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El deber de un líder por ShinyOdaya

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Notas del capitulo:

Holaaaap!!

Aqui ShinyOdaya dejando el capitulo 25 de El deber dde un líder 

Ya casi termino el examen final ;) las pruebas de acceso son dificiles, entiendanlo ^^

Bueno, espero que disfruteeeis ^^

-Ahh… Jonghyun…- Gemí con el rostro pegado a la almohada.

Sentía su peso en mi espalda, aplastando mi cuerpo débilmente contra las suaves sabanas. El vaivén me dejaba completamente en blanco, y sus labios paseándose por mi espalda perlada de sudor me envolvían en la locura mas extrema.

Mi mano derecha se apretó en torno a él y la izquierda luchaba con mantenerme unido a la cama. El gemía mientras me masajeaba, lentamente, como si pudiera controlar mis espasmos. Me estaba haciendo sufrir.

Pero me gustaba.

Un movimiento brusco, y de repente el me estaba mirando, con una sonrisa ladeada de blancos dientes y una chispa intimidante en sus ojos color café. Seguía su movimiento suave, apretando, dejando que la corriente de calor extremo y placentero me subiera por el interior de mis piernas hasta el estomago y allí explotaran como fuegos artificiales.

Intenté bajar mis manos para amenizar un poco la tortura, pero el capto mis muñecas al vuelo.

-No se puede tocar...

-Pero, pero Jonghyun…

-Shhhs calla…

Se tumbo sobre mí, el pantalón vaquero que cubría sus piernas rozaba exquisitamente el interior de mis muslos. Me sentía algo inmune, desnudo, cuando el aun llevaba sus pantalones puestos, y por lo que parecía, no se los iba a quitar.

-He dicho que no te puedes tocar…- Frustro mi segundo intento.

Gemí al sentir su lengua paseándose, desde mi ombligo, hasta la parte baja de mi clavícula, dejando pequeños besos a su paso, succionaba mi piel, provocando marcas.

Incluso me mordió. Apreté mis labios mientras sentía como el mareo subía a mi cabeza. No sabía cuánto más iba a durar esa hermosa y excitante pesadilla.

-Jonghyun… por favor…- Me sorprendí suplicando

-No…- Cogí la almohada entre mis manos y la apreté fuerte mientras seguía acariciándome, no sabía si llegaría el momento en el que le pegaría un puñetazo.

El orgasmo llego tan lentamente que solo lo noté al final, cuando el calor se instaló en mi parte baja y de repente sentí como la sangre llegaba a esa zona. Fue como una gota de agua ardiendo cayendo sobre un trozo de hielo, derritiéndolo a su paso.

Jonghyun me besó cuando supo que terminaba. Su lengua estaba jugueteando con la mía cuando llegó, e intensifico el beso cuando me arqueé a buscar más roce.

-Mph…  -Deje de respirar mientras la sensación me abandonaba, y cuando se fue, boqueé en busca de oxigeno.

Jonghyun se separó completamente de mí, riéndose, partiéndose la caja a carcajadas. No le hice mucho caso, estaba intentando recuperarme.

-Jonghyun…

-¿Qué?- Dijo normalizando su respiración.

-Ha sido horrible- Le esperé soltando la almohada de entre mis dedos, tardaría en volver a su forma original- No vuelvas a hacerlo…

-No me hagas enfadar otra vez…

Le miré, su sonrisa no se iba de su rostro. Cogí las sabanas como pude y me hice bolita debajo de ellas. Supe que lanzó su pantalón por ahí y segundos después note su pelo un poco húmedo y su nariz, rastreando un hueco por el que meterse.

-¿Crees que después de lo que me has hecho, voy a dejar que duermas en mi cama?- Murmuré escondiéndome debajo de las sabanas.

Gimió un poco y me giré a mirarle. Me estaba poniendo esos ojitos otra vez. Brillantes y llenos de sentimiento. Abrí la boca para protestar, pero no salieron palabras, maldije por lo bajo mientras separaba las sabanas para que se metiera, apagó las luces y se enterró a mi lado.

No tarde en notar su pecho contra mi espalda.

-Jonghyun, estas desnudo

-Ahá, tu también- Intenté no pensar en ello.

La oscuridad y la reciente subida de adrenalina me  adormitaron un poco y dejé que mis parpados se cerraran, además notaba el suave ronroneo de Jonghyun a mi espalda y sus manos dibujando suaves círculos en mi cintura.

-Admite que te ha gustado- Me susurró.

-… En realidad si…

-Lo sabía, pero prométeme que no habrán más masajes a terceras personas…- Suspiré

-Vale.

