A la mañana siguiente Sarah y jake miraban con asombro la escena, Marianne le daba en la boca galletas y Jill las aceptaba con gusto. Jake al ver eso se llevó la mano con fuerza a la cara, tomo del brazo a Sarah y se la llevo al pasillo.
- Sarah…- dijo jake- ayer… ayer con Jill vimos… bueno…- se rasco la nuca- la razón por la cual ella esta así ahora es porque… ayer te vimos besando a un chico y ella se enojo bastante-
- ¿qué?- en aquel momento le entro algo de pánico y miedo, supuestamente había escogido el lugar por donde su joven prometida nunca pasaba, era como una mala jugada del destino o peor una mala broma.
- Lo más probable es que comience a salir con Marianne ya que ella tiene sentimientos por Jill, ella no quiere cometer los mismos errores que sus padres pero de igual modo lo hace- dijo jake descansando su espalda en la pared y se cruzo de brazos- desde chica es impulsiva y no piensa las cosas- sonrió de medio lado mientras recordaba algunos hechos de su infancia- eso a veces le traía consecuencias y duras-
- ¿Por qué actúa así tan a la defensiva?- le pregunto Sarah a jake- desde que nos presentaron he tenido la sensación de que sufre por algo, algo relacionado con su padre, algo que la ha dejado marcada y que termine siendo una chica fría y a la defensiva frente algún problema emocional-
- Si… de hecho es así por algo que ha ocurrido con sus padres, la relación entre el padre de Jill y ella es mala…- jake dio un gran respiro y cerró los ojos un momento- si te cuento su pasado… dime ¿qué ganarías tu?- aquella pregunta descoloco a Sarah por completo, tato que lo miro incrédula por la pregunta
- ¿qué?- logro decir al fin
- A lo que me refiero tu decías, que la odiabas y lo que yo te voy a contar es bastante serio y es mucha información, quiero estar seguro que no le aras daño a mi amiga, así que te are una pregunta, más bien dos- rio un poco- ¿Qué intenciones quieres lograr con la información que te daré? ¿Por qué?- sonrió antes sus preguntas- créeme que si no me gusta la respuesta no te diré nada –
- Que quiero lograr…- dijo pensativa- no es que quiera lograr… simplemente quiero entenderla, quiero poder apoyarla de otra forma, cuando tiene sus ataques, quiero sostenerla y levantarla, quiero de algún modo sanar su corazón, quiero lograr separarla del pasado de sus padres y que viva su vida- sonrió mientras negaba con la cabeza como si digiera algo descabellado o algo no propio de ella-mi modo de pensar es diferente con respecto a ella y no quiero hacerle daño, de hecho…- se sonrojo un poco y pidió a jake que se acercara- se ve mejor cuando sonríe- jake sonrió de modo burlón
- Me convenciste ven vamos a la azotea ahí te contare todo- dijo riendo, ambos se dirigieron al lugar que jake dijo, al llegar el cerro la puerta y se sentó apoyando su espalda en el barandal. Mientras Sarah se sentaba al lado de el
- Si te fuera a contar todo desde el principio… seria desde que la conocí- sonrió con nostalgia antes de relatar…
Inicio del flashback
Era el primer día de clases de un joven pelirrojo, iba de la mano con su madre vestido impecablemente con el uniforme del colegio el cual ingresaría en su primer año de educación, estaba algo impaciente pero se sentía feliz pero se sentía un niño grande.
Su madre le acompaño hasta la puerta y luego dándole un sonoro beso se despidió a punto de llorar, el niño sonrió a su madre y corrió al interior de la institución, con ayuda de una profesora encontró su salón lleno de niños y niñas jugando como si no hubiera un mañana. Al entrar el se unió a los juegos de unos niños que le invitaron de inmediato, todo iba perfecto para él, hasta que noto que no todos en su curso corría y se divertían, noto a una niña de pelo negro con ondas, quien se mantenía sentada en su pupitre mirando aburrida la ventana, a aquel niño pelirrojo le pareció curioso, pero le ignoro y siguió en lo suyo después de todo las niñas les transmitían piojos o eso escucho de uno de sus nuevos amigos. A los minutos llego su profesora, quien puso orden de inmediato y se presento. Las clases transcurrieron normales y aburridas para el joven.
