Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

67. El Amor de Sung Yeol (12) por dayanstyle

[Reviews - 13]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Sung Yeol se enojó consigo mismo. Odiaba sentirse debil hacia Myung Soo solo por enviarle flores. ¿Por qué el individuo pensaba que bonitos ramos podrían hacerle olvidar toda una vida de traición de los lobos?

 

Myung Soo había estado enviando flores durante toda la semana y Sung Yeol quería gritar para que el hombre deje de…él no se atrevía a hacer eso. Nunca nadie le había enviado flores antes. Nunca nadie le había enviado nada antes.

 

‘‘Hey’‘ Suho llamo desde adelante ‘‘¿Pediste ya tu almuerzo?’‘

 

¿Era una ofrenda de Suho? Esa sería la primera vez que uno de los hermanos Wu le ofrecía algo. Parecía algo fuera de lugar Suho hacer algo así. ‘‘no, ¿Porque? ‘‘

 

Suho apareció en el cuarto de atrás, con un almuerzo en la mano. Sus ojos se posaron en el cuadrado blanco y luego se lo entrego a Sung Yeol. ‘‘Esto lo entregaron para ti.’‘

‘‘¿Cómo sé que no hay una bomba en su interior?’‘ Sung Yeol lo agarro. No le gustaba Suho, pero lo odiaba menos de lo que odiaba a Kris. El tipo no era una mierda con él como Kris. Era decente con Sung Yeol.

 

Pero no eran amigos.

 

‘‘si, ya que muchas personas como tu mean fueran de tarro, tal vez debería llamar al escuadrón de bombas.’‘ El lobo se dio la vuelta y salió, dejando a Sung Yeol mirando la caja en sus manos. Podía oler el pollo. Realmente parecía un almuerzo.

 

Tiro la caja sobre el mostrador, Sung Yeol agarro el trapo del bolsillo de atrás y se limpió las manos. Acababa de terminar con su última reparación y tenía tiempo libre. El ya no tenía nada más que hacer por el resto del día. Sabía que Suho iba a decirle que se fuera.

 

Ese había sido su arreglo. Eso era algo que Sung Yeol había acordado cuando empezó a trabajar. Sung Yeol había insistido que no quería estar por aquí si no tenía nada más que hacer.

Ha pasado más de un año que empezó a trabajar aquí. Quería decirles a los hermanos que iba a trabajar turnos completos, pero el orgullo no permitía que pida horas extras, él sabía que estaba jodido de la cabeza. Nadie tenía que decírselo.

 

Pero lo hizo. Sung Yeol comenzó a limpiar el taller de reparaciones, poniendo las herramientas de vuelta a donde tenía que ir, pero él siguió oliendo el maldito pollo. Su estómago gruño y Sung Yeol decidió que debía comer el almuerzo, ya que fue entregado ¿Por qué dejar que se desperdicie?

 

Volteo y abrió la tapa, Sung Yeol vio juntas unas piezas de pollo y unas galletas individuales, pero eso no fue lo que llamo su atención. Había algo escrito en la parte interior de la tapa. Alguien le había dejado un mensaje.

 

No, no fue cualquiera. Sung Yeol sabía exactamente quien lo había hecho. Myung Soo. ¿Por qué no podía dejarlo en paz? Imágenes de Myung Soo desnudo le llegaron a la cabeza, Sung Yeol gruño porque esas imágenes eran perturbadoramente calientes.

 

Él cerró los dedos de su mano, enojado consigo mismo por dejar que esos pensamientos entren a su mente. Sus ojos se redujeron a la escritura de la caja, Sung Yeol leyó.

 

‘’Esto es solo una pieza de pollo. Si quieres ver el resto, ven a la cena a las 5 pm. Ven solo y ningún pollo va a ser lastimado. Sabré si alguien te sigue. No se te ocurra llamar al FBI o desgarrare cada pieza de pollo.’’

Antes de poderlo evitar, su boca se torció en una sonrisa que se esforzaba por salir. Cerró la caja, odiándose por estar impresionado con la imaginación y la persistencia de Myung Soo.

