La chica lleva un ceñido tapado azul. Las botas que usa son discretas pero aún así ella resplandece sin mucho esfuerzo. La observo caminar hacia el auto y le abro la puerta gentilmente. Su mirada es triste y luce perdida como hace varios días. Me saluda con un cálido beso en la mejilla, pero se queda contra la puerta, alejada de mí.
Hace tiempo que salgo con ella. Compartimos ocasionales salidas, encuentros. Algún que otro beso. Ella, ella…No se preocupa por mis verdaderos sentimientos, aunque trato de no herirla con mis acciones, las cuales me delatan cada vez más seguido. La veo pretender olvidar esos detalles. Pero ya lo sabe. En parte por mi actitud cuidadosa hacia ella…
~-Hyung, ven aquí…Todavía quedan algunos arreglos que hacer-dijo Jiyong, un poco enojado. Algo no le hacia gracia desde hace semanas.
-¿Qué necesitas? Debo irme ya-respondió su mayor, apurado.
-¿Y qué? ¿Tienes que ir a ver esa noviecita que tienes? Dile que espere. El trabajo es primero.
-¿Qué es lo que tienes contra ella?-inquirió Seunghyun, un poco molesto. ¿Por qué Jiyong decía eso con tanto desdén?-Ella es mi novia, y yo decido que ella esté primero.
-Claro, por unos besos y abrazos de mujer, tú no cumples tu trabajo. Debemos tener esto para pasado mañana. Deberías interesarte.-contestó el líder, con aires de superioridad.-Ni siquiera te he visto abrazarla en público. Apuesto a que aún no se han acostado. ¿Y ahora quieres decirme que ‘ella es primero’. Ni tú te la crees.-expuso el menor, mirando como su hyung contenía la ira.
-Me voy de aquí. Sabes que me intereso por mi trabajo, eres idiota por hablar. Ni pienses que volveré antes para terminar mi ‘trabajo’.-dijo el mayor. Ji no era el mismo, estaba más inestable que de costumbre, y por eso, había decidido alejarse de él y ocuparse de otras cosas. Como tener novia. Odiaba describirla así, pero ella era su vía de escape. –Y si me acuesto con ella, es mi problema.-sentenció.
-Si, claro, hyung.
-¡Ya basta! No te interesa lo que hago. ¿O si?- dijo Seung acercándose violentamente al menor. –Que no te escuche hablar así de mi, de nuevo.-JiYong sonrió, con algo extraño en sus ojos.-Ni siquiera la has tocado, Seung. Ni siquiera les has dado un beso decente. Miró directo a los ojos del mayor, y juntó sus labios violentamente. Tomó su rostro entre sus manos y continúo besándolo. Seung por su lado, abrió los ojos. No quería caer en eso. No ahora. Esto era lo que trataba de evitar. Terminar correspondiendo el beso que el menor le daba, porque nunca más querría dejarlo. Las respiraciones entrecortadas lo envolvían, lo mareaban. Debía pararlo, como sea.
-Ji… ¡JiYong! Déjame ya-dijo el mayor empujándolo. –Tengo novia ¿lo olvidas?- No, claro que no lo olvido. Ojala pudiera olvidarlo. Y así no tener que rogar por tu presencia. Por favor, no lo entiendes. Vete ya. No quiero verte. Es que aún no lo entiendes. ¡Vete!- dijo JiYong, dando dos pasos, y dando un portazo.
Ji… ¿Ji?...Dime lo obvio. Yo te…te amo, así es para ti también. Pero ahora no, no puedo hacer eso.
~
-Seung…-su voz sacude mis recuerdos- Debemos hablar...
Nos bajamos del taxi, y comenzamos a caminar por el parque que, a causa del invierno, no contaba con muchas personas rondando.
-Seung...yo sé que nunca me amaste…y yo lo acepté...pero cada vez duele más- dice ella, y su voz se quiebra más al final
-¿Qué estás diciendo? Yo te quiero. –digo, tratando de sonar convencido
-Esa es la diferencia. Se a quien amas.- El beso de JiYong vuelve a mi mente con más fuerza que antes. Atacándome por sorpresa. Enojándome de nuevo.
-No, no. Te amo a ti – eso suena tan ridículo ahora. Y en un impulso tomo su delicado rostro y le doy un beso. Un poco busco, pero quiero borrar las palabras de mi mente. Esas que se repiten todos los días al intentar dormirme. Ella no corresponde el beso, y me vuelvo violento, como si quisiera mostrarle con eso que ella es a quien amo.
-Seung, no...-dice, y noto sus lagrimas- Basta, por favor…Ya… ¡Basta!- grita y me empuja.- ¡No soy yo a quien amas!-dice llorando, y mi corazón sufre un poco por verla así. –Me duele, y no creo que lo sepas. Quiero que me dejes-sus lagrimas son abundantes- Ve con él, deja de lastimarme-grita otra vez. No se que hacer, ella no puede dejarme. La necesito aunque sea para olvidarme de él por un rato. Su bonito tapado se esta desarreglado y el maquillaje deja feas marcas en su cara.
-No quiero dejarte, por favor…lo arreglaré….No te vayas...-digo, desesperado, ella se ha dado cuenta después de todo- No me dejes- Pero mi voz suena igual que siempre, no me quiebro, nada sucede. A ella no la amo, pero la quiero.
-Seung, ya sabes como termina esto. Desearía no verte mas, no querer verte mas-sus lágrimas cesaron, pero ahora la nieve es la que cae lentamente- Yo, me iré…A diferencia de ti, yo si te amo. Pero eso contigo no cuenta.
Poco a poco la luz del sol, nos abandona y el frío nos envuelve. Mi mente corre a mil por hora, tratando de decir algo coherente. Pero ella se acerca, con paso firme, y me da un beso en la mejilla. El ultimo de todos.
-Lo siento-balbuceo, sin convencimiento- De veras, lamento que esto se termine así…Perdón por lastimarte-ella no contesta, y se aleja de mi.
No quiero ver a JiYong tampoco. No aún.