Cómo era posible que esto le sucediera a él, a Seto Kaiba? Wheeler era el único culpable, pero… a pesar de esto. ¿Por que se sentía así?
No podía, por más que lo intentara, Joey seguiría en su corazón. No podía dejar que esto se supiera, sería el hazme reír de toda la escuela.
Y ahí estaba él, llegando con sus amigos. Intentó no verlo, pero fue demasiado tarde, él lo vio; rápidamente cambio su mirada a otro lado.
“Maldito seas Wheeler” pensó
“Maldito seas Kaiba” pensó también el chico rubio
.Joey, ¿te sientes bien?-preguntó Yugi
-sí-
Durante el resto de la clase Seto no dejaba de ver a Joey, a su todo, su ser, su ángel. Aun recordaba como el destino los había unido:
Yugi, Wheeler, Ryou y él habían sido elegidos para ir al mejor internado-colegio de Japón. En cuanto llegó…
FLASHBACK
-Kaiba y Wheeler, habitación 27 del cuarto piso
-ni creas que por compartir la habitación de ahora en adelante seremos amigos- dijo tomando posesión de la mejor cama
-opino lo mismo-contestó el chico rubio.
El primer mas resultó pacifico hasta que por obra del destino, ambos habían llegado de una fiesta discutiendo.
-rayos… ¡TENÍAS QUE ARMAR UN ESCANDALO!
-para tu mayor información, de no haber sido por mi estarías muerto Wheeler
-me puedo cuidar solo
-esa no fue mi impresión
-no, me arruinaste la noche…
-cállate
-no te entiendo, primero…
-cállate
-estabas en paz y hasta creí poder ser tu amigo- con esta palabra Seto se paralizó, ¿amigo?-todo estaba bien, yo fui el del problema, no tenías por que hacerte el héroe
-cállate, no te hagas tontas ilusiones. Solo…quise…ser, bueno ayudar
-ahora tartamudeas, ese no es el Kaiba que conozco. ¿Por qué me ayudaste?, ahora que lo pienso… ¿por qué rayos me alegro?
Seto tampoco entendía porque lo había ayudado pero tenía que admitir que al ver a Wheeler, ahí… sintió necesidad de protegerlo, como si él fuera algo de gran valor y ahora, el rubio se alegró; él también.
-Joey-era la primera vez que lo llamaba por su nombre-de casualidad…-los ojos miel del rubio lo miraban fijamente haciendo que el ojiazul se sonrojara ligeramente.-de casualidad, cuando me ves ó me escuchas…sientes
-¿alegría, emoción, felicidad?-respondió completando la frase- sí, lo siento. La verdad, no tengo nada contra ti, pero en ocasiones… no sé, el poder venir aquí y alejarme de mi nefasto padre y estar contigo…juntos, bueno…
-algo en común-dijo Seto- aún conservó cierto odio a mi padrastro, el maltrato físico y psicológico… no tienes idea.-una lagrima corrió por su blanca mejilla
-Seto-dijo el rubio- por lo menos tú lo hiciste por tu hermano, en cambio yo… no puedo ofrecerle algo a Serenity- por alguna razón Joey se acercó a Kaiba estando casi cuerpo con cuerpo.
-me siento solo en ocasiones-respondió Kaiba
-¿con tantas chicas suspirando por ti?-preguntó con tono burló Joey
-solo por mi físico y mi dinero, más no me conocen. No me entenderían-
-yo podría entender- ambos se miraron fijamente por unos momentos.
-Joey- Seto puso su mano en la mejilla de Joey, acariciándolo. El cachorro era él único, él único que podría aliviar su dolor.-besamé-para sorpresa de este Joey aceptó. Los labios de aquel a quien tanto tiempo había insultado…estaban llenos de sabor, calor y ternura.
