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GIROS DEL DESTINO por crystalwall

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Notas del capitulo:

Hola, les traigo el nuevo capítulo, este la verdad me quedó un poco largo pero es que no podía cortar la idea en medio, como Shun está contando su historia necesitaba llegar a un punto para terminar el capitulo

Espero que les guste

Capítulo 8.- Yo… soy tu dueño

 

Esa noche Shun salió de la terapia totalmente destrozado, su ánimo estaba por los suelos, él sabía pero como que su cerebro se había resistido en aceptar el hecho de que eran años los que Radamantys lo había engañado con Alberick, al inicio lo supo ocultar muy bien pero ya luego nada le importó al rubio y ahora hasta estaba en su casa, el peliverde no quiso esperar a Ikky a que salga del hospital y pidió un taxi pero tampoco quería ir a la casa con Seiya, en estos momentos quería estar solo pero no tenía a donde ir, no tenía en donde refugiarse, Seiya era muy buena persona pero en los actuales momentos el castaño tenía todo lo que él deseaba y eso hacía que Shun no lo quiera ni ver, en casa estaba Ben, ese bebé estaba hermoso, Seiya estaba de encargo y aunque seguía medio delicado tenía un esposo que lo cuidaba y estaba pendiente de él, una hermana y un padre que lo visitaban y lo apoyaban, un buen trabajo… por qué la vida se ensañó en su contra y todo le había salido mal?, por qué Seiya si tenía todo y él no tenía nada???? Y encima de todo estaba la forma en la que Alberick lo había mirado en la mañana, tan poquita cosa era???

 

Shun decidió que quería caminar para aclarar sus ideas y eso fue lo que hizo, caminó un poco por las siempre llenas calles de Tokio hasta que pasó por un restaurante de sushi, vaya… hace muchos años que no comía sushi pero es que no podía comerlo porque a Rada no le gustaba entonces él se había eximido de uno de sus platillos favoritos porque su rubio esposo decía que cuando comía sushi podía olerlo en él y se negaba a acercársele, Shun como siempre había cedido y el suchi se convirtió en una de las cosas vetadas en su casa, otra era la coca – cola, el pollo frito y el jugo de naranja, en ese momento frente a la ventana del restaurante el joven abogado se puso a pensar en las cosas que cedió para complacer a su esposo y se dio cuenta que el único que había cedido en esa relación había sido él, el único que había hecho todo para complacer al otro había sido él, el que sacrificó todo lo posible era él, Radamantys nunca hizo nada por él o por su matrimonio o para complacerlo, y al pensarlo de esta manera una rabia como nunca había sentido le invadió pero no era rabia en contra de su esposo, era rabia en contra de sí mismo, se dejó aplastar y anular por aquel que no le dio nada bueno dándose cuenta que a la final Radamantys tenía razón, Shun se había convertido en un ser que doblegaba sus deseos por los de su esposo, extremadamente complaciente hasta niveles malsanos, un títere en sus manos…

 

Sin esperar más Shun entró al restaurante y ordenó un poco de todo, al diablo… él iba a comer sushi hasta que explote y nada ni nadie se lo iba a impedir, cuando le sirvieron los platos el abogado sonrió feliz, por primera vez en mucho tiempo sonrió limpia y sinceramente ante algo tan simple y empezó a comer, era la primera vez en semanas que comía con ganas y en eso estaba cuando su teléfono sonó, era Ikky el que lo llamaba, el peliazul estaba preocupado porque había llamado a casa a ver si Shun ya llegó pero obviamente no había llegado

- Nissan… has comido en el restaurante de sushi que queda como a seis cuadras del hospital?

- Si… es el favorito de Seiya, tú estás ahí?

