Su chaqueta resbaló por los brazos y cayó al suelo. Quería apartarla con los pies, pero no le dio tiempo, MinHo le hizo retroceder hacia la cama, cogiéndole del cuello mientras le besaba.
Empezó a besarle en la escalera, cuando iban a subir, justo después de que TaeMin dijese
- ... Mi madre está durmiendo…
- Mejor. – Le besó entonces.
- … Creí que
- Ya acabó el día.
Cayó de espaldas sobre la mullida cama y MinHo cayó sobre él. Pero se separó para dejarle tumbarse bien mientras se sacaba la chaqueta ya la lanzaba al sofá. Se sacó también los zapatos, los calcetines y los pantalones; eso con la ayuda de MinHo, besándole la cadera y luego la rodilla.
Se arrastró sobre él hasta quedar a su altura.
- Mh- ... – Se le subió la camiseta y la mano de MinHo apareció allí. Estaba caliente, y subía por su pecho. Se sacó la camiseta y le miró.
- ...Realmente te creció el pelo... – Susurró. TaeMin le pasó un brazo por el cuello y le acercó a sus labios. Ese beso era cada vez mejor; más rápido, más electrizante; más excitante y mejor en todo.
MinHo se separó para sacarse también la camiseta. Las manos de TaeMin iban por su pecho, pero bajaban a los abdominales, y luego a su miembro, aún escondido dentro de la ropa.
- Mmg...
- Está tan duro... – Suspiró riendo. Le bajó el bóxer y él se lo sacó antes de tumbarse sobre él.
- Lo puede estar más...
- ...Lo sé... – Se movía sobre él frotándose. – Mmh...
MinHo empezó a bajar besándole el cuello, a grandes saltos. Solo se detuvo a besarle los pezones, de ahí salto al ombligo y luego fue directamente a sacársela del calzoncillo.
- Tu también lo estás...
- Ah-... – Empezó a besárselo y luego a lamerlo, pero se le escapó de la boca y de la mano, porque TaeMin bajaba también, así que subió.
Pasó de besar o lamer; directamente se la metió en la boca empezando a mamar, y era genial. Crecía dentro de su boca; aquellos labios eran demasiado buenos. Se separó con el sonido de su propia saliva y se acercó a su vientre para darle besos. Subía por su perfecto torso, besándole con ternura pero realmente demasiado excitado como para sentir nada más, hasta que llegó a su cuello y empezó a succionar. Sus miembros se chocaban; quedaban incómodamente pegados el uno junto al otro; sentía el vientre de MinHo en la punta y él sentía el suyo, y todo el cuerpo; todo acariciándose.
- I’m so horny... – Susurró MinHo. TaeMin sonrió y siguió comiéndole el cuello
- ...Same as me...
- ¿Why are we talking english...?
- You started… - Le miró y le besó en los labios. Los ojos de MinHo se veían negros y brillantes, seguramente igual que los suyos. Le sonrió - Because it’s sexier than hangul
- Mm… - Le abrazó acariciándole. – I don’t think so… - Murmuró
- Don’t you? Well, so… it’s because… we’re fucking awesome. – Le devolvió la sonrisa.
- Yeah… You got it…
Le volcó acariciándole sin dejar de besarle. Le daba un beso, y otro, y otro...
Sentía sus manos bajando por su cuerpo, acercándole de la cadera, subiéndola. Se lanzó a su cuello mientras se le colocaba entre sus glúteos. Sentirla ahí fue... demasiado.
- ... Mierda TaeMin... – Suspiraba en su cuello. Movía la cadera; la metía y sacaba de ahí. - ...Mierda TaeMin... Mierda... – Le besó el cuello concentrándose en eso, quería ignorarse de cintura para abajo pero era imposible.
Buscó sus labios y siguieron besándose. Pero luego TaeMin se separó.
- ... – Le miró y tragó saliva. Había dejado de mover la cadera pero se había quedado ahí. – Uff...
- MinHo... – Bajó una mano por su cuerpo a modo de caricia, y luego se torció volcándose fuera de la cama.
Buscó algo bajo esta, y al volver tenía un bote de plástico y una caja de condones. Cogió ambas cosas mirándolas. “Lubricante.”
- No me dolerá.
- Sabes que sí.
- Sé que no. – Respondió decidido a pesar de tener el corazón a punto de sufrir una arritmia. – He estado... entrenando. B-bueno, practicando... – “¿Eh?” – Estuve practicando con unas cosas; Key me aconsejó.
- ¿Qué?
- P-puedo... puedo meterme tres dedos sin que me haga daño... – Tragó saliva de nuevo.
- ... ¿Va en serio?
- No me dolerá. ¿Quieres…? – MinHo dejó la caja y el bote en el escritorio, en el cabezal de la cama. - ... Yo sí quiero...
Le besó. Siguió besándole lentamente. “Mierda, claro que quiero…” “¿Por qué no lo hice…? ¿Se habrá metido un manillar él también...?” Sonrió y TaeMin también, aunque no sabía por qué. Se incorporó y tomó la caja de condones para sacar uno.