Por otra parte Joey sentía los labios de Kaiba como un elixir prohibido, nunca antes nadie había besado a Kaiba, él era el primero. A pesar de la frialdad de su exterior, sus labios eran dulces. Kaiba empezó a acariciar la nuca de Joey y este lo abrazó, en lo que los minutos avanzaban, las caricias aumentaban.
Kaiba acariciaba su espalda y Joey su pecho.
Kaiba le desabrochaba la camisa y Joey le quitaba la chaqueta.
A la mañana siguiente despertaron exhaustos, cansados y abrazados.
Kaiba siendo el primero en despertar admiraba la belleza de su compañero, sus cabellos dorados y su cuerpo, que aunque un poco más pequeño que el suyo le parecía perfecto. ¿Cómo las chicas jamás se habían fijado en él? Tan bello, tan perfecto.
En cuanto Joey se despertó, se vistió y salió de la habitación. Kaiba extrañado lo detuvo en la puerta.
-¿a dónde tan rápido?-hizo una pequeña sonrisa la cual el chico rubio no respondió
-ya te hice sentir mejor. Mi trabajo acabo- las últimas frases fueron frías y salió, dejando a Kaiba semidesnudo, parado con cara incrédula.
FIN DEL FLASHBACK
“Wheeler”. Tenía que saber a que se refería, habían pasado 4 días después de eso y Joey ahora dormía en la habitación de Yugi. Eso es, Yugi, él podría decirle lo que pasaba con el cachorro.
Espero al descanso.
-Yugi, vamonos-decía Ryou
-sí- en cuanto Yugi se levantó de su asiento una mano lo detuvo por el hombro- ¡Kaiba!- Joey recordando, se salió del salón sin decir nada.
-necesitó hablar contigo Yugi, a solas-dijo mirando a Ryou
- nos vemos Yugi-dijo este saliendo aprisa del salón.
Ambos bajaron al patio y se fueron a una banca lejos de los lugares concurridos.
-¿qué pasa Kaiba?-preguntó Yugi
- es sobre Wheeler-contestó-algo pasó. No se por donde empezar
-te enamoraste- Yugi había adivinado- creo que Yami podrá explicártelo mejor- Yugi hace aparecer a su alterego.
-bien, dime-dijo Yami
-después de que Wheeler y yo lo hiciéramos, en la mañana intente ser amable, pero el solo me respondió: “ya te hice sentir mejor, mi trabajo acabo”-Seto bajo la mirada
-eso es…-comenzó a decir Yami mirando al cielo-porque el trabaja en un burdel gay-esto último paralizó a Seto
-¡¿qué-qué dices?!
Yami volteó a verlo-como tú sabes, Joey no dispone de un buen estado económico, su padre alcohólico lo obligaba a venderse todas las noches y paso el tiempo, de seguro el pensó que si se acostaba contigo te sentirías mejor. Ese es su trabajo ¿no?
-¡¡NO!!-gritó Seto-¡no tiene por que ser así!!-sorprendido por su propia actitud se clamo.-no…tiene que…ser…así-dijo con voz baja
Yami puso su mano sobre el hombre de Kaiba-te conozco, fuiste mi sacerdote y se cuando algo te preocupa-Seto volteo a verlo con la cara llena de lagrimas-si de verdad lo quieres, si de verdad te importa dile lo que sientes. Joey también siente algo, pero tiene miedo de saber que es-las palabras de Yugi animaban lentamente al castaño.
-Yami-llamó Kaiba-tienes razón, hay…siempre hay algo dentro de mí, es un sentimiento-la voz se hacia dulce con cada palabra, Yami sabia bien lo que diría-y ahora,…quisiera decírselo
.si ese es tu deseo te ayudare y Yugi también-respondió
-tengo una idea-dijo el castaño recuperándose-Yami, tráeme a Joey a las 6 en este mismo lugar
-deacuerdo- contesto Yami retirándose, dispuesto a cumplir la misión, pues también quería en cierta forma a Kaiba,…si, era un buen amigo.
-a las 6?- preguntó Joey en la alcoba de sus amigos-para qué Yugi?
