nunca lo está, pero se encontraba deprimido por todo eso de soy viajero en el tiempo y todos los que conozco están muertos. Por esa depresión no contaba con su asistencia y por ello tampoco lo había invitado, hasta que Nick abrió la boca y tuvo que arruinarlo. 

En fin, henos aquí en una de mis mayores fiestas y yo sin poderla disfrutar como se debe. La había hecho en la torre, durante un mes después del incidente logré hacer maravillas en ese lugar, agregué un par de pisos y la elegancia que Pepper incluyó en la decoración. Obviamente esos cambios exigían a gritos una celebración. La inauguración de mi torre era el motivo, pero el triunfo reciente sobre los enanos verdes de otra dimensión destruyendo Nueva York, era la excusa.

Me acerqué un poco donde se encontraban mis supuestos fieles invitados. La voz de Steve se escuchaba cada vez más alegre, es más, nunca lo había oído reír.

- ...casi vomito en su cara, no paraba de gritar y Bucky sólo de burlaba de mí. Cuando bajamos del juego no me podía sostener y tuvo que cargarme por todo Coney Island. Más que un gran soldado, también fue el mejor hombre que he conocido.

Tanta cursilería me asqueaba y más cuando todos lo miraban hipnotizados, las chicas con ternura y los hombres con admiración. Estúpido Steve.

Antes de querer intentar cruzar el campo de los ositos cariñositos, preferí salir de ahí. Me dirigí a mi taller, no quería hablar con nadie, todos se divertían arriba, incluso la aguafiestas de Natasha. Si buscas la definición de fiesta y diversión en un diccionario aparece mi foto y mi nombre en mayúsculas. Y eso que ocurría haya arriba no era precisamente una fiesta, no sin mi presencia.

-Tony...- Sentí un jalón a mi smoking. 

-¿Bruce, qué haces aquí?

-JARVIS me dejó entrar, ¿por qué no estas arriba?

-No quiero ver a nadie

Bruce se recargó en el escritorio que estaba frente a mí, sabía que me miraba extrañado pero no quería verlo a la cara.

-Tony, es tu fiesta y no piensas ir, ¿qué te sucede?- Suspiré lo suficientemente audible como para que notara mi molestia.- ¿Es por Steve verdad?

-¿Cómo lo sabes?- Mi impecable sarcasmo era evidente, pero al parecer no lo notó o más bien lo ignoró.

-Llevas toda la semana quejándote de su presencia.

-Es que es simplemente irritante. -Lo miré con enojo, con todo el enojo que tengo hacia ese patético veterano de guerra.- Se pavonea por todos lados como si fuera lo mejor del mundo, cuando él no hizo absolutamente nada y habla de su imbécil amigo Bucky. Bucky es un gran soldado, Bucky fue tan bueno conmigo, el mejor hombre que he conocido...

Me vi interrumpido por la risa de Banner que no paraba y que mientras más me enfadaba más fuerte lo hacía.

-¿Qué es tan gracioso?

-Estás celoso- Intentaba no seguir riendo e hizo un énfasis en el “estás”.

-No bromees conmigo Banner. Que tenga sus 5 minutos de fama no es razón para que le tenga envidia.

-Sabes que no hablo de eso.

-¿A qué te refieres?- Lo observé intrigado.

-Tienes celos de Bucky.

No me contuve y solté una carcajada. -¿Yo? ¿Celoso de un tipo muerto?

Bruce caminó hacia la puerta y antes de retirarse se detuvo sin girarse a hablarme.

-No tardarás en darte cuenta.- Susurró lo suficientemente audible como para oírlo.