- Si, es fantástico, hace tanto tiempo no comía nada tan delicioso

- Guárdame un poco no? – eso ya Ikky lo dijo en tono relajado primero al saber en dónde estaba Shun y luego al escuchar su tono, Shun estaba tranquilo y hasta se podría decir algo emocionado

- Solo si te apuras nissan, no te ofrezco nada…

- Ok., por qué no pides una ración de todo para llevar, si yo voy a comer sushi y no le llevo a Seiya me asesina

- Seiya no te asesina

- No lo has visto enojado, le encanta lanzarme las cosas, lo bueno es que ahora lo que más a la mano hay en la casa son los peluches de Ben

- Eres un exagerado nissan

- Solo un poco, ordénalo por favor que yo ya mismo salgo

- Ok.,

Al llegar esa noche a casa Seiya los recibió con una sonrisa porque venían con una súper cena, ese fue el primer día que Shun se unió a la conversación de sobre mesa aunque solo estaba tomando un tecito, mucho sushi en verdad que le había hecho daño pero no le importaba, era un dolor de estómago muy bienvenido, la conversación luego de la cena se extendió por algunas horas, por primera vez Shun estaba hablando de muchas cosas que su hermano no sabía sobre su vida, sobre lo que le había pasado, sobre lo que había perdido y lo que se había dejado quitar, para Ikky y Seiya todo esto era nuevo, una cosa era saber los titulares y otra muy diferente era saber los detalles que Shun ahora estaba compartiendo, Saga les había dicho que este día llegaría y que ellos como su familia podían hacer todo menos reclamarle nada, que era bueno que Shun se abriera a las demás personas y esa conversación duró muchas horas

 

A la final Ikky estaba complacido porque por primera vez ya no vio ese amor incondicional que Shun le tenía a su esposo, ahora el peliverde hablaba con rabia y dolor, la terapia le estaba llegando y haciendo comprender muchas cosas, Saga le ayudaba a poner en perspectiva lo que le había pasado, le ayudaba a entender lo que Radamantys le había hecho, la manera como lo había dominado y manipulado y que ese amor no era bueno para nadie, que una de las mejores cosas que podía hacer Shun era seguir con su vida, “La mejor venganza es ser feliz” le había dicho Saga, eso Shun lo comprendía pero no podía verse a si mismo como una persona feliz, le faltaba mucho trecho pero el joven abogado creía que estaba saliendo adelante y eso era algo

 

Shun poco a poco se iba dando cuenta de que las limitaciones que él mismo se había impuesto para complacer a su esposo ya no eran necesarias, Saga ayudó mucho en esto cuando le contó lo bien que se sintió la noche que fue a comer sushi, el psicólogo le recomendó que saliera y se comprara ropa a su gusto porque era siempre Radamantys el que le compraba su ropa, le había dicho también que un cambio de look era siempre bueno y en eso su hermano le podía ayudar, Saga le había dicho también que siempre era bueno que llamara o se pusiera en contacto con las personas de su pasado que por su esposo había dejado de frecuentar, que se aleje de las personas negativas o muy cercanas a Radamantys que intentaran hacerle sentir mal, que ahora era el momento de en verdad hacer un cambio por todas las cosas de las que antes disfrutaba y por su matrimonio tuvo que sacrificar, Shun no estaba muy convencido de esto pero se decidió a hacerlo cuando recordó la manera en la que el amante de su marido lo había mirado en su propia casa haciéndolo sentir cual vil cucaracha

 

Esta nueva actitud de Shun a Ikky lo tenía contento pero lo único que le preocupaba al peliazul era que Shun aún no quería volver a la oficina y estaba pensando seriamente en renunciar, Ikky le decía que eso no era muy conveniente, que no se podía quedar sin trabajo, que tenía que salir adelante y era fundamental que gane su propio sueldo para eso, Shun sonrió con tristeza… su propio sueldo… si como no… si desde  que empezó a trabajar Radamantys siempre manejó sus cuentas y tenía control total del dinero y solo le daba una cantidad mensual muy pequeña, el resto del dinero el rubio  lo administraba, en qué????... pues eso Shun nunca lo supo porque cada que preguntaba había bronca segura, pero ahora como sus cuentas estaban congeladas el rubio no había tenido acceso a ellas e Ikky ya había hecho las gestiones en el banco para abrir una nueva cuenta para que le depositen el sueldo a Shun y había pasado el saldo de su antigua cuenta a esta, por lo menos el desgraciado ese no vería ni un solo centavo mas de su hermano si Ikky lo podía impedir, Shun no se había opuesto, tampoco es que lo había alentado pero si tenía un cierto sentido de satisfacción al saber que ahora Rada ya no contaría con esa entrada extra, al rubio profesor que se gastaba todo el sueldo ahora le tocaría eximirse de algunas cosas

 

