LuHan vuelve a China con la mentalidad de olvidar a ChanYeol, y enterrar todo sentimiento, cerrándose a sí mismo.

El castaño llora, llora porque por más que busque alguna escusa para no creer, hay muchas más pruebas. 

Entonces volver a su natal China con su padre, suena mejor que quedarse a vivir con dos personas que lo apuñalaron, se ríeron de él.

SeHun aparece de casualidad. No es nada de lo que él quiere ahora. Es dulce, atrevido. Es azucar y es sal. Es aceite y agua. Es comprometido y es gay.

— No deberías de decir eso delante de alguien que si entiende el coreano, idiota.

—Me gustas tú, pero sé desde que tenía trece que ella es lo que necesito.

— Tú me usas, yo te uso. No encuentro el amor en todo esto LuHan.

HunHan con mención de ChanHan. Pequeño ChanBaek y lo más probable, SeStal.