Antes de finalizar las clases la profesora les entrego una hoja en la cual debían escoger una actividad complementaria de la hoja y entregarla mañana sin falta con firma del apoderado el niño miro la hoja con expectación, aun que sin saber leer, sabía que escogería y seria defensa personal o artes marciales.
Al llegar al auto de su madre le comento muy alegre lo ocurrido y le mostro de inmediato la hoja, la madre de aquel niño sonrió y leyó todas las opciones que tenía hasta que, dijo lo que el mas esperaba.
- Artes marciales…- no pudo continuar por que su hijo la interrumpió feliz
- Esa mama… quiero estar en esa…- dijo alegre
- Está bien hijo, la pondré en la opción y la firmare para que la guardes en tu cuaderno y la entregues mañana temprano- en niño asintió mocionado e inmediatamente fue a guardar la hoja
A la mañana siguiente fue uno de los primeros en entregar su hoja, se sentía emocionado, veía como todos sus compañeritos entregaban sus hojas, pronto dentro de unos días como indico la profesora estarían los resultados.
Al fin era el momento, en la que la profesora por lista indicaba en que talleres estábamos, pronto seria mi turno. Pero antes de escuchar su nombre noto algo que le sorprendió el nombre de una chica en lo mismo que quería el, en artes marciales. Como una chica iba a a escoger artes marciales, ¿no que le gustaban las cosas femeninas?
- Desde mañana empiezan los talleres recuerden que en la circular decía lo que cada taller requiere- dicho esto se despidió de todos y se marchó para que e profesor de lenguaje entrara
Este era un gran momento para Jake, estaba emocionada a solo unos pasos de entrar y ser el mejor en su clase, un paso más para ser investigador.
- Que te vaya bien hijo- le dijo su madre sonriendo, él le sonrió emocionado y entro corriendo al dojo.
El profesor esperaba a los más pequeños mientras que los grandes ya estaban practicando, una vez que todos estaban reunidos el profesor los llamo y pasó asistencia.
- Bien niños calienten un poco y ya les explicare el primer ejercicio- dijo el hombre mientras les mostraba como calentar después de unos 15 minutos calentando el profesor les enseño dos movimientos básicos y dicho esto empezó a fijarse en su otro grupo de chicos más grandes.
Al precio a Jake le entusiasmo bastante el ejercicio pero se empezó a aburrir debido a que lo domino y cuando se acercó al profesor para ver si le enseñaba algo mas este solo lo ignoro y siguió dándoles indicaciones a sus alumnos más avanzados, volvió a su grupo quien la mayoría estaba jugando y se sentó unos momentos observando como los grandes hacían otras cosas.
- Yo igual quiero aprender a hacer esas cosas- dijo mientras suspiraba resignado
Pero su resignación no duro mucho cuando se le ocurrió imitar a los más grandes y así se entretuvo aprendiendo solo hasta que finalizo la clase. Pero al momento de agarrar sus cosas y esperar en la entrada por su madre algo lo detuvo, algo que a él no le gustaba y le fastidiaba. Era ver como algunos de los chicos grandes molestaba a otra persona, se acercó con paso firme y al ver de quien se trataba se sorprendió, era esa niña rara de su clase que miraba a la ventana y la que escogió lo mismo que él.
- ¿Te crees la gran cosa verdad?- le dijo uno de los chicos mientras la empujaba contra la pared con fuerza
- No me creo nada, ustedes son unos idiotas que se creen muy malos- dijo enojada la niña
- ¿Crees que puedes hablarle así todos porque tu papa sele en revistas y es millonario?- le dijo otro mientras la levantaba agarrándola por la palera
- Les hablo así porque son imbéciles que se creen superiores por tener fuerza- le espeto enojada
- Te enseñaremos a respetar a los mayores y a no creerte el cuento, aunque con una pequeña cuota no te lastimaremos mucho-
- No les daré nada, no me valgo del dinero de mi papa- empujo a su agresor y trató de golpearlo, pero este rápidamente lo esquivo y le dio un rodillazo en su estómago asiendo que caída de rodillas al suelo, otro de los chicos la cargo mientras otro colocaba una soga en sus pies, luego la colgaron de las piernas en uno de los palos de las escaleras de madera del dojo que usaban los más grandes para hacer flexiones de brazo en el aire. Ella trato de forcejear pero fue inútil quedo colgada de cabeza mientras sus agresores reían con ganas.
