Jiyong no podía recordar la primera vez que había estado consciente del pensamiento 'Seunghyun es atractivo'. Se habían conocido el uno al otro por tanto tiempo- antes de que hayan llegado a la pubertad y haberse dado cuenta que lo que las hormonas eran- que el sentimiento jamás se había manifestado en ningún tipo de momento 'ah-ha'!. Así que supuso que siempre había encontrado a su amigo bien parecido, incluso cuando había estado tirando del lado regordete.
El conocimiento de esto no lo había molestado, nunca le había causado problemas, por que honestamente, Jiyong estaba atraído a gente atractiva en general. Además, había vivido y trabajado con tantos hermosos hombres y mujeres a través de los años que la belleza física se había convertido, más o menos, en una constante aburrida en su frenética vida.
Estaba por debajo de su notar.
Hasta que él y Seunghyun fueron a su iniciación de concepto para el nuevo álbum de GD&TOP, eso fue.
Había tomado 3 horas, tres miserables horas, para que las noonas tiren y tuerzan y ricen y frían su fino cabello hasta convertirlo en a lo que Jiyong podía llamar un afro. Bueno, un 'medio-fro', en realidad. Habían rasurado sus costados y jalado el resto para arriba en el posiblemente estilo más raro en el que jamás había sido peinado. Mientras giraba su cabeza de costado en costado, mirándose a si mismo en el espejo, pensó que lo podía hacer funcionar. Un poco de delineador kohl para hacer resaltar a sus ojos, unos cuantos accesorios brillantes y sería suyo.
Un destello de blanco en el espejo llevó a sus ojos lejos de propio rostro, y giró para encontrar a Seunghyun recostado en la entrada, brazos cruzados, cintura resaltando de un lado. El destello que había visto era el nuevo cabello de su compañero de grupo. Las noonas lo habían teñido blanco. No rubio, no plateado, blanco. Habían rasurado sus costados, tanto como lo habían hecho con Jiyong, y luego acomodado su lacio cabello hacia arriba en forma plana. Él podía ver la cohesión en el concepto, sin importar lo tonto que los estilos eran.
Mientras Jiyong dejaba que su mirada viajara del cabello de Seunghyun hasta el resto de él, todos los pensamientos de "tonto" dejaron su mente. Seunghyun estaba usando un traje, como de usual, y el rígido contraste entre su blanco cabello, negros ojos, y saco gris hacían de él una imagen muy exótica. El de cabello oscuro sintió su rostro ruborizarse cuando se dio cuenta que no solo estaba casualmente examinando a su amigo, estaba mirándolo activamente.
"Lo sé… Luzco como un Vanilla Ice asiático," el chico más alto refunfuño, obviamente no feliz con su nuevo aspecto y completamente mal-interpretando la expresión del chico más joven.
Jiyong sacudió su cabeza, tanto como para aclarar sus pensamientos (que estaban rápidamente convirtiéndose en lascivos) y para asegurarle a su amigo que él no estaba de acuerdo con su apreciación. Hizo su camino hacia Seunghyun y lo agarró del brazo, arrastrando a ambos de ellos al frente del espejo de cuerpo entero. El ceño del chico mayor solo se profundizó.
"Es como si estuvieran tratando de estilizárnos como raperos de los principios de los años noventa.Es decir, qué es esto?" preguntó, palmeando su mano encima del elástico cabello de Jiyong.
"Y le hicieron rayas a mi ceja. Vanilla puto Ice," murmuró, pasando un dedo sobre su gruesa ceja izquierda, labios fruncidos mientras que su paso se encontró con dos huecos en el pelo.
Jiyong le dio un manotazo a la mano de Seunghyun para retirarla de su nuevo hacer y le dio un codazo en las costillas.
"No hay manera, hombre, luce genial. Solo piensa en cuanto vamos a resaltar. Recuerdas cuando estuve rubio para el concepto de Heartbreaker? Bueno… Todos amaban esa mierda. Y no luces como Vanilla Ice," dijo, sonriendo. "Luces como Guile de Street Fighter."
