¡No podía concentrarse! Miro furtivamente hacia donde se encontraba Takano-san, como si se hubiesen puesto de acuerdo sus ojos se encontraron con los suyos, una sonrisa pícara se formó en el rostro del hombre parado al lado del editor jefe del departamento Esmeralda, se sonrojo, sabía que esa sonrisa estaba dedicada únicamente a él, la sonrisa era del nuevo mangaka de la editorial, un joven de 24 años con mucho talento que Shouta “consiguió” y trajo a la editorial, la cual gustosa empezó a publicar el manga de Yukina Kou, un joven con mucho talento y del cual se esperaba que estuviese de primero en las ventas; Al principio el moreno quería que se le fuese asignado el manga de Yukina pero a Yokosawa le pareció que sería mejor poner a Takano a cargo del nuevo manga; En estos momentos el editor en jefe estaba haciéndole unas cuantas correcciones al manuscrito, puesto que era su primer tomo quería que fuese perfecto, por lo que Yukina se encontraba en estos momentos en la oficina de Esmeralda, a tan solo unos cuantos pasos de su amado novio y futuro esposo. Ya tenía medio años comprometido con Yukina, y un año viviendo juntos en una casa que habían comprado.
—Shouta… ¿Cuándo piensas decirle? — le susurro Ritsu, el cual estaba sentado al lado suyo intentando contener las una que otra carcajada mientras miraba a su amigo y compañero de trabajo intentando ocultar que no cabía de felicidad al tener a Yukina tan cerca
—Después de la boda — Dijo Shouta intentando disimular que en vez de estar mirando su laptop estaba mirando a su novio
— ¡Vas a esperar otra semana! — El moreno asintió, Ritsu suspiro y le dio una ojeada a su compañero — ¿Has estado comiendo bien?
—Vivo con Kou, es un milagro que no esté gordo siempre hace mucha comida
—Eso es bueno
— ¡Pero no quiero engordar!
— ¡Tienes que! — Shouta suspiro y se colocó en posición de descanso
— ¡Yukina Shouta no es tiempo de dormir! — grito Takano desde su asiento, más que molesto parecía divertido y tras ver la reacción de Kou y Shouta se partió en carcajadas; desde que Takano se enteró de que la persona con la que Shouta estaba a punto de casarse y con la que había compartido una relación por tres años era su nuevo mangaka no paraba de llamarlo por su futuro apellido… Era verdad en una semana ya no sería Kisa Shouta, seria Yukina Shouta (En Japón y en muchos países después de que una pareja se caza, la mujer adquiere el apellido de su esposo… En este caso el uke adquiere el apellido del seme)
…
El primero en irse fue Kou, a pesar de ser un mangaka y estar empezando a ganar fama con su primer manga, Kou aun trabajaba en la librería, y hoy tenia turno hasta altas hora de la noche; Shouta termino de trabajar, miro el reloj y tras hacer una mueca Ritsu supo que hoy Kou saldría tarde, últimamente pasaba mucho tiempo con Shouta, por lo que cada día se le hacía más fácil entender sus gestos faciales. Lo tomo del brazo y lo jalo hasta los ascensores.
— ¡¿Qué haces?! — Gruño el moreno, Ritsu solo le sonrió; Su respuesta fue contestada hasta estar al frente de una tienda de trajes de novia — ¿¡Porque co** me traes aquí!?
—Dentro de poco te vas a casar… Creo que lo más apropiado es que vayas escogiendo tu vestido de bodas y no lo dejes para última hora como haces con tu trabajo — Shouta se sonrojo, volteo la cara para luego contestarle en un puchero a su amigo
—Mi traje ya está listo — se sonrojo aún más — Rio-chan lo hizo
— ¡Rio Kojima! ¡¿La amiga de la escuela de Yukina?! — El moreno asintió, Ritsu soltó una carcajada irónica — ¿Quién lo diría? La chica que peor te cae en el mundo hizo tu traje de boda
— ¡No la odio! — se sonrojo aun mas y dijo casi en un susurro —Solo quiero matarla cuando está cerca de Kou, Cuando lo llama, cuando le manda mensajes, cuando va al cine con él, cuando lo llama por su nombre… ¡Pero cuando no está cerca de Kou es muy agradable!
