Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El salvador que necesita ser salvado. por christalchii268

[Reviews - 92]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Ultimo capitulo de este año 2013~

Espero les guste... Yo aun no se ._.

 

A leer .w. *reparte copas con jugo de uva (?)*

Capítulo 3: “Siempre he sido fiel a mis sentimientos…”

 

-Tienes una nueva caja en tu escritorio…

Inoue sonrió extensamente, corriendo como niño pequeño a su lugar de trabajo. Miyagi apoyo su cadera en la pared mientras vea a su mejor amigo abrir la elegante caja de madera negra. Una baja exclamación de admiración se escuchó cuando vio el contenido y saco una hoja de papel, leyendo conservando su sonrisa. Él no pudo evitar entrometerse cuando Inoue bajo la mirada abochornado mientras susurraba con voz prácticamente nula.

-¿Ya me dirás quien te envía regalos todas las semanas?

-Nop. Es un secreto- rio Inoue, aunque Miyagi alcanzo a ver, de nuevo, que Inoue lo evitaba y parecía asustado.

Ya habían pasado tres meses completos. En todo ese tiempo todas las semanas había algún presente lujoso que llegaba a las manos de Inoue por alumnos o paquetería. E Inoue no quería decir quien lo enviaba o porque.

Shinobu y él habían cedido en no presionarlo, ambos felices de que alguien cortejara tan elegantemente a Inoue y que este pareciera tan feliz y ansioso por el nuevo presente, pero Miyagi cada vez estaba más curioso y solo un poco preocupado.

Nada cambiaba, el profesor continuaba su vida sin ninguna alteración excepto los regalos. Si alguien lo quería conquistar era predecible que ese alguien estuviera ahí, revisando la expresión de Inoue y planeando el siguiente movimiento, pero Miyagi no daba con eso. Nadie extraño, ni siquiera los sentimientos de Inoue decían que estuviera frecuentando a su pretendiente. El extraños solo se ponía en contacto con Inoue a través de sus regalos y eso lo inquietaba.

¿Y si era una broma o una trampa? A pesar de que Imi-nashi fue destruido y el Rey muerto, aun sobrevivían habitantes no muy conformes con el resultado, viéndolos como los causantes de todo. Celes los protegía, pero Miyagi no quería ver en peligro a su amigo. No deseaba ver herido a su Protector cuando estaba tan entusiasmado por el cortejo.

Si aquel hombre lo dañaba…

-Espera. Es un hombre, ¿verdad, Inoue?- le pregunto, el pensamiento siendo demasiado bizarro solo para suponerlo.

-¡Miyagi, cállate!- exclamo sonrojado Inoue evitándolo una vez más. –Con quien frecuento no es tu asunto…

Ahora el chico estaba a la ofensiva. Miyagi esperaba que eso no fuera por su pregunta. Sería raro que Inoue saliera con una mujer. Él había visto el apuro que tuvo su amigo cuando acepto el favor de las compañeras de Risako. El chico había dicho que las mujeres eran peligrosas y parecía en shock incluso semanas después de las cinco citas.

Miyagi rio entre dientes, examinando la vergüenza y pena de Inoue al volver a cerrar la caja en su escritorio. Quien fuera que lo conquistaba al parecer estaba haciendo un muy buen trabajo. Miyagi nunca había visto tan ilusionado y alegre a su amigo por una propuesta.

¡El chico parecía un niño esperando un juguete todas las semanas!

-Solo ten mucho cuidado, ¿sí?- le pidió siendo sincero, sin poder deshacerse de su protección hacia su amigo.

-¿No tienes clases, Miyagi?- gruño Inoue desviando el tema. Miyagi volvió a reír.

-Pobre del que te corteja. Aguantarte… -Miyagi cerró la puerta carcajeándose, escuchando la bola de nieve estrellándose en la puerta atrás de él.

 

 

Inoue no podía evitarlo. Al guardar la más reciente carta de Sakurai el volvió a releerla, junto a las otras tantas que le había enviado con sus presentes, desde joyas a ropa y demás artículos caros y bellos que Inoue se sentía una doncella. Y el sentimiento aunque tonto, le hacia sonreír.

El maldito hombre nunca lo trato como una débil mujer en sus mensajes. Él solo le contaba algún dato sobre su persona y algún halago para Inoue. Mencionaba que aunque estaba en viajes de negocios, él trataba de estar al tanto de Inoue a través de su cómplice en la universidad. Él sabía que eran sus estudiantes, porque varios de ellos sonreían traviesos mientras le entregaban los presentes en su oficina o en los pasillos.

Era tan estúpida la situación pero Inoue no podía evitar involucrarse. Él sonreía siempre que veía el nuevo obsequio y leía la nueva información de Sakurai.

Inoue ahora sabía que al hombre le gustaba viajar por los mundos y conocer sobre ellos, que estaba acostumbrado a la riqueza, pero aun así disfrutaba de lo simple mientas fuera bello. Que era dueño y fundador de una empresa importante e influyente, con su sede principal en el mundo Claridad. También el lenguaje extenso y su conocimiento le hacían creer que su educación era de altura. La manera en que pretendía conquistarlo era con educación y respeto, pero siempre tenía aquel molesto tinte de superioridad y pretencioso.

