Oh, ahí está "Como te odio, como puedes seguir buscándolo ¡Deja de mirarlo! ¿Que pensara si se da cuenta que lo estas mirando? Podría pensar que eres desagradable por seguir fijándote en él cuando el ya te dejo claro que no tiene interés en ti" Pero si lo ignoro podría pensar que lo estoy ignorando forzosamente porque aun no supero su rechazo, no quiero que piense que me gustaba TANTO, me gusta - gustaba - pero no estoy enamorado de él así que no tengo porque deprimirme. "Pero si lo ignoras totalmente pensara que solo mentías y que en realidad no estabas tan interesado en él como decías y se decepcionara de ti. No vale la pena.
¿Entonces que debería hacer?
Quisiera poder entenderse a sí mismo, quisiera poder ser una persona completa en vez de fragmentos de personalidades retorcidas que se encerraron en el mismo cuerpo, haciéndolo inestable. Tan odioso. Una pequeña decisión, que para cualquiera es tan fácil, para él, es un enigma que no puede resolver en menos de una semana - si es que lo resolvía -.
No sé qué hacer, me rindo ¿Quien podría ayudarme si nadie sabe sobre esto? Ah, porque no puede ser más abierto con sus "amigos" ellos no son mis amigos, ellos lo creen y no quiero lastimarlos pero falta mucho para que pueda considerarlos como tal, tal vez si mis estándares no fueran tan altos no tendría estas dificultades "Pero si confías demasiado en ellos como para que sean tus amigos, cuando te rechacen y te lastimen dolerá" No quiero que duela, pero me siento solo "Siempre estás solo".
- Minho - Si, Minho, ah, el era tan llamativo, pero tan tranquilo. A muchas personas en la escuela les gustaba Minho, aunque en realidad nunca hubiesen hablado con él, contradictoriamente, Minho tenía muchos amigos en la escuela, más que cualquier otra persona, pero al mismo tiempo no era alguien popular "Quizá porque las personas con las que habla no son personas populares" Pero habla conmigo "Pero tu si eres popular" No tiene sentido "No, en realidad no, ni siquiera entiendo cómo eres popular si eres tan introvertido y repudias a todos" Ellos piensan que bromeo cuando les digo que no me agradan "Mejor así" Eso creo pero, es molesto. "Ah sí, lo es" Minho es una persona tan agradable y amable con todos, especialmente conmigo, porque él cree que soy adorable y siempre se divierte cuando está conmigo ah, pero el se ríe de cosas que digo que a mí no me parecen graciosas, todos lo hacen, pero cuando yo creo que algo es divertido nadie se ríe, porque será así...
A Minho solía gustarle Ji Yong, lo conoció antes de que el siquiera supiese de su existencia, pero le rechazo claramente, a Minho aun le gustaba Ji Yong, lo cual le alegraba - aunque cualquiera pensase que el que a tu amigo le guste la misma persona que a ti es problemático - para él era todo un alivio y un placer. Poder hablar de la persona que le gustaba con alguien que también lo hacía, era algo mutuo y se entendían el uno al otro, a diferencia de sí mismo, Minho salía con otras personas a pesar de que en el fondo, aun procuraba no hacer nada desagradable frente a Ji Yong que causara - aun más - que le rechazase. Minho era una buena persona, ciertamente mejor que él, sin embargo no le entendía, como salía con tantas personas a la vez y luego decía otras cosas, había veces en las que simplemente no podía confiar en él, creyendo que le mentía. Pero quien era él para acusar a otros de mentirosos cuando probablemente no hubiese alguien más falso que el.
- ¿Que pasa? - siempre le miraba con tal cariño y adoración que le hacía sentir culpable por no poder corresponder la preocupación y cuidado con la que el otro le trataba "simplemente no lo quiero" no puedes forzar a alguien a sentirse de cierta forma solo porque tu lo haces, así es el amor y ciertamente así es la amistad.
- No sé qué hacer sobre Ji Yong, ¿Que crees que debería hacer? - Ah, era tan desagradable para el exteriorizar sus sentimientos ante otros pero no veía otra forma, si no podía encontrar una solución por sí mismo, tal vez el otro, quien fácilmente había tenido más relaciones que el mismo podría guiarle.
- ¿Respecto a qué? -
- No lo sé - Honestamente no lo sabía, cualquier cosa que Minho dijera seria una pista para él, así de bajos eran sus conocimientos amorosos. "Ah, amor ¿Seguro?" No en realidad no, solo me gusta no es para tanto.
