Por enésima vez el peli-plata miró su computadora sonriendo, ¡por fin el escrito ya estaba listo!.
Había sido todo una lucha acabarlo en tiempo record, más no se quejaba, hacía mucho tiempo que no escribía algo por gusto, sin presiones de Aikawa o Marukawa. Una simple idea que sin duda solucionaría en buena parte su vida y la de su amado inquilino. Más tarde le daría las gracias a querido amigo de cabellos negros por la inspiración.
Hacía un par de semanas Akihiko, por error, había presenciado como Takahiro instruía a su pequeño hermanito en las artes de la seducción y el amor, indicándole como tratar a una mujer y aconsejándolo sobre qué hacer en su “primera vez”. Todo esto sin sospechar que desde varios años Misaki ya había experimentado y demostrado a la perfección sus cualidades amorosas al novelista.
Más esto le dio una idea al peli-plata, aún había muchas cosas que el castaño desconocía, y que sin una pequeña ayuda, jamás descubriría.
-Usagi-san ¡Ya está el desayuno!-
Rápidamente el mayor imprimió su trabajo, le colocó un una portada así como un broche y sin dudarlo bajó a su estancia principal para estar con su inquilino.
Apenas bajo la escalera el peli-plata pudo deslumbrar una de sus imágenes favoritas de Misaki, quien concentrado servía el desayuno con un bonito delantal color morado.
De nuevo el mayor sonrío, ¿cómo podría el castaño enojarse con él cada vez que le decía que era muy lindo? Nunca el oji-verde se había visto en un espejo.
-Buenos días Usagi-san-
-Buenos días Misaki, tengo un regalo para ti-
Al escuchar esto, de inmediato el castaño salió de su concentración pensando el porqué del presente, pero sin poder preguntárselo a su acompañante, dio las gracias y vio como el mayor metía unas hojas de papel a su mochila para después sentarse en la mesa a desayunar.
No tardo mucho tiempo para que el universitario también se sentara a desayunar y olvidara las hojas de papel que el escritor le había dado como presente.
Ese día el peli-plata estaba de muy buen humor y Misaki prontamente lo notó, sonreía mucho y platicaba de cualquier cosa como una persona “normal”, tanto que por un momento olvido las clases que tenía.
Cuando se dio cuenta de lo tarde que era, el castaño corrió de la mesa, acomodó los platos sucios en el fregadero, se despidió del novelista y tomó su mochila para salir corriendo después.
No hubo tiempo para que Usagi-san le explicara el presente a su niño, sin embargo confió quecon tan solo leer su título y primera hoja, Misaki entendiera cuál era su intensión.
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Ese día fue caótico para el castaño, había llegado tarde a su primera clase, su trabajo de inglés había sido un desastre y por si fuera poco no había entendido nada de economía.
Daba gracias al cielo que a medio día tuviera un descanso para organizar sus ideas. No obstante apenas se sentó en la cafetería escolar, vio las hojas que el mayor había colocado en su mochila.
Era raro que el novelista hiciera algo así, quizás era algo que estaba ocultando de su editora para evadir de nuevo su compromiso.
De inmediato tomó su celular para hablarle a la peliroja, más antes de que pudiera marcale pensó que sería buena idea leerlo ¿ahora en que estaría trabajando el novelista?
“El manual del buen uke”
Por Akikawa Yayoi
Introducción:
Manual que concede una guía de orientación sexual y social para aquel hombre tímido que no acepta sus sentimientos, en lo sucesivo denominado “uke”, mismo que no muestra o no sabe cómo demostrarlos a su respectiva pareja, en lo actual denominado “seme”.
Creado a partir del deseo de un hombre, que busca que su acompañante rompa la timidez, conozca y exprese con su cuerpo la locura y la lujuria que le provoca cada vez que está a su lado.
Este material es solo ficción, cualquier semejanza a la personalidad de alguna persona actual, si es viva o muerta es pura coincidencia. No permitido su lectura para aquella persona ajena al tema o menores de edad.
Cualquier reproducción total o parcial sea de forma escrita o electrónica, sin el respectivo consentimiento de su autor se considerara como un plagio y se demandara con las autoridades competentes.
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Capítulo 1:
Tu mi uke, yo tu seme.
Si eres tierno y lindo, te sonroja fácilmente, suspiras como “chica enamorada” cada vez que te acarician, no aceptas tus sentimientos y en la intimidad es el que “recibe” además de que gime como si no hubiera mañana. ¡¡Felicidades eres un uke!!