Sakurai siempre dejaba en claro que enamoraría a Inoue, todas las veces con una confianza que lo asustaba.

Bien Inoue admitía que estaba curioso, y que lo poco que iba descubriendo le interesaba, sin embargo seguía algo recio a ceder. Por muy halagado que estuviera, por lo dulce que le hiciera sentir ser cuidado y pretendido… simplemente estaba mal…

Inoue dejó caer el paquete de hojas al suelo, sobresaltado por el movimiento brusco atrás de él. Convocando con furia una daga de hilo se volteo, solo para relajarse al ver a Johnny en medio de su sala. El chico debió aparecerse con su Poder adquirido al ser parte de su familia por un ritual… Y también el chico estaba llorando.

-¡¡Nii-san!!- exclamo desesperado el Chaton antes de correr a abrazarlo. Inoue por reflejo le correspondió susurrándole para que se tranquilizara.

Había pasado un tiempo que el chico no aparecía tan afectado enfrente de él. Mientras lo guiaba al sillón y seguía musitándole, Inoue trataba de recordar los consejos de la doctora del chico, que le había dicho muy seria a Inoue en específico, que debían tener cuidado con las crisis aisladas que el Chaton pudiera tener. Entre más lejos una de otra, podía ser mejor o peor, pero eso dependía de la causa principal de su recaída.

>>Tengo a Johnny en mi departamento llorando. ¿Me puedes explicar porque está conmigo y no contigo?<< Gruño Inoue en la mente de Sumi Keiichi, aprovechando el enlace que el chico tenía con ellos por enlazarse con Johnny. El silencio fue su única respuesta, alarmándolo.

-Johnny, pequeño… ¿Qué está sucediendo?

-Kei… él… -sollozo débil el Chaton, negando repetidamente. Inoue se apresuró a separarlo de él para mirarlo a los ojos.

-¿Él que, Johnny? ¿Está bien Sumi?

-¡No!… -grito desesperado el chico. –S-simplemente… él… él solo se desmayó y yo…

-Oh, Johnny… -Inoue lo sostuvo más fuerte, evitando que el chico se desplomara. –Escúchame con atención… ¿Esta Sumi recibiendo ayuda? ¿Lo está viendo un médico?

-Nii-san…

-¡Contéstame, Johnny!- pidió desesperado Inoue, tratando aun así de ser gentil con el alterado Chaton. Johnny respirando agitadamente asintió repetidamente. -¿Si esta con alguien capacitado? –Johnny volvió a asentir.

-Y-yo acompañe a… a Jung-sama… a-al hospital… pe-pero… -Johnny negó tristemente antes de volver a abrazarse a Inoue, su sufrimiento hiriendo incluso a Inoue. El solo pudo abrazar fuerte al chico, deseando que todo estuviera bien.

>>Chicos, Sumi está en un hospital. Al parecer se desmayó en su trabajo. Johnny está conmigo muy alterado y necesito saber cómo está el editor…<< Anuncio rápidamente a su demás familia, sintiendo su sorpresa y temor conforme el seguía hablando. >>¿Alguien puede ir y averiguar algo más? Unheated solo tiene un hospital, no les será difícil encontrarlo…<<

>>¡¡No pueden ir!!<< Advirtieron desesperados Risako y Stravros a la vez.  

>>¿Qué pasa?<<

>>Nos están informando justo ahora en Seris que Moonless tiene alguna contingencia… Cerraron el tránsito a otros mundos…<<

>>Es una pequeña epidemia, por lo que dicen<< Agrego Stravros.

>>¿Pero Johnny está bien, Inoue?<< Se alarmo Shinobu. Inoue volvió a separar a Johnny de su cuerpo y tomo su rostro sorprendido entre sus manos, mirando sus ojos y revisando su salud con su Poder.

-Johnny, ¿te sientes mal de algún modo? ¿Enfermo, débil…? ¿Te duele algo?- le cuestiono con apuro, viendo las lágrimas del chico que no paraban.

-No, Nii-san… 

>>Johnny está bien. Asustado y preocupado, pero bien…<< Agrego, volviendo a abrazar al chico. Johnny parecía estar perdido si no tenía contacto con alguien de la familia en una crisis.

>>Johnny es un Protegido de Moonless y Celes lo preparo para que viviera sin problemas ahí… Dudo que algo pudiera ocurrirle al pequeño. Está protegido por tecnología… << Musito Miyagi compartiendo sus reflexiones. >>Por quien debemos preocuparnos es por Sumi…<<

>>Pero él también es Protegido de Moonless…<< Recordó Shinobu.