- Pídenos perdón- dijo uno sonriendo con malicia- o no te bajaremos-
- No les pediré perdón, no les hice nada…- dijo la niña- ustedes deberían pedirme perdón o si no…- uno de ellos la interrumpió dando un golpe fuerte a la pared
- O si no que…. Tus papitos no están aquí, el maestro se fue y nadie te salvara-
- Cierto… aprende tu lugar… aquí ese apellido tuyo no sirve de nada- exclamo otro
- No- dijo mientras sus ojos se llenaban de lagrimas
- As lo o te quedaras aquí toda la tarde- dijo otro mientras la empujaba con el pie asiendo que se meciera
Jake miraba la escena cada vez más enfadado, apretó sus puños fuertemente y decidió intervenir.
-DETENGANCE!- exclamo Jake mientras se acercaba corriendo asía los chicos, ellos se miraron sorprendidos y estallaron en risa, luego uno de ellos avanzo un paso y en un movimiento tiro al niño al suelo, luego le hizo una llave, haciendo que el niño pelirrojo gritara de dolor.
Su plan no había funcionado, se supone que debía detenerlos pero no funciono.
- Miren quien tenemos aquí…- dijo uno de ellos mientras reía- un defensor de la justicia-
La niña aun colgada miraba como le hacían una llave a ese niño estúpido, ¿por qué intervino?, se preguntó mentalmente.
- No te metas niño…- dijo la niña- no es asunto tuyo-
- Te veías en problemas- dijo Jake- pensé que necesitabas ayuda- rio un poco- descuida los venceré con mi movimiento mortal súper secreto-
Todos los presentes quedaron con la duda ante el dicho del niño. Para luego que los brabucones estallaran otra vez en risa.
Cinco minutos después los chicos se marcharon riendo mientras los dos niños más pequeños yacían colgados de los pies, la niña miraba seria como se marchaban y recordaba el movimiento mortal súper secreto, que por cierto fue un total fracaso.
- Eres un tonto- dijo la niña
- Hey trate de ayudarte- Jake se sintió ofendido ante el insulto que le dijo la niña
- Lo sé, no debiste, mira como quedaste- dijo seria la niña- ¿Cómo bajaremos ahora?-
- No lo sé- exclamo Jake- por cierto me llamo Jake-
- Jill… Jill Ginovaef- dijo la niña mirándolo
- ¿Porque te molestaban? ¿les hiciste algo?- le pregunto Jake mirándola
- No… ellos me molestaron primero, son brabucones y se enojaron porque les reclame por empujarme-
- ¿hijo?- era la mama de Jake, quien preocupada había entrado al dojo, miro para todos lados y luego de unos segundos diviso a su hijo colgado de los pies con una soga
- Mama…- dijo Jake
- Hijo ¿Qué paso?- le pregunto preocupada mientras lo bajaba con cuidado y repetía la acción con la niña
- Gracias señora- dijo la niña tocando su tobillo algo adolorido por el roce
- De nada pequeña, pero, me dirán que paso
- Em…- Jake se avergonzó pero se asustó un poco, su mama era de temer
- Señora… e… em… su hijo trató de ayudarme porque unos chicos me querían colgar de la soga pero como eran muchos terminamos ambos colgados- dijo Jill omitiendo el resto de lo sucedido
- Ya veo- dijo seria- ¿eres amiguita de Jake? ¿te paso algo?-
- No se preocupe estoy bien- sonrió levemente- y no… aun no… nos acabamos de conocer, am… me llamo Jill… Jill Ginovaef- dijo algo nerviosa la niña
- ¿Ginovaef?- se preguntó bajito la mama de Jake, había escuchado ese apellido en algún lado pero no lo recordaba
- Mama tengo hambre- dijo Jake tocando su estomago
- ¿Jill?- otra voz femenina y adulta sonó en el dojo y una mujer alta de cabello negro suelto, con ondas se acercaba al lugar, la piel de la mujer era pálida como si fuera de porcelana, sus rasgos eran fino y muy femeninos, sus ojos eran café claro y llevaba un vestido crema de ejecutiva.
