Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Golden Age por One_FluffyMaknae

[Reviews - 6]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

No se si esto cuente como ongfic...mas que basado en la letra, esta basado en la melodia de la cancion....pero Ñeh! es lo mismo(?) XD

 

 

** Golden Age - Beck **

 

 

 

-- Golden Age --

 

 

Kyuhyun levanto la mirada con cierto aire de niño malcriado, dirigiendo su mudo enfado hacia el cielo. Totalmente absurdo considerando que la ausencia total de ropa abrigadora era exclusivamente su culpa.

 

Maldijo internamente su mala costumbre de no informarse sobre las condiciones metereologicas diarias, pero por culpa de otra mala costumbre mucho mas difícil, si es que no imposible, de solucionar terminaba en situaciones como las actuales. Si tan solo dejara de jugar hasta altas horas de la noche, no tendría que levantarse tan apresurado por la mañana justamente por el hecho de haberse dormido más de la cuenta.

 

Su abrigo apenas cubría su cuello, haciendo que la fría brisa invernal se colara por su columna, alojándose en todo su cuerpo. Sus manos apenas las sentía y cada vez le era mas difícil mover sus dedos sin sentir una punzada de dolor. Ni hablar de su piel, usualmente era pálido, pero cuando el frió lo atacaba tan intempestivamente como ahora, se volvía casi tan blanco como la nieve que comenzaba a caer sobre su cabeza.

 

Maldito invierno tan crudo que tenia que soportar.

 

Junto sus manos delante de su boca y dejo salir una bocanada de aire caliente, con la imperecedera esperanza de lograr algo de calidez. Su piel resintió el brusco cambio de temperatura, ardiendo ante la sensación de calor que le invadió por escasos segundos.

 

No tenía muchas opciones. O se iba a su casa en busca de sus olvidadados bufanda, gorro y guantes o simplemente tendría que soportar lo que quedaba del día el frió que con el pasar de las horas se hacia mas insoportable.

 

Lamentablemente la primera opción no estaba dentro de sus posibilidades.

 

La noche anterior se había enfrascado en una partida demasiado interesante, perdiendo toda la noción del tiempo, para cuando se dio cuenta ya eran las 5 de la mañana y él tenia clases en solo dos horas mas, para su desgracia esas dos horas se transformaron en tres.

 

Cruzo la calle intentando enmascarar los ligero temblores que su cuerpo producía para contener el frió, sin mucho éxito en realidad, estaba seguro que parecía uno de esos cachorros abandonados a la intemperie.

 

El fuerte olor a café de la calle contraria despertó sus entumecidos sentidos y a pesar de no ser un gran fan de la oscura bebida, le pareció la idea más lógica para calentar su cuerpo.

 

 Sin dudarlo atravesó el ventanal del lugar.

 

Una calida ráfaga de aire tibio le envolvió, las luces color ámbar le dieron la sensación de un otoño tardío y todo su ser pareció lanzar un suspiro de satisfacción ante el agradable cambio de temperatura.

 

Con gran satisfacción descubrió que no había nadie que obstaculizara su libre paso hacia el vendedor que en ese momento estaba dándole la espalda. Con una genuina sonrisa tirando de sus labios, dio paso a una pequeña pero lo suficientemente alta tos, logrando llamar la atención del chico tras el mostrador.

 

Una sonrisa brillante.

 

Sus mejillas se calentaron, sus manos jugueteaban nerviosas en sus bolsillos y su pedido quedo olvidado en el frenético compás que los latidos de su corazón decidieron comenzar.

 

-          Bienvenido, puedo tomar su orden?

 

Carraspeo ante el chico más alto, de pelo corto y negro al igual que sus ojos, piel bronceada y una sonrisa que le quitaba el aliento. Despejo momentáneamente su confundido cerebro y asintió rápidamente, desviando su mirada al gran menú que se desplegaba delante de el.

 

-          Caramel Machiatto, por favor

 

Un tecleo rápido, una mirada fugaz y Kyuhyun sentía que se olvidaba hasta de la materia que se suponía en menos de media hora mas debía exponer en algún trozo de papel que su profesor le facilitara. El frió, la desagradable nieve, su fatal olvido por ropa más abrigadora, todo quedo en segundo plano cuando fue conciente de su propia perdición delante de un hombre que nunca antes había visto.

 

Momentáneamente enfurecido consigo mismo, por su falta de control, por su ligero desliz a  sentimientos precarios como era el supuestamente “enamorarse a primera vista” no fue capaz de escuchar las palabras que el vendedor le repetía con mirada curiosa.

 

-          Disculpa….me puedes decir tu nombre?

-          Kyuhyun…

-          Ok Kyuhyun, puedes tomar asiento, enseguida sale tu café.

-          Gracias.

 

Escueto y sin robar otra mirada al otro se dirigió a una mesa cerca del gran ventanal que daba a la calle. La sola contemplación hacia la fría acera hizo que los molestos escalofríos volvieran a su desgarbado cuerpo. Un suspiro derrotado salio de sus labios, resignado a morir congelado o mínimo pescar un resfriado de aquellos.

 

El vaho de una taza interrumpió su cadena de comentarios de autocompasión por su desafortunada suerte. Giro con brusquedad ante la interrupción y sus ojos chocaron no solo con la misma sonrisa perturbadoramente hechizante, si no que también con un par de guantes que descansaban sobre un bufanda negra, justo delante de su cara.

 

-          Tu café Kyuhyun….y un pequeño regalo, cortesía de la casa…

-          Que?

-          Disfruta tu café!

 

Lo que había anhelado toda la mañana ahora yacía sobre la mesa de madera, como burlándose de su cara de asombro. Miro por enésima vez, el café, la ropa y finalmente el pasillo por el cual había desaparecido el dependiente.