>>No, solo tiene licencia como Visitante. Su trabajo requiere que viaje por varios mundos de vez en cuando y el editor apenas está tramitando la permanencia junto con Johnny…<<

>>Bien, demonios…<< Gruño enojado el Chaton. >>Estuvo por años en el maldito mundo y no pudo decidir ser Protegido… Si lo hubiese hecho habría sido examinado y protegido de enfermedades y situaciones que afectan a viajeros en Moonless. ¡No le habría afectado esto!<<

>>Shinobu-chan, basta<< Pidió firme Inoue acariciando seguidamente la espalda de Johnny. >>No es como si Sumi hubiera previsto esto. El hombre tenía un punto de vista diferente antes de conocer a Johnny. No podemos culparlo por guardar reservas de quedarse en Moonless hasta que ellos decidieron vivir ahí…<<

>>¡No, pero ahora por su decisión está en peligro!<< Grito alterado el chico. El enlace del Chaton y Miyagi quedo en silencio, diciéndoles a los otros que estaban hablando en voz alta entre ellos.  

Inoue suspirando dejo que Miyagi tranquilizara al chico mientras le pedía detalles al matrimonio en Seris. Cuando ambos volvieron a involucrarse en la plática, Johnny estaba más tranquilo e Inoue ya sabía qué hacer.

>>Bien, Risako y Stravros nos mantendrán informados de lo que se enteren. Seris está más cerca de Moonless, así que ellos tendrán las noticias más rápido…<< Comunico a sus otros amigos. >>Mientras, Miyagi trata de ponerte en contacto con el jefe de Sumi. ¿Recuerdas que te dio su número de teléfono compatible con el brazalete electrónico? Seguro te aclarara sobre el estado del chico. Johnny dijo fue él quien lo ayudo en el hospital…<<

>>Olvídalo, Inoue. Hace unos minutos trate de hacerlo, pero no entra la llamada…<< Se lamentó Miyagi sonando desesperado.

>>Jung-sama cambio su número la semana pasada…<< Susurro de improviso Johnny, abrazando más fuerte a Inoue en la realidad. El Chaton ya no lloraba.

>>Johnny…<< Susurro triste Shinobu antes de cambiar el tono de su voz. >>¿Puedes decirnos el nuevo número?<< Johnny asintió oculto en el pecho de Inoue mientras se los decía.  

>>Bien, les diré lo que consiga…<< Prometió Miyagi, desconectándose de la conversación, seguro llamando.

-¿Estas mejor?- le pregunto Inoue al pequeño en sus brazos. Johnny asintió sin verlo, pareciendo tan perdido como sus sentimientos lo demostraban. Inoue no podía imaginar el miedo del pequeño al ver a su amante en peligro después de todo lo que había vivido en los últimos años.

Un desesperado ruido de golpes en la puerta de su departamento sobresalto al Chaton. Inoue empezó a gruñir enojado hasta que escucho la voz desesperada de Mitsu pedirle que abriera.

-No tardo… -le susurro Inoue a Johnny, separándose de él. El Chaton se sentó mejor en el sillón y lo siguió con la vista en todo su recorrido.

-Está bien, sabríamos si es lo contrario… -calmo Inoue al escritor preocupado solo lo vio en la puerta de entrada. Mitsu se mordió su labio, moviéndose de un pie al otro. –Anda, pasa. Johnny está conmigo…

-Perdón, Kazu… Kaoru me contacto desde el trabajo y me dijo lo que estaba pasando en Moonless y entre en pánico… Oh, Johnny-chan… -susurro al verlo. Ambos sin pensar se abrazaron, ambos preocupados por el editor a su manera. –Tranquilo, Johnny-chan. Si Kazu dice que está bien, es porque lo está…

-¡P-pero…!

-Johnny… -llamo Inoue con suavidad. –Recuérdalo, pequeño. Nuestro enlace como familia se vería comprometido si algo malo le pasara a Sumi. Tú mismo lo sabrías porque eres su pareja, Johnny…

-Exacto, por eso mismo yo vine. Kazu sabría si algo va mal… -sonrió Mitsu mientras consentía las orejitas caídas de Johnny. –Ahora, ¿estarás tu bien, Johnny? Conozco a Keiichi-kun y sé que no le gustaría verte tan triste y preocupado…

-E-estoy bien. Gracias, Mitsu-san…

-Ni digas eso. Ambos cuidamos de Keiichi-kun, ¿recuerdas?- guiño dulcemente el escritor, caminando con Johnny hacia la sala. Mitsu se detuvo y soltó a Johnny cuando en su camino golpeo algo en el suelo. -¿Y esto, Kazu?

-¡¡N-nada!!- exclamo desesperado Inoue, corriendo para alcanzar el paquete de cartas atadas con una liga. Lamentablemente no fue lo suficientemente rápido y Mitsu leyó la firma de una de las misivas.

-¿Quién es Sakurai y porque se despide de ti con un beso?- sonrió Mitsu retirando de su alcance el paquete. El escritor era corto de estatura pero se las arregló para evitar a Inoue.

-¿Se llama Sakurai el chico que te está ligando?- pregunto con curiosidad Johnny mirando a Inoue. Él gimió en voz baja.

-No tú también, Johnny-chan… -susurro Inoue rendido.

-¡Vaya, y no me había dicho nada, Kazu!

-Ni a nosotros nos ha dicho… -se lamentó Johnny mirándolo de reojo. –Por lo que se, Nii-san y Miyagi-san han querido saber, pero Nii-san no quiere decirlo…

-Oh, diosa… -rio Mitsu dulce. –Me pregunto qué querrás esconder…

-¡No estoy escondiendo nada!- se defendió Inoue mirando más a Johnny que a Mitsu.

