Beauty and the beast
Ella era bella,
frágil como una rosa,
él era una bestia esclavo de sus impulsos
Fueron muchas las veces en las que pude detener esto, pero tenía que llegar al punto de que casi desapareciera, para que él se detuviera, y aun así diré que lo ame, lo ame con el alma, incluso después de todo no lo puedo odiar pero eso no quiere decir que lo ame, todo comenzó aquel día, como olvidarlo, si fue el día en que firme mi sentencia de muerte, ya que el tiempo que estuve con él fue como estar muerto en vida.
Único día que les ataron esposas
ya no eran niños,
crecieron, se hicieron adultos juntos
Nos conocimos cuando yo tenía 8 años, a partir de ahí quede embobado con él, su cabellera negra como el cielo nocturno, su ojos violeta, para mí el ser más perfecto, a pesar de que fuera, por unos años mayor que yo, yo me enamore de él, a pesar de que ambos fuéramos chicos, y no era bien visto , sobre todo por la clase social de nuestras familias, el a pesar de todo se fijo solo en mí, eso me hizo muy feliz.
-Inuyasha, tengo algo que preguntarte.- me dijo con un semblante serio, no era de los que sonreían mucho, pero aun así me encantaba.
-dime, ¿qué sucede Naraku?.- le digo con una gran sonrisa.
-quiero que estés conmigo siempre, que me pertenezcas solo a mi-eso me hizo muy feliz, que tonto, pero creí que sus sentimientos asia mi eran verdaderos- ¿aceptas pasar toda tu vida conmigo?
-por supuesto- le dije mientras me le lance y lo abrace, mis padres no estaban de acuerdo al principio pero al ver a qué familia pertenecía, lo aceptaron de inmediato, es extraño pero aunque mi sueño se estaba volviendo realidad, yo me sentía vacio, nunca tuve ningún otro amigo ya que le tenían miedo a el, y él se enojaba si yo me le acercaba a alguien, pensé que estaba cuidando a la persona que quiere, no a su juguete favorito……
Todo marchaba bien,
eso parecía en su primera luna de miel
juró serle de por vida fiel
y ella a él,
una historia como otra cualquiera
quién les ve y quién les viera
A pesar de todo siempre tenía una sonrisa, tenerlo a mi lado era lo más hermoso, pero algo salió mal, pasaron los años y él me dijo que quería que nos casáramos yo muy emocionado acepte, ahora que lo pienso a él nunca le dije un no, que tonto fui, nos casamos y ese día firme mi sentencia, el juro serme de por vida fiel, éramos felices, muy felices durante los primeros meses, yo era la persona más dichosa, hasta ese día……
Pero el tiempo pasa
y las relaciones se agotan
se cansan,
ella ni lo nota
porque esta ciega,
ciega de amor
Pero no aguanta la monotonía
ya no quería ser dueño de una sola tía
o eso le decía a sus colegas de copas
''Yo salgo con otras, pero ella ni lo nota''
-hola Naraku, estaba preocupado, llegaste tarde- le pregunte a muy altas horas de la noche, pensé que le habría pasado algo, pero llego ebrio.- estas ebrio cierto.
- eso no te incumbe, lárgate quiero estar solo – dijo ignorándome completamente, subió a su recamara y se encerró, si su recamara, hace unos días dijo que quería que durmiéramos, en recamaras diferente, ya que el llegaba tarde por “trabajo” y no quería preocuparme.
Bella estaba ciega
pero no era tonta,
ya dudaba
Tantas noches sola
cuantas horas de la madrugada
Pensé que se le pasaría con el tiempo, pasaron tres meses y su comportamiento no cambiaba, más bien empeoraba, después del tiempo me entere de que él durante esas noches que llegaba tarde, se la pasaba de cama en cama, de mujer en mujer, no podía creerlo él me juro serme fiel ante el altar, yo pensé que era un malentendido, si eso debía ser el era incapaz de eso.
