Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Angeles Callejeros por Verdadero98

[Reviews - 183]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

CAPITULO 1

POV. NARRADOR

-¡VAMOS KUGA!-. Los gritos de los chicos se escuchaban a calles de distancia mientras que una oji-verde se movía ágilmente esquivando puñetazos, gotas de sudor resbalaban por su blanca piel con cada desplazamiento de sus músculos y las esmeraldas que permanecían en su mirada observaban con seguridad a su adversario. -¡MATA A ESE IMBECIL!-. La sonrisa preferida de los espectadores apareció en el rostro de la chica pues todos sabían lo que eso traía consigo, su contrincante ya sumergido en desesperación soltaba golpes torpes y violentos ayudando a su derrota ya inminente. La aludida dio dos pasos hacia atrás tomando impulso rápidamente y en una vuelta que el chico no pudo percibir a tiempo gano la suficiente fuerza para enviarlo contra la pared más cercana únicamente con una patada a su pecho. El pobre no podía levantarse, la sangre comenzaba a salir de su cabeza formando un charco escarlata en el piso que se esparcía con rapidez, la peli-azul caminó lentamente hacia él aumentado el miedo que se sentía en el aire.  



POV. NATSUKI

Takeda no podría mas, pobre inútil, nunca fue rival para mi, siempre queriéndome retar con esa aura de superioridad, o al menos eso según el por qué a mi parecer no era más que arrogancia e hipocresía con los suyos, si, él era un maldito desgraciado. -Levántate-. La voz que salió de mis labios notablemente le helo la sangre, inútilmente quiso ocultar el terror que más evidente no podía ser, no obtuve respuesta de su parte lo cual me enfureció. Los gritos del fondo pasaron a ser un murmullo en mi cabeza. -¡QUE TE LEVANTES CON UN CARAJO!-. Harta lo tome de su playera manchando las vendas que portaba en mis manos con su sangre. Sentí la rabia quemando mis venas como cada vez que me enojaba, la fuerza recorriendo mi cuerpo hasta el último rincón de mi ser y mi mirada firme llena de odio dirigido al imbécil delante mio. -Nos encontraremos en el infierno…….-. Le sonreí sádicamente a Takeda obteniendo como respuesta una dura mirada que ni un cosquilleo me causo, saque un cuchillo de mi espalda el cual sostuve contra su cuello -Cuando se me de la gana matarte-. Lo solté de golpe contra el asfalto y patee sus costillas escuchando como crujían sus huesos junto con sus quejidos, debo admitir que me causo placer el dolor de Takeda. Quedo inconsciente a mis pies con un último puñetazo, deje su cuerpo en su sangre teniendo seguridad de que a nadie le iba a importar, emprendí paso hacia el hombre que organizaba estas peleas para recibir mi paga, esa que me daba la buena vida pero en realidad no necesitaba del todo. -Buen trabajo Kuga-. Me menciono escuchando los gritos de mis estúpidos espectadores, la sonrisa en su rostro era de satisfacción pues yo le generaba muchas ganancias. –Como sea, págame-. De mala gana exigí mi dinero para poder largarme de ahí, el lugar comenzaba a apestar a sangre. -De acuerdo ten tu dinero-. Lo recibí y guarde en el bolsillo de mis jeans. –Y recuerda que tienes la pelea en la que tendrás que….-. No termino su oración puesto que todos los presentes escuchamos las sirenas de los policías acercándose, ya no me importo lo que me decía y corrí a mi motocicleta. Todos los chicos corrían asustados a sus autos, el alboroto era muy grande llamando aun más la atención de los policías. Monte mi compañero metálico con agilidad, en pocos segundos ya iba a gran velocidad en la carretera quemando mis llantas contra el asfalto que parecía no ser suficiente para soportar mi paso, concentrada en las curvas iba sonriendo al pensar que era la octava vez de la semana que salía ilesa de los encuentros con la policía, JA estúpidos ingenuos si creen que me atraparan.

POV. NARRADOR

Natsuki sonriendo bajo su casco partía las calles a su paso, las ráfagas de viento con suerte eran testigos del camino que recorría como si fuera lo más fácil del mundo pero ella no esperaba que entre las vueltas que le esperaban kilómetros delante se encontrara lo que le daría el mayor giro a su vida. Ella ya iba concentrada en que cervezas comprar, en que consola de videojuegos usaría esa tarde y su decisión más difícil del día: que pizza pediría. De la nada su celular sonó y pensando en el hecho de que pocos tenían su teléfono decidió contestas claro está sin reducir la velocidad. -Hola preciosa, ¿sigues en lo mismo?-. Una voz que le repugnaba se escucho al lado contrario de la línea, sin dudarlo respondió, sus manos se cerraron fuertemente al igual que su quijada al punto de casi sangrar. -Vete al carajo-. Escucho una risa antes de colgar su celular, no permitiría que esa persona volviera a su vida, ni siquiera pensaba dejarle vivir. Mientras tanto en una esquina saliendo de su lujoso auto se encontraba la chica de mirada carmesí, esos bellos rubís que conquistaban a cualquiera que quisiera, aquella cabellera sedosa que era envidiada por cualquiera, la figura más atractiva de la ciudad o en otras palabras la perfección hecha mujer, o eso creían los demás sin saber todo lo que aquella enigmática mujer encerraba en sus adentros con tan solo 18 años. La motociclista se acercaba a gran velocidad a la esquina que cambiaría su vida ¿para bien o para mal? En realidad sería imposible saber, pero la furia que la peli azul encerraba venia en aumento por lo que aunque al parecer no era posible incremento la velocidad hundiendo el acelerador. Sin preocupación la chica de ojos rubí permaneció en esa misma esquina pues sintió el impulso de hacerlo aparentemente sin razón más tampoco creyó que una simple esquina pudiera iniciar todo un tramo de su vida. -¡CUIDADO!-.La oji-rubi escucho una voz que le alertaba de algo pero no sabía de que hasta que observo su posible final sobre ruedas dirigido hacia ella, su cuerpo se paralizo y su mente solo pensaba en que su muerte seria ahí no creyéndolo del todo. La peli azul perdía el control de su motocicleta, consciente de lo que pasaba quiso recuperar el dominio de su compañero metálico pero todo sucedía muy rápido sin embargo eso no le impidió reaccionar a tiempo, tomando el control de su vehículo dio vuelta justo a tiempo para con una mano montar a la hermosa chica de pelo ocre en su motocicleta salvándole de ser aplastada por una camioneta 4X4.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).