-Y dime entonces porque siento tus barreras mentales tan fuertes, Kazu… ¿Qué es lo que quieres ocultar de mis poderes?

-¡Es inevitable, Mitsu-chan! Tu solo te metes en… -Inoue se detuvo cuando escucho a Miyagi hablarles.

-¿En…?- pregunto sonriendo Mitsu, callándose y poniéndose serio cuando Inoue levanto un dedo pidiendo silencio.

>>¿Qué sucede, Miyagi? ¿Qué averiguaron?<<

>>Todo esta bien. ¿Johnny?<<

>>Estoy aquí<< Ofreció el Chaton, tomando en físico la mano de Inoue.

>>Bien. Sumi solo se desmayó, no es nada grave. Contrario a lo que pensábamos, él ha estado bajo procedimientos de aclimatación aun siendo Visitante, así que la epidemia solo lo debilito un poco. Estará bien bajo tratamiento. El virus entro en su sistema pero no ha avanzado…<<

>>¿Pero esta fuera de peligro?<< Intervino Risako al pendiente de todo.

>>Si, no está comprometido en ningún aspecto. La tecnología de Celes ayudo a que el virus no se esparciera… Los médicos en este momento solo están eliminando el virus…<<

>>¿Y cuándo lo podre ver?<< Cuestiono aprensivo Johnny.

>>En cuanto el mundo levante la restricción. Si apareces solo te regresaran. Puede y el virus no dañe a Sumi, pero aun es portador. Incluso a Jung lo atendieron y mandaron a su casa. Todo Moonless está en cuarentena por protección…<<

>>Pero estará bien…<< Dijeron al mismo tiempo los demás para consolar a Johnny.

>>Gracias, Miyagi-san<< Susurro ya más tranquilo Johnny.

>>No te preocupes, pequeño. Solo permanece tranquilo en casa de Inoue. Nosotros vamos en un rato, mientras va al departamento un pequeño grupo de expertos para checar que en realidad estés bien y no seas portador<<

>>Lo siento, yo no sabía…<< Se alteró Johnny mirando con miedo a Inoue.

>>Tranquilo, solo es rutina<< Calmo rápido Miyagi. >>Es casi seguro que estas bien, pero quieren asegurarse…<<

-Mitsu y yo no te dejaremos solos… Ninguno de los dos puede enfermarse y es con los únicos que has estado en contacto desde que llegaste. Tranquilo… -susurro Inoue acercándolo. Mitsu se acercó preocupado.

>>Yo cuidare a Johnny. No se preocupen…<< Prometió a su familia, abriendo su mente a Mitsu para que también entendiera el problema.

>>Bien, cualquier cosa aquí estaremos…<< Dijo por ultimo Stravros retirándose con Risako. Poco después también Miyagi y Shinobu se fueron.

Mitsu se encargó de distraer a Johnny hasta que los médicos llegaron y lo examinaron, coincidiendo que Johnny estaba bien. Para la noche en conjunto lograron que el pequeño Chaton tomara un baño y durmiera. Inoue como siempre le dejo su cama y con Mitsu se fue a la sala, donde el preparaba su futura cama.

-¿Y entonces solo te va a enamorar?- pregunto juguetón Mitsu sentándose en el sillón enfrente de Inoue, sus ojos brillando con malicia.

-¡¡Mitsu!!- se ofendió Inoue volviéndose rojo. –Te abrí mi mente para que vieras lo de Johnny, no mi vida personal…

-Sí, sí- desestimo el escritor moviendo su mano. –Yo no quise examinar eso, pero tu mente está llena de ese hombre e inevitablemente lo vi. No es mi culpa- término de decir ensanchando su sonrisa.

-Pero no lo ignoraste- gruño entre dientes Inoue sin verlo.

-Oh, vamos. Como si a la larga no fuéramos a enterarnos. ¿Me contaras o no?

-Quieres decir que aún hay cosas que no viste- musito irritado.

-Por favor, Inoue…

El profesor logro tensarse con su nombre susurrado con cariño. Odiaba cuando Mitsu le llamaba sin más con ese tono tan personal. Siempre lograba que él confiara sin pensar, que se hicieran más cercanos al ser solo la tercera persona en su vida al llamarle por su nombre de manera gentil. Inoue no podía creer cuanto apreciaba a Mitsu en ese momento.

-¿Por qué estas huyendo de él, Inoue? Pensé que te darías una oportunidad…

-Lo estoy haciendo… -él añadió aun sin verlo, solo recorriendo con su mirada el silencioso departamento.

-Bueno, cierto que has llegado más lejos que nunca… Sin embargo, cariño… ¿Cuándo lo vayas a volver a ver? ¿Qué pasara entonces, Inoue?

-¿Qué quieres decir con eso, Mitsu-chan? Él es solo…

-¿Solo que, cariño?- Mitsu se levantó y obligo a que Inoue lo encarara, aunque aun así el profesor desvió la mirada. –Estás pensando en él. Te estas ilusionando. Lo estas tomando en cuenta… ¿Por qué vas a huir de…?