 

Me desperté con las sabanas encogidas en algún punto lejano de la cama, pues no las sentía y la suave brisa que venía de algún lugar que no recordaba me acariciaba las piernas desnudas. Seguía desnudo.

Abrí los ojos y no me hizo falta comprobar que Jonghyun no estaba  a mi lado, porque no sentía ni sus manos ni su respiración.

Tanteé los muebles en busca de mi móvil. No llegaba a ser mas de las nueve, suspire cansado y fui a abrir  las ventanas. Cuando se hizo la luz busque mi ropa por los rincones y me vestí lo más rápido que pude.

Salí al pasillo con la cara lavada y con el pensamiento de que hoy sería un día normal. Sin sobresaltos ni trotes innecesario.

En la cocina me encontré con un Minho adormitado y con mi novio.

Novio, se me hacia raro.

-Buenos días- Dije en voz alta.

Ambos se giraron hacía a mí, Minho me saludo de igual manera, y Jonghyun rodeó la mesa para plantarme un dulce beso en la mejilla. Me ofreció bollos de chocolate que yo acepté gustoso.

Comimos alegremente unos minutos, bromeando sobre mi cara de recién levantado y aludiendo al ruido, aunque escaso, que hicimos la noche anterior. Pero llegó un momento en el que la casa se me hizo vacía.

-¿Y Taemin?- Pregunté girándome en mi silla para buscarle con la mirada en el salón

-No lo sé…- Minho hablo tan natural que me dio miedo- Cuando me desperté no estaba.

Miré a Jonghyun, este evitaba entrar en la conversación.

-¿Mas bollos?- Me ofreció y yo cogí otro de la bandeja.

 

El viaje a nuestro día de actividades encerrados en la SM fue corto, de momento la promesa de que ese día iba a ser un día normal había tenido su pequeño percance. Pero para mi sorpresa Taemin ya estaba allí.

Jugaba con unos micrófonos de poste entre sus manos en la sala de baile más grande de la compañía. El coreógrafo hablaba con el animadamente mientras el pequeño maknae hacia pasitos intentando controlar el micrófono con sus pies. Cuando nos vio reflejados en el espejo saltó de alegría.

-¡Hola! Mirar lo que hemos pensado Tony y yo…- Echó el micrófono a un lado y posó con la cabeza gacha- ¡Yey~!

Yo me reí por su actitud y Jonghyun se mostro interesado y soltó un par de bromas mientras se acercaba a Taemin, pero Minho pasó completamente de su novio y se sentó sobre las colchonetas de un lado de la sala y sacó su móvil. Mi mirada voló a Taemin, sus ojos se habían posado en el cabizbajo Minho que le tenía completamente obviado, entonces de esos gruesos labios salió una sonrisa, pero fue como un puñal de frio hielo para mi corazón, porque era la sonrisa más triste y forzada que había visto nunca. 

Solo estuvimos ahí como mucho una hora, pues Tony nos explico la esencia de la coreografía y la idea que habían tenido el y Taemin, pero el coreógrafo le atribuyo todo el mérito al pequeño.

Al parecer, según el coreógrafo, Taemin llevaba allí desde las siete de la mañana, él había llegado un poco después. A pesar de haber llegado tan pronto, el maknae se encontraba alegre y despierto, dando todo de sí en las clases de canto y perfilando su danza cuando nos enseñaron la primera parte del estribillo.

-Este debe darse un chute de algo…- Jonghyun se secaba el sudor con una toalla rosa, pero yo no prestaba atención a la toalla precisamente.

Sino a su pecho y a como las pequeñas gotas de sudor bajaban zigzagueando por su cuello hasta fundirse con la tela de su camiseta.

-Onew…

-¡Claro, ¿por qué no?!

-¿Por qué no a qué?

-¿Qué?- Suspiró

Se acercó a mí y me agarro de los mofletes, comenzó a tirar de ellos, mientras yo cerraba los ojos con fuerza de la vergüenza.

-Sé que soy sexy pero no me gustaría que te cayeses por estar observándome

Le quité la toalla y él se rio mientras se acercaba y yo intentaba esquivarlo. Llego un momento en el que apresó mi cintura entre sus manos y yo temblé como la gelatina en manos de un niño

-Jonghyun aquí no- Le aparte como si fuera fuego- ¿Estás loco? Están los bailarines y el coreógrafo.

Se  apartó de encima mío con las manos en alto y yo pase por su lado para dirigirme a hablar con Minho. Jure, juro, y juraré que la palmada en mi trasero fue de su parte, aunque cuando me giré él miraba hacia otro lado mientras silbaba. Le propine un pequeño golpe y seguí mi camino.