 

Él no iba a ir.

 

‘‘Si has terminado, te puedes ir’‘ dijo Suho por el pasillo. ‘‘ ¿Fue una bomba?’‘

 

Sung Yeol negó con la cabeza mientras tomaba la caja blanca y se dirigía hacia el reloj. ‘‘no’‘ ‘‘Quizás la próxima vez, alma perdida ‘‘dijo Suho mientras se alejaba.

Sung Yeol se habría enfadado por las palabras de Suho si no habría visto la burla en los ojos del hombre antes de alejarse. El chico había tratado de romper el hielo desde que Sung Yeol había comenzado a trabajar aquí. Sung Yeol nunca bajó la guardia y no permitía que cualquiera entrara-en especial un lobo.

 

Sung Yeol salió de la bahía en la parte de atrás, en dirección a su moto. El comenzó a tirar la comida al contenedor de basura. Pero en el último segundo, se echó para atrás. Igual que las flores, Sung Yeol no podía decidirse a lanzar lejos cualquier cosa que Myung Soo la había mandado.

 

Con un gruñido feroz, Sung Yeol lanzo el almuerzo por el aire, lo miro chocar contra el edificio de al lado y luego aterrizo en un lio esparcido por el suelo. Se dio vuelta, se negaba a ir a recogerlo.

 

Realmente, realmente se odiaba en ese momento por permitir que Myung Soo lo encantara, por meterse en su piel. Él paso la pierna por encima de su moto, arranco el motor, y luego desde el callejón de atrás arranco, en dirección a su casa.

 

Mientras montaba, Sung Yeol ignoraba los límites de velocidad, ignoraba que él estaba conduciendo demasiado rápido. Hubo un profundo dolor en el pecho y en el momento, en el lapso de tiempo que se ahogaba, nada le importaba. Que había una posibilidad de arruinar su moto y matarse en el proceso.

 

No importaba.

 

Nada importaba.

 

Que estaba fuera de control. Su cabeza estaba jodida, sus pensamientos se dispersaron, su ira estaba hirviendo en su interior. Que no iba a ser acoplado a un lobo. Sung Yeol no iba a dejarse seducir por un hombre con el pelo rubio- castaño y grandes ojos avellana.

 

Él llego a casa sin llegar a ser parte de la acera. Sung Yeol aparco su moto en la parte de atrás y camino hacia la casa, entrando por la puerta lateral. Pasó por alto todo y se fue directamente a su habitación, donde se paseó por el piso de madera.

 

¿Cómo demonios permitía que Myung Soo lo encantara? ¿Que había estado pensado? Myung Soo era un lobo. No habría ningún coqueteo, ni citas, ni romance, y no se reclamarían. Sung Yeol se enojó más cuando su polla se animó ante la idea de tomar a Myung Soo allí mismo en su cama.

 

La ira se volvió tan caliente que Sung Yeol maldijo mientras se arrancaba la ropa, la tiro a un lado mientras entraba en su cuarto de baño. Necesitaba una ducha. Necesitaba refrescarse y calmarse.

 

En lugar de sumergirse en la bañera, Sung Yeol entro directamente en el área de la duchas y abrió el grifo. Tenía dos duchas, dos espray golpeándolo a la vez. Presiono la palma de las manos en la pared de mármol y bajo la cabeza, deseando poder lavar el dolor, todo el dolor, hasta el último maldito recuerdo que tenía de cada uno de esos malditos lobos.

 

De repente Sung Yeol sintió que alguien lo observaba. Él no se molestó en dar la vuelta porque sabía quién era. ‘‘Lárgate, Aron’‘

 

‘‘No cuando puedo sentir lástima, mi hermano’‘ La cálida y profunda voz de Aron, lleno el cuarto de baño, y Sung Yeol se puso un poco a gusto. Aron siempre había estado ahí para él. Había conocido al shifter oso polar más tiempo que conocía alguno de los otros hombres que vivían en esta casa.

 

Aron había sido el que lo encontró cuando sus padres murieron y cuido de Sung Yeol hasta que se recuperó. Aron había sido el que casi pierde la vida ayudando a Sung Yeol a combatir la manada de lobos que lo atacaron cuando era más joven.

