CAPITULO 1
“Ojala nunca te hubiera conocido”
Lo odiaba con tanta fuerza que Dolía, pero al mismo tiempo lo necesitaba tanto, era mi perfecta droga, soy adicto a El cada día más. Pero maldigo el día en que te conocí, ojala nunca mis ojos se hubieran cruzado con los tuyos.
Me arrepiento de amarte todavía, no sabes cuánto me cuesta no pensar en ti, en mi mente todos los días lo único que pienso es, ¿estarás bien sin mí? ¿Aún me sigues recordando?...
¿Eran verdaderas todas esas promesas de amor?, recuerdo cuando mirándome a los ojos decías que algo había cambiado en ti cuando nos conocimos, que estabas tan feliz de que estuviéramos juntos, Que jamás nadie nos iba a separar…
Ahora sé que solo eran algunas de las muchas estupideces con mentiras que inventabas para que te creyera el cuento de lo “tan” enamorado que estabas de mí.
Fui un ciego y total estúpido al creerte todas esas cosas maravillosas con las cuales me fuiste enamorando poco a poco, que irónico fue el destino al decidir que yo me enamoraría de la persona que odiaba con todo mi ser, la persona que me hacia la vida imposible, ¿porque no me di cuenta antes?... Él y yo éramos polos totalmente opuestos, como el negro y el blanco. Éramos personas totalmente diferentes y aun así yo caí rendido y enamorado el mismo instante que me hiciste todas esas promesas de amor….
un vendaval demasiado fuerte me saco de mis pensamientos, el fuerte aire que sacudía naturalmente las ramas de los árboles y el delicioso aroma de las flores hacia remolinos por el campo, me hizo temblar ligeramente por la falta de alguna prenda que me cubriera, tome una nota mental de la próxima vez asegurarme de traer alguna manta o suéter .
El agua del pequeño Rio debajo de mis pies empezó a tornarse un poco Fría, así que decidí que era momento de regresar a casa. Inevitablemente mientras me levantaba de la arena, acaricie amorosamente mi abultado vientre de 7 meses….
Mi embarazo es una caso muy especial, solo algunos hombres tenían la bendición de poder crear vida en su interior, y más especial porque casi nadie resultaba en estado a la edad de 16 años, muchas veces mamá me dijo que su Bebe iba a cuidar de otro bebé, y tenía tanta razón, yo apenas era un adolescente que pereciera que cuidaría de su hermanito cuando mi Hijo naciera, tampoco quiero decir que no deseo a mi bebé, lo amo desde el momento en que descubrí que esperaba un angelito , al principio cuando me entere que estaba esperando, sentí tanto miedo, miedo a tantas cosas que ni siquiera me daba cuenta de la personita que estaba en mi vientre sufría por mis estúpidos pensamientos.
En esos momentos de soledad al pensar que algo me pudiera dañar a mí y a mi Pequeño Niño aun no nacido, un Pedacito de mí que no tenía la culpa de las tonterías que cometió su tonto Padre
Pensaba que en cualquier momento alguien vendría a quitarme a mi Bebé, inclusive pensaba que mis propios padres me dirían que de cualquier modo me deshiciera de mi pequeño. En mi mente solo pensaba en tantas posibilidades, en cosas malas que me obligarían a escapar de un momento a otro.
Al principio de los meses se me hacía difícil estar solo sin EL a mi lado, aunque me costara admitirlo, lo necesitaba y mi Bebé también necesitaba de su Otro Padre, el padre tonto que daño el corazón de su Papi, esta situación hacia que por las noches me encontrara llorando silenciosamente sin que nadie me escuchara aferrado a la almohada para callar mis sollozos
Mientras que yo pasaba en momentos tan difíciles, inconscientemente me la pasaba pensado en El, inclusive yo mismo me odiaba tanto porque no dejaba de recordarlo cada día, tan solo el hecho de pronunciar su nombre me provocaba escalofríos y los incontrolables latidos de mi corazón hacían resaltar el gran medio que tenía, y aun así lo amo tanto que Duele…...
-¡Dave!- El grito que dio mi Tío Tom llamando mi atención me saco de mis pensamientos - ¿Dónde te metiste?, te he estado buscando para que me ayudaras a preparar la comida.-
- Perdón Tío… es que estaba dando un pequeño paseo por el Rio- Le dije para que no sufriera de un pequeño regaño ya que me había salido sin siquiera avisarle a nadie a dónde saldría.
Después de enterarme de mi embarazo, tome una decisión y les dije a mis padres que de un modo u otro quería irme de ahí, no quería quedarme ni un instante más en un lugar donde me siguieran haciendo daño y donde también habitaban tantos recuerdos, Aunque no me sentía con derecho de pedirle nada a mis papas . A Toda costa protegería con uñas y dientes a mi pequeño Bebé, por nada del mundo permitiría que me quitaran a mi hijo.
