Besos de altura
En ese gran edificio con muchísimos pisos de grandes ventanas, en el lugar más alto, se encuentra el CEO Choi Siwon quien, debido a su alto cargo, cuenta con una hermosa oficina de grandes ventanales que cubren del piso al techo.
Por supuesto que brillan con claridad a la luz del sol gracias al tímido chico de nombre Kyuhyun, quien cada semana usa su equipo especial y sube todos esos metros para limpiar aquellos ventanales. Kyuhyun sabe que es un trabajo difícil además de peligroso, pero tiene algo que lo alienta cada vez que llega al último piso, nadie sabe qué o quién se encuentra ahí, es su pequeño secreto.
Desde el primer momento en que Siwon vio a ese hermoso chico de piel clara y suave con su cabello esponjoso y rostro angelical, no pudo evitar mojarse, sí literalmente, porque olvidó que su café estaba en el viaje hacia su boca y lo dejó caer sobre sus pantalones, quemándose en el proceso.
Hizo tanto escándalo que su secretario HyukJae entró a toda prisa y sin siquiera tocar para ayudar a su jefe.
-Presidente Choi, ¡se ha ensuciado!, déjeme lo ayudo, debe estar muy caliente.
-Por supuesto que estoy caliente, casi ardo. Ven, acércate pequeño y lame hasta la última gota de esto que has causado.-
HyukJae se quedó helado al escuchar las órdenes de su jefe, -¿acaso le estaba llamando pequeño mientras ronroneaba? Por Dios, ¿qué va hacer ahora?- Por suerte Siwon reacciona y lo salva de su estado de shock.
-HyukJae-shi, ¿pero qué hace aquí? ¿No le dije que estaría ocupado y que solo podía llamarme si era urgente? Vuelva al trabajo ahora mismo.-
Y el secretario salió a toda prisa.
-Debo estar loco; mira que tener una fantasía a plena luz del día, en medio del trabajo y con un empleado presente. Espero no haber hablado en voz alta. Ese hermoso chico me va a volver loco o pervertido antes.- sonrió Siwon al pensar esto último.
Siwon pasaba cada mañana trabajando en su oficina y esperando ese deseado momento en que su hermoso ángel estaría fuera de la ventana haciendo esos lindos pucheros mientras dedicaba toda su atención a dejar impecable el ventanal. Como deseaba que el niño lo mirara tan solo por un segundo para apreciar esos hermosos ojos puestos sobre él, quería saber cómo se vería una sonrisa solo para él y si era posible observar esos labios fruncidos esperando por su cercanía.
Era en todo lo que podía pensar mientras robaba miradas del chico a unos metros de él, tan cerca y al mismo tiempo tan lejos. Pero lo que Siwon no sabía es que aquel chico siente una gran atracción por él y cada vez que va a trabajar, llega con una enorme sonrisa que nada ni nadie le puede quitar.
Estos hombres, ambos, están enamorados de un desconocido del que no conocen ni su voz, simplemente se miraron y cayeron rendidos a los pies del otro.
Así pasan los meses, entre miradas a escondidas, vistazos cortos y sonrisas discretas. Hasta que un día Siwon, el todopoderoso CEO Choi Siwon, ese que obtiene lo que quiere cuando lo quiere, no soporta mirar a lo lejos esa belleza y no poderlo tocar, está seguro que desea a ese chico y aunque parezca imposible sabe que lo ama como a nadie en este y los demás mundos. Por lo que decide que ese es el DIA y hará su movimiento para tener a ese ángel a su lado para toda la vida.
Ese día, Kyuhyun llega como siempre al trabajo, prepara sus herramientas del trabajo y pone a funcionar el elevador para comenzar la limpieza, al llegar al último piso ve algo muy extraño, la oficina de su amado está a oscuras y parece que vacía. Se entristece por no poder ver al guapo dueño de la oficina, pero aun así sigue con lo suyo. De repente se encienden las luces y Kyu sorprendido comienza a inspeccionar todo, observando que el piso está cubierto por hermosos pétalos de rosas, al pasar su vista hacia el centro descubre que el bello hombre está de pie ahí, con una enorme sonrisa y un par de hermosos hoyuelos enmarcándola, Kyuhyun está tan atontado que no se da cuenta que ese hombre se ha acercado a él y lleva en sus manos un cartel, cuando el desconcertado chico lee el mensaje en la pancarta, no lo puede creer, es lo más lindo que ha visto en su vida.
“Desde el primer momento en que te vi, no he podido quitarte la mirada de encima, mi vida ha tomado sentido, antes vivía sin esperar nada, pero desde que te conocí solo existe una cosa a la que quiero aferrarme con todas mis fuerzas… tú. ¿Quieres ser mi razón de vivir por el resto de nuestras vidas?”
Kyuhyun con lágrimas en los ojos solo pudo asentir, Siwon se acercó aún más a la ventana y estando frente a frente unieron sus vidas en un dulce beso tras el cristal.
En ese momento Siwon escuchó una gran cantidad de gritos, aplausos y todo tipo de ruidos; eran chicas coreando ¿WonKyu? ¿Pero qué estaba sucediendo? Siwon no tenía ni la menor idea, abrió los ojos y al frente de su cara encontró una pancarta roja con letras amarillas que decían WonKyu, cuando esta cayó, pudo deleitarse con el perfecto y rojo rostro de Kyu, Siwon solo pudo sonreír y abrazar a su hermoso amante mientras le susurraba al oído.
-Te amo.-
Era impresionante todo lo que se podía imaginar en un momento tan corto.