Sabes algo, siempre me he preguntado por qué me enamore de ti, eres un idiota, mandón, brusco, un completo bastardo…
Porque si yo, digiera todo lo que me has hecho, probablemente, yo ya no estuviera a tu lado, estúpido marimo.
Pero, aun a si te sigo amando, como la primera vez.
Aun me pregunto por qué hago todo esto por ti, todas tus fantasías, desde que vivimos en el departamento.
¿Cuántas veces te he hecho un striptease?, la verdad es que no me acuerdo
Vestirme como mujer- solo para que tú te sintieras cómodo en la calle-.
¡Y eso es lo que estoy haciendo justo en este momento!
*quiero que te vistas de maid, rizado*-aja si, y yo, que te hago caso.
Es incomodo ¿sabes?
El corset, aprieta, pero no te preocupes, luego me la cobrare.
Me coloque la “liga” en la pierna derecha, y acomode la tiara en mi cabeza, solo con verme me mojo, ok, ok yo tampoco me quedo atrás, cabeza de musgo.
*narro yo*
El rubio corrió hasta el cuarto que compartía con su pareja, abrió todos los cajones, hasta que lo encontró.
Pues claro de que serbia todo el disfraz si se colocaba unos bóxer, pues no Sanji, como buen pervertido que era, aun, conservaba la ropa femenina, de sus denominados “tiempos oscuros”.
Cual elegiría, la negra con encaje o la blanca de suave algodón, solo con pensarlo su miembro despertaba.
Al no tener nada debajo de la minúscula falda, se notaba, y mucho, eligió, una de color fucsia
Le apretaba, pero solo tenía que esperar, dirigió la mirada al reloj de la mesita de noche, solo esperar una hora, y su marimo, llegaría y lo haría, suyo.
Solo con pensarlo, sentía unas ganas tremendas de masajearse, pero para eso tenía al cabeza de césped
~***~
*narra Zoro*
Simplemente no me podía concentrar, esos niños no aprenden, arggg, cuál es su problema solo tienen que luchar.
Yo, cuando tenía su edad derrotaba a todos, a adultos, a niños…, a todos menos a Kuina, tsk…
Pero que tiene casi todos, además solo fuero dos mil y un veces, ni que fuera tanto.
-¿por qué sonríe, zoro-san?-un niño, ha cierto lovo, pobre a veces me da pena, sus padres le pusieron lovo.
Era cierto estaba sonriendo.
-por nada-le respondí cortante, el niño solo fue a seguir entrenando.
Tsk… que molestos.
Que estará haciendo el cocinero, cuando llegue lo follare, relamí mis labios y mi pene dio un tirón.
Tsk, estúpido cocinero, solo con pensar en eso se me pone dura, levante mi mano derecha y vi mi reloj, faltan cuarenta y cinco minutos, no es tanto, solo tengo que esperar.
~***~
*narro yo*
Cuando termino de dictar las clases, Zoro se subió a su moto, y partió rumbo hacia su departamento, o al menos eso creía él.
Luego de dar vueltas por la ciudad, al fin las calles dejaron de moverse de su sitio, y pudo llegar a su residencial.
Volvió a relamer sus labios, que le habrá preparado el rubio, se moría de hambre
~~~~~~
Mientras tanto el rubio terminaba de preparas onigiris, con la palabra “amo” escita con algas marinas, se separó de su creación y los contemplo.
Sintió como sus mejillas ardieron.
Su “amo”estaría a punto de venir…
TO BE CONTINUED...