—Y aun así no la odias — Ritsu levanto una ceja con incredibilidad
—No la odio — se miraron fijamente a los ojos, ninguno de los dos pestañaba, hasta que Shouta decidió rendirse — ¡Ok! Si me cae mal — el ojiverde bufo triunfante, de repente el sonido del estómago del moreno llamo la atención de los dos, mientras que Kisa se sonrojaba, Ritsu lo fulminaba con la mirada
— ¿Desde qué hora no has comido?
—Desde la una — Ritsu vio el reloj… Eran las 8pm; el ojiverde lo golpeo en la cabeza y se lo llevo a rastras hasta un restaurante
Luego de que Ritsu hiciera que se comiera un plato y medio de pasta a la Boloña, hiso que se comiera una crepa de frutas y chocolate, Ritsu estaba a punto de pedir otra cosa cuando Shouta lo detuvo asegurándole que ya estaba muy lleno; al momento de pagar la cuenta el moreno apenas estaba sacando su billetera cuando Ritsu ya lo había pagado todo, lo regaño e intento pagarle pero el ojiverde se negó a aceptar el dinero de su amigo, esto hizo que el moreno se enfurruñara; Ritsu lo acompaño hasta la estación, también quería acompañarlo hasta su casa pero se encontró con uno de los editores del departamento de al lado (Misaki) y mientras que lo saludaba el moreno se escapó tomando un tren que estaba saliendo. Desde que le confeso su estado a Ritsu este había convertido en alguien muy sobreprotector, incluso más que Kou, bueno era normal, Ritsu también estaba pasando por la misma situación que él así que ¿Era normal que se cuidaran el uno al otro?
…
Tres días después
— ¡Muy bonita fecha escogiste para casarte! — Dijo de forma sarcástica su madre desde el otro lado del teléfono — ¡Tu hermana se casa ese mismo día! ¿Cómo voy a estar en dos bodas al mismo tiempo?
—Ve a la de mi hermana, después de todo ya tienes los pasajes para España comprados — Shouta se recostó en el mueble, ya llevaba casi media hora hablando con su madre, la cual intentaba buscar la forma de ir a tanto a la boda de su hija como a la boda de su hijo — Como por enésima vez, mi boda será mucho más sencilla que la de mi hermana, no tendré una resección de lujo por que no la quiero… — Ya había discutido con Kou ese asunto, no quería una boda ostentosa, de ser preciso quería que solo fuesen ellos dos; Yukina insistió tanto que termino accediendo a hacer una pequeña reunión (todo el departamento de Esmeralda y los familiares más allegados) — Si no puedes venir no me molestare contigo
— ¡Pero eres mi único hijo! ¡Deberías molestarte y ser más egoísta!
—Voy a casarme con otro hombre… Imagina que tienes dos hijas y ya esta
— ¡Tú eres mi primogénito! —Shouta sabía que su madre no había montado todo este drama por que se perdería la boda de su hijo favorito, sino porque su madre odiaba a la familia del futuro esposo de su hermana, por lo que ella prefería mil veces ir a su boda donde estaría la familia de Yukina, la cual era tan bella y encantadora como Kou — ¡Sabes lo mal que me siento en tener que ir a España a la boda de tu hermana y perderme tu boda!
—Lo se mamá, pero un pasaje de avión es mucho más caro que un boleto del tren bala — se levantó y fue a la cocina
— ¡Puedo revenderlo! — enserio su madre estaba muy desesperada; el moreno vio unas galletas que le había preparado Kou, se metió una a la boca y luego regaño a su madre
— ¡No puedes hacer eso! Los pasajes están personalizados
— ¡Puedo hacer que los despersonalicen! — y ya estaban empezando las incoherencias
—Adiós mamá, disfruta España — Estaba a punto de colgar cunado su madre grito
— ¡ESPERA! — El moreno hizo un ruidito de Hujum para que su madre supiera que la estaba escuchando — ¿Cómo te sientes? — se sonrojo ligeramente
—Muy bien, las náuseas casi desaparecieron y mi apetito está regresando
— ¿Cuándo piensas decirle?
