Su Woong era, probablemente, la u nica persona en el planeta que no tenía un teléfono celular. Necesitaba uno para hacer su pedido en línea. Había ido de una habitacion a otra, para acceder a lo que necesitaba. Cuanto mas observaba a su alrededor, mas decidido estaba, de que tenía razón sobre este lugar.
Necesitaba un poco de vida.
Había encontrado, lo que tenía que ser la sala común del centro de detencion. En lugar de estar aún mas deprimido, una burbuja de emoción se precipito a traves de él. Imaginó como el podría transformar el área abierta en una sala de estar, completa con una tonelada de plantas, alfombras, una gran televisión, y definitivamente, pintarlo de nuevo.
Finalmente tambie n encontro la cocina industrial, aunque parecía que no se había utilizado desde que el centro de detención, se había construido.
—Hey, mira esto. —JiAn lo llamó desde el pasillo. Puso un pie fuera de la sala. La puerta estaba hecha de pesado acero, haciendo que tuviera curiosidad por lo que estaba dentro.
—¿Que es?
JiAn hizo un gesto con la mano, lo que indicaba que debía entrar.
—Tu forma de ordenar, lo que sea necesario.
Al entrar en la habitación, vio que era un centro de control, parecía como si hubiese sido actualizado desde que el complejo había sido utilizado como prisión. Una docena de pantallas de plasma, cubrían una pared, mostrando una vista de todo el complejo, y un ordenador portatil en un escritorio. Ahora sabía como Min Su se había dirigido a él, con una incorporea voz.
—Iré a la fría sala común —, dijo JiAn. —Comprar no es lo mí o.
—¿Solo vas a sentarte allí ?
—Nop. —Levanto su tele fono. —Voy a jugar algo. Tranquilízate.
JiAn era un poco raro. Se dirigió al ordenador porta til y fruncio el ceño.
—¡JiAn!
El shifter regreso a la habitación, echando un vistazo alrededor. —¿Que ?
Señalo al ordenador portatil. —¿Como hago para encontrar lo que necesito?
Girando los ojos, JiAn fue hasta el ordenador y se detuvo en un motor de busqueda. —Sólo tienes que escribir mueble, o cama, o lo que estés buscando. Si pegas el código postal, debería darte unos pocos sitios para comprobar.
—¿Sabes el código postal? —No tenía idea.
JiAn negó.
De acuerdo, podía hacer esto, a pesar de que sólo había utilizado un ordenador un par de veces. En el mundo de las hadas, no había necesidad de tales cosas. Había estado en el reino de los humanos, un puñado de veces, y aprendio acerca de los ordenadores, cuando entró en una tienda Apple. En verdad, había quedado fascinado con la tecnología y quería aprender mas sobre ella.
Estaba a punto de obtener un curso acelerado de compras en línea.
—Gracias.
Con un movimiento de cabeza, JiAn se fue.
Paso la siguiente hora, tratando de navegar en las páginas que quería. Periodicamente levanto los ojos hacia los monitores y vio que los pasillos todavía estaban vacíos. Aparte de JiAn sentado en una de las mesas de la cafetería, no había nadie mas allí . Encontro el sitio web de una tienda de muebles local, que tenía un bonito mobiliario. La siguiente cosa que supo, era que estaba haciendo clic como un loco, agregando un montón de cosas a su carrito.
Cuando levanto los ojos de nuevo, para comprobar los monitores, su corazón salto . Se levanto de su silla y se acerco a la pantalla de plasma, en su extremo derecho.
¡La cosa que titilaba se encontraba en uno de los pasillos!
Se precipitó al panel de control y contemplo todos los botones, tratando de averiguar cual era el sistema de altavoces. No tenía ni idea de dónde estaba. Sus ojos se dirigieron rapidamente de nuevo al monitor. La cosa estaba allí , de pie, mirando a su alrededor como si estuviera perdido. Volvio la cabeza hacia la cámara, y un escalofríp le recorrio la espalda.
Sus ojos se mantuvieron enfocados y sin vida, sintio como si lo estuviera mirando. Empezó a golpear los botones, rezando para encontrar lo que buscaba. Cuando volvio a mirar a la pantalla, se lleno de terror.