Esquivó el palmaso que Seunghyun le envió y lo empujó por el hombro . El chico de cabello blanco fue girando unos pasos más allá, mirando hacia atrás de nuevo para mirar a su afroado líder.
"Ok, me arrepiento: No luces como Guile."
Seunghyun enderezó su chaqueta, aún mirándolo.
"Te vez como hisopo gigante."
El chico más grande se dirigió hacia él, atrapó la espalda de su camiseta mientras lo volteaba. Jaló duro, y ambos de ellos terminaron desmadejados en el frío, suelo de cemento.
"Hahaha! Hiso-TOP!" Jiyong chilló, tratando de retorcérse lejos de los fuertes dedos que estaban siendo hundidos en su torso y fallando en el intento. Seunghyun le siguió haciendo cosquillas sin piedad hasta que una de las noonas de maquillaje abrió la puerta y empezó a regañarlos.
"Chicos! Levántense de ese sucio piso y pongan sus traseros en el salón! Aún tenemos que probar maquillaje y atuendos para el concepto," siseó.
Las noonas habían estado ahí más tiempo que ellos, y el stress del día obviamente estaba empezando a tocarlas. Jiyong y Seunghyun se pusieron de pie e hicieron reverencias, murmurando sus disculpas a su espalda mientras ellas se iba. Cuando se fue, Seunghyun miró a Jiyong, quien le sonrió inocentemente.
"Es lindo como piensas que esto a terminado," sonrió, luego palmeo el rostro de Jiyong dos veces, lo suficientemente fuerte para que la acción sea llamada bofetadas.
"Ahora vámonos. No queremos hacer enfadar a nadie más."
Jiyong sobó su mejilla y vio a los amplios hombros de TOP salir del cuarto. Por una vez se sintió agradecido de que su hyung era lento en darse cuenta; de otra manera, él podría haber notado la erección que había empezado a formarse en sus pantalones cuando lo tumbó al suelo y puso sus manos sobre él. Jiyong frunció el ceño con ese pensamiento, luego se abofeteó a si mismo en el lugar donde Seunghyun lo había hecho solo momentos antes, pero más fuerte.
Él no necesitaba esto. Seunghyun no necesitaba esto. Nadie necesitaba a Kwon Jiyong desarrollando un flechazo en el chico con el quien estaba apunto de embarcarse en un horario de intensas promociones. Cerró sus ojos, tomó un suspiro hondo, y ordenó a sus hormonas que se callen de una buena vez.
Funcionó por otras dos horas, hasta que vio el concepto completo del álbum traído a maravillosas vida en la forma de un Choi Seunghyun.
Jiyong se atoró con su soda sabor a fresa y tosió violentamente mientras TOP venía desde el cuarto de maquillaje que actualmente él estaba ocupando. Todos alrededor de ellos se iluminaron con sonrisas, empezaron a aplaudir, animando, y TOP hizo reverencias profundas hacia ellos. Cuando se enderezó miró a Jiyong, arqueó sus labios en una media-sonrisa y el chico más joven estaba empezando a notar como su corazón se emocionaba.
Ambos de ellos fueron puestos en trajes negros, pero a lo que Jiyong pensaba que los hacia ver un poco mayor, un poco más como un gángster (especialmente con la dorada cadena que colgaba de su cuello,) Seunghyun lucía… No estaba seguro de que tuviera palabras para describir cuan ridículamente afable y elegante que el traje negro hacía lucir al chico. O cuan alto. O cuan sexy.
Aclaró su garganta y se paró, tratando de aclarar sus pensamientos al mismo tiempo.
"La mierda. Es James Bond!" bromeó, haciendo su camino hasta Seunghyun.
"Estás feliz, ahora? Al parecer vamos a estar usando trajes; tus favoritos."
