Eun-Hae
Enbizaka no Shitateya
Les contare la historia de una pequeña, tranquila y hermosa aldea…
“Comencemos a trabajar, ¿Ok?”
En un rincón de la aldea enbizaka un bello joven castaño de nombre Lee Donghae mantiene una sastrería su buen y amable carácter junto a sus finas habilidades, siempre hacia que se hablara de el en aquel pueblo pero, había algo que molestaba la mente del chico logrando perturbarlo y eso era la infidelidad de su amado esposo Lee Hyuk Jae.
“A pesar de que tiene alguien como yo nunca viene a casa, pero aun así debo seguir trabajando y pongo un par de tijeras en mis manos, las tijeras que mi madre siempre solía usar, mientras más las afile mejor han de cortar…”
Hoy la aldea es la misma de siempre, se respiraba un agradable y tranquilo aire, todo era tan tranquilo hasta que el castaño lo vio en la calle principal, ¿quién era el chico que sostenía su mano? Vestía una hermosa bufanda azul, parecía muy amistoso con ese sonriente chico no pudo soportar seguir viéndolos así que volteo y salió corriendo de ahí.
“Pero aun así debo seguir trabajando y pongo un par de tijeras en mis manos, por mis mejillas caían gruesas lágrimas, pero aun así seguí arreglando la bufanda que había ante mi…”
Hoy la aldea no era la misma de siempre, al parecer había sucedido un tipo de asesinato, pero hoy también lo había visto esta vez en el puente, ¿Quién era el chico que estaba junto a el?, parecía estar algo deprimido y ese joven lo fue a reconfortar, tenía un hermoso y largo abrigo negro, con que ese tipo de chicos le gustaban.
“Pero aun así debo seguir trabajando y pongo un par de tijeras en mis manos, con mis ojos rojo he hinchados de tanto llorar, seguí arreglando el abrigo entre mis manos…”
La tensión en la aldea seguía sin mejorar se contaba por ahí que había habido otro crimen, hoy lo había visto frente a la tienda de juguetes ¿Quién era ese tierno chico que estaba con él?, para el chico que parecía muy lindo compro un pequeño conejo color rosa, que demonios creía que estaba haciendo, realmente en él no se podía confiar.
“Pero aun así debo seguir trabajando y pongo un par de tijeras en mis manos, ¿mis tijeras eran de este color antes? Hoy nuevamente trabajare muy duro…”, “Finalmente conseguí terminar este trabajo y si tú no vienes a mí, entonces tendré que yo ir junto a ti…”
Las tijeras tienen dos hojas
Realizan su cometido uniéndose y rasgándose una con la otra
Al igual que una pareja se lleva bien
Es lo que su madre solía decir…
“La bufanda azul, el abrigo negro y un pequeño conejo de color rosa puse en mis manos, ¿me convertí en el tipo de chico que te gusta?, ¿Qué tal? ¿No me veo bien?...”
Hoy la aldea era realmente un caos pues sucedía que a un joven de cabellos rojizos han asesinado, al parecer había sido toda la familia de cuatro hermanos, ellos habían sido asesinados por alguien, pero a pesar de todo él había seguido actuando terrible… “Hola buenas tarde bello joven, es un placer conocerte…” eso le había dicho el, era como si nunca lo hubiera visto, ¡Era como si le hubiera hablado a un extraño! y luego de eso no lo volvió a ver.
“Pero aun así debo seguir trabajando y pongo un par de tijeras en mis manos, esas tijeras que ahora se teñían de un bello color carmesí, mientras más las afiles, mejor han de cortar…”
Fin!!!