-Basta… -pidió Inoue con voz débil. –No lo puede evitar, ¿de acuerdo? Sakurai solo llego y…

-¡Inoue!- llamo Mitsu sacudiéndolo sosteniéndolo por los brazos, dado que no podía alcanzar sus hombros con facilidad. –Tú y yo sabemos que si ese chico no hubiera insistido, tu solo te habrías alejado definitivamente. Es su insistencia lo que te tiene conquistado…

-¡No estoy conquistado!

-¿Y si lo estuvieras porque estaría mal?- Mitsu suavizo su mirada y le tomo gentilmente su mejilla, logrando por fin que lo viera a los ojos. Inoue trago saliva al ver tan puros sentimientos fijamente. -¿Por qué sigues dañándote, Inoue?

-…Temo por él… -confeso en un susurro.

-¿Por tu linaje? ¿Por tu Poder? ¿Por tu pasado? Inoue, ¿no has pensado que tal vez él ya lo sepa y aun así no le importa?

-¡No debería ser así!

-¿Y qué hay de él, Inoue? ¿Ya examinaste que tal vez él también tenga muchos problemas? ¿No crees que deberías darle más oportunidad de explicarse que solo a través de cartas con unos pocos renglones?

-Mitsu…

-Dímelo, cariño. Dime que no quieres verlo, que no quieres el amor que te está ofreciendo… Dime que no te quieres enamorar de ese hombre… de lo que te puede ofrecer…

-Te odio… -sollozo Inoue, dejando caer su frente en el hombro del escritor que sin dudar lo rodeo, tanto como Inoue lo hizo varias veces en el pasado tiempo en que Mitsu caía en depresión por su perdido hijo.

-Te quiero mucho, Inoue. No como amigo, sino como familiar. Casi un hermano… Y quiero que seas feliz, cariño. No voy a permitir que te vuelvas a hacer daño. Si con eso logro que me odies, no me importa. Estaré ahí para ti, siempre…

-Eso no quita que te siga odiando… -rio Inoue, sintiendo aquel particular sentimiento de cariño hacia al chico que también logro querer como hermano.

 

 

-¿Moonless? Yo no sabía que el tenia familia allí… ¿No nació en Imi-nashi?- pregunto Sakurai a su cómplice, Matsumoto Yuuto. El Chaton sonrió nervioso moviendo visiblemente su colita de abundante pelaje.

-Yo la verdad no entiendo mucho de eso, Sakurai-san. Johnny es imposible sea su familia. ¡Es un Chaton! Pero todas las veces el profesor Miyagi, Shinobu-san y el profesor se refieren al Chaton y su pareja como familia…

Sakurai apretó con su dedo pulgar e índice el puente de su nariz. El Chaton en la pantalla de video-llamada lo estaba confundiendo.

-Bien, dejemos ese tema para después. ¿Estás seguro que estará bien?

-¿El profesor? Si… El Chaton acompaño a ambos profesores y se veía bien. Aunque por lo que escuche, el chico está quedándose con el profesor mientras Moonless levanta la contingencia y el Chaton pueda volver a ver a su pareja…

-Correcto… -susurro Sakurai, viendo más allá de su pantalla el bello sombrero de fino material que planeaba mandar a su conquista al día siguiente. –Mantenme informado…

-Claro- sonrió el chico antes de levantar su mano para pedirle atención rápidamente. –Lo olvidaba. El profesor hace unos días se quejó de querer un nuevo abrigo. Lo dijo en broma porque mis compañeros estaban hablando de eso, ¿pero no cree que merece la pena la molestia?

Sakurai soltó una risita. El Chaton parecía tan emocionado porque Sakurai le regalara un abrigo al profesor tanto como si se lo fuese a dar a él.

-Dime una vez más porque te vez tan feliz por ayudarme… -rio Sakurai sin poderlo evitar. El chico sonrió melancólicamente mientras veía a la lejanía.

-El profesor me dio libertad, algo que yo siempre di por perdido… Es amable, paciente y también parece estar buscando libertad… Yo de verdad creo que alguien que se esfuerza tanto por conocerlo y halagarlo, merece el favor del profesor. Solo quiero devolver un poco del hermoso regalo que le dio a mi raza. Simplemente quiero que llegue a ser feliz y sonría sin rastro de anhelo en sus ojos… -se encogió de hombros terminando de hablar, sus mejillas sonrojadas.

-Gracias, Matsumoto…

-Ni lo mencione, Sakurai-san. Debo irme. Puede y no tenga que hacer examen, pero aun así no quiero bajar de rendimiento- rio el Chaton terminando por desconectarse, evidentemente evitando que su bochorno fuera visible.

Sakurai solo sonrió y tomo de su vaso con suplemento de sangre, sus pensamientos como siempre en su profesor.

Para él había pasado cerca de dos semanas, pero sabía que había sido más para su conquista. Y entre más lo cortejaba y conseguía aliados entre sus estudiantes, más determinado estaba Sakurai en terminar su trabajo y reunirse con el hombre. Las ansias lo inundaban tanto que era casi insoportable.