Al inicio de la semana siguiente en la terapia Shun habló un poco sobre el resto de su noviazgo, de las cosas que pasaban que a los ojos de Saga eran avisos de emergencia pero que lastimosamente el amor todo lo cega y Shun no lo vio venir por lo que cuando quiso levantar cabeza ya fue muy tarde

 

***

La relación de Shun y Radamantys tenía cambios sutiles a través del tiempo, el rubio habían temporadas en que era todo dulzura y comedimiento, en esas temporadas Shun se sentía el hombre más feliz de la tierra porque se sentía amado, deseado, considerado y todo lo demás, Radamantys era el hombre perfecto en toda la extensión de la palabra y lo enamoraba cada vez más, el problema era también que al rubio le agarraban épocas en que poco le faltaba para tratar a Shun cual basura, esas eran las épocas en donde le hacía hacer cosas medias extrañas para recriminárselas después, entre las más memorables estaban las de tener sexo en público, una de esas veces Radamantys había llevado a Shun al baño de un restaurante, eso podría sonar excitante pero fue muy incómodo para Shun porque Rada le pidió que se la chupe y los encontró así uno de los meseros

 

Otra de las veces se lo llevaba por los botaditos de la Facultad y tenían sexo en el pasto, atrás de los edificios, atrás del estadio, algunas veces los habían visto pero eso al rubio parecía no importarle mientras que Shun se moría de la vergüenza, lo bueno es que esas épocas extrañas en Radamantys solían durar poco, un par de semanas cada dos o tres meses, ahí era cuando el rubio le armaba escándalo por todo, le colgaba el teléfono, era sumamente grosero y agresivo, se le desaparecía y no había poder humano que lo encuentre, lo dejaba afuera de su casa en medio de la noche luego de hacer el amor, lo llamaba solo para insultarlo y decirle que no era lo suficientemente bueno para él, que era un inexperto en la cama y muchas cosas mas

 

A Shun le parecía sumamente contradictorio porque había días en los que Radamantys lo acusaba de inexperto en la cama y al día siguiente lo acusaba de que lo estaba engañando con alguno de sus amantes, el rubio siempre era celoso pero de vez en cuando le salía con paranoias injustificadas, le decía que su hermano era un estúpido y que Seiya un cualquiera, en fin… en esas épocas el rubio no se aguantaba a si mismo menos aún a Shun

 

En ese tren de altibajos pasaron los dos años siguientes de la carrera de Shun hasta que el peliverde acabó sus clases y empezó a hacer las prácticas pre profesionales en el departamento legal de una multinacional, Shun estaba preocupado por como este cambio de eventos afectaría su relación pero en contra de todo pronóstico todo se calmó, es que se dio un cambio importante en su dinámica, Shun ya no era alumno de la Universidad por lo que ya no habría problema si alguien se enteraba de su relación y en la primera semana de sus prácticas Radamantys se lo dejó muy en claro cuando lo fue a buscar para comer y al llegar lo besó en los labios delante de todo el mundo, Shun no sabía qué hacer, esto nunca le había pasado porque su relación era un secreto pero como Rada puntualizó ese día ya no tenían que esconderse de nadie nunca más, ahora eran libres para vivir su relación como cualquier pareja normal

 

Este cambio fue magnifico en muchos aspectos, Radamantys se dedicó a conocer ahora a todos los amigos de Shun, cuando el peliverde salía pues él les caía, ahora estaban juntos en todas partes y eso a Shun le encantaba, por primera vez todos sabían que tenía novio, Rada lo acompañaba a todas partes y se llevaba bien con sus amigos, iban a bailar, al cine, a conciertos, salían como antes no podían y esa fue en verdad la época más bonita de su relación, a los ojos de todo el mundo Shun no habría podido encontrar un mejor novio, ese no era el caso de Seiya que estaba haciendo las prácticas en la misma multinacional, todos sabían que el castaño tenía novio pero si habían visto a Ikky un par de veces no lo habían visto más, por lo regular el castaño iba solo a donde sea que sus amigos los invitaban o de plano no iba, a los ojos de todos la relación del castaño no era necesariamente buena y no le daban ni seis meses antes de que rompieran sin saber que Ikky y Seiya ya llevaban juntos casi tres años

 

Una noche Shun fue al departamento de Radamantys, el rubio estaba un poco extraño estas semanas porque en términos generales le molestaba que Shun trabaje y le armaba bronca cuando tenía reuniones o se quedaba hasta tarde en cosas a las que él no podía ir y estaban teniendo problemas esos días, Shun esperaba un arranque de histeria de su muy temperamental novio pronto y eso lo tenía preocupado

