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Rescatame por alexriden02

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Notas del capitulo:

Holaaa (n_n)

¿Me extrañaron? ;-) Aqui les dejo otro pequeño regalito, se que es pequeño pero espero que sea de vuestro agrado.

Bueno… no aclaro nada ni adelanto mucho, solo espero que disfruteis del capitulo.

Tal vez tarde más, mi notebook sigue en reparación, no saben cómo la extraño. Tendré que ser paciente hasta que vuelva. Además por las fiestas mi tiempo es acotado,  mucho que organizar, regalos que comprar, las visitas que vienen y no se van (n_n),  en fin se acerca navidad. Ademas mi hermanita - si, tengo una hermanita mas pequeña - me pidio escribir un cuento de vampiros para obsequirselo en navidad, igual creo que se lo comprare no son mi fuerte las historias de vampiros.

Saludos a todas vosotras!!!!

 

 

 

Cuando sintió las manos de Jaejoong rozar su nuca, una corriente eléctrica viajo hasta su pecho. Una sensación tan placentera como el beso, pero al mismo tiempo desconcertante. Aturdido entre lo que sentía y los pensamientos que invadían su mente, su cuerpo reacciono empujando al más joven. Casi lanzándolo a caer contra el suelo arenoso, pero Jaejoong se mantuvo de pie. Él tampoco creía lo que había hecho, giró sus ojos hasta agachar la mirada, estaba realmente avergonzado. Su cuerpo al igual que su mente se negaba a creer que aquel beso era real. Tímidamente retrocedió algunos pasos lejos de Yunho.

 

-  ¿Te lastime? – preguntó Yunho algo preocupado al notar la actitud que había tomado el más joven hacia su accionar, la de empujarlo. Descreía lo que había hecho, besar a Jaejoong. Besarlo con tanta pasión y entrega como hace años  no lo hacía. Lejos de disipar sus dudas, su mente al igual que su corazón estaba más  confundido, su cerebro parecía estar sumergido en una espesa nube de dudas.

-  Es… es tarde. Esta  oscureciendo  – dice Jaejoong con la voz entrecortada – Estoy cansado, tengo sueño – alza los ojos al cielo que ya estaba plenamente  oscuro, un cielo nocturno iluminado por escasas estrellas. Casi atontado se aleja de Yunho. Camina tímido hasta llegar a la mansión. Lugar donde busca refugiarse, pero no había  lugar a donde correr o huir, aquel imponente hombre siempre lo alcanzaría y lo atraparía en sus redes.

 

Yunho se toma la cabeza, despeina su pelo y hace rabietas <<- ¿Qué demonios hice? ¿Por qué lo bese? ¿Por qué lo empuje? ¿Qué demonios me sucede?>>

 

 

Cuando él decide  regresar a la mansión ve que Jaejoong estaba cenando en la mesa del comedor. Con toda la calma que podía el más joven le ofrece que lo acompañe a cenar.  Jaejoong actuaba de forma normal, para Yunho  era evidente que aquel beso no había significado nada en el más joven. Algo fastidiado al ser el único perturbado, rechazó la oferta alegando estar cansado.

 

 

-  ¿Do… donde dormiré? – preguntó Jaejoong sin un ápice de vergüenza en su rostro, pero por dentro estaba temblando, aquel beso lo había perturbado <<- ¿Por qué me besaste?>> esas palabras eran su única pregunta para Yunho, palabras que no parecían salir de sus labios. Palabras aprisionadas en el interior de su boca.

 

Que más deseaba responder Yunho: << A mi lado, junto a mí>>, pero solo alcanzo a decir – Dormirás en  la habitación principal – pauso antes de continuar – Yo dormiré en mi vieja habitación – aclaró sin que Jaejoong se lo pidiese, pero sentía que debía hacerlo. Después se marchó en silencio hacia su vieja habitación.