—El día de la boda
—Si no se lo dices el día de la boda, regresare de España y se lo diré yo— otra vez con lo mismo
—No te arruinare tus vacaciones de ensueño — aunque no podía verla sabía que estaba frunciendo el ceño — Adiós mamá, que te diviertas en España — colgó y se metió otra galleta a la boca
…
Un día antes de la boda
Unas manos heladas recorrían su cuerpo, examinando que todo estuviese perfecto, se detuvieron parte baja, algo no estaba bien y ella lo sabía, después de todo fue la que diseño y confecciono el traje que llevaría mañana en la boda, Rio miro a Shouta algo molesta, el peli negro se encogió de hombros.
—Engordaste — lo acuso, no podía mentirle, el moreno asintió —Kou se casara con una vaca — se burló ella
— ¡Eh! No estoy tan gordo — hizo una mueca — Aunque dentro de poco de verdad pareceré una vaca — pensó el moreno — ¡Además! ¿Quién te da el derecho de recriminar mi figura? — su tono había pasado de “estoy haciendo mi mejor intento para no matarla” a “la voy a matar”
—Soy la mejor amiga de Kou y soy la que hizo tu traje… Si engordas tengo que trabajar el doble para que te veas decente al lado de Kou
— ¡No es mi culpa! Kou hace mucha comida — sabía que estaba mal echarle la culpa a Yukina, pero de cierta forma era verdad… Yukina últimamente estaba cocinando demasiado
— ¡No culpes a Kou de tu sobrepeso! — la cara de la joven diseñadora se tornó roja de la ira
— ¡No lo culpo a él! ¡Culpo a su comida! — el moreno no se quedaba atrás, puesto que su cara se había tornado incluso más roja que la de la joven
— ¡No culpes a la comida que yo le enseñe a preparar a Kou!
—…— Shouta iba a responderle pero la voz de Yukina detuvo la pelea
— ¿¡Que está pasando allá!?
— ¡Nada! — respondieron al mismo tiempo como si no quisieran la cosa
— ¡Voy a entrar! — pero antes de sé terminara de abrir la puerta Rio y Shouta se lanzaron hacia la puerta haciendo que se trancara nuevamente
— ¡No entres es de mala suerte ver a la novia con el vestido antes de la boda! — el de cabellera canela puso los ojos en blanco y golpeo la puerta
—1: Shouta es hombre por lo que sería novio y 2: Es un traje no un vestido — suspiro — Me iré, pero si los vuelvo a escuchar pelear entrare por esa puerta aunque tenga que derribarla — después de escuchar como Yukina se alejaba de la puerta ambos se deslizaron hasta caer al suelo
— Si Kou entra y ve el traje antes de tiempo te matare — amenazo la joven al azabache
—Por favor dejemos de pelear, o enserio Kou derribara esa puerta — ambos se levantaron y siguieron dándole los toques finales al traje blanco que llevaría Shouta mañana para su boda
Una hora antes de la boda
— ¡Qué bien te vez! — lo alago Onodera; el ojiverde llevaba puesto un traje negro con una corbata del mismo color de sus ojos
—No es para tanto — dijo Shouta mientras se levantaba de su asiento
— ¿No te has visto en un espejo? ¡Te vez increíble! — el moreno negó ¿Para qué quería verse llevando el traje que había hecho Rio?, Ritsu suspiro y empujo a su amigo a un espejo que le permitía reflejar todo el cuerpo del pelinegro. Shouta por unos momentos no supo que decir, había visto aquel traje blanco con la capa y la flores tal vez un millón de veces pero jamás había visto el traje en él. A pesar de ya estar perdiendo su figura esbelta con aquel traje pareciese que no hubiese subido ni un kilo, el traje le recordó mucho al que Rio había confeccionado para Yukina en uno de sus festivales escolares, la diferencia entre su traje y el de Yukina, a parte del color, era que el de Yukina tenía un aire de la época victoriana, mientras que el suyo era más moderno y menos ostentoso
— ¿Por fin te viste al espejo? Y dime ¿Qué piensas? — la voz de Rio lo sorprendió pero aun así no dejo de ver su reflejo en el espejo
—Que a pesar de que te odie… Amo el traje que me diseñaste — la joven se sonrojo y refunfuño
—No lo hice por ti si no por Kou
—Gracias — Rio solo se sonrojo y miro hacia otra dirección, Shouta pudo escuchar un susurro y tanto vago pero aun así audible diciendo
—Cuida a Kou por mí