-es algo urgente, creo que…pues- Yugi no sabía que excusa dar-yo, veras…es……… que es algo en lo que solo tu puedes estar y… ¡por favor!-suplico sonrojado
-esta bien Yugi, estaré ahí- sonrió afirmando-aunque no se de que quieras hablar-
-tú no te preocupes Joey, jeje-dijo Yugi algo nervioso-ya veras
6:00 p.m
Seto esta recargado en un gran árbol de cerezos; por ser una ocasión especial decidió arreglarse lo mejor posible para su Joey. Llevaba puesto un pantalón negro, una camisa azul rey con los tres botones superiores desabrochados, permitiendo la vista de un hermoso pecho y un pequeño collar de una cruz de plata (se la regalo Mokuba)
En su mano derecha llevaba un ramo de rosas blancas y rojas, envueltas en celofán transparente con un gran moño rojo.
Su mirada estaba fija en el suelo, sus ojos que normalmente mostraban superioridad y arrogancia, ahora tenían un nuevo brillo lleno de dulzura y amor; sus mejillas levemente sonrojadas y sus labios ligeramente abiertos.
“qué querrá decirme Yugi?”Pensaba Joey”justo cuando tenía planeado invitar a salir a Hitomi, espero sea rápido pues ya me arregle” (cierto, llevaba un pantalón color gris y una camisa verde botella (si, 2 botones abiertos ))
Ya no pudo seguir con sus pensamientos, porque se pasmó al ver a Kaiba esperándolo en donde se suponía estaría su amigo.
-Kaiba…-fue la única palabra que pudo salir de su boca.”Se ve tan lindo (pensaba mirándolo detenidamente) así, todo sonrojado, con sus bellos ojos azules brillando de esa forma tan hermosa…y vestido así, con esa cara, con el cabello en su rostro, pero…no, no puedo pensar así, por eso no lo quiero ver, tengo miedo…miedo de enamorarme y que luego…luego…él”
-Joey-por fin Seto se había percatado de la presencia del rubio. El color rojizo de la tarde le daba un toque rosado a la piel de ambos haciéndolos sonrojarse-yo, verás…
-tu me querías hablar?-preguntó Joey intentando ser indiferente
-sí-respondió Seto-acércate, solo quiero hablar contigo de algo muy importante, onegai Joey-ante su petición, el rubio acepto y se acerco de forma lenta hasta él. Seto, nervioso aún tomando valor y mirándolo fijamente a los ojos se disponía a hablar-Joey, yo…ay algo dentro de mí que te quiero decir, es algo muy fuerte y…solo quiero decirte que…yo, yo-cada palabra era más difícil que la anterior.
Joey solo podía estar parado y ver como su más querido ser intentaba hablarle.
-Joey, yo…quiero decirte-decía Seto mirándolo con esperanza
-solo dímelo-dijo Joey con dulzura
-¡ai shiteru Joey!-Seto se sonrojo a más no poder, pero sin apartas la vista del otro.
Ante su sorpresa Joey se abalanzo a él, abrazándolo por el cuello.
-Seto, Seto…yo también ai shiteru-contesto dándole un beso en la oreja
-Joey- Kaiba respondió el abrazo colocando sus brazos en su cintura, después se separaron levemente-no volverás a estar solo, jamás…siempre estaré a tu lado-puso sus manos en el rostro del rubio atrayéndolo hacía si-ai shiteru- y con esto besó aquellos labios tan dulces que lo enloquecían.
-Seto- Joey rompió el beso-yo también estaré junto a ti
-toma, son para ti-Seto le entrego el ramo de rosas a Joey, el cual las abrazo contra su pecho-mi querido Joey-sus bocas volvieron a fundirse en un beso lleno de amor, dejando al viento soplar silencioso como único testigo. Ninguno volvería a sentir la soledad, ahora que en sus corazones nacía este nuevo sentimiento.
FIN
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español