- ¿Todavía te gusta? -
- Creo que si -
- Aigo, aigo, te entiendo, aun después de que me rechazo aun llamaba mi atención cada vez que le veía, pero me sentía tan incomodo de hablarle, como si cualquier cosa que le dijese estaría mal - como si pensara que eres imbécil, si, es verdad, por eso hablaba con Minho.
- ¡Exacto! No quiero verle, pero tampoco quiero ignorarle aunque desde el principio cada vez que me miraba me volteaba a otro lado y fingía no oírle - Habían momentos en los que se preguntaba si esa seria parte de la razón de su rechazo, pero luego volvía a convencerse de que simplemente no le gustaba al otro "Como culparlo".
- Pues no se que quieras hacer -
- No quiero salir con el -
- ¿Entonces? -
- No lo sé -
- ¿Entonces para que te lo complicas? No pienses en el - eso quisiera, si no fuese tan obsesivo, ugh, que asco.
"Si esto fuese un manga..." Cada vez que pensaba así era cuando todo se complicaba, porque siempre se comparaba a sí mismo y a su situación con un estúpido manga "Debo dejar de leer mangas" Pero es tan difícil... En los mangas shoujo la protagonista no se daba por vencida aunque el chico que amaba le rechazase, simplemente, con una sonrisa y ojos llorosos le prometía esforzarse y hacer que la amara, y entonces, el chico le miraba con ternura, aun con un corazón cerrado, esperando un futuro donde la chica ante el cumpliera sus palabras, y a lo largo, antes de que se diera cuenta le amaba tanto que el simple pensamiento de ella lejos de él le rompía por dentro. En otras ocasiones, aparecía otro personaje interesado en la protagonista que hacía que el héroe se celara aunque no quisiese aceptarlo, y entre peleas y discusiones mentales terminaba aceptando sus sentimientos y esforzándose para que la chica le diese otra oportunidad y reconquistarla, aunque esto no fuera necesario porque ella nunca había dejado de amarlo. E incluso, en muy pocas ocasiones, ella simplemente exclama rendirse, y el, al sentirse olvidado y abandonado, en su soledad reparaba en el espacio dentro suyo que quedaba vacio sin su presencia, era entonces cuando irremediablemente se daba cuenta que siempre la amo.
Si, esa era la rutina cuando la chica era rechazada - en su caso era un chico... - debería el proseguir con alguna de estas opciones, o reaccionar como debería hacerlo cualquiera y esperar que las cosas pasen por si solas.
Debería rendirme "Si te rindes, el pensara que no te gustaba tanto, incluso si te considerara vería que no hay realmente sentimientos de tu parte y lo dejara pasar... “Pero si no me rindo el podría pensar que soy desagradable por no rendirme y podría odiarme, probablemente lo molestaría mas...
Que debería hacer...
Ahí estaba de nuevo, sentado en una mesa lejos de él, enajenado, como si no hubiese vida a su alrededor, escribiendo cosas fuera de su imaginación en una libreta maltratada. Era tan descuidado en esas cosas y al mismo tiempo tan ordenado y obsesivo "Aunque sea más obsesivo por mirarle lo suficiente para deducir su conducta" que detestable... Quisiera saber que escribe. Nuevamente, Ji le miro fugazmente cuando creía que no se daba cuenta - pero siempre se daba cuenta, solo fingía que no - ¡Porque me miras! ¿Que es lo que buscas en mi? Si no te gusto, no me mires ¡Es irritante, solo me confundes! Si no tienes interés en mí, no me mires, no...
Es un cretino, no sé que piense de mi, el decía que soy genial... y que era... "sexy" - esa palabra le desagrada totalmente, odiaba cuando otros se referían así hacia su persona, como si solo sirviese para eso... - dejando eso de lado - el comportamiento de Ji era lo que más le confundía, la forma en que le sorprendía mirándole a escondidas, como siempre escuchaba sus conversaciones con otros e incluso le respondía aunque el encontrase algo desagradable que escuchara lo que le decía a otros y tuviera el descaro de responder, pero Ji estaba pendiente de él y eso le hizo creer que tal vez, solo tal vez, le interesaba, aunque fuera un poco, y Minho - ligeramente celoso - también lo creía.