 

Llovía en Tokio y Shun llegó totalmente empapado a la casa de Radamantys el que lo recibió y lo hizo pasar enseguida llevándolo al baño y abriendo las llaves de agua caliente de la tina, Shun se dejaba hacer en algo aliviado que el rubio estuviera de buen humor, cuando el peliverde estaba sumergido en el agua caliente el mayor se fue a la cocina y regresó con dos copas de vino

- A qué se debe? – preguntó Shun tomando la copa con una sonrisa

- Qué no me puedo preocupar por ti?

- No es eso, preocúpate todo lo que quieras si me vas a recibir con un baño caliente y una copa de vino cada que llueva

- Quería hablar de algo contigo, no pongas esa cara que es algo bueno

- Ah sí?

- Si… me ascendieron a Profesor principal a tiempo completo y eso viene con un aumento de sueldo

- Genial

- Si, pero no estoy pensando solo en eso, tu ya mismo te gradúas y estamos saliendo por cuanto tiempo Shun?

- Más de tres años

- Exacto… Shun… quieres casarte conmigo?

- What???

- Te amo, te eres perfecto para mí, me amas, es tiempo… cásate conmigo Shun, quiero empezar nuestra vida juntos pero de a de veras, no quiero tenerte solo algunas noches a la semana conmigo, te quiero todo el tiempo junto a mí, cásate conmigo

- Ohhh Rada… si… si me casaré contigo… - el peliverde abrazó al rubio empapando su camisa pero en ese momento nada importaba y la pareja se besaba emocionada, cuando Shun salió de la tina se envolvió en una bata y en la habitación habló con su rubio amor haciendo planes para esta nueva etapa, el peliverde estaba simplemente feliz, flotaba en las nubes, todo lo que siempre quiso a la final lo estaba consiguiendo, le faltaba poco para graduarse, en la multinacional le habían ofrecido un contrato a lo que terminara las prácticas y ahora se casaría con el amor de su vida… todo estaba encajando en su sitio, los planetas se alinearon para traerle felicidad

 

La noticia del matrimonio de Shun le cayó a Ikky cual patada en el estómago, a él no le acababa de gustar el rubio para su hermano pero ahora ya no había nada que pudiera hacer, las cosas ya estaban en movimiento porque Shun y Rada habían decidido que no querían hacer una ceremonia elaborada, solo irían al Registro Civil el próximo viernes y luego una cena sencilla de celebración y así lo hicieron, Shun se mudó al departamento de Rada y Seiya se mudó con Ikky, al papá del castaño no le hizo mucha gracia que su hijo se mudara con el novio pero ellos no tenían planes de matrimonio todavía, Ikky estaba haciendo la especialización y quería terminar eso primero antes de dar el siguiente paso, a Seiya no le molestaba y se mudó feliz con su novio, ya las cosas se daría cuando se dieran, Ikky lo amaba y de eso estaba seguro

 

Las primeras semanas de su vida juntos Radamantys fue el esposo perfecto en todo el sentido de la palabra, como el rubio tenía auto iba a buscar a Shun a la salida de la oficina e iban a comer o dar vueltas por la ciudad, regularmente salían con los compañeros de oficina de Shun, lo que incluía a Seiya pero casi nunca incluía a Ikky, el médico estaba ocupado con su especialización y casi no se les unía, es más… desde que Seiya se mudó con Ikky, el castaño se excusaba e iba a casa a esperar a su novio que llegara del hospital y se quedaban ambos en casa, a Shun esto le parecía extraño porque Seiya siempre fue  muy sociable pero poco a poco se empezaba a separar de su grupo de amigos para dedicarse a su novio

 

Una de esas noches en las que estaban en un bar con todos sus amigos de la oficina pasándola genial algo inesperado pasó, Alberick, el amigo de Rada el que de vez en cuando llamaba o visitaba Tokio entró al bar en el que estaban, el rubio al verlo sonrió y se acercó a conversar con él y luego lo trajo a la mesa y lo presentó a todos, el recién llegado se unió y felicitó a la pareja por su reciente matrimonio y les dijo que sentía no haber estado en Tokio para poder acompañarlos, el resto de la noche pasó sin mayores incidentes hasta que la pareja llegó a casa

 

Shun se sacó la bufanda que estaba puesto y la dejó sobre el mueble de la sala, como siempre hacía, pero esta vez Radamantys le dijo en un tono bastante agrio

- No puedes ser un poco más ordenado y no dejar tus cosas botadas por toda la casa?