La primera vez fue la más dolorosa,
te regaló una infidelidad por cada rosa
y es que el perdón será tu debilidad
pero lo que pasa una vez
siempre sufre de una vez más
Pero algo andaba mal, cada vez que llegaba tarde me regalaba una rosa y cuando hacia eso mi pecho dolía, dolía mucho, el siempre me pedía perdón, y como tonto yo siempre lo perdonaba, pero pasaba una y otra vez , pero me canse debía enfrentarlo…..
. Este cuento no es eterno
debo salir ponerle un fin
ser más fuerte que esa bestia
debo salir
quiero vivir
quiero vivir
-Naraku, debemos hablar, quiero saber que sucede- le dije lo más comprensible que pude.
-deja de quejarte, y déjame en paz- siempre evitándome.
-Naraku quiero que me respondas- le dije sosteniéndolo de los hombros, pero eso le degusto, y me golpeo, a partir de ahí empezó a actuar de manera agresiva, yo no me defendía pensaba que pararía, pero no, no se detenía, golpeaba con más fuerza, hasta que se detuvo y me hablo.
- no vuelvas a reclamar por nada, o te irá peor. – en su mirada se veía la furia, me dijo eso mientras el me levantaba del piso jalando mis cabellos plata.
- cogh... tú no puedes cogh...tratarme así- le dije intentando levantarme pero me era imposible, mi cuerpo dolía y gruesas lagrimas salían de mis ojos.
- claro que puedo, porque tú eres de mi propiedad, así tú lo decidiste- me quede helado,¿ese es el hombre del que me enamore?, llore, llore hasta no poder mas, me sentía de la peor forma, ese no podía ser él, pero día a día era lo mismo, pensé que podría ayudarlo pero, quien me ayudaba a mi?
Tantas cicatrices ya no puedo más
me duelen las entrañas
de tanto sangrar..
No existe un maquillaje que pueda tapar
este moretón que es mi corazón
Ya no sé cuánto más tiempo podré aguantar
ya no me quedan lágrimas para llorar
el peso de estos años me doblan la edad
En cada rincón tengo un moretón
¿A dónde se fue el hombre que yo amaba? Donde estaba? No entendía nada de lo que pasaba, solo que quería salir de esa mansión, de la cual tenía prohibido salir, pero quería salir de esa mansión, ya que aunque la jaula sea de oro, sigue siendo prisión, lo intente varias veces, pero el resultado era el mismo, el me descubría y yo recibía mi “castigo”, llego un momento en el que no sentía dolor físico, sino dolor en mi corazón, por que la persona que amaba me hacía daño y yo no hacía nada para impedirlo. Pero en el fondo creía que el me amaba, si él me pedía perdón yo lo aceptaría y olvidaría todo, que tonto soy.
Dime que esto no ha pasado
tu dime que lo abre olvidado
mañana todo habrá cambiado
y esto será sólo un horrible recuerdo
Sé que me quieres mi vida
yo sé que no habrá más heridas
mañana será un nuevo día
Y otra vez seremos felices de nuevo.
Empieza otra nueva discusión , al parecer algo malo paso en su trabajo, ya que llego furioso, no me dijo nada, solo empezó a actuar de forma agresiva y yo estaba muy asustado. Empezó a golpearme, esta vez tosía sangre, había exagerado esta vez…
Empiezan las discusiones,
parece que a él no le gustan,
se vuelve insensible y agresivo
y a Bella le asusta
Lágrimas caían, tras un empujón
y el primer puñetazo,
te conformas con un perdón
y un simple abrazo
-cogh...Naraku… detente, duele- le dije con la voz entre cortada y él se detuvo y me vio preocupado, sus manos estaban llenas de sangre, de mi sangre para ser específicos.
- Inuyasha- en sus ojos se veía el miedo- perdóname, no sé que me paso perdóname- Lugo me abrazo, como pude respondí a su abrazo, estaba feliz de que se preocupara de mi.
-no cogh… no pasa nada…- dije justo antes de caer en la inconsciencia, y no supe nada de mí, no me importaba si moría, ya que él se disculpo yo era feliz nada más me importaba.