Sin embargo le rechazo ¿Porque lo rechazo? Aunque le apenara admitirlo, no lo sabía bien, cuando lo rechazo no le puso mucha atención a lo que le dijo.
Quería hablar con él, honestamente. Quería hablarle normalmente y ser amigos aunque fuese solo eso y al mismo tiempo no quería volver a verlo.
Por ahí venia Daesung, sonriente, como siempre.
- ¡Seung! - saludo animadamente.
- Hola Dae, ya nos vimos muchas veces hoy ¿Porque siempre me dices hola cada vez que nos encontramos? Con una es suficiente, de verdad... -
- ¡Ay ya! Perdone su majestad -
- No, no te perdono, estoy harto de ti y tus porquerías -
- Aigo porque siempre tienes que ser tan rudo -
- No soy rudo, tú eres muy sensible -
- No soy sensible, tú eres muy rudo, por eso no tienes pareja -
- Tú tampoco tienes -
Daesung sonrió inconforme sin saber que decir.
- Porque no quiero tener pareja por ahora -
- Pues yo tampoco -
- Hmp...-
Como siempre, Daesung no encontraba como ganar una discusión contra él, todos los días con Daesung eran iguales, pero aunque fuese rutinario lo encontraba ligeramente agradable, si hubiese una persona a la que escogiera en toda la escuela para referirse como amigo, sería el, tan amable y protector.
Aunque así fuese, esa era también la parte que más le desagradaba de él, su amabilidad, no era algo personal, simplemente no soportaba a la gente amable, sobre todo aquellos que eran amables indiscriminadamente, sin importar quien fuese, ese tipo de actitudes - para él, al menos - eran algo que solo se le debía mostrar a personas cercanas porque si no era así, perdían su valor, si alguien es amable contigo al igual que lo es con otros, no tiene nada de especial, son actos vacios, despreciable en su opinión. La gente amable era tan aburrida y desagradable para él, pero Daesung era algo distinto, porque aunque era amable con todos, era especialmente amable con él, y con eso le bastaba por ahora. Aunque siendo un ser caprichoso tal y como lo es él, el que fuese amable con otros le causaba algo similar a los celos y no podía evitar reprochárselo lo cual los sumergía en bizarras discusiones similares a las de las parejas causando gracia y confusión a otros, pero el ya había aclarado - varias veces - que no eran más que amigos - si es que lo eran siquiera - estas palabras lastimaban a Dae, ya que él le consideraba su mejor amigo, pero por mas que se esforzara no podía verlo como su amigo, y lo lamentaba - tal vez -.
Ellos solo eran amigos, aunque su relación fuese bizarra y absurda hasta para Minho, agradecía haber conocido a Daesung ya que le había ayudado mucho durante su estadía en la escuela desde que se conocieron, nunca antes alguien había sido tan amable con él, lo cual le incomodaba, no sabía cómo reaccionar, mucho menos como corresponderle.
- Tengo hambre - lloriquee, sobándome el estomago con desesperación a lo que Daesung saco su billetera para contar su dinero.
- Vamos a la cafetería - Antes de ir a la cafetería Daesung siempre revisaba que tuviera suficiente dinero para comprar lo que quería, era muy glotón y luego se quejaba porque comía mucho "Y luego reclama como si fuera tu culpa por no haberlo detenido" que irritante, uno que no tiene dinero para andar comprando cada vez que tiene hambre "Siempre te compra todo lo que quieras aunque no lo pidas" Pero me hace sentir que abuso de el...
- ¿Que quieres? - me pregunto una vez que llegamos a la cafetería, a decir verdad no me gusta demasiado la comida chatarra "Excepto el helado" pero eso no es para el almuerzo, si no almuerzo bien tendré otro desorden alimenticio "Ah, pero de verdad me gusta el helado" ¡No! Debo resistir, mire alrededor considerando las opciones que no eran muchas y llegue a la misma conclusión de siempre.
- Un licuado de fresa y un pastelillo es suficiente -
- ¿Seguro? ¿No quieres algo salado? -
- Bueno si... -
- Compraremos algo salado más tarde, ahora no - No se para que me pregunta si siempre decide lo que quiere, me dan ganas de golpearlo pero si el paga no me puedo quejar... claro que si puedo.