Me senté al lado de Minho, sobre las colchonetas y me arrastre justo para tocar sus rodillas con las mías

-¿Qué hyung?- Ni siquiera me miró, estaba demasiado enfrascado en algo interesante que pasaría en su teléfono.

-Solo quería hablar- Ni caso.

Le arrebaté el móvil de las manos y el se estiro intentando atraparlo de nuevo. El hecho de que fuera más alto jugaba a su favor ya que estirado incluso alcanzaba la mano que sujetaba su teléfono, pero le puse una mano en la cara dificultando la visión.

-Ay hyung, dámelo…- Se quejaba.

-Vamos a hablar- Se cruzó de brazos y por fin pude sentarme bien.

-¿Qué?- Refunfuño

-¿Lo habéis dejado?- Alzo una ceja- Taemin y tu- Su rostro se transformo, sus hombros se hundieron y dejo escapar un largo suspiro.

-No- Dijo seco

-¿Entonces qué os pasa?- Hizo una mueca cuando me miro, sabía que estaba dudando en si contarme sus problemas o no

-Es solo…- Empezó a decir- Que… no me gusta.

Ladeé la cabeza hacia un lado y me abofeteé mentalmente por dejar que eso pasara.

-¿El?- Sugerí

-No, el me encanta, estoy enamorado hyung- Suspiré de alivio- No me gusta lo que está haciendo…

Le devolví el teléfono móvil, pero siguió prestándome atención. Jonghyun revoloteaba por nuestro lado, no le iba a dar un masaje a nadie, no tenia de que preocuparse.

-No me gusta verlo sufrir de esa manera, no entiende que me hace daño a mí también

-Nos hace sufrir a todos- Confesé- Pero tal vez deberías hacerle caso a Key- Su rostro se crispo y su nariz se dilató.

-Key no sabe lo que dice, no puedo simplemente dejarlo estar- Se puso recto- Aquí el único que lo conoce soy yo, se cómo piensa, como actúa, que es lo que siente.

-Y aun así no sabes cómo ayudarle…- Le miré, me miró- ¡Lo siento! Ay dios Minho no quería decir eso…

Sus ojos se aguaron en menos de lo que yo tarde en volverme a disculpar, tan solo unos segundos. No sabía en lo que estaba pensando y aunque en mi subconsciente supiera que mis palabras eran verdaderas, yo no tenía ningún derecho a echárselo en cara. Un sentimiento de asco a mi mismo me creció en  el pecho.

-Lo siento de veras Minho

-Tengo muchas ganas de pegarte un puñetazo ahora…- Le temblaba la voz.

-Atrévete- Jonghyun comentó sin ni siquiera mirar hacia nuestra dirección.

Se escuchó una respiración salvaje de su parte y un suspiro de la mía. Estaba completamente seguro de que Minho ya no me dirigiría la palabra. Estaba a punto de decir algo, soltar otra disculpa cuando escuche un fuerte golpe en la madera del suelo.

Por inercia levante la vista, y mire por encima del hombro de Minho, a Taemin.

Mis ojos se abrieron en demasía, mi corazón empezó a bombear sangre para que mis músculos reaccionaran, pero me quede completamente estático, esperando a que alguien me gritara para que fuera útil y me levantara a ayudarle.

-Taemin…- Conseguí susurrar y Minho giró su cabeza para mirar a sus espaldas.

Dos bailarines y el coreógrafo rodeaban a un chico que acaba de perder el conocimiento, tumbado de cualquier manera cuan largo era sobre los tablones de madera de la sala. Un jadeo en mis narices y Minho salto

-¡Tae!- Corrió como desesperado hacia la figura de Taemin en el suelo, apartó a la gente que ocultaba a su novio y cayó de rodillas a su lado.

Por mi parte, juraría que todo pasaba a cámara lenta, como Jonghyun corrió a uno de los bailarines y le grito que llamara al doctor que se encontraría en la enfermería de la empresa.

Como Minho temblaba de rabia, con la cabeza de Taemin sobre su regazo. Yo aun estaba sentado, pero me levante lentamente en cuanto fui consciente. Empecé a acercarme despacio sin ánimo de alterar, pero mis lágrimas me fallaron. La impotencia, porque me destrozaba la imagen, porque de alguna manera lo había estado advirtiendo, y porque aunque al final no fuera nada grave, la imagen de uno de sus hermanos, débil, en el suelo, destrozaba a cualquiera.

Sentí el brazo de Jonghyun rodeándome el pecho y tirando de mí hacia atrás. Lagrimas se quedaron suspendidas en el aire antes de caer al suelo. Pronto mi visión quedó opacada por su rostro.