No quieres darle importancia
porque no quieres perderlo
pero sientes impotencia
y a la vez pánico y miedo
No puedes creerlo todavía,
después de tantos años
''Te preguntas por qué te has caído en el puente''
Al despertar estaba en una habitación toda de blanco, mi cuerpo dolía mucho, y habían aparatos conectados a mí, caí en cuenta de que estaba en un hospital, mi ojo derecho dolía mucho, al parecer tenía una gasa en el, enseguida me preocupe por Naraku, si él me trajo al hospital puede que lo hayan encerrado, pero yo lo perdone debo ayudarlo. Pero tenía miedo, y si la gente preguntaba, debía mentir, o sino el se enojara y me golpeara, debo evitarlo.
El silencio no te ayuda,
sé que no sabes que hacer,
sabes que fue la primera
y no será la última vez
Créeme sé que no quieres más problemas
pero no te quedes en silencio
si tu marido te pega
Iba a intentar levantarme, pero la puerta se abrió, ahí estaba un hombre con una hermosa y larga cabellera plateada, llevaba una bata, así que pensé que sería un medico.
-no deberías levantarte- me dijo acercándose a mi- aun no estás bien del todo, dime, ¿cómo te siente?- al parecer estaba preocupado, ¿por mi?, ni siquiera lo conozco, ¿por què se preocuparía por mi?
- me duele el cuerpo- mi voz sonaba apagada.
- eso es normal, me alegra que hayas despertado, ¿tu nombre es Inuyasha cierto?, el mío es Sesshomaru, puedes hablarme de tu- me dijo con una sonrisa, que daría yo por que Naraku me sonriera de esa manera.
-de acuerdo- le dije, aun mi voz sonaba extraña.
-dime, ¿quién te hizo esto?- yo me sorprendí con esta pregunta, y sentí un temblor ya que no quería responder.
-yo….yo me caí- que gran mentira pude decir
- fue tu esposo, ¿cierto?
-no sé de que hablas- ¿como lo sabía?
-cuando él te trajo estaba manchado de sangre así que lo supuse,¿el te maltrata cierto?
- no claro que no
- deja de defenderlo- dijo ya con una voz más autoritaria, se veía preocupado- yo puedo ayudarte, lo encerraran y…..
- no, no digas eso, el se enojaría- lo interrumpí y empecé a llorar abrazando a mí mismo, luego sentí sus brazos fuentes rodeándome.
- todo estará bien, ya lo veras- me sentía protegido en sus brazos, quería sentirme así siempre.
Porque no le perteneces,
te mereces mucho más
Ese cretino tienen autoridad
se la das y él se crece
No puedes detenerle,
no puedes defenderte,
no puedes hacer más que rezar por tener suerte
Pasaron semanas y yo me recupere de todas mis heridas físicas, y un poco emocionalmente, ya que seguía viendo a ese doctor, no solo en el hospital, sino en lugares públicos, ambos nos hicimos amigos y lo convencí de que no dijera nada sobre el asunto de Naraku, era un día tranquilo, Naraku no había vuelto a actuar de forma violenta y eso me hacía sentir feliz, pero ya no me sentía de la misma manera con Naraku, y estaban creciendo sentimientos por Sesshomaru, llegue a casa después de mi encuentro con él, y me lleve una sorpresa…..
Cada día más normal
pasar del amor al odio,
se convirtió en algo habitual
otro mal episodio
Bestia no te quiere
pero quiere que seas suya
para siempre
-Naraku, llegaste temprano hoy del trabajo- le dije al verlo sentado en la sala principal.
- y tú ¿te divertiste con tu amante?- esa mirada, no esa mirada llena de furia era la que siempre me daba miedo.
- ¿de que hablas?- estaba aterrado.
- dime,¿qué hiciste hoy?- se iba acercando y yo retrocedía.
-Salí a tomar un café con Sesshomaru y …..- no termine de hablar ya que fui interrumpido al sentir un golpe en mi rostro.
- y lo admites- empezó a golpear y a golpear, yo intente decirle que parara que no era lo que pensaba, pero no se detenía, me jalo del cabello como muchas veces atrás, y me dijo- quiero que te quede algo en claro, ''¡Si no eres mío, no serás de nadie entiendes!''