- ¿Quieres ponérmelo...? – Dijo riendo. Se lo dio – Toma. Eh, con los dientes no, tonto. – Se lo sacó de las manos de nuevo y lo abrió y se lo volvió a dar. Se lo puso sin muchos problemas; lo había visto montones de veces, incluso lo había practicado con un bote de espuma para el pelo en casa de Key.
- ... No te favorece mucho... – Le miró divertido.
Se dejó caer de nuevo para besarle. Ahora era aún más tierno. ¿Trataba de tranquilizarle? ¿Demostrarle que no era solo sexo? Aunque TaeMin no necesitaba ninguna de las dos cosas; estaba tranquilo y sabía que aquello era amor.
De repente sus besos se volvían más pasionales; volvía a acariciarle todo el cuerpo, hasta llegar a cogerle de la cadera. Se la subió sobre los muslos. TaeMin quedaba curvado y no sabía dónde poner las piernas. Le miró algo incómodo, pero MinHo llevó las manos por sus piernas y le subió los tobillos a los hombros.
- ... ¿Estás bien así...? – Bajaba las manos hasta su cadera de nuevo, y las subía, y las volvía a bajar, acariciándole.
- ...Mm... – MinHo se tiró todo hacía delante, curvando más a TaeMin, hasta llegar a sus labios. – Mm... – Cerró los ojos. “¿Está ocurriendo de verdad...?”
Alargó el brazo para coger el bote y se echó un poco en la mano. Sonrió.
- ... Ash… - Le echo un poco por el vientre, bajando hasta su miembro – Está frío... – MinHo sonrió esparciéndolo con el dedo – Mmg- ... – Pasó de largo hacia el perineo y ahí echó más - ...Mh... – Se inclinó de nuevo para besarle en el pecho mientras su dedo seguía bajando. – Mgm... – Hacía círculos alrededor y le volvía a besar – Mh. – Lo introdujo lentamente. – Mmh... – Le miraba alucinado. Se miró el dedo.
- TaeMin.
- ...No me duele...
- Lo tenías todo preparado, ¿cierto?
- ... ¿Eh...? - Le miró frunciendo el ceño. – Ah sí... – Se lo metió otra vez y lo sacó para volver a meterlo, haciendo círculos dilatándole. – Me dijo Key que era mejor si te... limpiabas...
- ... Mm... – Le metió dos dedos y entraron con la misma facilidad “Este niño...” Sonrió para sí, pues él estaba con los ojos cerrados otra vez. Los ojos cerrados y la boca entreabierta. - ¿...Te gusta...?
- Mmg... – Seguía moviendo los dos dedos tratando de dilatarle. Se le hacía sumamente sencillo. HanA lloró de dolor con eso. “Y él, pst...” Miró su cara.
Realmente parecía gustarle. Su pecho subía y bajaba nervioso, acorde con su respiración agitada. Se veía hermoso. Le bajó la otra mano del pecho hasta el vientre.
- Ah... – Y luego se la cogió empezando a acariciarle – Mh... – Veía su nuez al tragar. Le daban ganas de morderla y besarla. Le metió los tres dedos moviéndolos otra vez, pero no duró demasiado. TaeMin abrió los ojos cuando se los sacó. – Ah...
Se volcó de nuevo sobre él y le beso. Un beso se juntaba con otro; no se separaban de darse uno y ya volvían a besarse. TaeMin le rodeó por los hombros, pero tuvo que soltarse; MinHo se incorporaba otra vez. “...Lo haremos... Lo haremos de verdad...” Tragó saliva otra vez viendo como se colocaba de nuevo y se echaba lubricante. Y le miró. TaeMin fingía no estar asustado.
- Te quiero.
- Lo sé… - Le vio inclinarse sobre él; se curvaba de nuevo. Le miraba aguantándole la mirada, aguantando las ganas de cerrar los ojos mientras la sentía entrar lentamente. – Ah-
- ¿Duele? – Se paró y TaeMin negó con la cabeza. Le sonrió y siguió entrando, aunque no mucho más; y volvía a salir lentamente.
TaeMin tragó saliva de nuevo. Entraba otra vez, poco a poco. Se inclinó aún más para llegar a sus labios y darle un beso. No fue cómodo pero le gustó, porque aún le entró más. La sentía ahí, tal cual, rígida y caliente, dentro de él. Y salía otra vez. Aún no estaba fuera y en lo más profundo ya la echaba de menos. Entraba otra vez, más adentro aún.
- Mh... – Abrió los ojos y le miró. MinHo se veía turbado, con los ojos cerrados y luego mirándole mientras suspiraba otra vez. Alargó el brazo a su cuello y se la metió más adentro al inclinarse sobre él. Le dio un beso y se separó de nuevo sacándosela. - ...De verdad... De verdad, de verdad... Te quiero TaeMin... – Sonrió y cerró los ojos al sentirla entrando de nuevo. Cada vez le gustaba más. Abrió los ojos de golpe.
- Ah.
