Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

NUNCA DIGAS ADIOS... por suicidal teddy

[Reviews - 38]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Sobre las consecuencias del libre albedrío...

 

“She had an earthquake on her mind
I almost heard her cry out as I left her far behind
and knew the world was crashing down around her

I sink now to the ocean floor
Because I know that we are more
But I've made this mess, I built this fire
Are you still mine?”

 

- Earthquake, The used.

 

- De pequeño eras muy juguetón, cariño – se recostó junto a mí y acarició mis cabellos -. Nunca tuvimos la certeza de si serías niño sino hasta el día que naciste.

- ¿Por qué mami?

- Porque te escondías mi amor. Creíamos que eras niña y hasta habíamos planeado que algún día te casaras con Joaquim. Cuando vi tu carita tan bonita tampoco lo noté. Fue el médico quien me dijo que eras hombre. Un príncipe – me dio un beso en la frente. Sonreí orgulloso.

- ¿Entonces me iba a casar con Joaquim? Yo lo quiero mucho.

- Bueno – meditó divertida -. Si hubieras sido princesa habría sido buena idea.

- ¿Y no puedo casarme con él de todas maneras?

- Claro que no, pequeño Johan. Te corresponde una princesita; la más linda de todas – me guiño un ojo mientras me arropaba -. Eres un angelito cariño. Tienes el corazón más puro del mundo.

 

Nunca supo que en ese momento mi corazón ya estaba perturbado por Joaquim. Pobre mamá ¿Qué habría pensado de mí? Ella  era muy liberal…quizá no me habría juzgado. Suspiré con nostalgia. Al levantar la mirada distinguí su figura a través de la enorme pared de vidrio. ¿Qué hacía allí? El día anterior le había gritado que me dejara en paz, poco antes de cerrarle la puerta en la cara. Ahora me estaba esperando en la puerta de mi trabajo.

 

Huiría…

 

Espera ¿por qué? Podía deshacerme de él con facilidad. No era un niño. Salí y pasé por su lado sin mirarlo.

 

- ¿Porqué pretendes que no me has visto? – hablo en voz alta.

- ¿Qué haces aquí? – ataqué al instante -. Vete.

- Vine a recogerte – encendió un cigarrillo.

- ¿Cómo sabes que trabajo aquí?

- ¿De nuevo con eso? Ya te dije que sé todo sobre ti – le lancé una mirada asesina -. William – agrego finalmente.

- ¿Qué? ¿William? - ¿Su lazarillo de toda la vida? No podía creerlo. Cuando estábamos en la escuela obedecía todas sus órdenes, pero ¿tantos años después? ¡Infeliz!

- Ya no trabaja para mí. Es algo así como una suerte de amigo. ¿Vamos a casa?

- Tengo mi auto. Gracias – dije de mala gana.

- Ya lo sé, por eso pedí que se llevaran el mío.

- Pues qué pena – espeté -. Toma un taxi.

- ¿Estás loco? – preguntó con los ojos desorbitados -. En mi vida he tomado un taxi.

 

Niño rico. Era espantoso, nunca pude acostumbrarse. Lo observé detenidamente; el cabello lacio, negro, cortado irregularmente caía sobre sus hombros. Lindo como siempre, pero más masculino; la forma de su rostro se había definido y su tez, antes lisa, tenía rastros de barba.

 

- Sube – dije con mal talante, invadido de una lástima repentina -. Sé que me arrepentiré – abrí la puerta de mi auto.

- Te has vuelto muy huraño – comentó una vez sentado a mi lado -. Antes era más bien neurótico.

- Mira Joaquim, no te pases – amenacé entrecerrando los ojos.

- Pero no te enfades- sonrió echando humo por la ventana.

- Tú también has cambiado – me vengué – Ahora eres más amable. Antes eras un pobre imbécil.

- Entonces podemos decir que tantos años sin verte han mejorado mi carácter.

- Idiota.

- Tan solo es una broma. En realidad tenemos que hablar – soltó con seriedad. Ya no juagaba; su expresión estaba tensa.

 

Lo invité a mi departamento para conversar con tranquilidad. Era cierto, necesitábamos hablar al respecto. Después de todo nunca supe muy bien qué paso…era hora.

 

- No voy a pretender que nada ha pasado- dijo sentado en el sofá -. Sé que me fui sin darte explicaciones.

- Me abandonaste – interrumpí con el dolor contenido -. Prometiste que estarías conmigo para siempre. Cuando desperté te habías largado, sin despedirte.

- Mi madre nos había descubierto…

- Y habría hablado con ella…

- ¿Qué pensabas decirle? Nos encontró en la cama, Johan – exclamó. Las imágenes acudieron a mi mente inmediatamente. Joaquim, mi primera vez en todo -. Ella me ordenó que volviera a Suecia. Decirte solo habría empeorado las cosas. Seguramente hasta se hubiera enterado tu padre.

- No me interesa lo que piense – informé con seriedad -. Es mi vida, es mi problema con quién salga.

- Estarías muerto ahora. Él solo quiere lo mejor para ti.

- ¿Qué es lo mejor para mí? ¿Qué me case con una muñeca de porcelana? ¿Qué tenga hijos rubios y bonitos? Perdóname Joaquim, pero eso es algo que a ti te encantaría, pero a mí no.

 

Sonrió abiertamente.

 

- Si eres una muñeca de porcelana, sobre todo cuando te enfadas así – tomó mi mejilla y lo rechacé de inmediato -. Claro, me encantaría casarme contigo, tener niños rubios y bonitos…parecidos a ti.

 

Mi estómago se estrujó miserablemente. Mierda, estaba diciendo estupideces.

 

- ¿Qué me quieres decir? – pregunté desafiante, sin inmutarme.

- He vuelto por ti ¿Eres mi futura esposa no? – imbécil. ¿Ahora era chica? Infeliz.

- Esas son tonterías que creía cuando era niño. Ya lo olvidé.

- ¿Enserio? – preguntó acercándose a mí peligrosamente. Me encogí en mi lado del sofá.

- Claro que sí. No te acerque así – grité, pero mi voz sonó a súplica. Maldita sea.

- ¿Por qué? – su voz apagada llegaba a mí a través de su respiración tibia, dulce. Cerré los ojos con fuerza –. Te he extrañado muchísimo – Iba a besarme. Su perfume, su presencia abrumadora. Ya casi…

- Aléjate – vociferé asfixiado -. ¿Quieres saber porque papá me largo de su vida? – expliqué rápidamente -. Porque le conté que tenía novio y haría mi vida con él.

 

Me soltó visiblemente sorprendido.

 

- ¿Novio? – repitió incrédulo. ¿Qué creía? ¿Qué esperaría por siempre?

- Ya tenemos más de un año.

 

Silencio. No sabía qué decir. De repente la puerta se abrió. Sonreí al reconocerlo. Rubio, con su mochila colgando sobre su pierna y un portafolios en su brazo. Separó ligeramente los labios al vernos.

 

Erik estaba de vuelta en casa.

Notas finales:

Proximo capitulo;: tapar el sol con un dedo?..

 

P.D. en ésta segunda parte tengo planeado invertir los papeles; ahora le toca a Joaquim hacer méritos para estar con Johan...por lo menos hasta cierta parte de la historia ;)


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).