El hombre lo estaba hechizando conforme más sabía acerca de él y su pensamiento, incluso estando tan lejos.

Sakurai también estaba cada vez más desesperado por lograr una simple oportunidad con el hombre. Temía que al volver a encontrarse este solo huyera y esta vez no lo encontrara. Perder todo rastro de él y no poderle decir que quería una sincera y honesta oportunidad de estar a su lado. Querer perderse todo lo posible en su profesor.

-¿Señor?- llamo su secretaria, logrando un gruñido de Sakurai por ser interrumpido en sus fantasías. -Lo siento, señor. El señor Aoi ha respondido…

¡Por fin! El maldito hombre era el causante de que Sakurai cediera en cortejar al profesor a larga distancia. Muy, muy larga distancia. De no ser por su trabajo y lo temperamental de su socio…

-¿Y dijo…?

-Accedió a una cita en dos días…

-Un semana entera en Celes… -susurro Sakurai sonriendo. -Arregla todo de una vez. Nos retiramos inmediatamente después de la reunión.

-Por supuesto, señor. ¿Desea que mande el obsequio?- señalo el sombrero encima de su caja. Sakurai midió sus posibilidades permaneciendo estoico en su aspecto.

¿Será mucho pedirle a su profesor que se vieran después de todo lo que Sakurai dejo en claro?

-¿Señor?

-…Hazlo, pero espera- pidió, recogiendo la nota que antes escribiera y cambiando el contenido.

 

>>Te estaré esperando. No importa cuánto tiempo, y aunque vengas, siempre te estaré esperando<<

 

 

Inoue sonrió cuando vio a Johnny reír junto con Shinobu. El pequeño chico por fin había superado el susto de ver desplomarse a su pareja.

Por otra parte, Inoue no superaba sus propios miedos a pesar que sus seres queridos le alentaban. Era un poco humillante estar frente a dos Chaton que sufrieron el infierno mismo y ahora sonreían, se permitían seguir adelante e incluso estaban dispuestos a volver a sufrir con tal de tener el mismo feliz desenlace.

-¡No, fue gracias a Nii-san!- exclamo feliz Johnny sobresaltándolo. Inoue rio bajo al ver a Sumi refunfuñar.

-Podrías haber esperado, Johnny. Yo te habría explicado el significado de ese libro… -se lamentó Sumi, seguro refriéndose al trabajo universitario en el que Johnny estuvo estancado e Inoue le ayudo.

-No puedes compararte con Inoue. Él es profesor… -susurro irritado Shinobu, moviendo agitadamente su colita rubia. Sumi solo lo vio levantando una ceja.

-Sí, gracias. Yo puedo también hablar, ¿saben?- intervino Inoue rápidamente, dándole una mirada significativa al Chaton, recordándole su promesa de no buscar problemas con el editor. Shinobu solo giro los ojos.

-Lo que sea. Gracias por cuidar este tiempo a Johnny, Kazuhiko-san… -dijo Sumi inclinando su cabeza con seriedad.

-De eso nada. Me alegro saber que ya estas mejor, Sumi- sonrió Inoue honesto.

-Me asustaste… -susurro Johnny al lado del hombre. Cuando Sumi lo vio con dulzura supo que era el momento de dejar a la reencontrada pareja solos.

-Vamos, Shinobu-chan. Tienes exámenes de prueba- apresuro al Chaton que se levantó sorprendido.

-No dijiste nada de exámenes…

-Y solo porque eres mi amigo te lo dije, vamos…

Shinobu gruño pero se despidió y mansamente los llevo de nuevo a Celes. Ambos se sorprendieron que al llegar ya fuera de noche. Habían perdido la noción de tiempo y la diferencia. En Moonless eso era común.

-Rayos, Miyagi me va a sermonear… -susurro Shinobu antes de desaparecer.

-Y me quede solo… -bromeo solo Inoue dejándose caer en su sillón. Su mirada sin pensar se fijó en el centro de mesa. Una rosa azul congelada y puesta en una linda caja de cristal que Inoue había comprado meses atrás.

Y de nuevo aquellos enigmáticos y algo terroríficos ojos rojos inundaron sus pensamientos. A su lista de cosas de las que arrepentirse, faltar a su cita con Sakurai y arrastrar con él a Shinobu hacia Moonless, todo para evitar al hombre.

Inoue levanto sus pies del suelo y abrazo sus piernas a su pecho, en todo momento viendo la rosa que se mantenía viva gracias a su Poder. 

Mitsu tenía razón al decir que Inoue quería enamorarse, pero también era cierto que le daba mucho miedo la idea. Viendo a Miyagi y las demás parejas a su alrededor, compartiendo aquella abrumadora privacidad e intimidad. Dar todo su ser, ser un libro abierto en su pasado y pensamientos.

-No soy el indicado… -le susurro con miedo al silencio violento de su casa.

Inoue no era el indicado para nadie, y así debía ser. Porque alguien como él no merecía más de lo que ya tenía con sacrificios. No quería perder a nadie más, preocuparse más, abrirse a otra persona.

