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Nos conocemos de nuevo por maxi anime

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Notas del capitulo:

Hola a todos, bueno ahora si me tarde, lo siento mucho no pensé que tardaría tanto con este capítulo pero el boom esta hecho ¿Pensaron que falta poco? Pues no, están algo equivocados, falta para que termine pero no mucho, cuando me emociono ¡Me emociono!  Espero que les guste.

La brisa del mar mediterráneo llegaba a cada uno de sus poros, por primera vez en mucho tiempo se sintió en casa, a pesar de llevar años fuera de la casa donde creció. Angelo Bertello, mejor conocido como el antiguo Death Mask de cáncer y hoy reformado, volvía a su hogar después de años de vivir en el exilio, aunque no podía considerarlo como tal ya que era libre de volver a la casa de su familia cuando gustara. Lo cierto fue que la noche anterior Death Mask había recibido una llamada en su pequeña cabaña-hogar, y no dudo en sacar pasaje a su natal Sicilia.


Yuna de águila decido ser su acompañante mientras Soma dijo volver a su país natal solo porque se aburrió de ser el burro de carga. Por desconfianza o quizás estrategia, Yuna se quedó con los dos antiguos santos desde que lo conoció, ahora que sabía que el italiano no era precisamente un sacerdote y que Aphrodita manejaba un invernadero, no sintió peligro, no podía sentirlo además contaba con su cosmos. Cuando vio el rostro de Angelo palidecer ante la llamada telefónica decidió acompañarlo, además siempre quiso conocer Italia.


Aphrodita decidió acompañarlos también, conocía muy bien a Ángelo y su forma de actuar, cuando lo vio cambiar su rostro súbitamente supo que no debía dejarlo ir solo y así lo hizo. Aunque insistió a la muchacha que regresara al santuario o su país natal, ella se negó a hacerlo y sin más se vio en un viaje de tres.


—Veamos si entendí bien la historia—exclamo Yuna mientras caminaban por las calles de la ciudad, por cuestiones de seguridad los autos no podían acceder a una zona residencial, algunos decían que era por problemas con la mafia y otros porque los caminos estaban siendo reparados—. La señora Ángela Bertello es una devota católica y tuvo cuatro hijos, con diez años de diferencia cada uno.


—Así es, Gabriel, Benedicto, Ángelo y la pequeña María— acoto el antiguo santo de Piscis—. Gabriel, llamado como el Ángel, es sacerdote en Sicilia, Benedicto, llamado por los por dieciséis papas con su nombre, lo es en Roma.


—Entonces María es sacerdotisa.


—No Yuna, las mujeres no pueden llegar a ser sacerdotisas porque está prohibido por la iglesia católica, eso es cosa de hombre— exclamo el antiguo Piscis. — Además María es una niña, tiene solo trece años.


—Son muy cerrados, en el santuario no existe esa discriminación por género.


—¿Y los santos dorados? Conocí muchas amazonas con la capacidad de aspirar a ser dorados, como Marin de Águila, Shaina de Ofiuco también pudo serlo su constelación está dentro de eclíptica, pero no es aceptada, aun así— interrumpió el italiano.


—¿No tenían mujeres entre los santos dorados? — pregunto Yuna a lo que recibió como respuesta no solo que se detuviera la marcha a la residencia Bertello sino que los dos antiguos santos la miraron incrédulos.— Bueno, en la actualidad, el dios Marte cuando se apodero del santuario y secuestro a Athena nombro mujeres entre los dorados, tengo entendido que Paradox de Géminis fue amazona antes de tener la armadura de géminis, y también, o es algo que valga la pena mencionar, pero Marte nombro como santo de escorpio a una mujer, ambas fueron vencidas en la guerra contra Marte. Actualmente la armadura de Géminis la porta una mujer, se llama Integra, la hermana de Paradox.