 

Y había sido Aron quien había luchado a su lado cuando esos malditos lobos grises trataron de destruir su pequeña manada, haciéndolos correr a la Villa Kim, en primer lugar para obtener ayuda. El hombre era un maldito buen amigo, pero Sung Yeol no quería hablar con nadie en este momento.

 

No era que Aron era un superhéroe ni nada de eso. El hombre era simplemente un inferno de amigo. Eso es lo que era.

 

‘‘Cory me dijo que has encontrado a tu pareja’‘

 

‘‘Y Cory tiene una gran boca llena de mierda’‘ Sung Yeol respondió airadamente. Finalmente se volvió para ver a Aron inclinado sobre el mostrador, con los brazos cruzados sobre el pecho. El shifter oso polar no sabía el significado de las fronteras. Sung Yeol nunca criticaría al hombre. Infierno, hubo momentos en los que Sung Yeol necesito un amigo y de alguna manera Aron lo sabía y estaba allí para él.

 

Esto puede haber sido una de esas ocasiones, pero Sung Yeol no quería hablar de nada en este momento. No quería decirle a nadie sobre Myung Soo. Sung Yeol no quería hablar del hombre.

 

‘‘El destino te dio un shifter lobo por una razón, Sung Yeol. Es el momento de sanar y dejar ir el pasado’‘ Sung Yeol se giró, rechinando los dientes al hombre grande. ‘‘Jodete, Aron.’‘

Una sonrisa se formó en el rostro de Aron. ‘‘Tú no eres mi tipo.’‘ El hombre parecía que nunca se ponía nervioso o molesto por algo. No hubo momento en que Sung Yeol recordara haber visto a Aron enojado.

 

Bien, eso no era cierto. Aron se convirtió en un demonio, cuando estaba luchando. Pero aparte de eso. El hombre siguió con la más fresca compostura que Sung Yeol había visto. Sabía que Aron tenía sus propios demonios, pero el hombre nunca dejaba que se vean.

 

No estaba seguro si era bueno o malo.

 

Cerrando el agua, Sung Yeol se dio vuelta y agarro la toalla que Aron había traído, envolviéndola alrededor de su cintura. ‘‘Mira, aprecio lo que estas tratando de hacer pero no voy a tener un shifter lobo por compañero.’‘

‘‘Que mal’‘ dijo Aron mientras sus ojos seguían a Sung Yeol. ‘‘Lo registre en la panadería y tengo que decir, que sin duda es un buen culo.’‘

 

Los ojos de Sung Yeol cortaron a Aron, odiando el hecho de que su ira iba a volver porque Aron pensó que Myung Soo estaba caliente. Aron no debía mirar a su compañero. ¡Maldita sea! Myung Soo no era su compañero, ni por un segundo.

 

Pero los celos hundieron sus garras en Sung Yeol. Aron era un buen amigo a tener, pero también un hombre voyerista en el sentido más verdadero. Él no se inmutaba alrededor de sus amigos cuando estaban desnudos, como ahora. Sung Yeol sabía que Aron no pensaría dos veces antes de ver a Myung Soo desnudo y eso lo enojaba.

 

Aron dio una risa profunda. ‘‘Estas loco porque piensas que quiero verlos tener relaciones sexuales, que quiero ver a ese magnífico hombre desnudo. Si no te importara, no estarías en plena ebullición en el interior.’‘

 

Sung Yeol se movió hasta quedar en frente de Aron, sus narices casi tocándose. ‘‘Mantente al margen de esto.’‘

 

Un tic empezó en la mandíbula de Aron. Él sabía que, aunque Aron era un maldito pervertido, no le gustaba que invadieran su espacio personal. Sung Yeol respiro hondo y dio marcha atrás. No debía volcar su enojo en su amigo.

