Ahora que está todo en silencio,
Y que la calma me besa el corazón
Os quiero decir adiós
Porque ha llegado la hora,
De que andéis el camino ya sin mí
Hay tanto por lo que vivir...
En este mismo momento, en el que sólo se pueden oír tus latidos, y bajas la mirada hacia dónde se supone que estoy ahora, sin darme cuenta de que en realidad estoy a tu lado. Quiero darte una despedida “formal” Nunca quise irme de esa forma, Keehl.
No llores cielo y vuélvete a enamorar,
Me gustaría volver a verte sonreír
No quiero que dejes tu cara muda, no quiero que dejes de ser feliz por mi culpa, ni que te extingas después de mí. Yo sé que puedes volver a intentarlo, sé que hay una “pequeña cosa blanca” que te adora, sé que puedes llegar a amarlo como me amaste a mí. Sólo quiero que seas feliz.
Pero mi vida,
Yo nunca podré olvidarte
Y solo el viento sabe,
Lo que has sufrido por amarme.
Perdóname, en verdad. Yo sólo quería ayudarte, aunque me costara la vida. Si a ti te pasara esto, yo me habría muerto sin más. Tú eres mi vida. Pero yo sé que tú tienes muchos otros motivos para vivir. Y no digo que todo esto no sea duro para ti, no estoy diciendo que no te cueste aceptarlo. Créeme que yo sé por lo que estás pasando. Sé que te duele, sé que sufres, y qué lloras por las noches.
Hay tantas cosas
Que nunca te dije en vida,
Que eres todo cuanto amo
Y ahora que ya no estoy junto a ti
Te cuidaré desde aquí
¿Nunca te lo dije? Creo que fue demasiado tarde. Pero ya lo sabías, pequeño genio, pequeño e indefenso Mello.
No debes preocuparte por mí, estoy feliz, siempre y cuando tú sonrías. Te cuidaré, acunaré tus sueños, y acariciaré el contorno de tu rostro. Estaré para siempre a tu lado, a mi manera. Pero estaré.
Sé que la culpa os acosa,
Y os susurra al oído ''pude hacer más''
No hay nada que reprochar
Ya no hay demonios en el fondo del cristal
Y solo bebo todos los besos que no te di.
No debes culparte, no fue tu culpa. Yo ya sabía exactamente lo que iba a suceder. Lo callé, porque así te soy más útil. No hay nada que pueda destruirte ahora. Yo me ahogaré entre tus recuerdos, para protegerte.
Pero mi vida,
Yo nunca podré olvidarte
Y solo el viento sabe
Lo que has sufrido por amarme
Hay tantas cosas
Que nunca te dije en vida
Que eres todo cuanto amo
Y ahora que ya no estoy junto a ti...
Vivo cada vez que habláis de mí
Y muero otra vez si lloráis.
He aprendido al fin a disfrutar
Y soy feliz
Eras todo lo que necesitaba para ser feliz. Y ahora lo que podrías hacer por mí es justamente eso, ser felíz. Tu felicidad depende de la mía. Me matas cada vez que sufres. Hazlo, ¿si? Aunque sea tal vez una petición egoísta. Pero no sufras, porque de nuevo mi corazón se destroza. Te lo diré, si es necesario. Soy feliz. Gracias a ti.
No llores cielo y vuélvete a enamorar
Nunca me olvides
Me tengo que marchar
No llores, mi vida, y date una nueva oportunidad. Yo sé que puedes ser feliz con alguien más. Con esa persona. No pienses que me estás traicionando. Le estoy muy agradecido. Sí, a Near. Porque yo sé que él te ayudará a salir de esto, lo que he provocado yo, con mi última acción. Sé felíz con esa persona. Te lo pido por favor. Si no lo quieres, tómalo como mi último deseo, sé feliz.
Pero mi vida,
Yo nunca podré olvidarte
Y solo el viento sabe
Lo que has sufrido por amarme
Hay tantas cosas,
Que nunca te dije en vida
Que eres todo cuanto amo
Y ahora que ya no estoy junto a ti…
Yo jamás podré olvidarte. Serás mi sol, como recuerdo de tus preciosos cabellos rubios. Serás mi luna, como recuerdo de esa nívea piel que tantas veces fue mía. No sufras más, no vale la pena. Puedes ser feliz, hazlo por mí. Vive esa vida que yo no tuve el privilegio de tener. Respira el alba, y suelta en ella todo el dolor que almacenas en tu alma. Ve, canta, respira, haz todo lo que yo no pude hacer. Eres lo que más amo en este y en mi mundo.
Desde mi cielo
Os arroparé en la noche
Y os acunaré en los sueños
Y espantaré todos los miedos
Desde aquí, alejaré las pesadillas, lucharé con lo que te pueda hacer daño. Pero no puedo pelear contra ti, si eres tú el que se hace daño. Olvida tu orgullo, que ese fútil luto te matará a ti también. Y yo quiero que vivas cada uno de los sueños que maquinaste junto a mí. Aunque los cumplas con otra persona.
Desde mi cielo
Os esperare escribiendo
No estoy solo pues me cuidan
La libertad y la esperanza
Yo nunca os olvidaré...
Aquí, en este momento y para siempre, te esperaré con las alas y el alma abierta, nunca estaré solo, me cuidan todas tus sonrisas. Y no seas tan egoísta, deberías estar gritando y corriendo. ¿Qué no lo ves? ¡Al fin soy libre! Mi corazón ya no guarda ninguna queja. Al fin he comprendido de qué en realidad está hecho el amor. Está hecho de felicidad, agua y plumas. Y de un brillo que ciega. Ten una esperanza, el ferviente anhelo de que nos volveremos a ver. Y que no sé te olvide, que aún tengo algo de humano. Porque tú te quedaste en mi alma. Jamás te dejaré.