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48 Hours por Himawari

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Notas del fanfic:

Este es un fanfic traducido del chino al inglés y de este al español y lo pueden encontrar (en inglés) aquí: http://lukai.me/post/32402255893/48-hours-prologue yo solo me encargo de traducirlo al español con su permiso.

 

Notas del capitulo:

Y recuerdo que el fanfic no me pertenece.

¡Que disfruten!

Últimamente, el clima de Los Ángeles ha sido soleado y placentero; sin embargo, no ha habido una baja notable en el número de los pacientes visitando mi clínica. Como siempre, mi secretaria se queja de la importancia de su trabajo y sin embargo el poco valor que tenía entre los ratos de descanso cuando no estaba respondiendo las llamadas telefónicas, los pacientes mantenían su silencio mudo, sorbiendo del agua con insistencia mientras que el grosor de las plantas se dobla en su escaso límite.

Soy un psicólogo, tengo cuarenta y dos años, aun soltero y con una licencia en América de más diez años ahora. Hablando en general no he recibido decepciones ni satisfacciones de mí mismo.

Anteriormente, desde mis días escolares, Los Ángeles nunca había sido pacífico pero claro que esto no había sido mi razón original por la que escogí psicología, seleccionar mi doctorado, era imposible evadir mi interés. Tengo que admitir que mi atracción por la psicología en casos criminales está enormemente relacionada con mi pasión hacia la condición psicológica entre marido y mujer. No es una falta de respeto hacia las responsabilidades de mi ocupación sino la gratitud que tengo por mi destino. Entiendo que, después de todo vivir no es fácil. Cuatro años atrás, un hombre autista de cuarenta años era sospechoso de envolver a su hijo en plástico para envolver y depositarlo en un bote a dos kilómetros de distancia de su hogar. Desafortunadamente la mujer no entendía inglés y su situación mental pasó de ser sana a viral después del incidente. Lo recuerdo en una navidad no muy agradable, en la habitación de control del Bereau Federal, el hombre que se sentó en lo opuesto, eventualmente comenzó a derramar una o dos lágrimas que procedieron en su taza de café.

Desde entonces, la ruta a Bereau me llegó a ser familiar, pero esto aplicaba a los escenarios en un lado de la calle en donde siempre me encontraba de día y de vuelta en la noche. Yo era más un objeto para satisfacer, haciendo uso de mis habilidades profesionales para ganar el alma de los diablos y por consiguiente vender a Satán. Por supuesto, esto no incluía mi propia alma.

Mi alma no requería ningún rescate, me permití una emoción ilimitable en el infierno y por eso aprendí del dolor. La policía no necesitaba saber de mi orientación sexual de la cual no sacarían ningún beneficio en mi profesión, les haría pensar en un psicólogo con problemas mentales íntimos.

Empezando el año pasado con ellos, intenté reducir mi cooperación con ellos, la cantidad substancial de casos privados resultó una falta de atención hacia mí mismo, definitivamente no deseaba que la presión abrumadora terminara por llevarlos a otro psiquiatra. Sin embargo, la semana pasada, un caso mayor involucró un gran número de hombres con descendencia asiática. Cuando el inspector David, de cuarenta años me llamó para hacerme la invitación no me negué.

Hablando sin importancia, un grupo muy popular de Corea vino a Los Ángeles este viernes para la preparación de un tour, entrevistas y otras actividades como la filmación de videos musicales. Desaparecieron en el momento en que se bajaron del avión, el personal de la compañía que había sido arreglada para recibirlos no se pusieron de acuerdo con su staff y ambos fueron separados al sacarlos por distintos lugares y perdieron contacto desde ese momento.

—Solo escuché a dos personas decir los nombres de nuestros miembros pero fallaron al esperar por los otros —Dijo una persona del staff.

Y fue solo hasta ayer, un martes por la mañana cuando la policía localizó a unos chicos en la villa de una finca.
Desafortunadamente, cuando los encontraron solo había un hombre vivo, sentado en la tina del baño tratando de tragar una gran cantidad de píldoras para el corazón.