 

Sus sentimientos estaban a flor de piel. Sung Yeol necesitaba conseguir un agarre. ‘‘Deja de ver mi pene, pervertido.’‘

 

Aron sonrió. ‘‘Te dije que no eres mi tipo’‘

 

‘‘Si, yo no soy delgado, rubio, o twinks de ninguna manera’‘

 

Aron se movió desde el mostrador hacia la puerta. ‘‘Simplemente vístete. Chaejin sigue preguntando por su tío Size’‘

 

Sung Yeol sonrió. El pequeño medio fey, medio humano no podía pronunciar el nombre Sung Yeol. Hangeng a menudo venia, porque él y Aron eran buenos amigos. Por alguna extraña razón, Chaejin había tomado gusto por Sung Yeol. El niño lo llamaba Size. A Sung Yeol le gustaba ese sobrenombre, solo cuando Chaejin lo llamaba. Le patearía el culo a cualquier otro que intentara usarlo.

 

Después de vestirse, Sung Yeol bajo las escaleras para ver a Hoya, Dong Woo, y Hangeng sentados en la mesa. Dong Woo sostenía a su hijo envuelto y Chaejin jugaba en el pasto. Mientras caminaba afuera, Chaejin chillo y grito ‘‘Size’‘.

 

Sung Yeol se sentó en el pasto y recogió uno de los juguetes cuando empezó a jugar con el pequeño niño, sintiendo como una paz interior.

 

 

 

¿Realmente había esperado que Sung Yeol apareciera? Si, lo hacía. Myung Soo mientras se tiraba en la mesa, renunciaba después de haber esperado más de una hora.

 

‘‘¿No se presentó?’‘ Donghae pregunto mientras traía otro vaso de agua. ‘‘¿Cómo sabes que yo estaba esperando a alguien?’‘

Donghae sonrió. ‘‘Solíamos decir que nada permanecía en secreto en la Casa. Pero ahora nosotros los chicos en la Casa decimos nada permanece secreto en el pueblo.’‘

Eso no era reconfortante. Myung Soo no estaba seguro de que le gustara que todos conozcan los problemas que estaba teniendo con Sung Yeol. Sabía que Sung Yeol probablemente tendría un ataque si el coyote sabía que todo el mundo era plenamente consciente de lo que eran- o no, para ser más precisos.

 

‘‘Te veo luego.’‘ Myung Soo salió del restaurant, sintiéndose desanimado. Sabía que iba a tener una larga batalla en sus manos, pero eso no significaba que no se iba a sentir herido.

 

Había pasado una semana desde que descubrió que tenía una pareja y Sung Yeol no se había movido ni un poco. Tal vez ya era hora de subir la temperatura un poco. Myung Soo había llegado a la conclusión de que Sung Yeol se había ido balístico en la panadería ya que descubrir que su compañero era un lobo lo había impactado.

 

Sung Yeol tenía un montón de tiempo para superar ese choque. Tal vez era tiempo de pegarse una visita. Él sabía dónde era Manchester. Myung Soo solo esperaba que Sung Yeol no lo matara.

Condujo hacia allí, llego cerca de la acera del lugar, la confianza de Myung Soo se debilito. Sabía que no iba a renunciar a Sung Yeol, todo tipo de escenarios jugaban en su mente sobre como esto podría resultar.

 

Estando dentro del auto, Myung Soo se sentó allí por un momento, pensando en lo que iba a decir al hombre. Solo había una manera de averiguarlo. Myung Soo abrió la puerta del coche, levanto la vista hacia la casa.

Era de color beige con adornos en blanco, flores decoraban un montón de la superficie. Había incluso rosas que bordeaban la acera frontal. El césped estaba bien cuidado, y el lugar se veía hermoso en la noche, la primera y segunda planta iluminados.

 

Las palmas de sus manos empezaron a sudar mientras caminaba por el camino del frente y subió los escalones del porche. Se quedó allí preocupado de que Sung Yeol lo mandara a la mierda, o peor, lo atacara.

 

Tal vez esto no era buena idea.