- Es solo  mi bufanda Rada

- Sea como sea, tu siempre lo dejas todo tirado, eres muy descuidado con todo, el otro día tuve que chequear el refrigerador porque tu compras muchas cosas y las dejas caducar o eres tan ciego que ni siquiera ves las fechas de expiración antes de hacer las compras, claro… como tu hermanito era el que te daba haciendo todo…

- Por qué estás tan molesto por algo tan simple?

- No es algo tan simple… no es el valor de las cosas, es el principio de la acción, pero no entiendes lo que te estoy diciendo verdad?, deberías ser más responsable y aprender a cuidar de ti y de mí, yo ya no soy tu profesor para decirte lo que tienes que hacer pero aparentemente no tienes iniciativa propia para pensar las cosas, sabes qué?, mejor ya vamos a dormir

- Rada lo siento, no pensé que esto fuera un problema

- Déjalo así… - el rubio fue a la habitación, se desnudó, se acostó dándole la espalda a Shun y no se volteó en toda la noche, el peliverde no sabía que pensar, Rada le buscó pelea por una niñería… será que le agarró otra época de esas?, ohhhh ahora solo había que esperar que le pase la histeria compulsiva y vuelva a ser el mismo de siempre, el rubio estaba acostado y no dormía, solo pensaba en los ojos verdes que había visto en el bar esa noche (y no los ojos verdes de su esposo, Rada estaba pensando en Alberick y de solo acordarse de él se estremecía)

 

A la mañana siguiente en el desayuno Rada no dijo nada, solo tomó su café y salió del departamento dando un portazo, Shun no entendía por qué estaba tan enojado, pero no podía pensar mucho en eso porque tenía que llegar a su trabajo, cuando llegó fue literalmente secuestrado por Seiya que lo llevó al cuarto de copiado y le mostró el anillo que Ikky le había dado, le había pedido que se case con él y ahora estaban comprometidos, el castaño estaba feliz y sonreía maravillosamente

- Cielos Seiya… y para cuándo?

- Un par de meses creo yo hasta que todo esté listo, Ikky ya está acabando la especialización y consiguió ya un contrato en el hospital como cirujano, fuimos a la celebración por eso ayer y me lo pidió, ayer mismo fuimos donde mi papá para hablar con él y él quiere hacer la ceremonia en el patio de la casa, Ikky estuvo de acuerdo, yo sé que eres el hermano de Ikky pero eres mi mejor amigo, serás el padrino de nuestra boda?

- Wow Seiya… claro que si

- Seika es la madrina, yo sé que Ikky quería pedírtelo él mismo pero cuando te lo pida pon cara de sorprendido por favor, tu hermano me asesina si se entera que ya te lo dije

- No te preocupes, y en dónde van a vivir?, en el departamento de Ikky?

- No… mi papá nos quiere regalar una casa, Ikky no está muy convencido, dice que le gustan más los departamentos entonces mi papá dijo que ya va a buscar uno grande porque me dijo que quiere muchos nietos y toda la cosa

- Hijos?

- Ya lo he hablado con Ikky, queremos niños pero no sabemos cuántos, yo digo que esperemos a ver cómo nos va con el primero antes de nada

- Me alegro por ti y por mi nissan, Seiya esto es genial

- Si… lo es…

 

Los días que siguieron fueron de planes y felicidad para el castaño y de tristeza y soledad para el peliverde, Radamantys se le desaparecía y no llegaba a casa, ya no lo iba a buscar en la oficina y Shun tenía que regresar en bus o taxi, eso no era el problema, el verdadero problema era el ausentismo del rubio y el mal genio que no se le quitaba con nada, en las noches que era cuando se veían discutían por todo y de todo, Radamantys más de una ocasión mandó a Shun a dormir en el sillón y las cosas andaban de mal en peor, Shun mas que molesto estaba preocupado, qué era lo que hizo para que su rubio se haya puesto así???, por lo que empezó una nueva técnica, en vez de pelearle las cosas a Radamantys y conseguir solo discutir otra vez, el peliverde trataba por todos los medios de complacer a su esposo pero nada de lo que hacía lo complacía, la situación estaba insostenible y lo más grave era que esta racha de histerismo del rubio estaba durando más que cualquier otra racha que pudo haber tenido