Todas las personas en su familia ahora eran inmortales, o lo más que podían reuniendo el Poder de todos y protegiendo a Johnny y Sumi. Inoue cuidaba a todos porque inevitablemente se había involucrado con cada uno, sabiendo que un futuro sin alguno de ellos lo mataría.

La única cosa que siempre le reto a los dioses fue mantenerlos a ellos cerca. Nadie más. Porque si Inoue se enamoraba y solo terminaba el no sobreviviría. Nunca lo haría…

-Perdón… perdón…

Sin darse cuenta Inoue empezó a llorar, odiándose cada vez más.

 

 

-¿Q-que sucede con ustedes?- gimió en sorpresa Inoue, viendo la mirada penetrante de Miyagi y Shinobu. Ambos de alguna manera habían logrado acorralarlo en una pared de la oficina solo llego de su última clase.

-Estas extraño…

-Más de la cuenta- añadió Shinobu. Inoue puso los ojos en blanco soltando una risita al final, eliminando su tono nervioso.

-Como siempre, tan sincero y directo, Shinobu-chan…

-¡No cambies el tema! ¿Qué te ha estado sucediendo todo este tiempo? Ayer solo me llevaste contigo y desde entonces pareces temer hasta tu sombra. También tienes esa mirada aprensiva y nerviosa.

-Sin contar que tus sentimientos de tristeza y remordimiento solo están empeorando desde anoche. –Miyagi se acercó y apretó su dedo índice en el pecho de su amigo. –Que cierres tus sentimientos no quiere decir que no me esfuerce en determinado momento por investigar sobre eso de otra manera.

-¿Qué quiere decir eso? Creo merecer algo de privacidad en algún momento. ¿No tengo derecho a un secreto de ustedes, par de entrometidos?

-No- dijeron a la vez la pareja sin importarles que Inoue de verdad estaba ofendido.

-Bueno, lo siento. No tengo que contarles todo… -susurro Inoue desviando la mirada. Él no conto con que Miyagi le tomaría la barbilla violentamente y lo obligara a verlo.

>>¿Y se puede saber porque razón nos ocultarías algo a estas alturas, Inoue?<< Le pregunto lo más privadamente posible. Shinobu hizo una mueca al no poder oír, pero no intervino mientras miraba preocupado a Inoue.

>>Miyagi…<<

>>Te conozco de toda la vida, Inoue. Nunca me ocultas nada a no ser que creas que con eso me harás daño, o a los otros. Sin embargo, tonto, al único que estás haciendo daño es a ti. Por favor… deja de guardar todo y habla con nosotros, Inoue…<<

-No quiero hablar sobre eso, ¿de acuerdo?- jadeo Inoue zafándose de ambos y alejándose hasta la puerta. –Yo mismo no sé qué demonios está sucediendo. No los voy a meter entonces a ustedes…

Inoue sin ver atrás corrió lo más rápido que pudo. A él en ese preciso momento no le importaba estar haciendo una escena en su lugar de trabajo, solo quería huir. Huir de sus amigos, de sus pensamientos, de la lógica y sentimientos. Quería huir de sí mismo y poder ser una persona más del montón.

Él no supo donde fue a parar. Solo siguió avanzando con toda la rapidez de la que era dueño hasta por fin cansarse y apoyarse agitado en un inmenso árbol en flor.

-Tranquilo, demonios… ¡Tranquilízate, Kazuhiko Inoue!- se gritó Inoue con enojo, notándose tembloroso y desesperado. Su respiración era irregular y rápida, lagrimas no dejaban de caer y sentía su cabeza explotar con pensamientos tan diversos. Estaba por derrumbarse verdaderamente por primera vez sin ser dueño de sí mismo.

-El destino debe quererme… -susurro una voz suave y herida. -Ahora se tu nombre de tus propia boca…

-¡Vete!- grito Inoue sin encarar a Sakurai. Sus manos haciéndose daño en el tronco donde se sujetaba con fuerza, apoyando su frente en el tronco. -¡Por favor! No ahora… ¡¡Vete!!

-No lo hare… -dijo Sakurai con una triste y nerviosa sonrisa, viéndolo.

-Por favor… -rogo Inoue sollozando. -Debes irte… No puedo… Desde que apareciste en mi vida yo ya no puedo pensar correctamente… ¡Ya no tengo control de mí mismo!- grito Inoue.

-Ya somos dos- se encogió de hombros Sakurai, casi indiferente. -¿Crees que en realidad mi cabeza esta tan tranquila como aparento? Todo el tiempo estas en mis pensamientos. Solo puedo pensar en que estarás haciendo, si te gustaron mis obsequios… Incluso llegue a permanecer toda la noche mirando por la ventana pensando si debí escribir otra cosa diferente en alguna de mis cartas… -termino riendo.

-¡¿Por qué ríes en esta situación?!- cuestiono Inoue viéndolo desesperado.

-Me di por vencido, cariño- sonrió el hombre con aquella expresión tan serena. -Me di cuenta que me enamore de ti, y siempre he sido fiel a mis sentimientos… El problema que ambos vamos a tener que vencer es tu miedo por tus propios sentimientos- comunico con la misma paz, acercándose a Inoue que inevitablemente retrocedió.

