Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

MALAS INTENCIONES por run4fun

[Reviews - 32]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Gracias por leer, en serio, muchas gracias.

se que mi demora es mucha, pero aun asi espero lean este capitulo.

prometo seguir la historia en cuanto pueda.

 

 .....

Shaka, Entro con sigilo a su casa, miro por los alrededores y tras no ver a su padre por ningún lado, se dirigió rápidamente a su recamara. Cerró con seguro la puerta tras sí. Respiro aliviado, lo que menos quería era encontrarse con su padre.

Una gran sonrisa se formó en su rostro en su rostro, el solo recordar a Aioria lo hacía sonreír.

Estaba por acercarse a su cama para descansar, cuando de repente, las luces se perdieron, dejando ver a su padre parado en una pared con una clara expresión que denotaba furia.

-padre…- logro decir en un susurro Shaka sin poder creer lo que veía.

-¡dónde estabas?! ¿Porque tardarte tanto? – grito notoriamente furioso,sosteniéndole de un brazo. Shaka solo lo miro sin responder. Mientras un  inevitable temblor comenzaba a recorrerle el cuerpo,

-¡vamos responde!- volvió a preguntar más furioso, mas Shaka permanecía callado.

-quieres decirme por las buenas con quién andas o quieres que lo hagamos por las malas. – le advirtió con un tono más intimidante, esto hiso que Shaka tragara en seco. Su padre podía ser un hombre muy intimidante cuando se lo proponía.

-no…no sé de qué hablas. – logro articular apenas.

-¿No sabes?- entonces le tiro a la cara unas cartas, eran unas que Aioriahabía escrito para él, y las que  había encontrado en un cajón. Al ver esto Shaka empalideció.

-esta no es tu letra y dudo mucho que sean de una “amiga”. – Shaka solo tembló en cambio Radamanthys se le acercó al rostro.

-¡habla, que es toda  esta porquería! – entonces, ante sus ojos rompió todas las cartas, Shaka solo miraba atónito.

Radamanthys amplio su sonrisa al ver la cara de pánico y de rabia de Shaka.

-vamos hijo…- sostuvo su mentón. - sé que eres listo. – apretó su agarre. – ¿dime con quién andas?

-con nadie. – respondió casi en un susurro.

Radamanthys, al no tener la respuesta que esperaba,  lo soltó tirándole en la cama, molesto.

-!mientes! – grito exaltado. - -pero no importa, ya me enterare y entonces…- lo miro de una manera lúgubre. - entonces desearas no haberme ocultado nada.-salió echando un portazo, dando a entender con ese acto su ira y furia.

Shaka se quedó petrificado, no sabía que hacer.- no puedo dejar que se entere,-pensó, pues si su padresabía  que se trababa de Aioria no les iría nada bien, lo sabía y tenía mucho miedo. Entonces busco con desesperación su celular, lo sostuvo. Necesitaba hablar con Aioria, decirle, advertirle pero como…

 

<<<<<<<<<<<<<.>>>>>>>>>>>>>

 

Aioria mantenía una imborrable sonrisa en su rostro, pronto llegaría al colegio y se encontraría con Shaka.Como deseaba gritarles a todos su romance, decir con orgullo que él y Shaka salían como pareja, pero,  suponía que ya habría tiempo para eso,- todo a su tiempo, todo asu tiempo.-

-¡Aioria!- el grito de milo lo detuvo.

-cada vez llegas más temprano que de costumbre, que, ¿acaso te enamoraste de algún profesor? – dijomilo mostrándole una sonrisa insinuante. Camus,quien estaba a su lado, solo negó con la cabeza.

-Milo, demostrar ser más responsable y consiente no implica que este enamorado de alguien, porque para ti todo tiene que tener un fin extraño. –

-pero Camus, Aioria está muy raro, y no me lo vas a  negar, anda más distraído, esa sonrisita que lleva en el rostro no se le borra con nada, además de…-callo al ver como Camus se alejaba para entrar al salón.

-¡¿adónde vas Camus?!- le grito mientras ponía una cara de indignación, siempre lo dejaba con la palabra en la boca.

