El sonido de las rejas cerrarse detrás de él congeló sus pensamientos en aquel instante. El instante en el que encaraba la muerte. El momento del cuál no había retorno posible.
El miedo y la ansiedad que le habían acompañado fueron socavadas por el frío de aquel húmedo pasillo. Él oficial que le acompañaba le dijo su nombre y él supo que todo estaba acabado.
_ Kim Jongin, de las bajas del partido obrero.
Lo llevaron hasta un cuarto en lo profundo de un largo pasillo. Mientras pasaba intento reconocer un rostro familiar entre los demás reos y vio varios. Él esperaba encontrar el rostro de su querido amigo Sehun ente ellos, pero no lo vio ahí. Movió sus labios pronunciando su nombre en silencio para secretamente preguntarle de él a un compañero que estaba ahí y que le veía pasar. Este entendió el mensaje, hundió su mirada en el suelo y negó con la cabeza. Jongin, o Kai como le decían sus compañeros de lucha, entendió de inmediato y su corazón se sumergió en la más profunda tristeza.
Aquella noticia le llegó para cavar con cualquier esperanza que le pudiera quedar de salir de ahí.
Lo sentaron en una silla de metal y le esposaron de pie a cabeza. Le tuvieron unos minutos ahí solo con una luz blanca que le daba en la cara. Hasta que oyó a alguien entrar, este se le paro enfrente y con su cabeza le bloqueo la luz. Entonces él pudo abrir sus ojos y ver de contra luz a la persona que estaba allí parada. Parecía joven, o al menos eso alcanzaba a ver.
_ Kim Jongin- dijo y la voz le sonó familiar de inmediato.
_ ¿Kyung Soo?- preguntó con la voz ronca.
Este corrió la luz para que le pudiera ver la cara.
_ Kyung Soo….- murmuró al verle mejor y notar que efectivamente era él y, que además, vestía un traje de oficial.
_ ¿Qué has hecho con tu vida Jongin?
_ ¿Qué has hecho tú con la tuya?
_ Defiendo mi patria de los subversivos que quieren dividir el país.
_ Viste a Sehun aquí… y lo dejaste morir ¿Cómo pudiste permitir que eso sucediera?
_ Sehun era un traidor a la patria como lo eres tú.
_ Era un amigo… y tú lo traicionaste.
_ Hice lo que tenía que hacer.
_ ¿Fuiste tú…?- sus ojos se llenaron de lágrimas producto de la decepción.
_ Le di la oportunidad que te daré a ti en nombre de nuestra antigua amistad. Sí me das los nombre y locaciones del resto de los subversivos te mando al exilio.
Jongin le miro unos instantes en silencio esforzando por contenerse.
_ Si colaboras podes salvar tu vida yendo al exilio.
_ ¡¿Tú crees que los voy a entregar por salvar mi pellejo?! ¡¿Crees que soy tan basura como tú?!
Kyung Soo respiró hondo y rehuyó la mirada al costado.
_ Si así lo quieres… - su expresión tranquila desapareció en un desborde de sentimientos- ¿vas convertirte en un mártir de esta revolución absurda? ¿Vas a morir por esta causa?
_ Sólo seremos realmente libres cuando la opresión estamental desaparezca. Mírate a ti mismo, instrumento de un sistema opresor.
_ Mírate tú a ti mismo, cordero de los traidores de la patria. Mi trabajo es detener el comunismo y lo hare cueste lo que cueste.
_ ¿Yo soy un costo Kyung Soo? ¿El deber está por encima de mí?
_ Adiós, Jongin. Ojalá el agente te deje vivir lo suficiente para que te des cuenta de tu error.