 

 

 

Recostado sobre la lujosa cama, Jaejoong observa el techo, después la ventana ansiando que pronto llegase el amanecer. La habitación era muy amplia y lujosa para su gusto, tan diferente de su pequeña habitación en la casa de sus padres. No solo el espacio era diferente, en ese enorme lugar Jaejoong se sentía muy solitario. Era como si estuviera solo, aún sabiendo que Yunho estaba en otra habitación. Abrió, cerró, abrió y cerró sus parpados varias veces hasta que se quedo dormido.

 

 

Yunho giraba de un lado a otro por su vieja cama, estaba nuevamente  dentro de su vieja habitación. Rodo en diferentes posiciones para encontrar la posición correcta para dormir, pero no podía. Su vieja cama parecía haberse encogido, pero no era así   él había crecido. Su mente no pudo evitar recordar el beso con Jaejoong. Los labios del más joven le gustaron, más que los de cualquier mujer, le eran exquisitos hasta dulces. Sin siquiera desearlo bajo la parte inferior de su ombligo su miembro se llenaba de sangre de solo recordar la fragancia y sabor de Jaejoong.

 

 

-   ¡Basta! – se dijo a sí mismo  intentando pensar en otra cosa. No podía creer que aquel beso con Jaejoong le provocara una erección.

 

 

 

Jaejoong sintió una brisa helada que lo obligo a despertarse. Un frio invernal recorría su espalda. Tímidamente abrió sus parpados, pestañeo varias veces. Observo  la ventana, estaba abierta << ¿Quién la abrió?>> se preguntó a si mismo intentando recordar que  había cerrado la ventana con seguro antes de dormir.

 

 

La habitación estaba ligeramente iluminada por el brillo nocturno de las estrellas, aún así estaba a oscuras y en silencio. Él estaba considerando volver a recostarse cuando escucho más de cerca una especie de susurro. El aliento helado espectral logro parar su corazón que después empezó a latir con una pulsión tan acelerada que no pudo contar sus latidos.

 

-  ¿Hay alguien? – preguntó entrecortando la voz. Observó los alrededores y la habitación parecía desierta. Tembloroso se levanta para cerrar la ventana, su respiración se alzaba. Dicha respiración seso cuando desde el cristal de la ventana se recostaba una silueta. <<Un fantasma>> pensó.

 

El perfil de espectro era el de una mujer. Lo adivinó por la delgadez de los hombros, por la fragilidad del cuello que debía ser fino y oscuro como la noche, y que se recostaba contra el vidrio con una precisión absoluta, estriada, renacentista.

 

Jaejoong sintió recorrer una briza helada que comprimía su estomago. Su corazón se había desbocado, y no precisaba contemplarse en el espejo que colgaba  justo detrás de él, para comprobar que sus ojos estaban dilatados, entreabierta su boca y la tez de su rostro tiritarte. Se había quedado quieto delante del fantasma. Nunca se preguntó la razón, pero desde el primer momento tuvo el convencimiento de que el espectro no iba a hacerle daño. Aún así cuando aquella figura, un tanto borrosa, intento acercársele, él hecho un poderoso grito. El espectro hasta parecía sonreír.

 

 

Presuroso por los gritos, Yunho irrumpió en la habitación donde descansaba Jaejoong. Encendió las lámparas. Jaejoong estaba parado frente a la ventana, cubriéndose el rostro con ambas manos.

 

-  ¡¿Qué sucedió?! – pregunto acercándose hacia el más joven.

 

Él al escuchar la voz de Yunho respiró aliviado. Volteo en cámara lenta y sin pensarlo se lanzó a los brazos de Yunho. Necesitaba sentirse protegido. Yunho asombrado por el accionar del más joven, solo pudo corresponder al abrazo.

 

-  Lo… lo siento – se disculpa aun siendo sostenido por los fuertes brazos de Yunho.

-  ¿Por qué gritaste? – dice  soltando a Jaejoong. Él realmente estaba preocupado, el grito de aquel joven sonaba  desgarrador en sus oídos. Su corazón temía que algo malo le hubiese sucedido.

 

Algo tembloroso Jaejoong le dice haber visto un fantasma, relatando su encuentro con el espectro.