—Saga y Milo se deben querer matar de saber ello, tan orgullosos de sus signos que son, Saga incluso ha dicho que ser dorado es cosa de hombres porque no hay que tener un ápice de debilidad que las amazonas suelen tener—rio el de piscis. — Dime ¿Por qué no es una historia que valga la pena contar de quien porto la armadura de Escorpión?


—Era la hija de marte y ella solo quería ser amada, o eso dijo Soma— respondió tristemente—. Era la hermana de Edén.


—Todos merecemos ser amados— sonrió Death Mask volviendo a caminar—. Milo si está enterado y me dijo que se siente triste por esa niña ¿Se llamaba Sonia?


—Si.


—Ya veo—exclamo levantando la mirada, pronto diviso su antigua casa.


La residencia Bertello era una casa añejada, ubicada en un barrio tranquilo de calles adoquinadas, parecía haber quedado en el tiempo, era un barrio que tenía sus años en la región, algunos decían que las construcciones eran desde la edad media.


—No puedo creer lo bello que es este barrio— exclamo Yuna con emoción —. Es hermoso, me siento en un cuento de hadas.


—Es hermosa, pero también tiene su lado oscuro—acoto Aphrodita —. Cuando llegamos a casa de los Bertello te diré el porqué.


No mucho tiempo después de caminar llegaron a una casa añeja, cada una de sus ventanas tenia macetas con flores de diferentes colores y sus hojas verdes tapaban casi toda la pared bajo ellas, una especie de planta cubría el muro de piso a techo. La puerta principal era de una madera bastante antigua, pero se mantenía con el paso de los años. Ángelo estaba por subir las escaleras cuando una jovencita salió de la casa y corrió a abrazarlo con emoción, para Yuna era evidente de quien se trataba, la hermana menor del antiguo santo de cáncer.


La muchacha tenia trece años y sus cabellos eran largos, del mismo color que los cabellos de Angelo, los llevaba sueltos con algunas flores sobre su oreja, recogiendo pequeños mechones que permitían ver su rostro. Se veía alegre, feliz, una niña a la que no le faltaba nada con su vestido largo de color celeste con bellos encajes de color plata.


—Esperen adentro, mi cuarto es la primera habitación subiendo las escaleras a su derecha— exclamo Death Mask mientras se adentraba en la casa, al entrar notaron una escalera que subía hacia el segundo piso y siguiendo las indicaciones esperaron al antiguo santo de cáncer.


El viejo cuarto del más joven varón de los Bertello parecía la habitación de un sacerdote, cruces e imágenes religiosas estaban por cada pared del cuarto, la ventana tenía una especie de ventanal en forma de circulo y el vidrio tenia diferentes colores donde claramente se veía la imagen del niño Jesús siendo iluminado por haces de luz. La cama de una plaza estaba justo frente a la ventana, a un lado una mesa de luz con una biblia y otra cruz con cristo crucificado que miraba hacia la cama. El armario estaba empotrado en la pared, ropa formal se veía y no había nada que fuera informar. Finalmente, el único escritorio estaba limpio, salvo por múltiples libros apilados de menor a mayor, parados, libros al parecer algunos escritos por sacerdotes, cardenales y hasta por propios papas.


—Señor Aphrodite, usted me dijo que esta ciudad tiene sus áreas negras ¿Se refiere a la mafia italiana? — pregunto Yuna examinando la habitación—. La familia del señor Death Mask verdaderamente quería que fuera sacerdote.


—La familia Bertello está conectada a la mafia italiana, pequeña Yuna— exclamo el antiguo santo de piscis viendo la ropa—. El abuelo de Ángelo era un Sottocapo de la mafia italiana, el dirigía a la familia Bertello.


—¿En verdad? — pregunto alarmada.