Inmediatamente mis padres entendieron porque tan desesperadamente les rogaba que me enviaran lo más lejos posible de ese lugar, así que ellos tuvieron una pequeña charla con mis Tíos que Vivian en la casa de campo, alejada de cualquier peligro y en donde no existía tantas cosas urbanas, eso es lo Yo necesitaba un lugar alejado del mundo. Mis Tíos sin rechistar me aceptaron después de que yo mismo explicara mi difícil situación, ellos desde luego me entendieron y termine mudándome a su gran casa en el campo.
El Tío Tom y su esposo Jake me recibieron con todo el amor posible, sin dejar de lado a mis 3 pequeños primos, Alyn, Jason y el Bebé de ahora 3 meses Mikel, su casa esta tan llena de cariño y amor, son una familia totalmente unida que me aceptaron como uno más de ellos.
Cuando yo me mude con ellos, mi tío Tom recién se acababa de aliviar del parto del bebé Mikel, así que en agradecimiento por dejarme vivir con ellos, yo cuidaba y atendía a mi Tío en lo que necesitara con el Bebé como preparar su biberón, en algunas ocasiones cambiarle el pañal e inclusive arrullarlo cuando lloraba, además de que me servía de entrenamiento para cuando tuviera a mi Pequeño, y mi primito es una hermosura andando, tan pequeñito que perece un muñequito.
-Dave…Dave… ¿Cariño estas bien? – La voz preocupada de mi tío preguntándome me hizo prestarle atención.
-Si… Si… Tío estoy bien ¿Por qué preguntas?- le dije un poco desorientado por la inesperada pregunta.
-No lo sé Pequeño… es solo que últimamente has estado más distraído de la normal, ¿te sientes bien? ¿Quieres que llame a tus papas?-
-¡No!, no es necesario que los llames, Yo…. Estoy bien, no te preocupes, es que estaba pensando en tantas cosas que a veces me pierdo en mis pensamientos… es normal, no te preocupes- Le dije tratando de convencerlo y era verdad que me quedaba tan enmiscado en mis pensamientos que era inevitable no darme cuenta de lo que pasa a mi alrededor, eso a veces me traía problemas.
-Está bien… solo que para la próxima quiero que me avises a donde saldrás, para que no me des estos sustos ¿de acuerdo?-
-Si Tío te prometo que lo hare- le dije, y al fin pudo tranquilizarse, me sentía un poco culpable por haberme salido así sin avisar, pero cuando me pongo nostálgico y recuerdo cosas que me gustaría olvidar, me hacía no imposible querer apartarme de todo para poner mi cabeza en orden y salir a dar un paseo por el pequeño y tranquilo Rio.
Nos encaminamos hacia la casa, para poder preparar la comida ya que llegaría mi Tío Jake con demasiada hambre como para devorar una vaca completa, eso es lo que dice mi tío Tom cuando ni siquiera da un respiro mientras come con mucha prisa, mis Tíos tienen varios terrenos de campos donde se siembra diferentes cosechas, así que era un negocio duro donde trabajaba de tiempo completo mi tío Jake.
Mi tío decidió preparar Pollo empanizado ya que es el favorito de los niños acompañada con espagueti y ensalada para mí, dice que debo comer saludable por mi pequeño angelito como de cariño le dice, mientras nosotros terminábamos de preparar la comida, después de un rato llego mi tío Jake con mis primos que se veían muy felices y cansados después de ir con su papá a trabajar al Campo, así que exclamaban que tenían demasiada hambre.
La comida ya estaba lista, así que todos nos sentamos a la mesa a degustar el rico sazón de mi Tío, luego de servir la comida se volvió escandalosa porque Jason y Alyn le contaban las anécdotas a su Papi de las aventuras que vivieron en el campo ayudando a su Papá con las vacas y Gallinas.
-¡Papi fue divertido vimos a una vaca que le daba de comer a la pequeña vaca bebé! – decía mi primito Jason de 5 años, como todo un niño emocionado por su primera experiencia.
-¡Si… y también vimos a las gallinas que ponían huevos en sus casas!- Dijo la pequeña princesa de la casa mi Prima Alyn que ya contaba con sus 7 añitos y era todo una preciosura y la consentida de sus papas.
- Estaban tan emocionados que no querían regresar a casa, decían que querían quedarse a vivir por siempre con los Animales- Dijo divertido mi tío Jake viendo con tanto amor a sus hijos, es imposible no pensarlo, ama tanto a su familia que mataría por ellos, por eso mi tío Tom se enamoró de él.
Mi Tío Tom también miraba con tanto amor a su familia, mis primos seguían platicando como les fue en el campo con su padre, cuando de repente se dejó escuchar el llanto de un bebé, eso solo significaba que era la hora de comer de Mikel, así que mi tío rápidamente lo trajo para darle su biberón. Todos amaban tanto al pequeño bebe de la familia, sus hermanitos lo veían todo el tiempo y lo llenaban de muchos besos. Que decir de mis Tíos, mis 3 primos tiene a los mejores padres del mundo.