- ¿Mm? – Pasó una mano por su vientre y se la acarició, esparciendo con el pulgar el líquido pre seminal que acababa de salirle inesperadamente, e intentó metérsela exactamente igual. Salió más rápido aún cogiéndosela y entró de nuevo sin esperar mucho.
- Mh.
Sonrió esparciéndolo de nuevo y empezó a masturbarle lentamente, al mismo ritmo que entraba y salía. Le miró y casi se echó a reír: su cara era un cromo. Estaba apretando los labios a ratos, y frunciendo algo el ceño, luego relajándose, luego entreabriendo la boca, apretando los párpados...
- Mhg...
- ...Mm... Bueno... – “¿Mm…?” Le miró sin abrir los ojos. La mano de MinHo de repente iba algo más rápido, se estaba acelerando. Y él también.
Seguía haciéndoselo, pero se concentraba en sentir su cuerpo caliente, estrujándole pero permitiéndole entrar y moverse dentro de él, algo delicioso. Todo su cuerpo contra él; sus nalgas, sus piernas, quemando contra su piel. Tan suave, tan dulce y delicado. Bajaba las manos hasta su cadera. La cogió de nuevo, acariciándole tiernamente mientras entraba poco a poco otra vez, disfrutando de la sensación. Luego empezó a acelerar su cadera y también su mano, poco a poco. Al principio ni lo notaba, pero a la tercera embestida sintió esa ola de calor en su cuerpo hacerse algo más intensa, y a la quinta más intensa, a la séptima más, a la décima; aún no estaba fuera del todo y entraba otra vez; luego salía completamente para sentir en todo el miembro la diferencia entre estar fuera sin la presión y el calor, a entrar de nuevo tan placenteramente.
- Mgh... – Hasta que TaeMin no gimió no fue consciente de cuánto se había acelerado su mano y su movimiento de vaivén. Frenó un poco temiendo que se corriera, volviendo a salir y entrar por entero, dejando esperar algo de tiempo para echarlo de menos, pero al penetrarle otra vez, y otra y otra, soltó su pene y le tomó por las piernas con ambas manos, moviéndose más rápido. Y más, y más rápido.
- Ah... – TaeMin se sentía al límite cada vez que le daba en ese punto, y aunque no siempre lo lograba, se sentía cada vez más cerca. El calor se intensificaba; le echaba de menos en ese breve instante en el que salía de él y adoraba sentir como le llenaba de nuevo, y se hacía tan continuado que se veía llegando en cualquier momento, aunque no lo hacía. Era como ver algo a través de un cristal empañado: sabía que le gustaba, pero solo lo disfrutaba de verdad cuando le daba ahí, y realmente no sabía cómo lo hacía, y MinHo tampoco. – Ah... S-si... si pudieras... si pudieras...
- Lo intento... – Se movía tan rápido que ya no sabía ni cómo lo hacía; había enloquecido. Se dejaba llevar por su instinto y parecía que la cadera se movía sola por inercia, pero trataba de conducirla siempre del mismo modo para darle dónde le gustaba.
- Ah- - Trató de hacerlo exactamente igual y a la quinta embestida le dio otra vez – Mh-
Pero era difícil. Se la agarró y le apretó la con toda la mano.
- Mhg... – Bajó la mano lentamente y luego empezó a masturbarle tan rápido como se la estaba metiendo – Ah...ah... A-h... M-Min...H-...
“S-su voz...” De repente se lo sentía aún más; parecía que TaeMin apretaba más y estaba más caliente y él también; de repente todo se hacía más intenso.
- M-M...M-MinH-...¡M-MinHo...! ¡Mm… Mm…! – Se escuchaba chocar y repicar contra su cuerpo. Aquello aún le ponía más. Sabía que se venía; iba a correrse; lo sentía; era demasiado intenso; casi ni podía soportarlo. - ¡Ah! – Se quedó con la boca abierta y MinHo seguía masturbándole y penetrándole igual de rápido o aún más, ignorando su mano empapada, la cara de éxtasis de TaeMin y la suya propia mientras sentía como se corría dentro de él y gemía con todo el alma.
Tuvo la sensación de que su orgasmo resonaba por la habitación. Tuvo esa sensación por varios segundos mientras iba frenando hasta quedarse parado a medio camino.
- ...
- ... – Cuando por fin abrió los ojos vió que TaeMin le estaba mirando.
- Waw... – Suspiró. Ni pensó en sonreír. Se miró el pene saliendo de él. TaeMin bajó las piernas. Se sacó el condón, lo ató y lo fue a lanzar pero se frenó. Al final lo dejó en el suelo.
- Recuerda que está ahí – TaeMin le interrumpió incorporándose y besándole.
Le cogía por la nuca atrayéndolo sobre él. Su vientre esparcía el semen de TaeMin entre los dos. Se separó de sus labios ruidosamente, quedando de lado.
TaeMin sonreía como un idiota y soltó una carcajada. Le escuchó sin abrir los ojos, igual que él.
- Fucking awesome... – Sonrió y se acercó a besarle de nuevo, acariciándole y abrazándole por los hombros y por el pecho, rodando por la cama, enredándose, mientras su beso se hacía eterno otra vez.