Mi ultima esperanza. por B2utiee

Mi última esperanza

Capítulo 1

Key POV

Todo comenzó el día que lo vi, aquél pequeño con esos ojos tímidos, esa mirada que denotaba el famoso Soy Nuevo!, con tan solo mirarlo podía ver los nervios que sentía parado en el medio del salón, la profesora esperaba que los que habíamos llegado “tarde”, si, digo “ tarde” porque había pasado como MUCHO 3 minutos del horario establecido de llegada.. Siempre era tan estricta. Me senté en mi banco de siempre, al fondo del aula, del lado de las ventanas que daban hacia la calle. En ese momento no tenía idea de por qué no podía dejar de mirar a ese chico, pero mis pensamientos se dispersaron al convencerme de que solo estaba extrañado de ver alguien nuevo en nuestra clase. La profesora ordenó a todos los que no estaban sentados aún que lo hicieran para tomar un suspiro leve y comenzar a hablar.

-Buenos días a todos, les presento al nuevo alumno Lee Taemin, tiene 17 años pero gracias a su inteligencia pudo adelantar un año de estudio, creo que es lo que nos hacía falta en esta clase... A ver si pueden aprender de el por favor. 
Taemin sonrió a todos con vergüenza y algo de nervios y finalmente se presento él mismo.
-Hola a todos, me llamo Lee Taemin y espero que cuiden bien de mí, un placer conocerlos.

Terminando de decir eso, busco con los ojos donde sentarse, al parecer el único lugar que quedaba libre era donde se encontraba Kangin, me lamenté al ver esa situación, ya que Kangin era un tanto… cómo podría decirlo.. Irascible? Yah.. La realidad es que era todo un idiota, maltrataba a todos y era algo bruto, yo era el único que le hacía frente sin miedo pues había descubierto que a las únicas personas que respetaba eran las cuales le demostraban valentía. Sonaba contradictorio lo sé, pero así era él. 

De pronto me puse a pensar “Por qué me interesa tanto donde se sienta? Al fin y al cabo ni lo conozco.. el debería poder arreglárselas solo con Kangin. Comencé mi rutina de morder mi lapicera mientras la profesora hablaba un montón de cosas las cuales sinceramente no me interesaban, últimamente me sentía muy distraído, a decir verdad me sentía solo. De repente sentí que alguien pinchaba mi hombro, yo seguía perdido en mis ideas, cuando recordé algo.. “Cierto! Tengo un compañero de banco.” Voltee para mirar molesto a Onew pero el solo me sonrió como de costumbre, era una persona tan amable que a veces me irritaba, sinceramente sentía que no podía enojarse con nadie, éramos tan diferentes, aún así era mi mejor amigo, solo por eso soportaba su carácter tan dulzón.

-Key.. malvado, llegaste y no me saludaste! Acaso te olvidaste de que tu mejor amigo existe? 
Me dijo con un tono algo triste pero al mismo tiempo haciendo un puchero adorable al cual creo nadie podría resistirse.
-Lo siento pollo, últimamente no ando de muy buen humor que digamos.
-Eso porqué? Ya sabes que puedes contarme, después de todo para eso son los amigos no? 
Me sonrió.
-Lo sé, es que.. me siento raro, a decir verdad me siento solo. Creo que todavía no pude superarlo…
Onew me palmeó el hombro y me dijo con la voz más comprensiva
-Sé que es difícil, el fue tu primer amor y eso nadie podrá borrarlo, pero aún así tienes que saber que conocerás a alguien que podrá capturar tu corazón y hacerte feliz, de eso estoy seguro.
Le sonreí de lado y asentí levemente, sabía que el tenía razón pero no era tan fácil olvidar a la primera persona que amaste en tu vida, al menos así era para mí. 
Cómo olvidar a ese hombre, con cara de perro que había conocido hacía tres años cuando había ingresado a este colegio? Sí, tengo que admitir que al principio no nos llevábamos muy bien, para ser sincero prácticamente nos odiábamos; pero con el pasar del tiempo decidimos dejar nuestras diferencias de lado y empezar a conocernos mejor.. Ese fue mi primer error, abrirme ante el. Por qué? Porque sabía que iba a terminar lastimado y así fue, estuve con el 2 años, le había entregado todo de mi hasta que de la nada empezó a estar raro, ya no me devolvía las llamadas, no me pasaba a buscar por el colegio y cuando me veía estaba distante, ya no teníamos contacto alguno.
Ahí noté que algo andaba mal, y como dice el dicho “La curiosidad mató al gato”.