—En los años ochenta y noventa, cuando Ángelo aún era Death Mask de cáncer, el asesino a toda la familia Bertello por sus crímenes, o eso creyó. Death Mask asesino a todos quienes tuvo frente a él, hombres, mujeres y niños, pertenecientes a la familia Bertello ya que la mafia se mantiene por la sangre, nacido bajo la mafia morirías bajo ella, tenga la edad que tengas, solo Vittorio se salvó, por haberse distanciado de su familia veinte años antes— comento el antiguo piscis—. Death Mask era asesino del santuario, un hombre que hacia cumplir la justicia de Athena y fue el propio patriarca, quien luego supimos era Saga de géminis quien usurpo el puesto, quien le encomendó tan sangrienta misión, su misión más terrible. Fue una misión por justicia, por los cientos de crimines que la familia Bertello había cometido contra cientos de miles de inocentes, les quito sus rostros, no como trofeo, sino como símbolo de temor, para que la Cosa Nostra no cometiera los mismos crímenes de quienes asesino, por supuesto la mafia no teme a nada ni a nadie, Death Mask tomo entonces como marca propia sacar los rostros como trofeo y así sus enemigos cuando fueran encontrados se verían la marca que todos reconocerían, y así la mafia le temería, pero como es sabido, eso no paso.


—Ya veo— dijo sorprendida.


—Cuando recobro su memoria, el mismo me confeso que asesino solo a los Bertello para que los demás miembros de la mafia buscaran su redención, detuvieran sus matanzas, la Mafia no entiende de la redención o el cambio, Ángelo sintió que no pudo clamar suficiente justicia por los inocentes— continúo mirando una foto escondida que encontró—. Y Vittorio Bertello, es un hombre que podría considerarse cobarde, el huyo de su familia para no pertenecer a la mafia cuando pudo hacerlo, se alejó de todo y alejo a su familia de todo lo que pudiera llevar que él, como el ultimo Bertello volviera a el camino del crimen organizado, sus hijos, todos varones dos fueron sacerdotes y Ángelo estuvo a punto de serlo.


—No creo que el señor Vittorio sea un cobarde— replico la muchacha. — ¿Por qué cree llamaron al señor Ángelo?


—Por la misma razón de siempre, su madre lo llama fingiendo estar muy enferma y que va a morir pronto, cuando Ángelo llega a casa siempre su madre le insiste en que vuelva a estudiar para ser sacerdote— respondió mirando con desagrado. Paro en seco por un momento, después de pensar como moderar su lenguaje ya que, a su juicio, había palabras que la muchacha no debía escuchar, mucho más de sus labios, continuo— Esa mujer no es la típica fanática religiosa, o de las mujeres que visten de santos para misa y cuando salen de ella dan nauseas de solo mirarlas por su comportamiento contrario a lo que sus propias normas religiosas mandan, ella es la típica loca a la religión, esta tan obsesionada con la religión que obligo a dos de sus hijos a ser sacerdote y de no haberse revelado Ángelo el también lo seria.


—Quizás sea por las mafias italianas.


—No lo creo, para la mafia toda la familia Bertello murió aquel día cuando Death Mask asesino a todos.


—Al parecer, no— interrumpió el italiano entrando súbitamente– La mafia italiana está arremetiendo contra mi padre, no me quisieron decir mucho de lo que está pasando, pero temen por María— miro sobrecogido sentándose sobre su antigua casa. Medito un momento antes de levantarse, con todas sus fuerzas golpeo con el puño cerrado contra la pared a su derecha— Esos malvivientes, debí haberlos asesinado a todos cuando pude hacerlo, fui débil al dejarlos vivos y pensar en su redención.


—Te prohíbo que pienses así— le interrumpió Aphrodite tomando su mano. — Tu mucho menos, tu encontraste la redención, tú te arrepentiste de tus actos, tu que sepultaste al antiguo Death Mask de cáncer y te trasformaste en este hombre que eres ahora, el maravilloso ser humano.


—Tu vida Aphrodite ha estado rodeada de belleza, tu mundo es color de rosa a comparación del de los demás, cuando en realidad es gris ante otros ojos— le interrumpió molesto.


—Quizás se puede encontrar una solución — interrumpió Yuna esbozando una sonrisa.