—Él es chino —Me dijo el joven aprendiz Mike—. Justo como tú.

Obviamente, teniendo una gran resistencia mental a estas situaciones, el chico se rehusaba a comunicarse con las personas desde que había sido descubierto por la policía. Lo más inútil de esto era, que él era la única persona que sabía la historia completa y siendo al mismo tiempo era una víctima, era el principal sospechoso. Y para añadir ahora su autismo temporal que había mostrado junto con sus cambios de humor y tendencias violentas. Ayer, para que firmara un documento de identificación le pasaron una pluma e hizo un intento de asalto al oficial de policía. Debido a la alta importancia de su caso, ahora estaba encerrado en una habitación monitoreada.

Aunque su cabello era un desastre y tras haber pasado dos días sin afeitarse todavía podía admitir que Dios le había dado una apariencia y altura excepcional. Si no hubiera sabido con antelación que él estaba en un grupo de Idols, habría usado “enormemente impresionante” para describirlo.
Era más que obvio que Dios tenía preferencia hacia él, además de su buena apariencia; él fue capaz de conservar su vida.

 

Su nombre chino es Wu Yi Fan, su nombre en inglés es Kris, de veinticuatro años; sus padres se divorciaron a temprana edad y además había experimentado una vida —no muy extensa— en el extranjero, es heterosexual y ha tenido varias novias. A juzgar por su curriculum vitae su familia es adinerada, bien educada, no hay un historial médico con importancia, no hay cirugía estética de por medio, ninguna dependencia a las drogas y no hay un historial criminal. Tenía una gran fama a la vuelta de la esquina. Sus habilidades personales eran normales, e incluso era el líder del grupo, no tenía ninguna tendencia autista.

La mayoría de las muertes confirmadas eran de nacionalidades coreanas, solo hubo tres como Kris, étnicamente chinos que se desarrollaban en la industria del entretenimiento coreano. Mike me dio un grupo de fotografías tomadas en el concierto de Tokio, se veían cercanos, íntimos y con apariencias similares que de acuerdo a las horribles críticas europeas hacia los asiáticos, realmente era difícil distinguir quién era quién.

—A juzgar por la hora de sus muertes, estos cuatro debieron haber muerto en las últimas dieciocho horas desde que los encontramos.

Mike me dio cuatro fotos de la escena del crimen y las acomodó frente a mí, estas fotos tenían sus nombres en inglés con tinta. A estas alturas la escritura era mucho más legible que su rostro.

—Él se llama Chanyeol, fue encontrado en el armario del primer piso en la finca. Se ha identificado que la causa de muerte fueron cuchilladas en el abdomen, se cree que el arma principal ha sido un instrumento de magia —Señaló a la espada retractable que había en la puerta de la foto—. Al parecer la espada atravesó la puerta y llegó al abdomen de la víctima para causar la muerte.

El chico de la foto parecía ser bastante alto, su cabello en la parte trasera de su cabeza se encontraba atado, su cuerpo estaba levemente torcido y mechones de cabello estaban en su rostro.

—Luhan, chino. Fue el único que encontramos fuera de la finca —Los dedos delgados de Mike apuntaron al segundo de los cuatro —Él atentó con subir a la chimenea pero desafortunadamente las sábanas de la cama eran tela que no soportaba su peso y se rompieron enseguida —La foto del chico parecía estar ileso y parecía guapo. Mike parecía muy desdichado ante el intento fallido del fugitivo —No entiendo, la cuerda de plástico en el centro de la sala en la finca era mucho más resistente que las sábanas ¿Por qué? ¿Qué estaba pensando?