 

El día del matrimonio de Seiya e Ikky llegó y esto representó nuevos problemas para Shun porque la noche anterior Radamantys le dijo que él no iba a ir a ese matrimonio, Shun le rogó por todos los medios posibles pero el rubio le dijo que él no iba y punto, en la mañana el rubio salió de la casa dando un portazo y ni siquiera dijo a donde iba, Shun con santa paciencia y mucha tristeza se duchó, se cambió y fue a la casa del papá de Seiya a cumplir con sus obligaciones de padrino

 

La ceremonia fue muy hermosa y sencilla, había bastantes invitados, compañeros del hospital de Ikky, compañeros de la multinacional de Seiya, amigos de la Universidad de ambos, amigos del colegio de ambos, familia de Seiya porque Shun era la única familia de Ikky y en medio de todas estas personas estuvo alguien a quien Shun no esperó volver a ver

- Hyoga… no sabía que Seiya te invitó

- Aioros me dio trabajo y pues, invitó a varias personas de la oficina, Seiya me contó que te casaste hace poco, y tu esposo?, no vino contigo?

- Claro que vino, solo me atrasé un poco a la ceremonia, me presentas a tu amigo Shun? – el rubio llegó sorpresivamente en el momento justo, al llegar abrazó a Shun por la espalda y le besó el cuello, el peliverde sonrió aliviado al ver llegar a su esposo en buen plan

- Claro… Hyoga este es mi esposo Radamantys Wyvern, Rada este es mi amigo Hyoga

- Mucho gusto – dijo Hyoga extendiendo su mano, gesto que fue correspondido por el recién llegado

- El gusto es mío, y dime Hyoga, desde hace cuánto conoces a mi Shun?

- Ohhh desde el colegio, no sé si lo sabías pero Shun y yo éramos novios en ese entonces

- Si lo sabía, mi Shun me lo cuenta todo, si me había hablado de ti, así que nunca perdiste el contacto con Seiya eh?

- Realmente no, trabajo para su papá ahora y pues nos invitó a la boda

- Ohhh… quieres bailar amor?

- Claro… disculpa Hyoga

- No no… sigan…

Radamantys tomó la mano de Shun y la apretó con fuerza cuando lo llevó a la pista de baile, ya cuando estaban lejos del oído de Hyoga el furioso rubio le dijo al oído a su peliverde esposo mientras bailaban suavemente al ritmo de la música

- Así que ese es tu noviecito eh?

- Él fue mi novio Rada, lo veo por primera vez hoy desde hace más de cuatro años

- Crees que soy estúpido?, si nunca perdió el contacto con el cualquiera de Seiya significa que igual te frecuentaba, no me lo niegues

- No Rada… no es así, te juro que no había visto a Hyoga en años

- No te creo… cualquiera hijo de puta… recoge tus cosas y sale inmediatamente que nos vamos para la casa

- Pero no puedo irme todavía, falta el brindis y esas cosas

- Te dije que salieras aurita, no te atrevas a desobedecerme Shun que no te voy a dejar aquí solo con tu amante para que te vayas a revolcar con él en mi ausencia, si no estás afuera en cinco minutos regresaré a sacarte de los pelos, me entendiste?

- Rada…

- Entendiste? – el rubio apretó con fuerza la mano de Shun y el peliverde se encogió un poco del dolor

- Auch… si… te entendí…

- Bien, no me hagas volver a buscarte – el rubio soltó a Shun dejándolo de pie en la pista de baile, el peliverde no dijo nada ni se despidió de nadie, solo tomó su chaqueta que estaba en el respaldo de la silla en su mesa y salió de la casa del papá de Seiya para dirigirse al auto de su esposo que ya estaba encendido, apenas Shun se subió el rubio arrancó y manejó como maniático por toda la ciudad hasta que llegaron a su propio departamento y entraron en completo silencio, Shun iba a decir algo y ahí fue que le cayó la primera cachetada en la mejilla, fue con tal fuerza el golpe que le hizo virar el rostro, el peliverde se incorporó lentamente pero no lo logró porque ahora le cayó un puñetazo en el estómago que lo mandó al suelo y lo dejó sin aire

- Eres un desgraciado… con tu carita de niño bueno crees que te vas a burlar de mi

- No Rada…

- Estabas usando el matrimonio de tu hermano como excusa para verte con tu amante

- Estás loco?