—No existe solución, la mafia sabía que me encontraba en Suecia, sabe todo sobre mis hermanos y sus trabajos como sacerdotes, saben cuándo encontrar a mi pequeña hermana sola.


—Quizás puedan ir al santuario, nadie puede entrar dentro.


—Yuna, oh Yuna, tus intenciones son buenas, pero pareces no conocer parte del funcionamiento primordial del santuario— interrumpió el de Piscis—. El Patriarca con su gran poder logra que una barrera impenetrable se expanda por los terrenos del refugio, solo aspirantes, soldados y santos pueden penetrar la barrera.


—Bueno, también hay otro lugar, solo para santos, pero no se…


—¿Qué lugar?


—Puede que les ayude a regresar su cosmos, admite aspirantes desde la ultima guerra de marte…


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Las Montañas de Jamir, un lugar desolado y rodeado de paz, o eso parecía en aquel momento.


Los antiguos santos de oro, Mu de Aries y Saga de Géminis se encontraban perturbando la quietud del lugar, ambos antiguos santos se encontraban buscando algo que los ayudaría a comprender por qué habían sido revividos, sin saber realmente a donde los llevaría. En compañía de Kiki y Shiryu, como santos dorados que eran, y Raki junto a Ryuho se encontraban en un área que el propio Mu había tachado en sus mapas por ser peligrosa, y se encontraba debajo del templo actual del reparador de armaduras.


—Dice señor Mu, que usted tacho de los mapas este lugar por seguridad— exclamo Ryuho mirando aquella marca roja y sobre ella estaba dibujado ni más ni menos que la torre donde Kiki y Raki habitaban.


—Debajo del risco donde vivo— exclamo mirando el suelo árido el santo de Aries.


—Según las historias de este lugar, los antiguos descendientes de Mu se aislaron siempre creyendo en la benevolencia de la diosa Athena, mi padre dice que el templo fue abandonado porque nunca más volvió a verse la gracia de Athena para el pueblo, por ello comenzaron a venerar a ídolos falsos.


—No entiendo como tu padre aún cree en Athena, después de todo este tiempo, yo siempre he sido fiel a mi diosa y porque he visto su poder a mi edad, en dos vidas, pero tu pueblo fue abandonado.


—Mi padre tiene fe en que algún día la diosa regresara y con su infinito poder regresará el pueblo a su gloria pasada, Saga, que el hecho que nuestros antepasados le dieran la espalda a Athena y este no regreso hasta doscientos años después, es lo que causo que nuestro pueblo dejara de creerle, aunque no sé porque se dejó de adorar a un ídolo falso.


—Quizás porque ese ídolo falso fue derrotado, debió ser un dios muy poderoso para que los descendientes de Mu le dieran fidelidad— exclamo Ryuho mirando el templo en ruinas.


—Esto es arquitectura tibetana— asintió Saga mirando al frente.


En efecto un edificio se había levantado en la región, todo él estaba cubierto por espesa vegetación al punto que no se veía una sola piedra. Enormes arboles habían tomado lugar entre las antiguas paredes, sus raíces se esparcían por todo el suelo, el césped había cubierto todo el suelo, el antiguo templo se veía siendo tragado por la extensa vegetación.


— ¿Qué se supone hay aquí?— pregunto el santo de dragón entusiasmado.


—Escritos— respondió Saga mientras avanzaba, vio una abertura que se encontraba cubierta por lo que parecían raíces por lo que opto quitarlas usando su fuerza, y al hacerlo una corriente de agua comenzó a salir—. Veo que hay corriente de agua por aquí, debe estar conectado a algún rio.


—Yo la quito, yo la quito.


—Shiryu tu hijo es muy enérgico—Sonrió Mu mirando al muchacho acercarse a la fuente y con su cosmos comenzó a desviar el torrente de agua.


—El sueño de Ryuho es que se acaben las guerras y vivir junto a nosotros en las montañas.