 

—Le puedes preguntar a él —Dijo David de la nada por detrás, había trabajado con él tantísimas veces y rápidamente sostuvo mi mano —Ha pasado un tiempo desde la última vez que te vi viejo amigo —Sonrió y sacudió mi mano —Ese joven es hasta ahora la pista más contundente que tenemos —Señaló a nuestro afortunado sobreviviente en la habitación monitoreada—. Si logras atravesarlo te prometo un viaje en Canadá de esquí.

—Estoy muy conmovido con tu generosidad, sin embargo —Toqué mi nariz—, deberías estar honorándome con un viaje a Hawai por la última vez que hablé contigo sobre esto. Aun así —Miré como Kris seguía en la misma posición. Inmóvil—, sabes que siempre he sido incapaz de comunicarte sobre mi trabajo con niños, sin mencionar a este niño tan lindo.

—Su fase adorable ya terminó, especialmente si quiere continuar con ese silencio —David sacudió mis hombros—. Este es tu trabajo, maestro vendedor de almas. Déjame ver su expresión obediente y llorosa mientras recuerdo este caso y tú mantienes ese rostro sin emociones en tu bolsa —Me dijo al caminar a través de la puerta.

—¿Alguna vez alguien te dijo lo enfermo que estás? —Le contesté bromeando.

—Por supuesto —Asintió—. Mi esposa me lo dice diariamente. Es muy raro que tu también lo hayas notado —Me dijo parpadeando.

—Vete al diablo —Mandé a sacar a David.

—¿Acaso el jefe te tortura así todos los días? —Le pregunté a Mike.

—No, es solo a ti —Me respondió levantando las cejas —Ahí está. Sr. Sobreviviente.

—¿Abusando de prisioneros? Ya te digo, necesitas saber que esta es discriminación racial —Bromeé y lo agarré del brazo.

—Vamos, que él abusa de ti —Mike dijo indefenso—. Ese chico mantiene la misma expresión todo el día, tan inmóvil, como una persona muda. Estuvimos viendo sus videos musicales y estaban bailando como saltamontes, parece mentira que se trate de la misma persona.

—Estuvo encerrado con cadáveres mínimo por cinco horas, si hubieras sido tú ya serías un saltamontes muerto —Le dije y él torció su boca.

—¿Un saltamontes muerto? Si hubiéramos entrado después él hubiera llegado al cielo con el estómago lleno de pastillas para el corazón; o quizás al infierno.

—¿De verdad dudas de él? —Pregunté—. Prefiero la metamorfosis del humor negro.

—Quizás —Mike torció sus labios y movió su cabeza—. De igual manera necesita colaborar con nosotros. Míralo, cubierto de espinas, justo como un león cuando saca sus colmillos y garras.

—¿León? ¿Cachorro?

 

—¿Acaso alguien de veinticuatro años te parece joven? —Mike inclinó su cabeza.

—Por supuesto. Me gusta la gente madura. Para ser preciso, si alguien de esa edad se convierte en mi amante me sentiría como un criminal.

—Claro, yo no salgo con mujeres que son mayores de esa edad.

—Cierto, olvidé que eres un cachorro —Sonreí y antes de que él me pudiera reclamar, tomé una de las fotos—. ¿Quién es él? Su tono de piel es, sexy, quiero decir comparado a los demás.

Mike me miró desesperadamente y movió su cabeza, continuando con su trabajo—: Él es Kai, coreano, también uno de los muertos en las últimas dieciocho horas —Observé la foto y escuché el discurso de Mike—. Antes de su muerte, parece que se vio en una pelea, el golpe final fue el impacto en su cuello. Este parece interesante —Mike sonrió—, hasta el final, sus manos sujetaron con firmeza el botón beige, el botón arrancado de la camisa de nuestro niño —Señaló al soñador de Kris en su asiento—. Las partículas de la piel también confirmaron que pertenece a él.

Asentí, el cachorro si parecía estar en grandes problemas.

—Lay, chino. De veintitrés años, la causa de muerte fue causada por desangramiento —Mike tomó la foto del final—. Su tiempo de muerte es realmente corto, parece ser que fue el último.