Flashback

-Jjongie, qué te pasa bebé? El solo miraba hacia un lado, sentía que ya no tenía ganas ni de verme. Me puse serio, ya no soportaba más este distanciamiento que ni yo entendía, me cansaba de intentar besarlo, abrazarlo y solo recibir rechazo de parte de él. 
-Jonghyun, te estoy hablando. Hace días que me evitas y realmente no entiendo tu comportamiento, ya me cansé de ignorar que me estás rechazando. Hay algo que no me estás diciendo? -Dije seriamente, por fin me miró, pero con una mirada que jamás había visto en mi vida, sentía como la tristeza que llevaba en ella y la culpa se transferían a mi cuerpo hasta que por fin habló.
-Lo siento Kibum.
Desde cuándo me decía Kibum? Sentía la opresión en mi pecho, no quería llorar antes de escuchar sus palabras.
-Sientes qué? No te entiendo Jonghyun.
-Es que.. yo… ya.. –titubeaba a completar la frase, lo que me ponía más nervioso.
-Ya no te amo. Lo siento, realmente no quería que las cosas terminaran así, pero ya no me siento completo a tu lado.. conocí a otra persona y te juro que no fue mi intención pero comencé a sentir cosas, no lo pude controlar, tan solo perdóname. 
Quiso rozar mi mejilla con su mano pero lo alejé abruptamente, sentía como mi corazón estallaba en mil pedazos. No, mil no, esa cantidad era poca mientras digería todas las palabras que salían de su boca, una lágrima recorrió mi mejilla sin pedir permiso y así como si nada comencé a caminar hacia mi hogar, el mundo, mi mundo estaba destruido.

Fin del Flashback

Suspiré al recordar eso que había pasado hacía ya un año. Sé que había pasado tiempo pero aún mi corazón no podía olvidarlo.

Taemin POV

Ingresé al aula, desconocida en su totalidad con muchos nervios y vergüenza, odiaba ser el nuevo, pero una vez más mi madre había decidido que nos mudáramos con la promesa – que seguramente sería rota- de que esta vez realmente nos asentaríamos en un ciudad.
Es que mi madre era pintora y simplemente amaba viajar para retratar siempre nuevos paisajes. Mi problema era que me sentía un yoyó, yendo de acá para allá continuamente, no podía tener amigos, pareja, nunca lograba establecerme en un lugar y sinceramente era doloroso.. Me sentía anormal. Esta vez discutí con mi madre y le dije abiertamente por primera vez que era la última mudanza, le dije que yo también me merecía ser feliz así que a mis peticiones solo asintió con una sonrisa e intentó tranquilizarme diciéndome que esta vez sería estable, totalmente estable.
Me sorprendí ante su facilidad para aceptar mi enojo, pero me propuse averiguar en este tiempo porqué esta vez sería diferente.

La profesora parecía muy estricta con todos los alumnos, me sentí algo intimidado por ella, parecía que tenía un carácter fuerte. Me presentó ante todos y lamentablemente nombró que yo era un año menor que ellos y que gracias a mi inteligencia había salteado un año de estudio, cosa que no me gustó demasiado porque no quería que me miraran de lado o que les cayera mal porque la profesora sin conocerme me estaba halagando. Observé toda la clase hasta que pude ver a ese chico rubio, bastante chic podría decirse, sentado al fondo del aula. No sé por qué pero me sonrojé un poco y sonreí torpemente, qué me estaba pasando? Si, debía admitir que era muy apuesto pero a mi me gustaban las mujeres, jamás me había fijado en un hombre. Noté su mirada y me avergoncé un poco, inmediatamente bajé la vista y me decidí a presentarme.

- Hola a todos, me llamo Lee Taemin y espero que cuiden bien de mí, un placer conocerlos.
Como suponía solo recibí miradas dejándome notar que no les interesaba mi presentación, salvo la de ese chico rubio, otro que parecía tan grande a mi lado que podría quebrarme con solo tocarme, dos chicas que me miraban con extraña ¿admiración? y por último un chico con la sonrisa más amplia que había visto. Pensé inmediatamente que al menos ya tenía esperanzas de llevarme bien con algunos compañeros.
Observé nuevamente el aula, esta vez fijándome donde podría sentarme y vi que el único lugar libre que quedaba era al lado de ese chico gigante, con una sonrisa me dirigí hacia ese lugar y antes de sentarme hice una leve reverencia hacia el.
-Hola, me llamo Lee Taemin un gusto, espero podamos llevarnos muy bien!
Le dije entusiasmado, el chico solo se limitó a contestarme de muy mala manera
-Me llamo Kangin y mientras más callado te encuentres mejor niña.

Me quedé estupefacto, me había llamado niña? Este si que no era un buen comienzo como había sentido hacía solo unos minutos…