 

-  Pero… la ventana está cerrada – dice Yunho comprobando que la ventana estaba cerrada con seguro.

 

Jaejoong no podía estar equivocado, aquella ventana estaba abierta junto al espectro.

 

-  Seguro fue una pesadilla – intentó calmar a Jaejoong ya que lucía asustado – o  una escusa para que  viniese a verte – comenta recibiendo la fulminante mirada de Jaejoong – Vale, es broma. Vuelve a descansar – dice descreyendo la existencia de fantasmas,  le parecía ridícula la sola idea de un espectro del más allá en la mansión.

 

Antes de que Yunho girase para abandonar la habitación, Jaejoong lo coge del brazo fuertemente. Yunho voltea y fija su mirada en las manos de Jaejoong que lo estaban deteniendo. Lo frenaban sin la posibilidad de dar un paso.

 

El más joven agacha la mirada, humedece sus labios, ni él mismo sabía que estaba haciendo << ¿Por qué lo estoy deteniendo?>>

 

 

Yunho endulza su mirada hacia el más joven, que parecía no dejarlo avanzar ni un paso fuera de la habitación.

 

-  Me quedare hasta que te duermas – dice tranquilamente ya que esas mismas palabras las usaba cuando Junsu tenía pesadillas. Yunho tenía un espíritu protector cuando veía la fragilidad de las personas y más de las personas que realmente le interesaban.

 

Jaejoong asintió  y volteo para recostarse en la lujosa cama. Su cuerpo aún temblaba. Yunho observó atento  el cuerpo tiritante de Jaejoong bajo las sabanas, cuerpo que  desde el inicio le dio la espalda. Tardo unos segundos, pero decidió hacerlo, algo que desde su pecho le clamaba realizar desde que tuvo al más joven en sus brazos.

 

El más joven intentó conciliar el sueño, pero no pudo. Sintió como unos brazos le rodearon por la cintura, abrazándole el estómago. Sin sentir molestia el más joven permitió el abrazo. Sobre su nuca sentía la cálida respiración de Yunho, la fragancia embriagante de aquel hombre, tan masculino. Jaejoong se inclinó hacia adelante, pero Yunho se apoyó con más insistencia sobre la espalda del más joven, sus labios rozaron la columna de Jaejoong.

 

-  ¿Te sientes mejor? – preguntó con un tono dulce en su voz susurrando por la nuca del más joven.

-  Nnhh… mh… si  – la garganta se le seco. No quería moverse y parecía que Yunho sentía lo mismo.

-  ¿En qué estás pensando? – preguntó Yunho como un susurro estrechando más a Jaejoong contra su cuerpo.

-  ¿Eh? … En nada – dice Jaejoong con un hilillo de voz. Le da la sensación de tener el corazón en las inmediaciones de su tímpano.

-  Piensa en mí – irrumpe con frialdad mientras él posa  las manos bajo la camiseta de Jaejoong, sobre el estómago, sobre el vientre iniciando a darle masajes, suaves caricias – Tu piel es como la seda – su voz era suave pero profunda… embriagadora para Jaejoong.

 

Los muslos de Jaejoong se relajaban. Parecía no controlar su propio cuerpo. Echo atrás la cabeza y la apoyo en el hueco del cuello de Yunho <<Basta. Ponte tenso. Combate esta atracción>> Lo intentó, pero su cuerpo se negaba a obedecer a su mente. El roce de aquellas manos era demasiado bueno como para despreciarlas.

 

-  Me pregunto si aún eres virgen.

 

Vale. Ahí Jaejoong se puso tenso. Ya estaba allí, aquella voz cautivadora y destructiva.

 

-  ¿Lo has hecho con alguien?

 

Era una pregunta muy directa y personal. Y él no estaba dispuesto a responder.

 

-  No intentes mentirme – él movió las caderas y le rozo la curva de la espalda con el miembro ¿Había sido un error?