—¿Esta es la foto de exhibir? —Pregunté.

—Es la foto de la escena del crimen, y por la foto de exhibición… —Mike mira hacia Kris—. Tendrías que preguntarle a él.

A primera vista, esto parecía la portada de una revista. El chico llamado Lay está sentado en una silla en una habitación frente a la ventana. Con la luz del sol brillando suavemente, su boca e incluso una pequeña sonrisa no revelaban ningún tipo de dolor. A juzgar por la foto, parecía un adolescente durmiendo bajo el sol, de no ser por las marcas de cortes superficiales que caían de su muñeca derecha, y el trazo de sangre en la alfombra que iba desde de la puerta hasta su muñeca.

—Cortes profusos como esto no causan la muerte tan simple, pero para la gente que sufre de coagulopatía congénita severa, es difícil de determinar —La voz de Mike resonó—. Sin ninguna ayuda médica a tiempo, sin encontrar su tipo de sangre, la posibilidad de morir es del cien por ciento.

—¿Suicidio? —Pregunté.

—¿Tú qué crees?

—No lo sé —Moví mi cabeza—. No soy un profesional, va por instintos… Mira esta expresión, él de verdad se ve tranquilo —Señalé la foto.

—Tienes razón, sin embargo…—Mike tomó una foto del baño—, la causa de muerte parece ser un trozo de cristal roto del espejo, tiene todas las huellas de Kris. Obviamente antes de que Kris pudiera tomar su propia vida —Mike señaló el otro lado de la bañera—, él formó un extraño patrón con los trozos del espejo, lo más seguro es que ya estuviera en un estado mental inestable.

Volteé la foto para ver el polígono torcido.

—Pero Kris estaba usando dos relojes, uno negro con blanco y uno rosa, dos estilos completamente diferentes —Mike remarcó—. Ambos ya no funcionaban pero se detuvieron a tiempos distintos.

—En el lavabo, una dirección y un número de teléfono fueron escritos en chino —Dijo Mike—. Se ha comprobado que son los datos del joven llamado Luhan, en Beijín. También hay muchos detalles que necesitan ser explicados, como el gran hoyo que hay en encima de la máquina Dance Revolution y el joven Sehun que cayó en el sótano hasta su muerte y justo a su lado había un pequeño trampolín. También la caja fuerte que está relacionada con el cubo rubik… es la primera que vez que veo un cubo dentro de una caja fuerte. Dos caracteres chinos fueron encontrados escritos en el lado inferior derecho del espejo en el primer piso de la finca.

Tomé la foto de las manos de Mike y la analicé cuidadosamente, las dos palabras decían “Vete pronto”.

 

—Este joven, también chino, Tao dejó su huella dactilar completa en el lado inferior izquierdo —Mike volteó otra foto—. Murió de un golpe abdominal, la herramienta del crimen parece ser una botella quebrada de vodka.

—¿El lugar de su muerte? —Pregunté.

—En la sala —Contestó Mike.

—¿Qué hay del resto?

—Ya he dicho demasiado —Mike se encogió—. Tú lo sabes también. Tenemos reglas y regularizaciones que seguir, después de todo —Me miró apenado—, no eres parte de nuestro equipo.

—Entiendo —Guardé silencio por unos momentos y luego tomé las fotos—. Gracias por explicarme, es mucho más detallado que otras veces.

Miré y le sonreí a Mike.

—Yo no di detalles extras, fue tu atención que pareció darte más detalles que usualmente pasa —Mike pestañeó.

 

—Está bien, lo admito —Bajé mi cabeza y solté una risita, aunque es justo decir, hay algo en medio de todo esto, una desigualdad, como el pasaje de la hermosa y joven vida que es más lamentable, como las decisiones de Dios para dejar vivir a uno y matar al otro—. Una última pregunta —Levanté mi cabeza y hablé—. ¿Era una ocasión especial? ¿Un día religioso?