Tiempo después de tantas aventuras con Las pequeñas vacas Bebes, mi tío Jake tenía que ir de nuevo al campo para vigilar al ganado y Demás cosas. Mis primos se fueron a jugar afuera donde su Papá pudiera vigilarlos, mi tío Tom tenía que dormir al bebé así que solamente quedaba Yo. Aproveche el momento y le dije a mi tío que fuera a descansar mientras yo recogía y limpiaba la mesa, cosas pequeñas ya que no pida hacer demasiado esfuerzo.
Al final de la tarde me sentía un poco cansado así que terminado mi deber me decidí ir a descansar un poco, cada día me sentía un poco pesado y los pies se me hinchaban, no era fácil pero me encantaba saber que mi bebé estaba sano ahí dentro en el interior de mi vientre el lugar más seguro en el mundo.
Con mis 7 meses recién cumplidos sentía que era más fácil sin los síntomas de los primeros meses, en los que a veces me mareaba de repente o los vómitos que llegaban de sorpresa. Pero ahora estaba mejor, solamente que mi espalda me llegaba a doler algunas ocasiones y me cansaba más seguido.
Mi tío Tom decía que todos esos síntomas nuevos eran normales, aunque cada embarazo era diferente en cada persona, y el mío no resulto ser tan difícil en su opinión.
Tomada la decisión me dirigí a mi habitación para poder descansar un poco, mi habitación era de lo más sencilla con solo una cama individual, el escritorio y el tocador de madera es ahí donde se dirigió mi mirada al observar la foto de mi familia, los extrañaba tanto aunque estaba con mis tíos no podía dejar de pensar en cómo estarán mis Papas o mi hermanito, cuando me fui los deje tan tristes que a veces me entraban las ganas de regresar a casa con ellos. Pero tenía que ser fuerte por el bien de mi Bebé, quiero que nazca en un lugar donde no le hagan daño, no creo que mi corazón resista que algo le suceda a mi Angelito.
Aunque sé que tarde o temprano tendré que regresar a donde pertenezco, donde está mi familia, voy a ser fuerte tengo que tomar fuerzas de donde sea para poder resistir, y proteger a mi bebé cueste lo que me cueste.
Inevitablemente pensar en Mi Verdadero hogar, pensar en mi Familia, me hacer llegar a recordar de nuevo el episodio doloroso que pase hace meses. Más específicamente me hace pensar en “El”…. A veces deseo tanto no haberlo conocido nunca, que nunca me hubiera hablado, que nunca me hubiera enamorado de EL.
Mientras me acostaba en la cama no pude evitar tomar el pequeño collar que guardaba secretamente debajo de mi almohada, el collar de corazón que tenía grabado:
“D y T por Siempre”
Por Siempre… eso era lo que creía cuando tontamente me enamore perdidamente de EL, cuando sus promesas me hicieron ver el cielo y después de ver el cielo, EL mismo me hizo bajar al infierno cuando pude ver todo con mis propios ojos.
Cuando entendí que todas las promesas, todas aquellas confesiones de amor, solo eran parte de la gran obra de teatro donde Yo era el actor principal que cayo enamorado del Actor popular que todos conocían, que todos adoraban. Que un pobre tonto Nerd como Yo no merecía ser feliz. Al final solo fui el payaso de la Obra y tú el Héroe de la historia.
Mis lágrimas incontrolables tocaban el collar con tristeza, como si quisieran quemarlo para ya no recordar más, para que acabara el dolor. Llore silenciosamente como cada noche lo hago cuidando que no escucharan mis Tíos, no quería preocuparlos más. Ahogando mis sollozos sobre la almohada que conocía todos mis secretos.
Llore y llore hasta que ya no tuve más lágrimas, frotaba mi vientre con tanto amor, hablando con mi Hijo, diciéndole que lo amaba tanto, que jamás lo iba a abandonar, que cuando naciera conocería a toda su familia que estaban mas que ansiosos de conocerlo, que recibiría tanto amor de mi que voy a hacerlo en niño más feliz del mundo.
No supe en que momento me empecé a quedar dormido… y de nuevo sentí ese sentimiento llamado Miedo, porque aunque no lo admitiera le habia mentido a mi Tío al decirle que todo estaba bien, no le dije la verdad al decirle que por las noches aún tenía pesadillas.
Esas pesadillas eran el maldito recuerdo de lo que sucedió hace meses, aún tengo grabado en mi piel la realidad al darme cuenta del engaño de mi “primer Amor”
Ese sueño de nuevo que no me dejaba en paz y que dolorosamente me hacía recordar lo que sucedió, todo lo que sucedió antes de que pasara todo esto, antes de vivir con mis Tíos, antes de esperar a mi Bebé … cuando lo conocí a EL.
El doloroso recuerdo lo llevo tan grabado que pareciera que fue ayer cuando sucedió….