Haciendo uso de su control agua, Ryuho cambio el flujo de la corriente haciéndola a un lado, lo que sorprendió a los dos antiguos santos, quienes no estaban enterados sobre el actual control de los elementos.


—Eso fue…


—Cierto, no se lo hemos contado— interrumpió Kiki a su maestro que miraba absorto.


—Entre las guerras que peleamos contra el dios marte un meteorito callo a la tierra, apenas si fue percibido por el resto de la humanidad pero su caída fue en el punto de batalla— comento Shiryu acercando a Ryuho para terminar su trabajo ya que pareciera que el flujo de agua volvería donde ellos.


—A los santos y a los marcianos nos dio el poder de controlar elementos.


—Fuego, Tierra, Agua, Aire,  rayo, Luz y Oscuridad— interrumpió Raki a su maestro—. Yo aún no controlo mi elemento, que es la tierra, primero debo controlar mi cosmos.


—Ya lo has hecho, Raki, mi maestro me dijo que lo defendiste de los esqueletos del cementerio de la armadura, y solo alguien con un gran cosmos puede hacerlo.


— ¿Y quién controla que elemento?—  pregunto Saga mirando incrédulo—.  En base al poder de los Aries pensé que serias luz.


—Sí, también controlo un segundo elemento—sonrió Kiki sonrojado.


—Bueno, sé el de mis amigos— respondió Ryuho— Mi amigo Soma controla fuego, mi amiga Yuna el viento, Haruto la tierra pero es medio Ninja...


—No soy medio Ninja.


—Haruto — exclamaron los santos a la vez.


— ¿No estabas en Francia?— pregunto Ryuho incrédulo—. Con Eden y los antiguos Santos de Escorpio y Acuario.


—Edén se quedó con ellos.


—Los dos santos más sobresalientes están aquí, Haruto de Lobo y Ryuho de Dragón, el destino los ha juntado.


—Koga es…


—Un perezoso.


 —Igual a Seiya— susurro Shiryu a Mu y Saga.


—Haruto ellos son Mu de Aries y Saga de Géminis.


—No, solo llámame Mu, ya no soy un santo, el santo de Aries es Kiki.


—Soy Saga Dimou.


—Soy Haruto de Lobo, santo de bronce de la constelación de Lobo, y como dijo Ryuho domino el elemento tierra— se presentó portando su armadura ante los ojos de todos.


—La armadura de lobo ha cambiado mucho, probablemente fue reparada dos o tres veces, unas cuatro cuanto mucho — exclamo Mu mirando la armadura con detenimiento.


—Sorprendente, puede ver cuántas veces una armadura ha sido reparada después de tantos años.


—No es algo para sorprenderte, pequeño Ryuho, un reparador de Armaduras debe ver todo con gran detalle y recuerdo cada detalle de la armadura de lobo, le hice una reparación menor mientras Seiya, Shiryu, Hyoga, Shun e Ikki subían las doce casas para salvar a Athena.


—Lo de la flecha he.


—Señor Mu, por aquí hay escritos que no entiendo— llamo Raki desde no muy lejos.


Mu y Kiki corrieron hasta donde estaba la joven aspirante a santo, adentrándose a una antigua cámara. Saga y los otros no tardaron en acercarse a ver lo que acontecía y se adentraron cuando vieron a los desendientes de Mu desaparecer.


—Son escritos muy antiguos que datan de cuando aún existía el continente, no puedo creer que se conserven— exclamo Mu leyéndolos con atención—.  Según esto, al hundirse el continente los pocos sobrevivientes zarparon sin rumbo, muchos murieron en el viaje por hambruna o enfermedad, finalmente llegaron a las costas de china donde no fueron bien recibidos, se trasformaron en nómades y caminar hasta estas tierras donde los habitantes morían llegando a la adultez…hay muchos signos que no entiendo.


–Aquí está el símbolo de Athena— señalo Raki.


