.Mi pequeño Frankenstein.
Era el cumpleaños de Itachi, cumplía...dejemoslo en un año más. Sasori había estado mucho tiempo, un mes y medio, trabajando en su regalo. Sabía, aunque Itachi no lo reconociera, que se sentía solo. Decidío hacerle una muñeca. Y no, no le iba a regalar una muñeca inchable. Itachi no se sentía solo en ese sentido, podía conseguir una chica fácilmente. Le regalaría una chica, que al igual que él, tenía "vida" y pudiera hablar y moverse libremente. Aparte también lo hacía por Konan, ella era la única mujer en los Ataksuki.
Pero, Sasori decidió ser algo más perro, y en vez de hacer una mujer hacer un hombre. Como lo chica iba a ser rubia y con ojos azules, el hombre sería así. Su especialidad sería el arte, le puso dos bocas en las manos, una cada mano. Su pelo era largo, con un gran flequillo y una coleta que le recogía el pelo. Se llamaría Deidara ya que realmente era un muñeco.
-¡Itachi-kun!-dijo Tobi entusiasmado.-¡Feliz cumple!.-
Él suspiro, Kisame quien estaba a su lado, simplemente se rió. Pain le miraba mientras que Konan salía de la cocina de la cueva con un pastel en sus manos. Olía delicioso y seguramente sabría mejor. Todos estaban reunidos; Pain junto a Konan como normalmente, Itachi con Kisame, Hidan y Kakuzu, Zetsu y Tobi. Pero faltaba Sasori.
-¿Donde esta Sasori?.- preguntó imponente Pain.- Estará por ahí.- respondió Hidan como siempre, arrogante.
-¡Ya estoy!.- se oyó decir a Sasori.- Ufff...¡Itachi!.- dijo señalandole, él otro lo miro sorprendido.- Te voy a traer tu regalo.-
-Espera ¿¡Qué!?.- dijo él mientras intentaba levantarse e ir tras él, mas Pain le dirigió una mirada para que aguardara.
Al rato se oyó gritar a Sasori quien decía que cerrara los ojos, Konan por más seguridad los tapó ella. Todos quedaron boquiabiertos al ver a Sasori con un cuerpo en su hombro. Ordenó a Konan que le destapara los ojos.
-Oh Kami mio ¿¡Esto qué es!?¿¡Me regalas un cuerpo!?¿¡Que quieres, que lo cocine!?.- Dijo Itachi.
-Calla, alejaos puede que reaccioné mal.- dijo Sasori, todos lo hicieron menos Tobi que se quedo en el sitio. Sasori hizo algo en la espalda de aquel "muñeco" y de un salto se alejo.
El individuo abrió los ojos y se puso rigido. Se levantó rápidamente, miro asustado y agresivo a su alrededor. Cuando vió a Tobi, se dirigió agresivamente hacía él. Le estranguló y lo empotró contra la pared de la cueva.
-¡Quieto, detente!.- Gritó Sasori.-Mada.-Él individuo se paro de inmediato. Miró a Sasori.-Aquí.- dijo él, lo trataba como un perro. Obedeció.
Sasori se sentó y él hizo lo mismo. Ambos cruzaron las piernas. Sasori alzó un dedo y lo puso delante del regalo de Itachi. Él lo miró y lo siguió. Siguió mirandolo y luego Sasori lo dejo caer en su nariz, entonces el rubio se pusó vizco. El Akatsuki alzó una mano y con su otra mano señaló la anterior. El otro puso su mano junto con la del marionetista.
-Mal.-dijo Sasori, él otro se estremeció y pusó cara de concentración. Hizo lo mismo con la otra. -¡Muy bien!.- exclamó Sasori. A el otro se le iluminó la cara.
-A ver.- cogió a Itachi y lo acercó.- Es tu regalo, no es un muñeco, es una persona habla, camina, ataca, come, duerme. Vamos que es otro más. Para que se intregara en Akatsuki le pusé dos bocas en las manos. Por eso le dije lo de mal, su boca me mordió.- Cogió la mano y la mostró, en ella había una mano que sacaba la lengua.- Mastica una arcilla especial que explota cuando lo ordena.-
-¿¡Le has regalado una chica por su cumpleaños!?-dijó Hidan.- Ahora no tendrá problema para follar, jajaja.-
-Hidan.- Kakuzu habló y hidan lo miró con algo de molestía.- Es más que evidente que es un hombre. Si te hubieras fijado, tiene nuez.-
-Kakuzu tiene razón es un hombre, se llama Deidara.- Él lo miró extrañado.- Si Dei-kun ya puedes hablar.-
-Di mejor Dei-chan, jajaja.-Dijo Hidan. Todos le miraron con cara de pocos amigos.
-A ver... ¿que coño pretendes que haga?- Dijo Itachi con curiosidad.
-Que lo saques a pasear, que le rasques detrás de la oreja y que le bañes de vez en cuando. Ah, y que le des de come y beber, no vaya a ser que se te muera la perra.- Volvió a decir Hidan entre risas. Zetsu y Tobi rieron por lo bajini ante su comentario. Pain le dirigió una mirada que los calló inmediatamente.
-Itachi no tendrás que hacer nada porque es una persona.- espetó Sasori.- no un perro.-
-Dije perra.- reprochó Hidan con un falso enojo, Kakuzu lo levantó por el cuello entrecerró un ojo como señal hacía su víctima a la que éste asintió. Lo dejó en el suelo.
-Etto... Encantado soy Itachi.- Le aclaró Itachi. Deidara lo miró, miró su mano la señalo y le dijo.
-No.- La lengua de la boca de la mano fue encerrada entre los dientes. Le tendió la mano y le sonrió.- Deidara, encantado.- Itachi cerró los ojos mientras varias gotas recorrian su cabeza. Le dió la mano, el rubio la agarró y la zarandeó mientras le mostraba una amplia sonrisa.
Itachi soltó el agarré, se acarió la mano. Creyó recordar que la boca de la mano le lamió. Realmente ese chico era especial.