—Siempre — le susurro el moreno al viento, por el espejo pudo ver el rostro de Rio la cual parecía complacida y conmovida por la respuesta del hombre con el que en pocos minutos su mejor amigo se casaría
En la ceremonia
Obviamente su boda no era en la iglesia, era en un salón ni muy grande ni muy pequeño, era el salón perfecto para que cupieran cómodamente las amistades y familia (familia de Yukina) perfectamente. Kou estaba sentado al lado del notario, ambos conversaban sobre las ventajas y las desventajas del matrimonio, cuando de repente todo el salón contuvo el aliento, el salón había tenido el mismo efecto cuando entro Kou, con su elegante traje negro y su corbata roja como casi toda la decoración; Kou se levantó y pudo ver su prometido, se quedó sin aliento, se veía tan apuesto, bueno Kou ya sabía que su pequeño y adorable Shouta era hermoso, aunque vestido de esa manera el castaño quería salir corriendo, tomarlo en brazos, llevárselo a su casa y hacerle el amor, iba a dar un paso hacia su prometido pero este como si hubiese leído sus pensamientos lo fulmino con la mirada. La ceremonia fue tranquila, exactamente como Shouta quería que fuese; cuando llego el momento de los votos la pareja no pudo evitar derramar una que otra lagrima. El primero en decir sus votos fue Kou.
—Aún recuerdo la primera vez que viniste a la librería, estaba seguro que eras un estudiante de secundaria que se había enamorado de mí por eso cuando me dijiste tu edad no lo podía creer… Sé que no soy perfecto, pero tú tampoco lo eres, todo lo que te falta a ti lo tengo yo, y todo lo que me falta lo tienes tú, por eso sé que nacimos para estar por siempre juntos; Shouta en estos tres años te has vuelto el centro de mi universo, mi adicción más grande y mi fuente de felicidad. Por eso estamos aquí, sé que aunque no estuviésemos casados tu seguirías estando a mi lado por el resto de mi vida, me caso contigo hoy porque quiero que el mundo sepa que eres mío y que si te llegan a poner un dedo encima los matare de la forma más dolorosa que exista. Shouta te amo eres mi todo. — el moreno como uno que otro entre los invitados habían empezado a derramar una que otra lagrima
—Kou siempre has sido mi príncipe, en mis 33 años solo he podido amar a una persona, esa eres tú; Tú me enseñaste lo que es el primer amor. Sabes al principio de nuestra relación pensé que era una broma ¿Cómo un joven tan apuesto como tu podía enamorarse de un viejo como yo?
— ¡No estas viejo! — refunfuño Kou, el moreno no tuvo que regañarlo porque los presentes fueron los que lo mandaron a guardar silencio
— ¡Ajam! … Kou tú has llenado mi vida de un sentimiento que jamás espere conocer, ya estaba resignado a que jamás me casaría, que llegaría a mi casa y nadie me estaría esperando — Shouta empezó a llorar — Tú has cambiado mi vida Kou, mi amor por ti es más grande que el universo, por eso y porque cuando sales a la calle un montón de zorras te caen encima, te tomo hoy como mi esposo, ya que quiero que salgas mañana muestres tu anillo de bodas y digas ¡MI ESPOSO me está esperando! — Muchos se rieron entre lágrimas de la emoción — Kou te amo
—Yo también te amo — ambos se olvidaron de las casi 100 personas que los estaban observando, se besaron con tal pasión que algunos empezaron a sentir calor
— ¡Ejem! — el notario les llamo la atención, la pareja se separó al tercer Ejem, y así pudieron continuar con la ceremonia. Se intercambiaron los anillos, se volvieron a besar y luego pasaron a firmar, los padrinos que había escogido la pareja fueron Ritsu y Takano, luego de que los padrinos y los novios firmaran los documentos de matrimonio el notario dijo al fin — Felicidades por su matrimonio señor y… Señor Yukina — Kou iba a volver a besar a Shouta, pero este se sintió un tanto mareado al escuchar al notario pronunciar las últimas palabras de la ceremonia de bodas… Señor Yukina, esa frase resonó una y otra vez dentro de Shouta y justamente cuan estaba a punto de besar a su esposo, el moreno se desmayó cayendo en sus brazos.