- Claro que estoy loco, perdí la razón cuando se me ocurrió fijarme en ti, maldito… pero yo te voy a enseñar a respetarme

 

Radamantys le dio dos puñetazos más a Shun que lo dejaron sin aire y lo botaron al suelo, eso lo aprovechó el rubio para tomarlo de los cabellos y arrastrarlo por el departamento, el joven peliverde pataleaba tratando de defenderse pero su esposo era mucho más alto y fuerte, el rubio lo lanzó a la cama y lo desnudó rompiendo en girones su ropa, Shun trataba de quitarse a Rada de encima pero no lo conseguía mover en lo más mínimo, mas bien se ganó dos puñetazos mas en su vientre y que el rubio lo volteara con violencia en la cama, le abriera las piernas y lo penetrara de una sola vez desgarrando sus tejidos y haciéndole sangrar

 

Shun no podía respirar bien porque Rada lo estaba aplastando contra la cama mientras lo embestía con salvajismo, mientras lo hacía le decía cosas como: “Así es como te la mete ese tal Hyoga?”, “Yo te voy a enseñar a que conmigo no se juega”, “Ahora quiero que gimas como seguramente ese te hace gemir”, “Yo soy tu dueño… solo yo soy tu dueño”, “Maldito… mil veces maldito, pero ahora ves a ver”

 

El joven abogado solo podía soportar y aguantar hasta que esta tortura acabara para que Radamantys que le estaba sujetando las manos lo soltara, el rubio seguía en lo suyo y ahora sus movimientos eran más frenéticos que antes y consiguió el orgasmo derramándose en el interior de su esposo que se quejó por el escozor que sintió

- Te quejas?, te quejas al hacer el amor con tu esposo pero dudo que te quejes cuando dejas que ese te coja como le da la gana verdad?

- No… no Rada… yo nunca…

- Cállate desgraciado, no tolero que me mientas, no tolero verte, no lo tolero, fuera de aquí

- Nooooooo… suéltame noooooo…

Radamantys había vuelto a agarrar a Shun de los cabellos y lo arrastró por el departamento para aventarlo en contra de la puerta de entrada, Shun se estrelló contra la puerta golpeándose la cabeza con fuerza, medio atontado intentó levantarse pero no pudo porque una patada le cayó en el estómago, y luego otra y otra, el joven sintió como lo jalaron hasta levantarlo y lo volvieron a aventar esta vez contra el mesón de la pequeña cocina y cuando estuvo otra vez en el suelo sintió como Rada lo levantó y de un manotazo aventó todas las cosas del mesón para lanzarlo a él allí, se acomodó en su espalda y lo volvió a penetrar con fuerza

 

Shun casi ya no se podía mover y solo escuchaba insulto tras insulto, sentía golpe tras golpe, sentía como sangraba producto de la violación y tal fue su dolor que no pudo más y perdió la conciencia, Radamantys lo seguía golpeando y violando hasta que se cansó, cuando llegó nuevamente al orgasmo y botó a Shun al piso de la cocina esperó verlo moverse, incorporarse o algo pero cuando no lo hizo de las iras lo pateó en el vientre una vez más, el joven no se movió sino que siguió sangrando totalmente inconsciente, ahí fue que Radamantys reaccionó y se asustó al ver como el charco de sangre en el que estaba Shun iba agrandándose, ahí el rubio le puso una bata y lo llevó al hospital más cercano

 

Cuando Shun despertó estaba en la sala de recuperación, tenía un suero conectado y le dolía todo, sentado en una silla a su lado estaba Radamantys y le sostenía la mano, el rubio estaba dormido pero despertó cuando Shun se movió tratando de soltar su mano del agarre de su esposo

- Tranquilo mi amor, el médico dijo que debes estar quieto

- No… me… toques…

- Shun, por favor perdóname, no sé lo que me pasó, los celos… la rabia, no soy yo cuando me enojo, al verte con ese tipo la sangre me hirvió y ya no pude ver nada y no me di cuenta de nada, yo te amo Shun, por favor no me alejes de tu lado, yo te prometo, te juro por lo más sagrado que todo volverá a ser como antes, yo te amo por sobre todo, Shun tu eres mi esposo…

- Y por eso me golpeaste?, por eso me atacaste? – lágrimas bajaron por las mejillas del indefenso peliverde que Rada limpió con un pañuelo

- Lo siento, en verdad lo siento, pero tú me provocaste – el tono de Rada denotaba arrepentimiento pero en este punto se estaba justificando, a sus ojos no fue solo el culpable de todo

- Yo que hice?