-Hay que dejarle respirar ¿Vale?- Pero yo en realidad no le escuchaba- Mírame Onew…

Pero yo solo podía ver como los bailarines se alejaban de Taemin y Minho, intentaba esquivar inconscientemente a Jonghyun para saber que estaba pasando exactamente. La puerta se abrió en un lateral de la habitación y un hombre entro apresurado. Lo perdí de vita tras la espalda de Jonghyun, puse una mano en su pecho para que me dejara ir con Taemin pero no se movió.

-Hey, mírame Onew…- Repitió y ante mi nulo caso cogió mi rostro y me obligo a compartir la mirada- Mírame…- Sus ojos oscuros también se notaban preocupados y tristes pero me asuste al ver reflejados los míos- Va a salir todo bien…

Vi sobre el hombro de Jonghyun, como Minho era apartado también de al lado de Taemin, por la fuerza, pues el moreno hacia todo lo posible por mantenerse de rodillas. Jonghyun me zarandeó, para que le prestara atención y que hiciera lo que me había dicho.

-Tengo que hacer algo- Le dije entre susurros- Soy el líder, tengo que hacer algo….

-Que seas el líder o no, eso ahora no importa- Me dijo serio, aferrándose a mi cuerpo para que no me moviera.

-Importó durante mucho tiempo... – Y podría haber evitado que todo eso pasara

-Pero ahora, Onew, tenemos que permanecer tranquilos- Cerré los ojos, manteniendo sus palabras en mi cabeza- Hay que transmitirle calma a Minho… ¿Lo intentaras?- Abrí los ojos lentamente mientras asentía, y suspire cuando vimos a uno de los bailarines con Taemin en brazos, abandonando la sala.

 

Al menos podía velar por él.

La luz tenue de la habitación dificultaba la visión de los dos cuerpos que habían tendidos sobre la cama. Por suerte el doctor había dicho que simplemente necesitaba descansar y que estaría como nuevo en unas horas, pero Taemin llevaba todo el día inconsciente, o durmiendo, quien sabe.

Nada mas Minho lo tumbo sobre la cama, me senté en una de las sillas y me coloqué estratégicamente a los pies de la cama de manera que podía verle el rostro perfectamente. El moreno se tumbo a su lado, si ni siquiera importarle mi presencia y acaricio el rostro tranquilo de Taemin hasta que también cayó en un sueño profundo.

Y allí estaba yo, sin perderme ni un solo movimiento de su pecho mientras observaba como las manos de un dormido Minho se cerraban en torno a la cintura de Taemin. Suspiré, tenía hambre y algo de sueño, pero no pensaba dejarlos solos.

-Podrías ir a ducharte, te haré café…- Negué con la cabeza.

Era la cuarta vez esa hora que Jonghyun pretendía sacarme de allí, admiraba su esfuerzo, aunque fuera completamente en vano. Noté como se acercaba a mí y se agachaba hasta quedar a la altura que me daba la silla, pasó una mano por mi pelo y entonces lo miré.

Sonreía, un poco, esa sonrisa de lado que solo me dedicaba a mí y no pude evitar sonreír yo también.

-¿Qué? Deja de mirarme así- Dije tan nervioso que me tembló la voz.

Se levanto, sus rodillas crujieron y le seguí con la mirada, me sujeto de los costados e hizo que me levantara con él. Iba a quejarme, pero puso un dedo en mis labios fruncidos para que guardara silencio. Cambio las posiciones y me puso de espaldas a él. Después tiro de mi camiseta para que me sentara, justo encima de sus piernas.

Primero me sentí como un niño, sentado encima de su padre, después me di cuenta de que el mayor era yo y entonces me caté que me sentía estúpido de verdad.

-¿Qué haces?- Susurré

-Relájate, ya que no quieres salir, entraré yo- Dijo a mi espalda.

Se acomodó más en la silla, ya que era de dimensiones considerables y me acomodó sobre él.

-Peso mucho…- Negó con la cabeza

Acabé apoyado de costado en su pecho, con mi cabeza descansando en el hueco de su cuello, pero sin perder de vista ni un movimiento de Taemin. Me acariciaba con ternura el brazo, como si de un gatito se tratara, y por un momento lo deteste, porque me estaba quedando completamente dormido en sus brazos.

Llegado el momento, bostecé y me acurruqué, aunque no quería, me dormí. 

Notas finales:

Yo, si fuese Onew, ya me habria tirado por la ventana. 

No se que pensaran pero a mi me encanta el Jonghyun atento y servicial ^^ siempre preocupado por Don Pollo 

Comenten que les parecio el cap *_*

 

https://www.facebook.com/DosVidasUnAdios  Unansee a mi graaan familia :P

Chuu~ nos vemos en el siguienteee *?* 

 


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