¡Ese pasillo estaba justo fuera de la sala de control!
Se dio la vuelta y se quedo en la puerta, preguntándose si podía lograr cerrarla, antes de que la criatura lo atacara. ¡Maldición, maldición, maldición!
Estaba demasiado asustado para moverse. Sus pies estaban pegados al suelo. Se quedo allí , conteniendo la respiración, pero la criatura no entro. Se dio la vuelta y estudio el panel. Finalmente descubrio el botón marcado como sistema de comunicación. Tenía que ser eso. Lo presionó. —JiAn, ¿puedes oírme?
Miro el monitor que mostraba la cafetería, para ver a JiAn mirar hacia arriba. Miro la pantalla de plasma, que mostraba el pasillo fuera de su habitación. La criatura se volvio , frunciendo sus cejas.
—Trae tu culo de vuelta aquí —dijo, en el micrófono. —¡Esa cosa esta fuera de mi habitación!
JiAn tiro la mesa, y el observó de un monitor a otro, mientras veía a JiAn correr a la sala de control, también mantuvo un ojo en la criatura, que siguio titilando. ¿Que era eso? No podía pensar que cualquier humano tuviera esa capacidad.
Cuando JiAn entró en el pasillo, que conducía a la sala de control, la criatura gruñó. Tiro una mano con garras hacia JiAn, pero este, eludió su alcance. Busco un arma. Su bolsa de pociones estaba en su dormitorio. No sería capaz de pasar a la criatura para llegar a ella, así que tuvo que recurrir a medios mas convencionales para tratar de ayudar a JiAn.
La sala no tenía nada que pudiera utilizar, a menos que quisiera estrangular a la cosa con un cable de alambre, o romper el ordenador portátil sobre su cabeza. No quería acercarse lo suficiente, para hacer cualquiera de ellas. Asomo la cabeza por la puerta y vio que JiAn había cambiado. Su lobo estaba gruñendo y chasqueando los dientes, mientras se alejaba de la cosa. La criatura pesadamente iba hacia JiAn, pero todo lo queelveía, era la espalda peluda.
Si ponía su manos en JiAn, el lobo estaba perdido. No es que dudara de sus habilidades de combate, pero por si solo su taman o podía ocasionar graves dan os.
—¿Dónde diablos esta , Min Su? —Susurro para sí .
La criatura giró la cabeza alrededor y el casi se tragó la lengua.
¡Oh diablos!
Salió deprisa de la habitación y corrió por el pasillo en la dirección opuesta, tan rápido como pudo. Luego se dio a la fuga, esperando que la cosa no pudiera llegar a él, si se quedaba cerca del techo. Cuando volvio a mirar por encima del hombro, la cosa estaba siguiendolo. JiAn estaba justo detrás de ella, gruñendo mientras seguía tratando de morder su pierna. Pero la criatura dió un manotazo a JiAn, como si fuera una molesta mosca. el miraba alrededor de las esquinas, tratando de llegar a su habitación. Necesitaba sus hierbas y pociones. Pero también tiempo -algo que sin duda no tenía.
Cuando paso junto a la entrada, la puerta se abrió y Min Su y sus hombres entraron, sin darse cuenta del peligro justo detrás de él.
—¡Cuidado! —Se detuvo y permanecio en el aire. —¡Esa cosa ya esta aquí!
Vago por la esquina, JiAn sobre su espalda con sus mandíbulas firmemente sujetas en el hombro de la cosa, pero que no parecía dañarla ni un poco. Min Su y los otros atacaron, pero sus ataques simplemente pasaron a través de la criatura. Estaba aturdido. ¿Cómo podía ser eso, cuando JiAn estaba firmemente sujeto a e l?
La criatura alzo su mano con garras hacia Soo Bin, el vampiro salió volando por el aire y choco contra un muro.
—¿Como diablos se supone que debemos derrotarlo? —San gruñó.
La criatura los miro a todos, antes de titilar. JiAn se dejo caer al suelo y gimio cuando se golpeo la cabeza contra el. Soo Bin se levanto y corrio de nuevo a ellos.
—Vuelve aquí , para que pueda poner mi pie en tu culo. —Soo Bin grito al techo.
