Era otro día de escuela como tantos otros, me levanté temprano y pasé a la academia para ensayar para las audiciones que se venían, tal como lo he hecho desde que llegue desde Tailandia, día tras día los mismos pasos, la misma música, el mismo camino de ida y regreso, nada especial que perturbe mi tranquila y feliz vida.
Luego del ensayo regresé a mi casa por un poco de comida y una rápida ducha para poder ir a la escuela, aún me quedan un dos años en la secundaria y por suerte aquí en Corea encontré una escuela flexible que me permitiera entrar un poco más tarde de lo normal para así dedicarme al igual que mis compañeros a proyectos como futuros artistas, lo mejor es que dentro de la escuela todos somos iguales, el ser un extranjero es cosa común, quizás por eso logré acostumbrarme rápidamente a esta nueva experiencia.
Ya llegando a la escuela, saludé a mis compañeros que fui encontrando de camino a mi clase, conozco a mucha gente de distintos cursos, pero podría decir que no soy de muchos amigos, soy amable y alegre pero no precisamente lo que la gente llamaría extrovertido, no tengo problemas con nadie pero tampoco soy amigo de todos, de hecho el único a quien puedo llamar amigo es Yugyeom quien entró a la escuela este año, al igual que yo, y desde el inicio nos hemos llevado excelentemente.
Mi sala es amplia, de paredes pintadas pulcramente de un blanco enceguecedor con grandes ventanas que dan a un pequeño parque que está dentro del recinto de la escuela, mi asiento esta junto a la ventana así logro desconectar mi mente de las clases y concentrarme en el suave sol de primavera que estos días acaricia todo a su alrededor, sé muy bien que aunque no tome atención tendré buenas calificaciones gracias a mi excelente memoria.
Clases de Biología… era casi medio día y ya no soportaba escuchar las clases, me sabía lo que el profesor explicaba de memoria, me concentré en el ventanal a mi lado y allí mi vida comenzó a perturbarse, ví a una figura extraña sentada sola en una banca del parque, luego llegó nuestro inspector quien le tocó el hombro y le hizo un gesto para que lo siguiera… En ese momento, distinguí levemente sus rasgos, cabello oscuro y liso, piel no muy pálida pero no logré divisar más, ya que una gorra negra me ocultaba su rostro, eso hasta que dirigió su vista al cielo antes de seguir su camino y ahí pude verlo… Wow! sus ojos rasgados, su inmensa sonrisa al sentir el sol en su cara, su blanca sonrisa me dejo deslumbrado y con su imagen rondando en mi cabeza me mantuve hasta el receso sin saber quién era.
Pero mi duda no duraría mucho, llegado el receso la escuela era un completo alboroto, todos hablaban de lo mismo, aunque yo no entendía bien, Yugyeom que era mas curioso averiguó y llegó a contarme de qué se trataba todo ese revuelo
-Bambam!!, ya sé porque tanto caos…Llegó un estudiante nuevo esta mañana –decía casi sin aliento, pues había corrido de un extremo a otro del patio a contarme.
-Y eso qué? No es como si nunca llegarán nuevos… - Realmente no entendía, pero mi mente dio un respingo al recordar al chico de la gran sonrisa.
-Dicen que es muy talentoso, que baila y canta, además tiene una personalidad muy especial y extrovertida, dicen también que es “salvaje” – Yugyeom iba enumerando con sus dedos todo lo que había escuchado en su breve “investigación” – Ahh y también dicen que es sexy, en conclusión un nuevo Líder, que se sumó al grupo de Jb-hyung
-Ahh entonces realmente es una persona con personalidad y talento, no cualquiera es integrado a ese grupo – no sabía por qué pero mi voz había sonado más amarga de lo esperado.
Así ese día continuamos conversando y todo continuo casi como de costumbre, claro a excepción del nuevo popular de la escuela, poco a poco yo al igual que todos me iba acostumbrando a la situación, no era tan distinto como lidiar con Jb.
Jb y su grupo de amigos estaban en último año, todos ellos eran talentosos e inteligentes, además de guapos, evidentemente todo lo necesario para ser populares.