-ya enserio Aioria,- volteo a mírale.-¿qué te traes? – se interpuso en frente de él acercándose a su rostro. - Vamos dime, acaso no somos amigos, los amigos se confían sus secretos. – le dijo mientras posaba ambas manos en su cintura.

-Todo a su tiempo milo, todo a su tiempo.-fue su única respuesta mientras ingresaba al salón de clases. Milo solo lo miro más intrigado que antes, enarcando una ceja

- ¡si claro, con amigos como ustedes, para que quiero enemigos! – se cruzó de brazosmolesto mientras seguía los pasos de sus amigos.

Shaka llego algo después de que la campana sonara.Aioria no le apartaba la mirada de él, en cambio este, solo lo ignoraba.

Y así fue toda la mañana, hasta que llegó la hora del receso. Shaka se la pasó pegado a su primo mu, esto hacia  que Aioria se impacientara y se pusiera nervioso. Por qué Shaka rehuía de él de esa manera, no tenía sentido, si solo ayer estaban de maravilla y ahora parecía que a Shaka le hubiera vuelto el mismo genio altanero y prepotente que poseía cuando se conocieron.

Al llegar la hora de salida supuso que se hablarían, como de costumbre, le diría que le pasaba,  eso era lo que Aioria esperaba; sin embrago, Shaka ingreso derecho a su auto, para luego marcharse dejando a Aioria mas confundido y preocupado que antes.

-bueno mi querido gato, nos vemos mañana. – le dijo milo dándole una leve palmadita mientras jalaba a Camus hacia su carro.

Aioria no hiso caso, pues seguía en un estado de incertidumbre y desconcierto.

El camino a casa jamás le pareció tan abrumador y agobiante.Lospensamientos le llovían, por un lado pensaba que había una muy buena razón por la cualShaka se comportaba de esa manera, pero por otro lado, le llegaba la inseguridad y el pensamiento más oscuro que se podría imaginar, Shaka lo rechazaba de nuevo.

Subía las gradas desganado, abrió la puesta de manera automática para luego ingresar a su departamento y dejarse caer en un sillón; completamente exhausto.

-¿te pasa algo, Aioria?- le pregunto su hermano al verlo tan abatido. Aioria solo se acomodó en el sillón mientras volteaba su mirada hacia otra dirección.

-nada. – respondió a secas.

 Aioros lo miro enarcando una ceja.  Sabía que algo le pasaba a su pequeño hermano así que no se conformó con esa simple respuesta.

-¿estás seguro?, digo, pues te vez demacrado y muuuy decaído. -  Aioria solo hecho un hondo suspiro mientras se ponía en pie y se dirigía hacia su recamara ante la  mirada atenta de Aioros.

-no es nada importante, solo estoy algo agotado. – dijo desganado. – mejor me voy a descansar. –

-pero…- Aioriani siquiera espero a que Aioros formulara su pregunta pues se metió rápidamente a su recamara.

-vaya.- Aioros tomo algo de agua mientras dejaba descansar su espalda en una pared, para posar su vista en el techo del departamento. – esto no se ve bien. …- le preocupaba la actitud de su hermano.

 

<<<<<<<<<<<.>>>>>>>>>>

 

Aioria solo se dejó caer pesadamente en su cama boca abajo, tratando de organizar sus ideas.

Sus ojos se abrieron de improvisto. De un solo movimiento se puso en pie para ir en busca de su celular. Lo tomo entre sus manos, tal vez Shaka le había dejado algún texto o algo así, lo tomo y al ver el aparato apagado una maldición salió de sus labios.

-por qué siempre olvido cargarlo. – como era nuevo con esas cosas se le olvidaban ciertas cosas como esa.

Desesperado, tomo el cable para luego conectarlo a un enchufe, espero a que cargado unos segundos, luego lo encendió de nuevo, una sonrisa se formó en su rostro al ver el fondo de pantalla, el, junto con Shaka mostrando una imborrable sonrisa.

Busco algo, mas no encontró nada, Shaka no se había comunicado con él, de seguro porque tenía el celular apagado. Volvió a maldecir, y esta vez marco el número de Shaka. Espero a que contestara y le explicara su actitud tan extraña, pero Shaka  no contestaba, solo lo mandaba al buzón de voz.  Al cabo de llamarlo 6 veces; lanzo el celular a un mueble frustrado.