Dudaba de que la criatura se viera afectada por amenazas.
Cuando miro a su compañero , vio sangre en la mano de derecha de Min Su. El puño de este había pasado a través de el, así que ¿de donde procedía la sangre? —Tenemos que averiguar lo que es —gruñó Min Su. —Una vez que hagamos eso, entonces podemos averiguar como matarlo.
Tenía la sensación, de que sería mas facil decirlo que hacerlo.
Sentado en la barra de su atico, leyendo The Daily Demon,Him Chan alzo los ojos, cuando una sensación de hormigueo bajo por su columna vertebral. Miró a su alrededor, pero no había nadie en la habitación.
Cerrando los ojos, se concentró, profundizando en su mente, para tratar de averiguar que había sido esa sensación. Entonces se le ocurrió .
Golez. Era la antigua entidad mítica que había convocado, cuando selló el velo Unseelie.
Golez era su sistema de alerta, si una de las hadas encontraba una forma de escapar. No causaba ningún daño, sólo aparecería donde estuviera el hada.
Pero cuando intentó contactarla, algo lo bloqueo. Eso lo desconcerto . Había puesto un hechizo, para poder encontrar a Golez donde fuera, pero la criatura parecía haber desaparecido. Perturbado por no ser capaz de encontrarlo, utilizo un portal para dirigirse hacia el reino de los humanos. Tal vez si estaba cerca, podría precisar su ubicación.
Apareció fuera de The Manacle. Eso lo dejo aun mas perplejo. Había estado dirigiendose a la pequeña ciudad Desire, que era el lugar mas cercano a la entrada del velo.
Inseguro de lo que estaba pasando, se dirigio hacia el interior, para encontrar a Jaehyo.
—¿Te lastimaste? —Pregunto Min Su, cuando Su Woong revoloteó hacia el suelo.
—Yo debería estar preguntando eso. —Su Woong poso sus ojos en la mano de Min Su -la mano que el había utilizado para arrancar el corazón del rebelde.
Min Su volvio a mirar donde la criatura había estado de pie. Una parte de el se preguntaba si volvería. ¿Cómo había pasado de los túneles a su complejo, y por que ?
Solo podía pensar en una respuesta. Era por Su Woong. Era el único factor común entre ambos lugares. —¿Seguro que no sabes que es esa cosa?
Este arrugo la nariz. —¿Como puedo saberlo?
Gruñó, cuando San se inclinó un poco mas cerca, olfateando el hada.
—En verdad no estoy de humor para esa mierda —advirtió. —Si alguno de ustedes se acerca mas, les arranco su puto corazón.
JiAn cambio de nuevo a su forma humana, haciendo que gruñera de nuevo.
—Alguien consígale algo de maldita ropa.
Su Woong se sonrojó, mientras miraba. Agarró a su compañero del brazo y lo llevo a su dormitorio.
—No tienes que ser tan agresivo —Su Woong gimio . —Puedo caminar muy bien por mi cuenta.
—Sí , y puedes mirar fijamente el pene de otro hombre. —Cerro la puerta detrás de ellos. —Ahora dime, por que esa cosa esta detrás de ti.
Su Woong fruncio sus cejas. — ¿Por que piensa que esta detrás de mí ?
—Debido a que eres el único, por el que fue dos veces —argumento .
Su Woong lo fulmino con la mirada. —¿Y eso significa que se que diablos esta ocurriendo? Nunca he visto eso antes en mi vida. —Se paseo en su dormitorio.
—¿No crees que te lo diría si supiera? —Se estremecio . —Todo esto me asusta.
Se acerco a él, pero Su Woong esquivo su mano. —No, pensaste que te lo estaba ocultando.
—¿Como si no hubieras hecho eso antes?
Su Woong tenía la cara roja de ira, mientras apretaba los pun os. —Sabes exactamente, por que no te rebele mi verdadera naturaleza.
El lo sabía, pero estaba enojado, porque Su Woong estuviera enojado. Tambien estaba enojado por los rebeldes, y el miedo que lo envolvio cuando a su regreso, encontró a Su Woong en peligro.
—Lo que significa, que podrías estar ocultandome algo mas.