—Mu, tu padre es un estudioso de estos escritos, quizás él pueda ayudarnos— Sugirió Saga—.Vamos a buscarlo, si le explicamos estoy seguro que comprenderá.


— ¿El padre de mi maestro?— pregunto Kiki asombrado.


—Tenzin es el último creyente en Athena en el que ahora es el poblado de los descendientes de Mu— comento Saga mirando seriamente—. Ha estudiado viejos escritos desde que tiene memoria y hasta llego planificar hacer que sus hijos se convirtieran en aspirantes a Santos, pero nunca comprendí porque ninguno llego ante Kiki.


—Porque Kiki se mudó y mi padre tiene el mapa a mi torre— respondió Mu ante aquello, mirando a Kiki bajar la mirada apenado.


—Vamos a su casa señor Mu, seguro su padre va a enseñarnos todo y como el señor Kiki es el santo de Aries va a saltar de alegría.


Mu asintió con la mirada y ante sus ojos todos asintieron igual, Saga le tomo del hombro y en un parpadeo ambos se alejaron hasta el extenso campo sobre las montañas del Tibet. Caminaron entre los prados hasta visualizar la vieja casa donde podían verse luces encendidas, luces de velas.


—Padre.


—Oh Mu, hijo mío, has vuelto— lo recibió Tenzin, quien estaba sentado sobre un extenso escritorio leyendo mapas antiguos.


—Padre ¿Qué estás leyendo?


–Antiguos mapas para encontrar la torre del último descendiente de Mu que es un santo fiel a la diosa Athena, voy a encontrarla hijo, siento que estoy cerca.


—Mu ¿No se lo has dicho?— pregunto Saga mirando sorprendido, en todos esos años que habían pasado siempre pensó que Mu había hablado sobre el pasado de santo de Aries, ya que Tenzin era aún un hombre creyente de la diosa Athena y busco siempre que sus hijos fueran santos.


—Poco después que recobre mis memorias, el padre de mi maestro, Nayat, el líder del pueblo, decidió que mi padre debía acabar con su locura. Nayat es un hombre sin corazón, sin contemplación nos separó a mi hermano y a mí, alejándonos de mi padre y mi madre, yo he estado viviendo con Dohko desde que pude escapar, ya que, cada vez que intentaba volver con mis padres, Nayat de inmediato se enteraba y nos separaba nuevamente, no he visto a mi padre en trece años.


—Oh Mu, hijo, pronto, muy pronto vas a comenzar tu entrenamiento— exclamo mirando con los ojos vidriosos. Tenzin no era aquel hombre que Shion conoció en el pasado, el brillo de sus ojos se había perdido, Saga noto sus ropas rotosas y desgastadas, el cabello de aquel hombre opacado por el tiempo y su sonrisa, la sonrisa de emoción no era tal, era una sonrisa falsa, fingida.


La separación de sus hijos había termino con la cordura de aquel hombre, Tenzin había visto a sus hijos volver a casa una y mil veces con los años desde que fueron obligados a separarse de él, Mu y Zen siempre le decían que sus tutores eran hombres malos y que los golpeaban, pero Nayat no tardaba en ir en la búsqueda de los menores para volver aparatarlos de los cálidos brazos de sus padres. Nayat era fiel creyente que la diosa Athena había abandonado al pueblo en el pasado, que dejo morir a su pueblo cuando el cataclismo ocurrió y por tanto no merecía ser venerada, con los años solo la familia de la que descendía Tenzin fue la última que creyó en la diosa y para Nayat ya era hora de terminar con esa herejía.


Tenzin entonces, contrario a lo que todos pensarían, siguió con sus creencias y buscando la vieja torre del maestro, del último descendiente de Mu que portaba una armadura, ya que, a sus ojos era la última esperanza. Tenzin, ciego por querer recobrar sus hijos comenzó la búsqueda del antiguo caballero, sin descanso, paso trece años buscando a aquel hombre del que se contaban en leyendas, solo para que este le ayudara, para que aquel tomara a sus hijos de aprendices y los llevara por el camino que la diosa Athena marcaba, pero en trece años no había tenido éxito, jamás lo encontró. Trece años había sido mucho tiempo, la esposa de Tenzin falleció de dolor ante perder a sus hijos, y Tenzin siguió buscando sin éxito aquello que solo era una leyenda para el pueblo,


—Debes decirle, el nunca perdió la esperanza y es hora de que sepa el pasado que te precede.