TOP asintió y alisó sus manos por el negro material de sus pantalones, y Jiyong realmente deseó que no lo hiciera, por que era tan dificil no pensar en él como sexy si seguía haciendo cosas sexys.
"Te ves bien también, Ji." escuchó a la profunda voz resonar.
"Ese maquillaje de verdad hace que tus ojos resalten. Tienen que hacer eso, si quieres competir conmigo," Seunghyun rió, poniendo su rostro al frente de el de Jiyong y meneando sus cejas de una manera que él probablemente encontraba tonta pero hizo que Jiyong quisiera agarrarlo de las orejas y adherir sus lengua en su garganta.
En verdad deseó que se pudiera abofetear a si mismo de nuevo, pero todos probablemente hubieran pensado que estaba loco. En vez de eso, apretó sus dientes y giró sus ojos a las payasadas de Seunghyun.
"Tú solo desearías que fueras tan sexy como yo, hyung," suspiró, mirando a su reflejo en el espejo más cercano y guiñando el ojo a si mismo. Las noonas de verdad habían hecho un trabajo excelente con él.
Otra hora después, y todos estaban terminando la noche, dispersándose por los cuatro vientos. Jiyong alcanzó a Seunghyun en el casi-desierto estacionamiento y jaló de su manga antes de que pudiera entrar a la van de la compañía.
"Hey, sal conmigo," jadeó, tratando de recuperar su aliento después de correr cuatro pisos de escaleras y a través de la cubierta de estacionamiento. Él casi olvidó encogerse por la elección de sus palabras.
"Para comer, idiota," resopló mientras Seunghyun se reclinaba sobre él, riéndose.
"Claro, cariño. Dónde quieres ir?" preguntó, voz profunda agrietándose mientras se convertía en más alta y alta con alegría.
"Si dejaras de reírte de mi, te lo diría."
Seunghyun puso una mano en su boca y giró hacia el conductor de la van.
"Creo que iré con Jiyong, Jae. Gracias de todas maneras."
El conductor asintió y agitó su mano, y Seunghyun cerró la puerta corrediza con un ruido sordo. Después de que la van se haya ido giró hacia Jiyong, aún sonriendo, pero no riendo.
"Ok, estoy hambriento, dónde ir?" preguntó, frotando su plano estómago.
Esa moción causó que las ruedas en la cabeza de Jiyong comiencen a girar hacia lo perverso una vez más. No podía recordar la ultima vez que había visto el estómago de Seunghyun, o alguna parte de su cuerpo superior que su camiseta no cubriera. El chico era modesto a exageración, pero Jiyong figuró que eso tenía algo que ver con todo el bullying que había pasado durante su rechoncha juventud. Ciertamente ya no lo era. Acaso su piel sería tan suave como su perpetuamente rostro sin pelo? Acaso tendría músculos? Era más de lo que Jiyong podía imaginar. Su pecho sería firme? Sus tetillas oscuras, y guijarras cuando Jiyong pasara sus dedos sobre ellas…
"Yo!" Seunghyun chasquéo sus dedos en frente del rostro de Jiyong.
"A dónde vamos?" Rió, pero Jiyong frunció el ceño.
"Demonios, lo siento. Creo que hoy ha sido un día muy largo," murmuró tímidamente. Un largo, duro día,
"Quieres ir por hamburguesas y ver una película? No estoy seguro de que si estoy listo para salir en publico así," Seunghyun suspiró, corriendo sus dedos por su caído cabello.
Jiyong mordió su labio, que diablos estaba mal con él hoy? No había sido tanto tiempo desde la ultima vez que había tenido sexo. Por que estaba actuando como una chica de 16 años? Seunghyun no era tan sexy.
Y luego Seunghyun miró a Jiyong desde su greña de cabello blanco, y se arrepintió de su ultimo pensamiento.
"Entonces es hamburguesas y una película. Sigues rentando ese lugar en Hannam-dong?"
TOP asintió.
"Excelente."