-no tiene sentido, esto no tiene ningún sentido, Shaka….-nuevamente se dejó caer en la cama pero esta vez mirando al techo, la angustia lo carcomía.

 

<<<<<<<<<<<<.>>>>>>>>>>>>

 

 

El dolor de cabeza seguía presente, ya ni siquieralas pastillas que Death le trajo le hacían efecto. Hasta le era imposible conciliar el sueño. Si  todo se había vuelto un fastidio,  solo sabía una cosa con certeza, odiaba a su hermano, lo odiaba.

Un ruido  hiso que abriera los ojos.Tocaban la puerta de su recamara, trato de ignorarlo pero ese ruido molesto hacia que el dolor de cabeza se incrementara.

Furioso, se puso en pie para ir hacia la puerta y desechar a la persona que lo molestaba en esos momentos.

-¡quéquieres! – grito furioso, mirando fijamente a uno de sus sirvientes.

-la…lamento molestarlo señor. – el muchacho trataba de calmar sus nervios, pero el simple hecho de tener esos penetrantes ojos rojos puestos en él, hacían que su seguridad se perdiera por completo.

-llamaron del colegio, quieren saber porque no se presentó esta semana. – soltó tembloroso, saga solo deposito su espalda en el picaporte, mientras echaba una maldición.

-¡solo descuelguen el maldito teléfono! – farfullo furioso, para luego cerrar la puerta en la cara anonadada de aquel joven quien pensaba que jamás antes había sentido tanto pavor ni miedo, saga en verdad era un hombre muy intimidante.

…..

Se tocó la cien, no sabía cómo hacer para dejar de escuchar la maldita voz en su cabeza.

-Kanon…. – termino diciendo mientras tomaba un vaso de licor que había en la mesita de noche.

-tengo que olvidarme de toda esta mierda…mi vida no se va a arruinar ahora que por fin tengo todo lo que quiero. –se puso en pie para luego tomar sus llaves.

Saldría a dar un paseo, el enclaustramiento no le ayudaba en nada, y la verdad, en esos momentos necesitaba distraerse, conseguirla paz que había perdido. Ya sabría  dónde podría encontrarla, pero la encontraría, aunque sea por unos momentos.

 

….

 

-saga, a que le debemos el honor de tu visita. – afrodita se acercó al peli azul, mirándolo de pies a cabeza.

-hasta llegue a creer que ya nunca te volvería a ver.  – afrodita se relamía los labio mientras lo rondaba, saga, sin prestarle mucha atención a Afrodita, se acercó a la barra y pidió un trago, el más fuerte que había.

-me alegra que hayas regresado, ya te extrañaba. – le dijo al oído, con un tono seductor. Saga solo esbozo una sonrisa.

-acaso Death no te da lo que quieres.- le dijo frio mientras lo miraba con algo de superioridad, afrodita solo soltó una carcajada.

-yo tengo lo que quiero, cuando lo quiero. – respondió, en tanto le arrebataba el vaso a saga y se lo bebía.

-no has cambiado. – dijo saga algo aburrido.

-en cambio tú, mi querido gemelo impetuoso, has cambiado como no tienes idea. – le hablo al oído mientras se apegaba más a su cuerpo.

-las personas no cambian, simplemente muestran lo que en realidad son. – hablo saga mientras volvía a beber del trago que afrodita le había arrebatado.

-tal vez…- le toco la espalda para luego deslizarse a su cadera. - solo espero encontrar aun a aquel hombre que no le temía a nada. – ante esas palabras  saga reacciono violentamente, se puso en pie tomo la mano de afrodita y lo hiso mirarlo de frente.

-deberías de tener cuidado con lo que pides.- su tono era intimidante.- tal vez no te guste el resultado. – apretó su agarre haciendo que afrodita soltara un quejido de dolor. Intento soltarse, mas saga no pretendía dejarlo ir, lo había provocado, ahora quería verlo pagar.

-ya basta.-la voz de Death a sus espaldas sonó seria  y molesta. – déjalo. – saga sonrió de lado para soltarlo de manera violenta. Mientras afrodita se sobaba el brazo lastimado.

- si vas a venir  a  mi bar, por lo menos compórtate. – dijo sin dejar de mirarlo molesto, Death.