- Hablaste con ese idiota – al decir esto el rostro del rubio se endureció y sus ojos brillaron de una manera bastante amenazante

- Hyoga… me golpeaste porque hablé con Hyoga?

- No puedo tolerar que siquiera mires al que fue algo tuyo, al que también te ha acariciado, besado, al que también te ha hecho suyo, yo… no me pude contener, tu eres mío, yo soy tu dueño y nadie tiene derecho de mirarte siquiera – Radamantys sujetó a Shun de los hombros y lo sacudió en la cama, el peliverde se quejó un poco y miraba asustado a su esposo, Shun temía que lo golpeara otra vez

- Yo no hice nada malo – rogó Shun por enésima vez encogiéndose en la cama

- Debes entender que tú eres mío, debes entender que de lo que pasó tú tienes la culpa, no me puedes provocar así – el rubio lo abrazó con desesperación, era una mezcla de sentimientos, ira, angustia, arrepentimiento, o por lo menos así lo sintió Shun

- Yo no… - el peliverde empezó a hablar pero su esposo le puso un dedo en los labios para callarlo

- Ya no me discutas más Shun, ahora tenemos que cuidarte para que te recuperes, tienes dos costillas rotas, una contusión en la cabeza y…

- Y???

- Te tuvieron que operar – admitió el mayor bajando la cabeza

- Por qué?

- Tuviste un aborto espontáneo

- Qué??? – Shun intentó incorporarse pero se encogió en la cama del dolor, se llevó una mano a su vientre y sintió el parche que le habían puesto, ahí estaba su herida

- Si me preguntas es lo mejor que pudo pasar

- Cómo me puedes decir eso? – Shun miró a su esposo con incredulidad y dolor ante tal afirmación

- Si… pero quién era el padre de ese niño, el estúpido ese o yo? – la mirada de Rada era dura otra vez, Shun se sintió cual cucaracha, su esposo dudaba de él cuando no le había dado motivos para que dude, pero eso no cambiaba el hecho de que Rada dudaba de él, no debía haber hablado con Hyoga…

- Tu… por supuesto que tú, yo no me he acostado con nadie ni he hecho nada – dijo el peliverde tratando de tomar la mano de Rada que se puso de pie y empezó a caminar por la habitación visiblemente molesto

- Eso es lo que tú dices, pero no te preocupes, el próximo niño que concibas si va a ser mío, me aseguraré de ello, ahora duerme y mañana cuando hables con la policía les tienes que decir que rodaste las gradas al salir de la ducha, me entendiste?

- Rodé… las gradas?

- Eso es lo que yo dije y tú vas a corroborar mi historia o quieres que todo el mundo se entere de lo cualquiera que eres?

- Pero yo…

- Ya deja de porfiarme Shun, yo sé de la clase que eres y de lo que eres capaz, he decidido que volveré a aceptarte así que pobre de ti que digas algo más de lo que te acabo de decir, está claro? – Rada fue terminante cuando dijo esto, sus ojos brillaban amenazadoramente y Shun sintió miedo, mucho miedo por lo que casi en un susurro dijo mientras asentía:

- Lo que tú digas

- Bien… duerme ahora que debes descansar, yo vendré mañana – el rubio salió de la habitación dejando a Shun que solo lloró la noche entera pensando en que había estado de encargo y había perdido el bebé, en que había sido atacado por su esposo pero que él tenía razón, no debió hablar con Hyoga, Rada era su esposo… Rada lo quería y lo había vuelto a aceptar a su lado… todo sería diferente, todo sería como antes…

 

Notas finales:

Espero que les haya gustado, el capítulo que viene se llama "Luna de hiel" entonces se pueden hacer una idea de lo que viene para Shun

Nos vemos el Jueves en el capítulo nuevo, muchas gracias por leer, cuidense mucho, saludos, bye


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