Bella no podía más,
el cada día era más bestia
Cuando ella quiso hablar
ya era demasiado tarde,
se dio cuenta que vivía junto al mal
'La Bella y la Bestia''
Prefiero no contaros el final
Al oír eso sentí mucho miedo, el no me amaba, nunca lo hizo, que estúpido fui, pero debía salir de ahí, debía pedir ayuda, grite, y grite, sabía que los implados no vendría por el miedo que le tienen a él, el seguía, y seguía golpeando cada vez más fuerte, todo yo estaba lleno de sangre y aun así no se detenía, en realidad golpeaba con mas furia.
Este cuento no es eterno
debo salir ponerle un fin
ser más fuerte que esa bestia
Debo salir
quiero vivir
quiero vivir
Recordé que no estaba solo, tenía a Sesshomaru, mientras él seguía golpeándome, logre mover con mucho esfuerzo mi brazo derecho, y alcance una botella que estaba en el piso, al parecer antes de llegar Naraku había bebido, tome la botella y se la estrelle en la cabeza a Naraku, el callo inconsciente a un lado, con dificultad me levante y no pude evitar decirle.
-intente ayudarte, Naraku pero no fue suficiente todo mi sufrimiento, si me hubieras entendido un poco- dije para caminar hacia el teléfono.
Tu final atravesó mi alma en sólo un compás
callaste mis lamentos con brutalidad
me has convertido en un triste numero más
Tu triste corazón fue tu perdición
Es demasiado tarde para ir hacia atrás
no volveré a tener otra oportunidad
seré sólo un mal día en la prensa local
Pero mi dolor será tu prisión
Y si yo ahora pudiera cambiar en algo tus miserias
daría todo porque entendieras
sólo un segundo de mi sufrimiento
Al llegar al teléfono, marque el número de la persona que me ayudo a darme cuenta del error que había cometido.
-hola……… Sesshomaru-mi voz sonaba rara ya que Naraku me había golpeado en la garganta.
-¿Inuyasha?.. ¿Que sucede? Te escuchas mal, dime,¿ ese desgraciado se atrevió a ponerte una mano encima?- su voz se escuchaba furiosa, una pequeña sonrisa salió de mi, el estaba preocupado.
- ayúdame……. Te necesito, estoy en casa- le dije con dificultad
-voy para allá, todo estará bien- luego colgó, yo con mucha dificultad camine hasta la salida no quería estar ahí tenía miedo, muchas lagrimas sacian de mis ojos, y me preguntaba a mí mismo, si por fin era el final, esto que viví no se lo deseo a nadie, a nadie.
Espero que al menos mi historia
no quede sólo en la memoria
Y traiciona nuestra trayectoria,
Que no se repita jamás este cuento
Pasaron unos minutos y llego el carro de Sesshomaru, atrás de el estaba una patrulla de policía, de verdad que él piensa en todo, cuando me vio su expresión fue de sorpresa, que cambio a ira, luego me abrazo y yo caí en mis rodillas con el abrazándome.
-todo estará bien, ya verás- me dijo mientras me abrazaba, pude ver como los guardias empezaban a sacar de la casa, ya a un consiente Naraku, que intentaba quitarse las esposas, Sesshomaru me dejo de abrazar y se levanto del suelo, fue directo asía Naraku y le dio un rodillazo en el estomago, luego le dijo- vas a pagar todo lo que has hecho, una a una las lagrimas de Inuyasha, ¿entendiste?- Naraku no dijo nada, los guardias se lo llevaron y lo metieron en la patrulla, por fin era libre.
Pasaron meses y yo vivía en el departamento de Sesshomaru junto con él, el matrimonio con Naraku se anulo, el estaba en la cárcel,, y podría casarme con Sesshomaru, el siempre me cuidaba, y vivía pendiente de mi, cada día decía que me amaba, y yo me enamore de él, al fin y al cabo después de tanto tiempo estar muerto en vida, pude volver a vivir
Este cuento no es eterno
debo ponerle un fin
Sé más fuerte que esa Bestia
debes salir,
vuelve a vivir
“Vuelve a vivir”
FIN