 

Tomo cuidadosamente el par de guantes e inmediatamente un fuerte, pero agradable aroma llego a su nariz. Ese olor no le pertenecía, tenia dueño y seguramente era de alguien que había sido despojado de sus pertenencias para luego ser entregadas a Kyuhyun.

 

Dejo su café abandonado mientras se ponía de pie al tiempo que tomaba lo abrigadores accesorios. Con paso firme se paro delante del mesón, donde un curioso chico le aguardaba.

 

-          No puedo recibirlo, obviamente esto tiene un dueño.

-          Si…son míos.

-          Que?

-          Pero tu pareces necesitarlos mas, tengo otro par en mi casillero, no te preocupes puedes tomarlos.

-          Pero…

-          Tu café se va a enfriar…

-          Oye….

 

Sin mas palabras desapareció por lo que parecía ser la puerta de la bodega, dejándolo ahí con un montón de dudas instaladas en su cabeza.

 

Todavía confuso finalmente regreso a su asiento, mirando fijamente la bufanda y los guantes. Si era práctico simplemente los usaría, sin remordimientos. El chico había dicho que tenía otros y ni siquiera le estaba cobrando algo por dárselos. Pero su lado lógico y racional reclamaba justamente lo poco normal que era la situación.

 

Dio un gemido ahogado de frustración seguido de un reconfortante sorbo a su café. El frió desaparecía lentamente de su cuerpo, pero sabia de antemano que apenas pusiera un pie en la calle volvería a sentirlo, o mejor dicho a dejar de sentir sus manos ante el horrible frió que lo azotaría.

 

-          Oye, no deberías darte tanta vueltas. Úsalos, no están sucias ni tienen nada raro…

 

Levanto la mirada con brusquedad. Hace cuanto estaba ahí, mirándolo de medio lado con una sonrisa divertida en su rostro. Una ves más sintió que sus mejillas se entibiaban y maldijo la hora en que decidió entrar a esa cafetería.

 

-          No entiendo por que haces esto…

-          No puedo permitir que alguien tan lindo se congele allá afuera. Cuando entraste parecías un cachorro feliz de encontrar su casa…

-          Me estas comparando con un perro!?

-          No, definitivamente eres mas lindo que un cachorro…

 

Se quedo sin palabra ante el repentino ataque de cursilerías que recibió. No lo conocía, ni siquiera sabia como se llamaba y le estaba diciendo ese tipo de cosas. Frunció el ceño en absoluta desconfianza, apretando su taza entre sus dedos.

 

-          Tranquilo, hablo en serio…

-          Ese es el problema…Ni siquiera te conozco y estas siendo demasiado amable.

-          Eso es malo?

-          Puedes ser un asesino en serie en busca de próxima victima!

-          ………………

-          O ser un acosador…

-          Soy Siwon, estaba esperando que preguntaras mi nombre, pero veo que prefirieres  recrear verdaderas novelas policíacas en cambio.

 

La vergüenza le invadió de forma tan eficaz como lo hacia el frió. Desvió su mirada y se concentro en las sillas mas apartadas de la cafetería. Intentando ignorar una vez mas la letanía de sus latidos.

 

-          Yo…me tengo que ir….

 

Se levanto raudo de su mesa sin embargo Siwon le detuvo con todo su cuerpo delante de si. Le miro incrédulo y algo cohibido, pero los suaves movimientos que le siguieron le robaron la atención, la cordura y la súbita urgencia de huir de aquel lugar.

 

Siwon tomo la bufanda, la enrollo en su frió cuello con delicadeza y una mirada cargada de devoción. Tomo sus manos, dejo su aliento sobre ellas, sin dejar de mirarlo, sin dejar de sonreírle, le cubrió con los guantes y se movió a un lado, dejándole libre el paso.

 

-          Yo…

-          Kyuhyun…Me voy a enamorar de ti. No necesitas enamorarte de mi, pero desde ya, mi corazón te pertenece.

-          Siwon…

 

Su corazón parecía a punto de explotar, su mirada se perdió en la oscuridad de las orbes contrarias, su aliento se engancho en su garganta, sus mejillas se tornaron carmesí y por unos minutos olvido su examen, el frió, sus maldiciones al horrible día que tenia. Todo, absolutamente todo se perdió en su mente.

 

-          Vete ya, vas a llegar tarde a donde sea que vayas.

-          Pero…somos desconocidos.

-          Tú eres Kyuhyun, yo soy Siwon, ya nos conocemos. Además, todos empiezan como un par de extraños.

 

Un suave empujón le dejo de cara a la salida, todavía intentando asimilar lo que pasaba. Un poco perdido, un poco sin ganas de irse de ahí. Dio un último vistazo al hombre que proclamaba tan fácilmente su posible enamoramiento por un extraño, y enterrando su cara en la calida bufanda, sonrió.

 

Al final las malas ideas terminan siendo las mejores.

 

La sonrisa nuevamente le encandilo, mas dio la media vuelta, cruzando el umbral. Sonrió suavemente antes de agitar su mano en señal de despedida. Y antes de que Siwon volviese a entrar, tiro de su brazo para conseguir su atención por última vez.

 

-          Kyuhyun?

-          Podríamos tomarnos de las manos, podrías besarme y entonces, solo entonces podría enamorarme de ti…Hasta ese día, no devolveré esto – señalo los guantes y la bufanda – Así que, si las quieres de vuelta…Voy a venir por un café esta tarde…

 

Sin dar la media vuelta salio corriendo hacia la calle contraria, se estaba haciendo tarde. De todas formas no necesitaba hacerlo, sabia que esa tarde cuando volviera por un segundo café, terminaría enamorado de Siwon.

 

 

 

Notas finales:

^^


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).