- Mami- sonrió la pequeña con entusiasmo, mientras corría a sus brazos
La mujer al verle sonrió mostrando sus dientes blancos perfectos y estiro sus brazos para recibir a la pequeña y alzarla en sus brazos.
- ¿Lista para irnos? - le pregunto la mujer a la pequeña
- Sí, pero antes me despediré de Jake- dijo bajándose
- ¿Jake?- pregunto la mujer, no había notado la presencia de dos personas, más bien una mujer y un niño pelirrojo-
- Si mama- ella camino hasta Jake y le estiro la mano- adiós y gracias-
- Am…adiós- estrecho la mano de Jill algo dudoso
Dicho está la niña se fue con su madre de la mano
A la mañana siguiente en clases el pequeño Jake miraba de reojo a su tal vez nueva amiga, pero estaría bien si son amigo, después de todo era una niña, sus amigos decían que uno no debía juntarse con niñas por que le contagiarían los piojos, pero su mama siempre lo rapaba hasta dejar un centímetro de pelo y con es evitaba los piojos.
Después de ese primer día de entrenamiento, las cosas no mejoraron mucho después en los siguientes entrenamientos ambos eran usados como sacos de boxeo y al finalizar la clase los colgaban de los pies en el mismo sitio.
- Entonces…¿tu mama viene temprano hoy?- dijo Jill mirando sus pies amarrados a la soga
- Por desgracia hoy no tenemos suerte, compañera- dijo Jake- su papa iba a buscarlo esta vez, raras veces tenía tiempo para el por su trabajo de detective y hoy vendría a buscarlo lo que significaba que sería tarde- y ¿tu mama?-
- Mi mama está enferma, vendrá mi padre y se demorara- dijo Jill desganada
- Tu mama se parece mucho a ti y es muy joven- dijo Jake- parecería que es tu hermana mayor-
- Mi mama no es tan joven tiene 30 años y gracias, espero parecerme a ella de grande, aunque no lo creo- sonrió ampliamente- mi mama es muy femenina y yo no lo soy-
- Cierto, si fueras como el resto no estarías en esta situación- rio Jake, Jill también rio- ¿y cómo es tu papa?- pregunto Jake
- Mi padre… es… muy estricto, la imagen lo es todo para él y es un empresario famoso, a veces lo acompaño a reuniones aburridas donde dice que me moldeara para ser una gran empresaria y digna heredera, por eso me dejo estar en artes marciales para que aprenda a defenderme sola y me despegue de mama, es muy frio conmigo y nunca me sonríe y varias veces me mira muy feo- la pequeña coloco una actitud triste- ¿y el tuyo?-
- Mi padre es genial… es un detective y uno muy bueno- dijo feliz Jake- yo quiero ser como el cuando crezca-
- ¿detective? Genial- dijo Jill entusiasmada- seria genial poder ser detective
- En mi casa hay novelas de detective, esperó aprender pronto a leer bien para poder leerlas solo-
- Genial,¿ me prestarías alguna cuando sepa leer?- e pregunto Jill
- Si, un día podrías ir a mi casa a jugar y a leer las novelas- dijo Jake entusiasmado
En aquel momento un hombre con traje negro bastante fornido y alto, llego su cabellera era negra lisa bien cuidada, su mirada era dura y muy seria, sus ojos era negros como la noche, el era el padre de Jill, quien al verla colgada lejos de asombrarse o preocuparse la miro con reproche.
- Que decepción- dijo mirando a su hija solo miro enojada y dolida a otro lado, el hombre saco un cuchillo que guardaba en caso de emergencia y corto ambas cuerdas, haciendo que ambos chicos cayeran al suelo.