Mike me miró y asintió.

—Para ellos lo era. Una fecha para recordar. Era su segundo aniversario desde su debut.

—¿Incluso sabes esas cosas? —Le miré.

—No debería saberlo pero hay ciertos detalles que debo saber —Dijo—. Está bien, ya no puedo decir más, cometí un error.

Le di una sonrisa fugaz comprensiva.

—¿Cuándo puedo hablar con él? —Miré hacia abajo y organicé algunos papeles.

—Cuando estés listo —Mike me miró y retomó en sus manos los papeles y fotografías—, sin embargo, me tienes que avisar con treinta minutos de antelación ya que hay unos pequeños y tediosos detalles para el trabajo.

Entonces comenzó a caminar hacia cuarto de control.

—¿Listo para trabajar? —Pregunté desde atrás.

—Tienes que estar bromeando, ya intentó atacar uno de nuestros colegas, y en cuanto a ti —Me miró de arriba abajo—, un doctor tan amable y gentil, no me gustaría que te convirtieras en una foto.

—Estoy en el lugar más seguro de la ciudad —Pestañeé en su dirección—. El doctor Don gentil y frágil tiene una personalidad mágica que la mayoría de ustedes no.

Asintiendo vagamente se fue de igual manera—: Lo siento, el deber llama. También —Se da la vuelta—, no me menciones magia o tendré que sospechar de ti.

 

 

 

Juzgando simplemente por la apariencia, sería incapaz de confirmar que esta persona es autista y violenta. Entiendo que la gente que no es entusiasta al hablar siente que la persona de frente no entendería lo que está diciendo. Y en su estado actual, él era en verdad normal.

—Hola —Cerré la puerta del cuarto de control y me acerqué a la mesa—, soy Frank —Le miré, hice una reverencia ligera y me senté—. ¿Te apetece un poco de café?

En respuesta a mi mediocre interrogatorio, él parecía tener ninguna intención de contestar.

—Yo, personalmente siento que el café Bureau no es muy bueno, sin embargo, traje algo de té —Dije—. Fue traído desde Mainland. ¿Tienes algún interés en probarlo? —Al hablar gesticulé a Mike por el té—. Noté que no has bebido agua en un tiempo largo, los humanos necesitan hidratarse por sí mismos —Hablé, mirándole directamente—. Eso es si quieres seguir viviendo.

Él mantuvo una postura tiesa pero sus pestañas se movieron ligeramente.

—No soy un policía, ni tampoco un amigo que ha venido a platicar contigo ni tampoco una niñera que está aquí para animarte —Dije sonriendo—, soy un doctor, alguien a quien más necesitas ahora.

Él miró al suelo, con ojos que reflejaban su falta de alma.

—Has pasado por mucho esta semana. Sin embargo, tiene que haber un día —Torcí mi cintura y él su cabeza cubierta por su cabello caído—, un día, vivirás y enfrentarás todo esto. ¿Te gustaría saber por qué?

No respondió.

—Porque no estás loco. Tu fuerza mental es estable y no tienes amnesia —Le dije—. Tu comportamiento y emociones que tienes ahora son completamente normales, especialmente de la gente que ha experimentado lo mismo que tu. Tal vez no admitas esto pero tu nivel de tolerancia hacia la presión es más fuerte que la gente ordinaria de tu edad. Aunque tenías intenciones de suicidarte, dudaste bastante tiempo.

Él siguió mirando al suelo.

—Tuviste al menos cinco horas, pero las pastillas de penicilina, no las tragaste —Le miré—. Pudiste haber escogido saltar a la muerte o degollarte con una pieza dura de cristal; hiciste una preparación muy detallada para morir en el baño, pero no lo estás.

Sus dedos se movieron ligeramente.

—Tu voluntad de vivir es mucho más fuerte que nadie más, más fuerte que esos compañeros que ahora están muertos, es la razón por la cual estás vivo —Me acerqué más a su rostro—, y Dios te ha permitido vivir, quizás esto no sea una recompensa pero eran sufrimientos que estabas destinado a recibir, castigos.