 

Antes de que pudiera girar y salir, la puerta se abrió. Un hombre con la piel y los ojos marrones lo miro fijamente, con el rostro inescrutable. ‘‘¿Te puedo ayudar?, Myung Soo’‘

 

Espera, se acordó de este tipo. Había llegado a la panadería en una o dos ocasiones. ¿Cómo se llamaba? Pensó duramente hasta que recordó que el nombre del hombre era Aron. ‘‘¿Esta Sung Yeol en casa?’‘

 

Aron salió, haciendo que Myung Soo diera unos pasos atrás. Él hombre cerró la puerta detrás de él y luego se apoyó en la casa cruzando los brazos sobre su pecho. ‘‘¿Sabes que tu vienes?’‘

 

‘‘no’‘

 

Aron negó con la cabeza. ‘‘yo no lo creo.’‘

 

El largo suspiro que el hombre dejo escapar no era prometedor. En ese momento, Myung Soo deseo que la tierra se abriera y se lo tragara. A pesar de que tenía una gran determinación, él todavía tenía momentos de dudas, momentos que deseaba no tener que vivir, o querer volver a vivir.

 

Como la vez que estaba tomando su ensayo sobre cómo preparar adecuadamente un creme brulee y había puesto en mantel en el fuego, falló su prueba miserablemente. Pero ese momento no era tan grande como este. Esto era la vida en estos momentos. Sung Yeol lo aceptaba o lo rechazaba iba a decidir cómo Myung Soo viviría el resto de su vida.

 

Un poco melodramático, pero era cierto. Los shifter solo tienen una pareja. Si Sung Yeol continuaba rechazándolo, Myung Soo eventualmente sería capaz de seguir adelante y salir con otros hombres. Incluso establecerse con uno de ellos. Pero ninguno complementaria el camino como Sung Yeol lo haría. Ninguno se convertiría en una parte de su alma.

 

‘‘¿Te das cuenta de que probablemente te diría que te vayas al infierno?’‘ Aron pregunto.

 

‘‘Probablemente’‘ Myung Soo asintió. ‘‘Pero yo no me voy a dar por vencido. Él es mi compañero, Aron. ¿Renunciarías a la tuya?’‘ no estaba seguro si Aron incluso tenía un compañero, pero él estaba tratando de hacer un punto.

 

‘‘Ni en un millón de años’‘ Aron admitió. ‘‘Pero yo quiero que seas consiente plenamente de que conseguir que reconozca incluso que son compañeros va a ser muy duro’‘

 

‘‘Conozco su historia,’‘ dijo Myung Soo. Estaba cansado de que todo el mundo le advirtiera sobre Sung Yeol, sin embargo a la vez diciéndole que no se dé por vencido. Las contradicciones eran dignas de una migraña. ‘‘¿Puedo verlo, por favor?’‘

 

‘‘Te llevare a él,’‘ dijo Aron ‘‘pero me mantendré alrededor para asegurarme de que’‘- Aron se aclaró la garganta- ‘‘actúe  civilizadamente’‘

 

Lo que sea. Myung Soo solo quería ver al chico. Él no quería a nadie más alrededor, pero no iba a discutir. Aron se podía negar si él protestaba. El hombre abrió la puerta y lo condujo a través de una sala de estar con un sofá rojo y un cofre para mesa de café.

 

Pasaron por la habitación y luego s través de una cocina. Myung Soo se detuvo en seco cuando vio a su compañero tendido en el césped, jugando con un niño pequeño. Se trataba de un lado de Sung Yeol que nunca pensó ver.

 

‘‘Él no es un mal hombre,’‘ dijo Aron en vos baja a su lado. ‘‘Solo ha tenido una mala vida.’‘

 

El corazón de Myung Soo dolía, por la sonrisa en la cara de Sung Yeol, la forma en que él fingió estar herido cuando el niño lo golpeo el pecho. Sung Yeol se agarraba el pecho, gimiendo, y luego sus brazos cayeron, su lengua fuera del lado de la boca.

 

Myung Soo rio. Él sabía que él nunca iba a renunciar a Sung Yeol, no importa lo difícil que el tipo lo empujara. Había un maldito buen hombre, un hombre cariñoso, enterrado debajo de todo ese odio y Myung Soo estaba decidido a liberar a Sung Yeol de su tormento.

 

 Continuará...

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).