 

Un temblor recorrió el cuerpo de Jaejoong, quien trago saliva sin saber cómo responder. Las caricias sobre su vientre, su pecho y el repentino acercamiento de Yunho, no pudo más que morder sus labios. En parte quería  responder y en parte quería apartarlo de un empujón antes de que olvidara porque tenía que resistirse. Yunho representaba de alguna forma todo lo que él odiaba desde que se conocieron, pero también representaba un clamor en su pecho, un fuego naciente en su piel y que solo aquel hombre podía calmar.

 

Yunho giro a Jaejoong para enfrentase  a él.

 

-  ¿Aún eres virgen? – él levanto las manos de Jaejoong para aprisionarlos contra el respaldo de la almohada.

-  ¿Por qué te importa? – apretó los labios sintiendo como Yunho se montaba sobre su cuerpo.

-  ¿Te acostaste con muchas mujeres? – se movió y su miembro volvió a rozar a Jaejoong - ¿O te acostaste con hombres?

 

De la impresión por la pregunta Jaejoong contuvo  el aliento sintiendo como su rostro pasa de un pálido blanco a un rojo escarlata.

 

-  ¡Por supuesto que soy…! – pauso – ¡Nunca me he acostado con nadie! – usa su fuerza y empuja a Yunho fuera de su cuerpo. Estaba molesto, como si la pregunta le ofendiese. Aún así su corazón parecía desbocarse y algo muy erguido  le presionaba contra sus pantalones de algodón. Los cuales se puso para dormir – Acaso no me escuchaste hoy. Creo que fui muy claro con lo que dije.

 

Yunho deseaba  creer en la virginidad de Jaejoong, pero al ver las imágenes de Jaejoong con su hermano en aquel motel lo hacía dudar. Aún así debía aceptar que  el rostro de Jaejoong lucia inocente y vergonzoso, sin lujuria, tal y cual como se vería una virgen que desconocía los placeres del sexo.

 

 

-  No todos nos acostamos con mujeres cada noche – dice haciendo una mueca mientras frunce el entrecejo en un tono de voz exigente –  no todos somos como tú ¿acaso olvidaste lo que hiciste con aquella mujer en el baño?  

 

Yunho esbozo una sonrisa al escuchar los reproches de Jaejoong. Se sentó junto a él.

 

-  ¿Estás celoso? – preguntó con cierto brillo en su mirada.

-  Ce….ce… ¡Celoso! ¡¿De quién?! ¡¿De ti?! – lanza una carcajada, como si hubiese escuchado un chiste.

 

Yunho sonrió de costado ante la reacción tan tierna de Jaejoong por negar algo que parecía tan obvio.

 

-  Esa mujer del baño no significa nada – dice astuto intentando explicarse.

-  No parecía no ser nada – rezongo cruzándose de brazos y volteando su rostro, lejos del alcance de Yunho.

-  Era la esposa de primer ministro – dice sin preocupación alguna.

-  ¡Así  tan despreocupado lo dices! –  regaña cruzándose de brazos  - ¡¿Te parece bien acostarte con una mujer casada?! ¡Para colmo la esposa del primer ministro!

 

 

Yunho tendió una mano despacio, como en trance – Esa mujer no significa nada a comparación de ti – le rozo con la yema del dedo la barbilla subiendo hasta los labios. Con el borde de un dedo toca el labio inferior de Jaejoong. Después pegó sus labios contra los del más bajo, recorriendo nuevamente todo el interior de aquella boca. Saboreando cada rincón, chocando sus lenguas, tragándose una y otra vez la respiración del otro.

 

-   Él único que me interesa hoy… – dice mientras besa a Jaejoong – Eres tú, solo tú y nadie más.

 

Jaejoong no se apartó. De hecho, se acercó más. Ansiaba algo más. No podía parar, se le puso la carne de gallina y ya no pensó para nada en resistirse.  Ambos cuerpos masculinos cayeron sobre la cama. Yunho se posicionó encima de Jaejoong, ambos aún continuaban con el beso. Beso que cada vez empezaba a hacerse más intenso y lujurioso.