- Papa yo…- dijo Jill levantándose
- Me decepcionas, eres débil, tu deberías darle una paliza a esos chicos que te hicieron eso y mostrarle quien manda enorgullece a tu apellido- dijo severo mirando en menos a su hija
- ¡NO!- dijo el pequeño Jake levantándose- no es justo, que usted diga eso- le reto
- ¿Y tú quién eres mocoso?- dijo con voz grave
- Soy Jake el amigo de Jill- dijo – y usted no sabe cuántos eran y cuan fuerte son esos chicos, apuesto que usted no hubiera podido contra 6 chicos 2 veces más grande que nosotros y 5 veces más fuerte y experimentados que nosotros- dijo Jake mirándolo a la cara, el hombre sorprendido porque un mocoso de 6 años le había retado y estaba intimidado ante su dura mirada
- Jake no…- dijo Jill débilmente, retar a su padre era como la muerte en cinco segundos
- Eres valiente niño eso me agrada- sonrió levemente mientras tomaba a Jill de la mano y se la llevaba casi a rastras
A los minutos su padre lo vino a buscar y se fueron en el auto.
- Papa…. ¿Cuáles son los empresarios más famosos del país?- pregunto Jake
- A qué se debe esa pregunta-
- Conocí a una chica y su papa es un famoso empresario, pero no me agrada ese hombre y no es amable con su hija o con otros, ¿esos hombres son malos?-
- Mmm…- se llevó la mano a la barbilla- no es que lo sean, es complicado de explicar, tal vez sea por algo que se comporte así, conozco a un empresario y es muy amable, a veces trabajo para ellos investigando algunas cosas, pero siempre velan por sus intereses-
Al pasar los días, Jill y Jake se relacionaban más, no solo en clases extracurriculares, si no en clases, lo que provoco que al muchacho lo molestaran sus amigos, pero él los ignoro, su nueva amiga era más interesante incluso en los recesos después de comer entrenaban un poco para mejorar y poder darle una lección a los chicos. Ahora contaban con que el padre de Jill contrato un entrenador personal para ella al notar que su hija no progresaba lo suficiente e invitaba a su amigo a entrenar.
Los días se transformaron en meses y los meses en años, para ser exacta pasaron tres años y ambos habían crecido bastante y se encontraban en cuarto básico, Jill superaba por unos centímetros a Jake y eran mejores amigos. Pero en ese mismo año se integró una muchacha de pelo castaño claro, era Vivian, en ese momento ella no se llevaba con Jill, sino hasta unas semanas más tarde que se integró al dúo.
Fin del flas back
Las campanas sonaron y finalizaban las clases el chico pelirrojo detuvo su relato y sonrió.
- Vamos por nuestras cosas y vamos a mi casa ahí te cuento mejor las cosas- rio un poco- aunque ahora sabes cómo nos conocimos-
- quien diría que a ambos los maltrataban chicos más grandes y más que los colgaban- rio un poco Sarah de solo imaginar a Jill con su cara de pocos amigos colgada le era cómico
- no te burles y no le digas que te conté, es un pasado que ambos queremos olvidar sin decir que dolía el roce de la cuerda – dijo Jake rojo y avergonzado
- okey no me burlo cuéntame más, es interesante ver otro lado de Jill, uno un poco más vulnerable- dijo Sarah
- en ese momento ella le tenía miedo a su papa, pero ya no- sonrió de lado Jake mientras ambos se encaminaban al salón donde Jill estaba recogiendo sus cosas, Vivian los miro extrañada pero le restó importancia y antes que se fuera Jake la tomo del brazo y le susurro.
- Ve a mi casa a dentro de dos horas-
- Jodete Jake- respondió Vivian
- Esta vez no es por mí, es por Jill, Sarah estará conmigo-
- Está bien, solo no te acerques mucho- dijo ella mirando a otro lado algo sonrojada
- Me acercare más, pero después invadiré tu espacio- sonrió con picardía Jake- esta solo lo miro malhumorada y se marchó