Imprimandome de ti. por Eviland

Érase una vez, en un mundo muy distinto al nuestro, donde los humanos no son más que animales cambia formas, donde no había ciudades sino manadas de las diferentes especies y las cuales estaban divididas por territorios. Cada territorio era entregado a una familia, la familia alfa de cada subespecie. Las especies más elevadas en la cadena alimenticia vivían en los confines de la tierra, gobernando desde las sombras.
Muchas guerras aparecieron debido a la codicia de las familias por tener más territorio. Convirtiendo a muchas subespecies en esclavos de los conquistadores. Entre las familias más poderosas y que más terreno había conseguido formando todo un reino, era la manada de los lobos.
Cabe destacar, que en esta familia, las lobas eran las que mandaban. Contaban las leyendas que una diosa había bajado a la tierra en una excursión quedando enamorada de una loba, concediéndole el mayor don, la fuerza de los dioses y el poder procrear con otras hembras. Como todas las leyendas y cuentos, el final no acaba bien pero la loba consigue crear una nueva especie de lobas mucho más grandes, capaces de aguantar las más bajas temperaturas, fuertes y ágiles. Por cada loba alfa nacerá una nueva cría heredando los poderes de su madre. Se buscaban a las más bellas y fuertes concubinas del territorio para que engendren a dichas guerrera, una vez que el feto estaba dentro esta le pasaba parte de su fuerza a la concubina, al dar a luz, las concubinas eran liberadas y ellas mismas procreaban con otros lobos creando una sub-raza de los alfa, fuertes pero no tanto como las primeras.
Sin embargo cada 100 años, nacía una hija que sobresalía del resto, era llamada la hija de la luna. Su piel era pálida y brillante, sus ojos grises como el cielo de aquellos terrenos y su pelo negro como la noche. Nacía con muchísima más fuerza que sus antepasados, era casi una semidiosa.
Y a esta altura os preguntareis ¿qué pasaba con esas guerreras alfas? Porque los lobos son conocidos por su imprimación de su pareja… ¿ellas también se imprimaban? Si, cada loba y lobo del territorio cada luna llena se reunía con sus semejantes en una hoguera en el centro del pueblo, bailando, comiendo, riendo y buscando a sus parejas respectivas. Mientras en el castillo de la loba alfa y los sub-alfas, una gran orgía se daba lugar en el comedor principal, cada lobo buscaba su pareja y para encontrarlas debían tener la misma marca en distintas parte de su cuerpo.
Una marca que era como un tatuaje, una marca de identidad, se supone que cuando encuentras esa marca, ambas personas se unen y nunca más se separan, hasta su muerte.
En el caso de la hija de la “reina” alfa, en el caso de que no se imprimasen antes de los 21 se les daba una concubina para procrear, para asegurar la especie. Recordemos que las lobas alfa solo podían procrear una hija en toda su vida. Por lo tanto no podían tener hijos en el caso de encontrar su pareja. De ahí que desde que la loba cumplía la tierna edad de 14 años se organizaran fiestas trayendo a todas las lobas sub-alfas del reino.
En el caso de Meridian, había conseguido encontrar a su pareja a los 16, Nahiala, una chica sub-alfa nieta de una de las tantas concubinas de sus antepasados .Juntas, bajo su primera luna, con la edad de 18 años ambas, habían engendrado a Dyan, la niña semidiosa.
Dyan, heredaría el reino, el cual estaba divido por el castillo de la reina, la burguesía sub-alfa y los pobres lobos que no habían conseguido evolucionar como sus compañeros, quedando en su raza común y más pequeña, eran los que trabajaban, en las afueras del reino e iban a la ciudad a vender los productos que sacaban de la tierra. Pero no tan solo lobos vivían en el reino, en muchas batallas habían conseguido esclavos de otras especies, la mayoría vivían en las afueras junto al resto de los lobos y otros eran vendidos como esclavos para servir en el reino. La ultima especie en caer fue la de los gatos, parte de la manada de los tigres habían comprado a casi toda su especie para esclavizarlos en sus dominios y crear una nueva sub-especie y otros habían sido vendidos en distintos reinos.