Cuando Su Woong paso junto a e l, agarro a su compañero de la muñeca. —No puedes salir. ¿Y si se trata de volver?
—Bien, estoy seguro que no permanecere aquí , contigo. —El tiro de su muñeca.
—Preferiría dormir con un grupo de cerdos, en este momento, que acurrucarme en la cama contigo.
Le enseño los colmillos. —Adelante, dime que me odias nuevo.
Su Woong giro bruscamente la cabeza, casi golpeandolo. Lagrimas brotaron de sus ojos, y se sintio como un completo idiota.
—¡Vete a la mierda! —Su Woong abrió la puerta abierta y salio de la habitación.
Maldijo su desagradable temperamento. No estaba acostumbrado a la bondad, y mantener bajo control su temperamento, estaba resultando ser mas difícil de lo que pensaba. Por demasiados años, había lidiado con el feo mundo. Se había endurecido y hastiado de el, y ahora tenía a su pequeña y dulce hada.
Su Woong tenía que estar francamente molesto, porque era la primera vez que lo había oí do maldecir. —Soy un idiota. —Se paso una mano por la cara, antes de ir por su compañero .
Cuando entró en la sala, Su Woong estaba gritandole a alguien. Corrio y dio vuelta a la esquina, para encontrar a su compañero y San mirandose el uno al otro, Su Woong flotando cerca del techo.
—¿Que diablos esta pasando?
—No estoy hablando contigo —, le dijo Su Woong, luego se volvio a San. —Y si me enseñas tus colmillos otra vez, pateare tus testículos, hasta que esten en tus intestinos.
Debería arrancarle la cabeza a San, por mostrar sus colmillos, pero Su Woong parecía tener la situación bajo control. el cayó al suelo, con los brazos cruzados sobre el pecho, con el ceño fruncido hacia San.
Lo cual era algo extraño, teniendo en cuenta que Su Woong media 1,50 de altura y San alrededor de 1,82.
—Fue una reaccion instintiva —, se defendio San. —No puedo evitarlo. Tu sangre huele a caramelos vampiro.
—Trata de tomar un bocado de mí y te convertiré en un burro. —Su Woong pisoteo ,
—¿Puede realmente hacer eso? —Pregunto San. alejandose.
—¿Quieres saberlo? —Dijo, antes de ir por Su Woong. Encontro a su compañero en la sala de control. Apoyo el hombro contra el marco de la puerta, cuando Su Woong comenzo a escribir en su portátil.
—Vete —, dijo Su Woong, sin darse la vuelta. —Realmente no quiero hablar, en este momento.
—Soy un idiota —, dijo.
Su Woong giro en la silla. —Realmente espero que no desees que discuta eso.
Merecía la reprimenda de su compañero . Había estado fuera de lugar. —Se que no me odias, y siento lanzartelo en la cara.
—Una disculpa no arreglara lo que me dijiste. —Su Woong volvio de nuevo al ordenador portatil. —Ahora vete, para que pueda seguir comprando. He descubierto que comprar cosas, me hace sentir mejor.
Hizo una mueca. No quería ver su proxima factura de la tarjeta de credito, pero no detendría a Su Woong de hacer clic. Durante los ultimos trescientos años, se había convertido en un inversor inteligente y tenía mas dinero del que sería capaz de gastar. Aún así , si Su Woong seguía dandole clic a ese ratón, estaría en quiebra en una semana.
—¿Que estas comprando?
—Un ajuste de actitud para ti. Supongo que debe ser extra grande —, Su Woong cerro el ordenador. —¿Por que sigues aquí ?
Se volvio y agito la mano hacia el. —Dije que no quiero hablar contigo.
—Y yo estoy tratando de rogarte —, sen alo . —Que es algo a lo que no estoy acostumbrado, no es facil para mí .
Con un resoplido, Su Woong se cruzo de brazos. —Esta bien, adelante, ruegame.
Ahora entendía, que la pequeña hada lo mantendría en línea y lo haría responsable por sus acciones. Tal vez, tener a Su Woong aquí , era exactamente lo que sus hombres y el necesitaban -alguien conmocionara este lugar y lo hiciera mas como un hogar.
continuará...