parecía un día normal, como cualquier otro, pero para alguien su vida cambiaría ese día, comprendería el verdadero valor de las cosas que lo rodeaban, y que no todas las personas son como aparentan. Honey-senpai tendría que aprender una dolorosa lección acerca de la madurez y la verdadera vida a su alrededor.
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Hace menos de una semana, había ingresado un alumno nuevo llamado Shinji Isaura, de estatura media , sus ojos color avellana y cabello color cobre al igual que su aspecto de un estudiante dócil y bien parecido, hicieron que se creara un club de admiradoras, trayendo como consecuencia que Tamaki le ofreciera una invitación para integrarse al club , así que sin poner resistencia alguna, acepto , viendo por primera a Honey-senpai , del cual se enamoró desde que lo vio, creando un lazo de amistad relativa , aunque parecía ser un estudiante dócil, podía llegar a tener pensamientos maléficos y siempre obtenía lo que quería importándole poco la manera en que lo conseguía, él había estado en un hospital psiquiátrico, debido a su problema de personalidad múltiple.
r13; ¡Takashi! r13;Gritó un pequeño rubio de ojos dorados que venía corriendo con una tarta en su mano. Shinji lo vio venir, él era un nuevo alumno del instituto que desde que entró se había enamorado perdidamente de Honey; aunque, en cierta manera, sus intenciones jamás fueron del todo sinceras.
r13;Hola, Honey-senpai r13;dijo Shinji. A pesar de ser mayor, siempre le decía senpai.
r13;Hola, Shinji-chan, ¿has visto a Takashi por aquí? r13;Preguntó con un gesto infantil, haciendo que Shinji se sonrojara.
r13;Sí, dijo que lo buscaras en el laberinto de los rosales. Yo puedo acompañarte r13;ofreció Shinji, con malicia. Esto fue detectado por Honey, pero él siempre confiaba en las personas, así que dejó a un lado su inquietud y aceptó acompañarlo con gusto.
“Será mi oportunidad, Honey, r13;pensaba Shinji, sonriendo de manera perversar13; te declararé mis sentimientos y serás mío, por las buenas o por las malas”.
r13;Oye, Shinji, no quiero caminar ¡llevo más de 1 hora caminando en busca de Takashi! Además, la tarta se me va a caer r13;dijo Honey haciendo un pequeño berrinche.
Shinji se acercó a él y ofreció cargarlo junto con su tarta. Se inclinó hacia Honey y éste saltó sobre sus hombros, agradeciendo el buen gesto con alegría.
r13;Bien, ¡vámonos! r13;Dijo Shinji con una sonrisa pervertida.
Avanzaron hasta llegar al laberinto de rosas. A Honey no le gustaba mucho la idea de entrar ahí, ya que siempre se perdía y eso le molestaba; además de que no quería entrar solo con Shinji, quien cada vez que podía le tocaba levemente el trasero, y eso le disgustaba. Aun así, Honey no se quejó, solamente fue con él, pero lo que pasó después jamás se le hubiera esperado.
r13;Honey-senpai, llegamos r13;dijo Shinji con un tono de malicia en sus palabras.
r13;Sír13;asintió el pequeño felizmente y bajó de los hombros que lo habían cargado hasta allí.
r13; ¿Te parece si entramos, Honey- senpai? – Preguntó Shinji, mientras tomaba las manos de Honey.
r13;No, mejor lo espero aquí; siempre que voy ahí me pierdo r13;dijo haciendo un leve puchero, y soltando la mano de Shinji.