¿Pero qué es un uke? ¡Fácil! “El término uke término popular japonés que denota la representación artística, erótica o romántica de relaciones de amor homosexual entre dos varones. Desempeña el papel pasivo o sumiso; suele ser una persona activa y feliz, de menor edad que el seme, sumamente tierno. Los uke tienden tanto a sonrojarse como a cambiar de humor con facilidad”.
¿Es malo ser uke? No, ya que eres el único encargado de satisfacer, amar, provocar y complacer a tu hombre y pareja sexual en todos los aspectos.
¿Qué es un seme? El seme es aquel atractivo, inteligente, sexy y seductor hombre que realiza el papel “activo” en las relaciones homosexuales de la pareja. Pero no solo eso, es aquel que brindará protección y amor a su uke bajo cualquier circunstancia y bajo cualquier amenaza, por eso se debe entender que solo existe y se tiene un seme. No a dos ni a tres solo a UNO.
Como “uke” es tu primera responsabilidad no permitir que el seme se sienta confundido con respecto a esos sentimientos, como buen uke es TU obligación hacerle sentir que eres único y exclusivamente de su propiedad.
Bajo ninguna circunstancia mires a otros hombres (incluso si som amigos o conocidos) no rías, ni te sonrojes delante de ellos, no respires, míralos con odio, aléjate del lugar y ve inmediatamente a contárselo a quién más confianza le tengas (tu seme).
Si persiste esa o esas “alimañas” y tratan nuevamente de hacer conversación contigo a solas, míralos despectivamente, insúltalos si es posible y ve de inmediato con su seme, no te separes de él hasta que entiendan que ya tienes dueño y que lo amas con sobre locura.
Pasada la amenaza y en un lugar libre de personas molestas, demuéstrele a su seme que no hay de qué preocuparse. Pronuncia en voz alta lo mucho que lo quieres y que sin él tu mundo no sería nada, después poco a poco quítate la ropa e invitale a tocar tu cuerpo para que verifique que nadie más que él lo ha hecho suyo. Recuerde que en ese momento tu seme se encuentra bastante celoso y tiene la necesidad de marcar su territorio (ya sea por afuera o por adentro)
NOTA: Si tu pareja termina haciéndole el amor salvajemente, no te preocupes, recuerda que el seme puede tocar cuanto quiera tu cuerpo (Capitulo 2). Comprende que a ningún hombre le gusta que toquen lo que le “pertenece” y tiene que asegurarse que nadie más lo haya hecho…
Capítulo 2:
Toca juega y aprende (explorando tu cuerpo de “uke”)
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Misaki no pudo continuar con el relato ¡¡¡¿QUÉ DEMONIOS ERA ESO?!! ¿UN MANUAL DEL “BUEN UKE”? Casi le da un infarto al universitario, ya sabía perfectamente porque el mayor se encontraba tan feliz en la mañana ¡Era un imbécil! ¡Un pervertido! ¡UN IMBECIL Y PERVETIDO!
¿Desde cuando su cuerpo le pertenecía a él? ¿Desde cuándo tenía que dejarle a hablar a todos los hombres? ¿Y decirle que era “su mundo”? ¿Satisfacerlo en todos los aspectos? ¡Jamás! ahora si había exagerado el novelista.
De inmediato del coraje a Misaki se le revolvió el estómago, ¡Lo mataría! ¡Lo mataría! ¡Ahora si lo mataría!
Lleno de furia el castaño tomó sus cosas y se dispuso a marcharse a su casa para reclamarle al estúpido de su casero; sin embargo cuando estaba atravesando el lumbral de la universidad chocó con un maestro dejando caer al suelo todos sus documentos y revolviéndolos con los exámenes que traería el malhumorado profesor.
-¡Tenga más cuidado! ¡Concéntrese más en sus acciones!- Recibió fuertemente una amonestación el menor por su imprudencia mientras ayudaba a recoger los papeles. Rápidamente tomó los suyos y salió del lugar, sin darse cuenta que el Profesor Kamijou, el mismo que minutos atrás había chocado con él, se había quedado con una parte de “El manual del buen uke” escrito por su casero.
Misaki no se había dado cuenta pero esa tarde había desatado el caos en la universidad y en cierta parte de la ciudad pues “el inocente regalo” de Usami-sensei pasaría, sin querer, de mano en mano por diferentes personas.
CONTINUARÁ….
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