Sus pestañas se levantaron y en su pupila había que no podía definir claramente.

—Puedes permanecer completamente en silencio por el resto de tu vida, hacer una evaluación psiquiátrica y después encontrar un buen abogado que te defienda y vivir la siguiente mitad de tu vida tranquilamente, como un perfecto cobarde. Pero este no eres tú. Si ese es el caso, tu vida terminó en ese momento y ahí en el edificio.

Unos segundos más se fueron en vano y le seguí mirando. Su voz ronca salió para decir sus primeras palabras en días—: Me estás sobrestimando.

Pude sentir que la multitud a mi espalda se inclinaba, gente que no tenía el traductor se lo puso. Solo detrás del espejo, detrás de mi espalda una docena de ojos podían vernos. Yo sonreí y miré a Kris.

—¿Por qué dices eso? —Pregunté.

—¿Te crees muy inteligente? —Me sonrió.

—Por supuesto que no —Respondí.

—No —Sonrió y agitó su cabeza—. Debes estar pensando que conoces todo al reverso de tu mano, que todo está bajo control.

Le miré en silencio total.

—Si supieras, esos policías te invitaron no por el caso, ni por mí. Yo solo soy acto, algo falso —Kris me miró desde la orilla de sus ojos—. Nuestro motivo principal era engañarte para que vinieras. Crees que estoy callado porque estoy sufriendo pero en realidad es solo una actuación.

Miré directamente a Kris y comencé a preguntarme si una evaluación psiquiátrica era siquiera necesaria.

—¿Cómo te sientes?

—No te voy a creer —Le respondí.

—¿Y qué si salieras de este cuarto y no encuentras a nadie? —Preguntó y dudé por un instante.

—Pensaría que hubo una emergencia y que todos salieron sin informarnos.

—¿Y qué si no pudieras contactar a nadie con el teléfono y te das cuenta que la puerta está cerrada? —Me miró.

 

Lo miré y aunque la atmósfera me hizo incómodo, traté de mantener mi profesionalismo en una actitud favorable.

—Yo… —Giré el vaso entre mis manos—, me protegería y sería cuidadoso hacia ti.

Sus ojos se oscurecieron—: Te equivocas.

—Yo definitivamente no tomaría la iniciativa para atacar antes de aclarar todo pero tampoco confiaría en ti.

Dobló su cabeza.

—Te equivocas… yo me equivoqué… todos nos equivocamos.

Examiné su rostro y me atreví a preguntar—: ¿Te refieres a tus compañeros de grupo?

Reveló una mirada desaprobatoria a bajó su cabeza.

—Tu té huele bien.

Tuve que seguirle y cambiar el tema.

—Oh ¿Lo has probado antes?

—Bi Luo Chun, es un viejo amigo que solía tener mucho té y bebíamos seguido —Mientras decía, yo, al parecer me convertía gradualmente en su viejo amigo.

—¿Un viejo amigo chino en Corea? —Pregunté.

—Exacto —Dijo—, no estábamos en la libertad de beber, solo durante el festival de primavera donde el té se convertía en un reemplazo para el vino seguido —Habló recordando.

—¿Tu viejo amigo sigue en Corea? —Pregunté y él se congeló por un momento y negó con la cabeza.

—No lo sé, pero supongo que él no quería regresar a Corea, dijo que se quería ir a casa.

Al hablar, gentilmente bebió a sorbos el té en el suelo.

Lo miré en silencio.

—Para ser honesto, no tengo muchos amigos —Se volteó y me miró—. Él siempre hablaba de irse a casa y yo estaba envidioso porque para mí, ni siquiera sé en donde está mi hogar. Creo que tienes razón en lo que dijiste, vivo no como una recompense, sino como un castigo.

Notas finales:

Si tienen dudas: @lilyheebum


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