La sensación amarga que me invadió al conversar sobre el nuevo la primera vez con yugyeom no me abandonó sino que fue creciendo conforme avanzaban los días, cada vez que lo veía a lo lejos no podía evitar sentirme atraído, su voz, su risa, la forma en que trataba a quienes lo rodeaban me hacían mantener mi vista en él, cosa que yugyeom varias veces me había criticado. Al cabo de un mes, ya podía describir su rostro con los ojos cerrados.
-Jackson… Jackson Wang – Yugyeom me había sacado de mi ensueño en la clase de Química
-Qué? Ese nombre no esta en la materia Yugyeom, concéntrate!...- No entendía nada
-Idiota, es el nombre del nuevo de último año, ese al que tanto miras, y viene de Hong Kong solo por si te interesa.. –finalizó el menor, ya que el profesor lo miraba con ira por interrumpir su exposición sobre los carbonos
Jackson Wang… ese era su nombre, le quedaba bien, pensé.
Habían pasado unas semanas desde que había conocido su nombre y todo seguía igual, no estaba en mis planes ir y declararme, no porque fuera un hombre yo hace tiempo había asumido que no me gustaban las chicas aunque ningún hombre hubiese llamado mi atención, hasta ahora, pero no sería de su agrado.. un chico tímido y común como yo no podría ser especial para alguien como él, definitivamente no.
Era un día de primavera poco común, las nubes amenazantes acompañaron mi camino a la escuela y un par de minutos después de entrar comenzó a llover, a la hora del receso nadie salió al patio pues la lluvia no había cesado, yo por mi parte preferí salir ya que estaba ahogado entre las paredes de la sala y un poco de lluvia primaveral no me haría daño, me senté en una banca del pequeño parque y cerré los ojos para sentir el agua mojar mi rostro. Estaba perdido en mis pensamientos cuando escuché a mi lado a alguien tararear una melodía… Abrí los ojos y mi acompañante fortuito era nada más y nada menos que él, y me miraba mientras seguía tarareando la melodía con sus audífonos puestos. De pronto se paró…
-Permiso, no quería interrumpir tu descanso, me iré… - me dedico una leve reverencia – Pero oye, no te quedes aquí afuera como si nada- sus ojos estaban fijos en mi, su mirada era tan profunda, se quitó la gorra que llevaba y me la puso. Yo estaba en shock
-eh… no te preocupes – fue lo único que logré articular
-no, no es problema, quédatela… - me dirigió su sonrisa fulminante, se acomodó los audífonos y antes de seguir su camino y sin dejar de mirarme, cantó - So shine bright tonight, you and I- y luego se marchó tarareando solo la melodía.
Luego de ese fugaz encuentro yo estaba desconcertado, y cada vez que me lo topaba en los pasillos o en el patio el me dirigía una gran sonrisa, lo que no ayudaba a mis intenciones de olvidar mi atracción hacia él.
Ya había pasado tiempo y era el aniversario de la escuela, según me habían contado todos los años se hacía una gran celebración donde habían competencias y demás. Las festividades para mi transcurrieron con tranquilidad a excepción de la muestra de talentos, donde claro jb y su grupo presentaron un tema con el cual dejaron a todos impresionados, claro que yo no haba quitado mi vista de Jackson quien bailaba con destreza y cantó algunas partes desatando la locura de su pequeña fanaticada escolar, yo también presenté un pequeño baile junto a mis compañeros de clase incluido Yugyeom, nada muy sobresaliente pero quedamos conformes. Terminadas las competencias y demás venía la esperada fiesta de aniversario, a la que yo no planeaba asistir en un principio pero luego de la insistencia de mi amigo cedí.
La noche de la fiesta había llegado, se realizaría en un salón de la misma escuela. Yo vestía una camisa que me había enviado mi madre y unos jeans que había comprado hacia unas semanas, Yugyeom no vestía muy distinto a mí, así llegamos a la fiesta que estaba llena, fuimos con mis compañeros, pero ya pasada la media noche comencé a aburrirme entre tanta gente y fui al patio a despejarme, la verdad había visto a Jackson bailar toda la noche con distintas chicas y chicos que llegaban a su lado, pero yo no me atrevía y eso me tenía frustrado.
Ya sentado afuera en la banca del parque, podía escuchar la música a lo lejos, suave pero con claridad, poco a poco me fui perdiendo en mis pensamientos hasta que un deja vú me trajo de vuelta a la realidad de la tibia noche. Jackson estaba sentado a mi lado, mirándome.