…
Abrió los ojos pesadamente, vio a su alrededor, todos estaban asustados, Shouta busco el rostro de su esposo cuando lo encontró se sorprendió, era la primera vez que lo había visto tan pálido, intento levantarse pero la multitud grito un gran ¡No! , los recuerdos de lo que había pasado hace unos minutos hizo que sus mejillas adquirieran un color rojizo, esto asusto a Kou, el cual rápidamente empezó a tocar el cuerpo de su esposo.
— ¡¿Tienes fiebre?! ¡¿Quieres que llame una ambulancia?! — exploto el castaño mientras registraba el cuerpo de su esposo en busca de un indicio de fiebre; Kou aparto su mano y se levantó, negando con la cabeza
—Es normal — dijo con la cabeza a gachas el moreno
— ¡¿Es normal que te desmayes en plena boda?! — Shouta asintió mientras empezaba a llorar otra vez
—Vas a ser papa… — dijo casi inaudible
— ¿Qué? — no era un que de sorpresa, era un ¿Qué dijiste no oí nada?
— ¡Kou estoy esperando un hijo tuyo! — grito Shouta, parecía que esas simples palabras habían matado a todo el mundo, puesto de que hasta se podía escuchar un alfiler caer
— ¿Estas bromeando? — Shouta negó vio el rostro de Kou totalmente serio, parecía estar muerto, los ojos de su esposo lo revisaban de arriba abajo; Shouta se iba a levantar para salir corriendo pero el abrazo del castaño lo tomo desprevenido — Shouta, te amo — Kou beso el cuello de su esposo para luego susurrarle — gracias — las lágrimas empezaron a derramarse en el rostro principesco de Kou, se levantó y grito a todo pulmón — ¡Voy a ser padre! ¡Shouta, mi amado esposo está esperando un hijo mío! — dicho esto los invitados felicitaron a la pareja de recién casados y futuros padres
Después de la boda y ya en casa de los Yukina
— ¡Kou! — Se quejó el moreno — ¡Eh! ¡Kou! — le paso una mano al frente de su rostro, pero aun así su esposo no reaccionaba, se había quedado embelesado viendo el primer eco del bebe, a los cinco minutos de estar observando fijamente el eco por fin hablo
—Es perfecto — exclamo Yukina en un susurro — ¡Shouta nuestro hijo es idéntico a ti!
— ¡Ah! ¿Cómo sabes eso? ¡En la ecografía solo se ve un pequeño bultito!
— ¡Lo sé por qué soy su padre! Y digo que será idéntico a ti
—Pues yo soy…. — se sonrojo y debió su mirada de los brillantes ojos de Kou —… ¡Yo soy su madre! Así que digo que será idéntico a ti — el castaño negó con una sonrisa antes de derribar a su esposo, le quito la camisa y le bajo un poco los pantalones, beso los labios de Shouta y bajo hasta su entre pierna, poso la cabeza en lo que debería ser el vientre de su esposo y empezó a hablarle al bebe
—Hola bebe… Es papá — Shouta se sorprendió por tal acto puesto que pensaba que sería violado por su esposo — Sabes, eres el pequeño milagro de tu mamá y mío, estoy muy feliz que estés creciendo dentro de mi amado Shouta
—No soy su madre — refunfuño el pelinegro
—Ok… Eres un milagro para tus dos papas… Ya quiero poder tenerte en mis brazos
—Para eso falta mucho — Kou suspiro y abrazo la cintura de su esposo
—Hasta entonces tendré que confórmame en tenerte entre mis brazos — diciendo esto se lanzó hacia los labios de su esposo para derretirlo con sus besos y hacerle cositas malas toda la noche.