-Vete… -susurro como último recurso débilmente.

-Y ahora estoy aquí… Rogándole a un hombre que me dejo esperando y huye en el menor movimiento que hago… -musito Sakurai ahora perdido en los ojos llorosos de Inoue. Él levanto una mano y retiro una lágrima negra. -Sé que tú y yo podemos tener a quienes queramos, pero yo quiero saber hasta donde el destino quiso que llegáramos juntos. Porque escribió que debo sentir algo tan extraño por ti…

-No me conoces… -gimió Inoue atormentado.

-Puede y sea cierto, pero tenemos la eternidad para hacerlo, ¿no?

-¿Por qué…?

-Deja de pensar, cariño- sonrió Sakurai apoyando con cuidado a Inoue en el tronco. -Será tu muerte…

-No puedo hacer eso. ¡Muchas personas importantes para mi necesitan de eso!

-¿Y qué hay de ti, amor?

-Yo no importo… No mientras ellos sean felices…

-Bien, si tú piensas en eso, hazlo. Yo me encargare de ti… -rio apartándole con cariño el cabello revuelto de su rostro.

-No lo hagas…

-Te dije que te esperaría y nunca te dejaría ir… -susurro Sakurai en su oído. Inoue se estremeció por el íntimo y extraño contacto.

-Yo nunca acepte eso. Esto que estás haciendo no es ‘esperarme’- exclamo Inoue recuperando un poco de su desordenada mente.

-Cierto… Entonces cambio mi promesa a: Siempre te amare y perseguiré. ¿Qué te parece eso?

-¡Idiota!- Inoue trato de separarlo de él, pero no encontró mayor fuerza con el hombre escondiéndose en su cuello, depositando ahí su caliente aliento que solo lograba debilitarlo más.

-Juro que mi propósito no era imponerme a ti, cariño… Ayer, mientras te esperaba, solo podía recordar todo lo que averigüe de ti por otras personas. Di con el hecho de que te muestras muy poco pero aun así ellos te entienden… Pensé… Me pregunte sino era mejor alejarme, viendo que tienes mucho a cuestas, pero no lo acepte… Recordé también tus ojos…

-¿Qué?- Inoue miro atentamente a Sakurai mientras se reincorporaba y le levantaba el rostro con ternura, acariciando con su pulgar su labio inferior.

-Mi madre siempre solía decir que mirara con mucha atención los ojos de las personas. Ahí se encontraban todas mis respuestas, todos los sentimientos… todo… Y tú me hechizaste desde la primera mirada…

-Eso no es…

-Inconscientemente pides amor, muerte… pides tantas cosas confusas en tus ojos, Inoue…

Y fue entonces que Inoue perdió por fin su cabeza. Él solo cerro los ojos cuando Sakurai robo su aliento en un dulce rose de labios. Abrazándolo por la cintura, guiando en aquella caricia que Inoue solo había dado una vez por algunos segundos, pero en esa ocasión era una eternidad.

Un bienvenido calor se extendió por su normalmente frío cuerpo. Inoue simplemente se aferró a la fuente de su desorden mental y devolvió lentamente aquello que simplemente se desbordo.

-Solo entrégate, Inoue. Yo te cuidare y amare siempre…

-Ojala fuera verdad… -susurro aturdido Inoue sin verlo. Sakurai solo volvió a besarlo, dejando que los malos sentimientos se fueran con el fuerte viento que soplaba y provocaba una lluvia de pétalos rosas.

Ya después lograría que ese terco hombre dejara de pensar tanto.

 

 

-¿Nombre?

-Magno Hayes…

-¿Mundo de procedencia?

-Imi-nashi…

-¿Motivo de su visita a Celes?

-Ahora, eso es lo interesante… -La mujer detrás del escritorio levanto la mirada y sin evitarlo se estremeció de la maldad en los ojos por completo ónix.

-¿F-familiar o conocido que resida aquí?- continuo nerviosa la chica mirando de nuevo el formulario que llenaba.

-Kazuhiko Inoue… Él espera ansiosamente mi vista. Después de todo, solo por él vine…

 

Continuara…

 

 

Notas finales:

No me acuerdo si tengo que aclarar algo D:

 

Aun asi, y de nuevo, mil gracias por seguir leyendo a esta novata en escribir y tratar de invitar en mi inmenso universo, que es mi fantasiosa mente~

Sin ustedes yo solo seria una chica loca que escribe por solo hacer algo, pero ahora tengo un motivo para estancarme, entregarme e imaginar. Tambien solo por ustedes aguanto calambres en el trasero por pasar horas enteras en la lap ;)

Espero y el proximo año sigan leyendo y les siga gustando. 

Aun habra mas tiernosos Chaton~

¡¡Feliz año!! Que este y todos los futuros años todo vaya bien en su vida. Miles de gracias, besos y abrazos desde aqui .w./

 

Y dicho eso, nos leemos el proximo año. No olviden comentar y ayudar a Daisuke con el confundido Inoue >w<

Nos leemos ^^/

Cuidense mucho~

 

Christal Celeste. 31/12/2013. 8:30 pm.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).