 

Las pálidas manos de Yunho se sumergen dentro de la camiseta de Jaejoong, acariciando el vientre, sintiendo tan suave al tacto  la piel de más joven. Sin romper el beso, aún a riesgo de perder el aire Yunho desciende sus manos hasta posicionarse en la parte baja del ombligo de Jaejoong.  Maldiciendo que Jaejoong llevase puesto los pantalones, aún así solo quería tocar esa parte que había empezado a desear desde el principio del beso. Pero iría lento, primero roces encima de la tela, caricias suaves ascendentes y descendentes.

 

Al sentir el rose de las manos del más alto sobre su miembro, la mente de Jaejoong se pone en blanco y solo puede emitir un leve gemido arqueando su espalda. Yunho al sentir como Jaejoong se mueve intensifica las caricias en la parte baja del más joven, sintiendo como su miembro empezaba a levantarse al solo escuchar los gemidos del más bajo.

 

Pero Yunho era impredecible, rompió el beso observo como el más joven huía de su mirada. Sin más que decir se levantó, beso la frente de Jaejoong y se despidió dándole las buenas noches.

 

<< ¿Eso fue todo?>> parpadeo sorprendido. Extrañamente su cuerpo ardía. Algo molesto pensó << Solo está jugando conmigo, si… solo está jugando>>  Jaejoong se tumbó en la cama intentando tranquilizarse y conciliar el sueño.

 

 

Yunho presuroso se metió bajo la ducha. Abrió la canilla de agua fría, necesitaba calmar  el calor de su cuerpo. Metió la cabeza para que se mojara, el agua helaba, pero no calmaba el ardor de su cuerpo, en especial no calmaba las llamas  bajo su entre pierna. Golpeo los azulejos del cuarto de baño con la fuerza de sus viriles puños, así descargar tensión pero fue inútil.

 

-  ¡¿Cómo pude excitarme con él?! – mira molesto debajo de su ombligo  a su tamaño problema. Después paso sus dedos por el largo de su eje endurecido al pensar en el cuerpo de Jaejoong. Recordar a Jaejoong provocaba que el erecto miembro de Yunho, se pusiera más erguido y no bajase ni con agua helada. Él intento calmarse y pensar en otra cosa, pero nada parecía funcionar.

Las personas que lo conocían estarían absolutamente sorprendidas por el desempeño que Yunho realizaba para calmar su miembro erecto. Nunca necesito tocarse a sí mismo para satisfacerse o calmar sus deseos, pero no tenía más opción. Realmente no deseaba dañar a Jaejoong con su lujuria animal, debía controlarse, pues en lo más profundo de su ser creía que Jaejoong  aún era virgen. No quería dañarlo o tener un rechazo ahora que Jaejoong parecía aceptarlo.

 

Ese día Yunho experimento  lo que los hombres llamaban: consolarse solos o masturbarse.

 

 

Para Jaejoong le fue imposible conciliar el sueño, ya que cada vez que cerraba los ojos recordaba las manos del más alto rozándole la piel. Además de la dolorosa molestia que sentía en su parte baja del ombligo. Realmente le dolía la erección que había tenido. Jaejoong era una persona muy ingenua a pesar de su edad, jamás había tenido una erección tan enorme ni sabía cómo tratarla, solo sentía un ardor incontrolable.

 

 

Suponía que no era común ese levantamiento en su miembro. Su mente buscaba una respuesta, lo que lo llevo a recordar  que Yoochun le hablo de eso. Jaejoong una vez en clase de Biología sintió curiosidad por saber cómo era el cuerpo de una mujer, los libros de biología no le ayudaban mucho. Así que le pidió ayuda a Yoochun para saber cómo era una mujer. Con solo 14 años Yoochun pensaba que era normal la curiosidad de su amigo, así que le consiguió una revista de mujeres desnudas, pero ni bien Jaejoong vio en la tapa  a una mujer enseñando los senos, bastante grandes. Sintió un levantamiento en su entre pierna, algo vergonzoso se negó a que Yoochun le siguiese mostrando la revista. Yoochun sonrió y quemo la revista, pero noto que su amigo no parecía levantarse. Con toda la vergüenza del alma Jaejoong le explicó que algo malo sucedía entre su entrepierna. Ese día Yoochun le explico que eso era común en los hombres, por propia vergüenza Yoochun no siguió explicando, solo le dijo que para calmarse debía  meterse en una tina llena de agua fría.