-está bien. – dijo indiferente saga. – Solo  dile a tu florecita que se controle,  porque yo, no lo voy a hacer.- Tomo nuevamente asiento para pedir otra bebida ya que la otra se había desparramado por el suelo.

Afrodita molesto como nunca antes, se fue echando chispas por los ojos. Death solo lo miro alejarse, negando con la cabeza. Su novio era  el que siempre se le insinuaba a otros,  provocándolos, la verdad, no le molestaba pues sabía que siempre volvería con él, pero a veces era un verdadero fastidio.

Tomo asiento al lado de saga. -y…ya hablaste con tu “querido hermano” – pregunto con intenciones de molestarlo.

-sí, me dejo un recadito para ti: Murete. – sonó molesto, Death solo amplio su sonrisa mientras  pedía otro trago para él.

-sabes cuál es tu problema. – hablo Death girando su vista por completo para mirarlo  mejor.

Saga solo lo miro de reojo algo intrigado.-¿cuál?-

-no tienes con quien desquitar tanta tención. – le sonrió, pues había tocado otro punto débil para el gemelo.

-¡por qué no mejor te vas y me dejas en paz! – grito ya cansado. Death solo se encogió de hombros mostrando una mirada maliciosa.

-te duele oír la verdad.- siguió sin importarle la mirada fulminante de saga. – nunca has tenido con quien matar la soledad, ni alguien con quien desahogarte, porque nunca has aceptado el amor de nadie, ni siquiera el de tu propia familia. –

Esa fue la gota que derramo el vaso, saga sostuvo a Death de la camisa  alzándolo en el aire. Sin dejar de mirarlo furioso.

-¡bastardo infeliz, tú no sabes nada de mi maldita vida! – le grito furioso mientras apretaba su cuello.

-calmado hombre….eso no te importa…jamás te ha importado una mierda el amor de los demás, ¿o sí?

– ¡claro que no! – lo soltó para dejarlo caer al suelo.

-yo soy feliz como estoy, no necesito de nadie, ¡de nadie! – tras decir eso salió votando en el proceso todo lo que se interpusiera en su camino.

-y luego dices que solo yo los provoco. – dijo afrodita mientras ayudaba Death a ponerse en pie.

-ese maldito imbécil, solo quiere creerse mejor que los demás, pero no es más que un pobre infeliz al cual  su propia  familia desprecia. –

-tal vez…pero ese pobre imbécil, no pago la cuenta. – le dijo afrodita sonriéndole mientras le acariciaba el cuello. Death esbozo una leve sonrisa, la verdad no le convenía deshacerse de un cliente como saga, pero para ser sincero, saga  se merecía eso y mucho más.

-pídeme otro trago, que quiero borrar este sabor amargo. – termino diciendo mientras volvía a tomar asiento, afrodita solo le guiño un ojo para luego ir en busca de su trago.

 

 

<<<<<<<<<<<<<<<<.>>>>>>>>>>>>>>

 

Shaka seguía ignorándolo, cada vez que estaba cerca de él, simplemente rehuía a su mirada y procuraba alejarse de él lo más posible. Para Aioria esto era más que desesperante.

 Su cambio de comportamiento no pasó desapercibido por quienes lo rodeaban, en las clases no hacía más que mirar a Shaka haciendo que algunos de los maestros lo reprendieran por su falta de concentración y atención. Dejo de hablar con milo y Camus simplemente permanecía serio y con el ceño fruncido haciendo que estos se preocuparan y apartaran al mismo tiempo, falto a muchas clases, las que tenía programada con saga, pero este a su vez estaba más concentrado en otra cosa así que la ausencia de Aioria no le importaba mucho.

 

No lo soporto más, después de casi una semana de ser ignorado  su paciencia llego a su límite. Estaba decidido, hablaría con Shaka y le pediría una explicación, si lo haría.

Lo vio acercarse hacia su coche, como de costumbre, no lo pensó dos veces  lo cogió de un brazo y lo obligo a seguirlo a un lugar cerrado, ante la mirada atónita  de milo y Camus  quienes vieron toda esa escena muy asombrados.

-qué te pasa, ¡suéltame!- grito Shaka molesto he intentado hacer que lo soltase pero Aioria no lo escucho, solo  afianzo su agarre.