- ¿Para que me preguntas si luego haces lo que quieres? Siempre es lo mismo contigo -
- Ay ya, te pregunto para comprar algo después, no te pongas así, te pones niña tan fácil -
- Tú te pones niña más veces que yo -
- P-Pues sí, pero una de las tuyas vale como 3 de las mías -
- Ya quisieras niña -
En ese momento Ji Yong entro en la cafetería sin que me diera cuenta mirándonos desde atrás nuestro. En cuanto lo note fingí que no lo veía, pero como siempre, Daesung, incapaz de leer mis pensamientos, le vio e inmediatamente le llamo para hablar cualquiera que fuese el tema con él. En todo momento mire hacia otro lado evitando cualquier contacto visual con él, de verdad no estoy listo para verle, mucho menos hablarle. Pero algo de lo que dijo Daesung me causo gracia y no puedo evitar burlarme de él, es un instinto.
- Si claro - me burle.
- Cállate tu no digas nada - podía sentir la mirada de Ji Yong en mi pero seguí ignorándole.
- Yo digo lo que quiera. Digo muchas palabras. PALABRAS QUE FORMAN ORACIONES -
- Ugh como te odio -
- Yo también te quiero - le sonreí burlón sabiendo que es el gesto que más le molesta, pero aunque me miraba molesto sabia que le causaba gracia discutir conmigo aunque le desesperara. Escuche a Ji Yong reír, alegando lo gracioso que soy. Es tan molesto, si soy tan gracioso ¿Porque no te gusto? Sé que es un reproche infantil y una forma de pensar muy absurda pero me cago en el, lo odio tanto ughhh su sonrisa es tan linda que quiero darle un puñetazo en la cara para que se le quite lo imbécil, ya quisiera el encontrar a alguien como yo, soy el único como él, el único que lo entiende y la persona con mas estilo en esta escuela, además ¡Soy encantador! Ah, te odio tanto, espero que en la calle un niño te diga señor y te cause una crisis de edad, empieces a desvivirte tratando de recobrar tu juventud y caigas en la bebida y los vicios hasta que termines en una casa vacía tirado sobre un colchón sucio tratando de sacar un poco de whisky barato de una botella rota. Solo espera y veras...
- Seung ¿Te pasa algo? - cuando reaccione, Daesung tenía nuestra comida y Ji Yong ya no estaba.
- Eh, no nada -
- Nunca me quieres decir nada -
- Ugh, pareces mi esposa, ya no te pongas tan niña, quejica - el licuado de fresa es tan dulce y refrescante que es como si tranquilizara toda mi mente, era tan placentero que cada vez que tomaba uno, lo bebía lentamente para que me durase.
- ¿Me das? - ya sabia...
- Miras muy raro a Ji Yong - hace tiempo, Daesung sospechaba que me gustaba Ji Yong, pero lo olvido rápidamente, jamás le dije que sus sospechas eran ciertas porque en esos momentos ni siquiera yo entendía bien lo que sentía realmente sobre ese chico tan raro que hace que Daesung tenga dolores de cabeza cada vez que trata de entenderlo. A pesar de que Daesung y Ji Yong se conocían antes de que yo los conociera, Daesung perdió interés en Ji e incluso muchas veces habla con molestia de él, aunque todos sabemos que en realidad le cae bien, solo que, Daesung al estar tan acostumbrado a ser tan sensible y expresivo sobre sus sentimientos se ofendió porque Ji nunca le contaba sus problemas - según me conto Dae - y "comenzó a caerle mal". Pero aun así, si algo le pasaba a Ji Yong, Daesung lo comentaba, lo cual me dejaba claro - y me causaba cierta gracia - que aun le interesaba y se preocupaba por él. Era la parte molesta y adorable de Daesung, sin embargo fue por esto mismo que no le comente nada, una parte de mi me dice que se molestaría si me gustase alguien como él.
Por la ventana le vi, lucia perfecto como es lo usual en el, aun con el uniforme se veía mejor que cualquier persona en sus mejores ropas, cada vez que lo veía, quería hablarle, pero no sabía de qué; ese era lo peor del caso. A pesar de que todas las personas a mi alrededor son mundos apartes de mi, siempre hay algo de que hablar, y teniéndolo a él, tan parecido a mí, las palabras no llegaban a mi cabeza. Me asustaba, y le temía más, al efecto que tenia sobre mí. ¿Cuanto me gustas en realidad? No lo entiendo. No entiendo que es gustar. No sé que debes sentir, ni pensar, cuando hay alguien así ante ti ¿Que debería hacer?
Si nuestras miradas se encuentran, no puedo pensar.
Te odio.