 

 

Recostado en la tina del cuarto de baños de la habitación  principal, Jaejoong pensaba en ese buen consejo de su amigo. Agradecía  haberlo recordado ya que no quería que Yunho lo viera en ese estado, por alguna razón se preguntaba qué fue lo que lo llevo a esa erección. Intentó pensar en otra cosa para así olvidar lo sucedido con Yunho, dejar aquellos besos y roses en el pasado. Alegando que todo era un simple juego de Yunho con él.

 

 

*****

 

 

Caía la tarde en Seúl.

 

-  Puedes ser breve que tengo algo importante que hacer – mascullo Junsu mirando su reloj, aún pasaban de las 4 pm.

-  Vamos, tan formal – sonrió – Hace tiempo que no nos vemos, creo que desde la preparatoria.

-  Lo sé – sonrió Junsu – Has cambiado mucho Hyun Joong.

-  Tú en cambio  luces igual que cuando te conocí – bebió un sorbo de café - ¿Cómo está tu hermano? ¿Sigue molestándote con su sobreprotección?

-  Algo, pero no viniste a hablarme de mi hermano – bebió un sorbo de café mientras intentaba descifrar lo que Hyun Joong tenía para decirle. Ambos se habían conocido en la preparatoria, no eran buenos amigo pero si buenos compañeros.

-  No – negó acariciando su pelo y acomodándolo hacia un costado – Es buen día para recibir una visita internacional – sonrió amigablemente.

-  ¿a qué te refieres? – ladeo la cabeza pensativo.

-  No sabes quién llegara en algunas horas – bebió otra sorbo de café.

-  ¿Quién? – preguntó intrigado.

 

Antes de que Hyun Joong respondiese, el teléfono de la oficina de  Junsu empieza a sonar. Eran uno de los  comandantes de la oficina central de inteligencia de Corea del sur. Junsu se disculpo con Hyun Joong para responder. El comandante de la sección contra el terrorismo le informo que habían recibido la amenaza de un nuevo atentado contra el famoso cantante Max Changmin. Molestos la central de inteligencia no encontraban forma de localizar al cantante, en el hotel nadie sabía nada, llamaban a su representante pero la línea daba ocupado.

 

 

-  Sé dónde está – dice confiado recordando que Max Changmin le dijo que ese día tenía una ensayo para el concierto – Les enviare la dirección del lugar, envíen a todos los efectivos de la división.

 

Hyun Joong se cruzó de brazos y hasta sonrió, estaba viendo en acción al flamante teniente de la división de inteligencia secreta coreana, Han-Jung Junsu.

 

-  Me disculpo, el deber me llama – hizo una reverencia – Me agrado volver a verte. Después hablaremos – salió velozmente  de su oficina rumbo a su auto.

-  ¿Después? Puede que sea tarde para ese entonces – se cruzó de brazos y sonrió macabramente.

 

 

Notas finales:

No diré nada con respecto al Yunjae, así me nació escribirlo y lo hice (n_n)

Bueno para las que me preguntaban por Hyun Joong aquí aparece, muy misterioso.

 BUeno no me queda mas que darles las gracias por seguir eligiendo el fic, creanme que me entristece saber proximo el final, me gustaria que fuese para siempre pero toda obra dee culminar. Gracias por vuestro apoyo y  dejar vuestros comentarios. pd: perdonenme si no puedo responder vuestros comentarios, aun asi los leo a todos desde mi celular.

Nii-chan: 09 días para navidad, mi época favorita (n_n) ¿Me habéis comprado un regalo?.

 


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