-¿por qué me haces esto, que estúpido juego es este! – le grito sosteniéndole de los brazos.

-¡por qué, dime porque, a que juegas! – le grito desesperado. Pero Shaka solo lo miraba serio; aparentando indiferencia.

-no sé de qué hablas…–

-no me vengas con eso, que ya se te olvido lo que teníamos. – Aioria estaba desesperado. -  que pasa, porque me ignoras,por qué haces esto conmigo, dime! por favor dime!. –Shaka no respondió solo permanecía callado mirándolo fijamente.

-porque de la noche a la mañana has decidido sacarme de tu vida. –

-no entiendo de qué hablas, sitújamás fuiste parte de mi vida.-soltó fríamente Shaka, Aioria lo miro molesto.

-¡mientes! – lo sacudió. - tú me amas tanto como yo a ti. –

-Aioria…necesitaba que lo creyeras…necesitaba vengarme de mi padre…lo necesitaba, y tú me ayudaste ahacerlo. – dijo Shaka tratando de sonar  seguro e indiferente.

-¿qué dices?-Aioria solo abrió los ojos, incrédulo ante lo que Shaka decía.

-ya me oíste, Aioria.- le sonrió mostrándole la mejor de sus caretas, hipócritas.

-no es verdad,tú me amas, lo siento, sentí…-

-yo no siento nada Aioria.- interrumpió mientras intentaba soltarse de Aioria. - así que ya déjame en paz o si no quieres que llame a mi chofer y….-

-¿y qué? – lo sostuvo nuevamente  haciendo que la espalda deShaka chocara contra la pared. – no me importan tus amenaza,  no me importan. – Aioria hablaba con unnudo en la garganta, mientras una parde lágrimas se asomaban por sus ojos.

- déjame ir, Aioria. – le pidió Shaka tratando  de sonar lo más serio posible.

-no…por favor…no. – no fue necesario que Shaka hiciera nada para soltarse pues, Aioria dejo de presionar sus brazos para caer a sus pies, arrodillado, rendido, dolió.

Ante tal escenaShaka no pudo evitar el soltar una lágrima, contuvo las ganas que tenía de lanzarse a sus brazos y limpiar esas lágrimas que corrían libres y sin cesar de sus orbes verdes.

En ese momento Shaka se sentía la persona más vil e inhumana  de la tierra, por hacerle eso a la persona que más amaba, pero  tenía que hacerlo, eso, si no quería que Aioria saliera más herido y perjudicado. Temía tanto de lo que su padre podría hacerle, temía por su seguridad.

-adiós... – Shaka estaba por salir corriendo y olvidarse de Aioria, estaba decidido a hacerlo, a dejarlo ir para que su padre nunca se entere de su romance, pero Aioria no, Aioria no lo dejaríaira si de fácil.

Ahí estaban ambos, descompuestos, con el corazón roto, sin saber que decirse.

-Aioria…- Shaka no tenía la fuerza para dejarlo ahí, tirado y desechado como un perro callejero, no. Su mente le decía que era lo mejor, dejarlo libre y no crearsemás falsas ilusiones, pero su corazón le gritaba que no se alejara de Aioria, que podían estar juntos, pues se necesitaban más que el aire que respiraban.

-te amo…acaso eso no es suficiente para ti. –Aioria alzo la mirada para ver los ojos de Shaka,llenos de lágrimas al igual que los de él.

-no creo que tu no sientas lo mismo por mí, no lo creo. – para Aioria el amor que sentía, era mutuo y nada lo haría cambiar de parecer.

Shaka trago en seco, se desmoronaba, jamás antes nadie había logrado hacerlo sentir tan miserable, como Aioria lo hacía sentir en esos momento. Sinproponérselo se arrodillo ante Aioria, para tenerlo cara a cara.

Acaricio su rostro para secar con delicadeza las lágrimas que caían sin cesar. -esto es lo mejor. –le dijo en un susurro, queriendo disculparse con él por lo que hacía.

Al sentir el cálido toque de Shaka,Aioria sostuvo su mano entre su mejilla, mientras negaba con la cabeza.