-Parece que este es tu lugar favorito, lo tendré en cuenta cuando quiera encontrarte – su sonrisa atacaba nuevamente.
-Deberías estar bailando –dije intentando sonar despreocupado
-Estaba ahogándome, no me dejaban tranquilo – sonrió con suficiencia – ser yo no es fácil.
-me imagino – dije mirando el suelo, no era capaz de verlo a los ojos – debe ser difícil ser popular, guapo, talentoso y admirado por todos – dije en tono de broma
-No seas cruel – su voz era seria, lo miré a la cara – preferiría ser como tú, eres talentoso y lindo pero vives tranquilo –sentí mis mejillas arder.
Luego de eso nos quedamos en silencio por largo rato, escuchando la música que sonaba a lo lejos, de pronto comenzó a sonar una canción conocida, era la de su tarareo de aquella vez. Se puso de pie rápidamente frente a mí y extendió su mano.
-Bailemos, amo esta canción – su mirada estaba fija y era casi suplicante
-ehh, pero… - no tenía excusas para decirle que no
-no te niegues, solo me falta bailar contigo… vamos será entretenido.
No podía negarme, su petición era sincera y sin mala intención, qué podría saber él de mis pensamientos de todos modos.
Comenzamos a bailar siguiendo el ritmo electrónico
Find light in the beautiful sea
I choose to be happy
You and I, you and I
We're like diamonds in the sky
Tomó mis manos y entrelazó sus dedos con los míos mientras continuábamos bailando…
You're a shooting star I see
A vision of ecstasy
Me acercó a su cuerpo, poniendo mis brazos alrededor de su cuello…
When you hold me, I'm alive
We're like diamonds in the sky
De pronto su voz sonaba suave en mis oídos, estaba susurrando la canción para mi, mientras me acariciaba mi mejilla con una de sus manos…
I knew that we'd become one right away
Oh, right away
At first sight I felt the energy of sun rays
I saw the life inside your eyes
Se separó de mi un paso y me miró a los ojos por un momento para luego tomar mi rostro entre sus manos y acercar sus labios lentamente a los mios, un largo y dulce beso que se hacía más profundo, separó su rostro y me sonrió de una manera tan tierna, como jamás lo había visto. Abrazados continuamos besándonos, mientras bailábamos su canción favorita.
-No puedo creer que finalmente te haya besado… -la canción ya había terminado
-ah?- estaba desconcertado
-Sí, te vi cuando recién llegué a esta escuela, tu mirada perdida en el ventanal, luego me viste yo intenté disimular, pero no pude salir de tu vista sin antes dirigirte una sonrisa, después de eso pensé que me hablarías o me buscarías, pero nada… siempre estabas lejos, a veces sentía tu mirada, pero parecía ser solo mi imaginación… hasta que te vi aquí, en este lugar y no dude en acercarme, te veías tan hermoso con la lluvia en tu rostro, me senté a tu lado y me relajé tanto que no me di cuenta cuando comencé a tararear la que ahora será nuestra canción e interrumpí tu descanso, me marché no sin antes entregarte algo que amaba para que me llevaras contigo de alguna forma, pero cuando vi ese pequeño destello en tu mirada supe que quizás tendría una oportunidad, aunque yo fuera un inmaduro en el que no te fijarías – sus palabras me tenían completamente sorprendido - sé que esto es extraño, pero no puedo negar que me gustas y cuando te vi bailar tan bien esta semana no pude sino sentir que me gustabas aún más…
-No sé qué decir… nunca llegué siquiera a imaginar que tu podrías fijarte en mi, soy tan común- simplemente no lograba creerlo…
-Por qué? Mira me gustas, solo confía en mí y relájate-Dijo mientras me estrechaba en un abrazo- Ahora que sé que te gusto, no lo puedes negar – su mirada ahora era juguetona –puedo decir que solo tengo ojos para ti mi pequeño tailandés… Permíteme hacerte feliz y demostrarte cuan especial eres…
No pude hacer más que rendirme al hombre salvaje y sexy que tenía en frente, acaricie su rostro intentando convencerme por enésima vez que esto era real y nos fundimos en un dulce beso, en nuestra propia fiesta alejados del resto... en nuestro lugar
Feel the warmth, we'll never die
We're like diamonds in the sky