-¿para quién?-

-mi padre…- no deseaba mentirle más, Shaka le decía la verdadera razón por la que pretendía dejarlo. Entonces Aioria lo comprendió todo, Shaka hacia todo eso por miedo.

-mírame, Shaka. – alzo el mentón de Shakapara que se miraran fijamente.

-dime que no estás dispuesto a lo quesea para estar a mi lado, para defender el amor que ambos sentimos. – Shaka se quedó tieso, parpadeo un par de veces.

-yo…no…- desvió su mirada inseguro.

-esperar solo 2 años, o hacer algo ahora...- Shaka abrió los ojos de par en par, que era lo que Aioria decía.

-vámonos, Shaka,- soltó de repente.

-no…eso es imposible…yo…-Shaka no pida creer lo que Aioria le proponía, fugarse.

-el amor lo puede todo, hasta lo imposible. – seacercó a su rostro.-dime…estas dispuesto a abandonar tus miedos, tu prisión de cristal, para irte conmigo y vivir una vida plena y feliz…-tomo sus manos entre las suyas tratando de transmitirle  seguridad.

-si aceptas, Shaka, si tan solo aceptas venir conmigo, yo te prometo que defenderé nuestro amor sin importar me nada, lo hare, no dejare que nadie te aparte de mi lado.-Aioria se veía muy decidido y seguro.

-Aioria, tu no pareces pensar las cosas con claridad, como nosotros podríamos…. –

-¿me amas?- lo interrumpió.

-con todo el corazón, pero…-

-solo dime, si, acepta Shaka…-sus alientos chocaban y para Shaka eso fue demasiado,lo necesitaba, necesitaba a Aioria,  sentir ese aliento en su rostro le nublaba el pensamiento. Solo podía pensar en lo mucho que loamaba, lo deseaba y  no quería apartarlo de su lado, no.

-está bien…-dijo en un susurro.-vámonos Aioria, llévame lejos, allá donde mi padre nunca pueda encontrarnos.  Solo quiero estar contigo…hare lo que sea….lo que tú me pidas…- la cordura parecía abandonarlos, para ellos en esos momentos nada parecía imposible, no, si estaban juntos.

Aioria sonrió y sintió una inigualable felicidad al solo imaginarse con Shaka, lejos, ellos juntos. Ya vería como se mantendrían, no importaba, el amor era tan grande que eso jamás sería un problema.

-viviremos para nuestro amor….solo… para nuestro amor…- le dijo Aioria seguro de que así sería pues lo necesitaba,   ambos necesitaban creerlo, creer que era así de sencillo, deseaban que así fuera y vivirían ese sueño, hasta el final.

Estaban a unos centímetros de distancia, sus labios apenas se rosaban podían hasta sentir latido desenfrenado de sus corazones. Entonces, Aioria  no se contuvo, se lanzó en pos de un beso, uno profundo que los hacía perder el compás de su respiración, que hacía que los ojos se mantuvieran cerrados y solo se limitaran a sentir el sabor del otro, el calor del otro; el aliento sofocante de ambos,  necesitaban sentirse de esa manera. Se separaron cuando la falta de aire los obligo a hacerlo.

-huiremos…- Aioria apenas y podía contralar las ganas que tenia de tocar hasta la última parte de la piel blanca de Shaka. Pero ya tendría tiempo para ello. Ahora solo quería llevarse a su ángel lo más lejos posible, para vivir una vida a su lado.

-¿cuándo? – pregunto Shaka sin dejar de percibir el embriagante olor que desprendía la piel de Aioria.

-en una semana…yo...hablare con mi hermano…el tendrá que entender.-le respondió, con la respiración entre cortada.

-Aioria, prométeme que esto es real, que si podemos, que esto es posible. –Shaka sentía tanto miedo como felicidad.

-lo prometo, ambos nos iremos, y viviremos juntos para siempre. – Aioria daría  y haría lo que fuera por su amor, lo haría y de eso estaba cien por ciento seguro él no tenía miedo a nada, ni siquiera a la amenaza que representaba el padre de Shaka.

 

CONTINUARA….

Notas finales:

Solo espero sean pacientes para leer la continuacion.

Me gustaria subir mas capitulos pero el tiempo no es mi mejor aliado. 

GRACIAS POR SEGUIR ESTE FIC!!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).