—Padre, hay algo que debo decirte, sobre mí— exclamo poniendo su mano sobre el hombro de su padre.


Mu le conto toda su vida pasada, sus recuerdos preciados de cuando fue santo de Aries, de que Shion no fue otro que su maestro y era el antiguo santo de los montañas del que tanto se hablaba, de las guerras vividas, de sus aventura en esta vida, finalmente hablo de su rencuentro, de cuando recupero sus memorias y su recuento con Kiki. Saga lo paro en un momento, era mucha información para aquel hombre y solo debía saber lo necesario, no más detalles de su vida actual, Mu asintió, no podía decirle de su actual relación con Saga y debía centrar su atención en pedirle ayuda, Tenzin era el único hombre que podría ayudarles en las ruinas.


—Fuiste un santo de Aries— exclamo orgulloso abrazando a su hijo—. Oh Athena, bendita seas por darme un hijo tan maravilloso, por darme a un hijo el cual cuidar, uno de tus santos.


—Señor Tenzin— interrumpió Saga a sus alabanzas—. Nosotros intentamos recuperar nuestro cosmos, pero no ha sido imposible en estos trece años, quizás usted pueda ayudarnos, encontramos ruinas antiguas, y usted es un amplio conocedor de la materia.


—Por supuesto, por supuesto.


Mu sin perder tiempo los teletrasporto a todos de regreso a las ruinas, donde los demás esperaban expectantes.  Saga presento al añejado hombre a todos los santos quien no cabía de gozo ante lo que sus ojos veían y sus oídos escuchaban.  Tan pronto como pudo después de conocer a los santos, a los héroes desde tiempo mitológicos, comenzó a leer cada escrito en las ruinas.


—Mu ¿Por qué no me dijiste que te separaron de tu padre?


—No podrías haber hecho algo, Saga, es triste, hasta mi maestro lo intento, intento que me quedara a su tutela pero como él era amigo de Tenzin y Nayat el líder del pueblo, no se pudo hacer nada.


—Señor Tenzin ¿Ha logrado descifrar algo?— Pregunto Kiki mirando entusiasmado al hombre que veía cada escrito en la piedra con gran interés, ignorando a su maestro y a Saga.


—Solo cosas desoladoras muchacho, ante el abandono de la diosa y el pueblo escapando de la persecución, la población se diezmo, encontraron en el camino solo hambruna y enfermedad, niños que nacían muertos, ancianos que no podían continuar el camino y quedaban a un costado de las rutas, enterrados sin ceremonia porque el tiempo no ayudaba, finalmente imploraron piedad pero Athena nunca escucho.


—Athena tardo doscientos años en volver a la tierra y para ese entonces el pueblo ya la había olvidado— recapacito Shiryu, mirando a Ryuho que pronto perdió su entusiasmo al ir escuchando la lectura.


—No solo eso, según estos antiguos escritos,  los ruegos fueron escuchados por un dios oscuro que exigía tributos que causaron hambre y muerte,  la diosa peleo contra aquel oscuro ser y salió victoriosa pero para guarecer al pueblo los aisló en las montañas, donde cada doscientos años volvería por algunos pequeños que se convertirían en santos, prometiendo que estos regresarían y ayudarían al pueblo, entre guerras y guerras, nunca ninguno logro regresar…Oh Mu, si hubiera leído esto, si tan solo lo hubiera leído.


—Padre— le interrumpió el ariano acercándose y abrazándolo—.Padre yo cumpli me deber y regrese, regrese como un hijo de Mu.


—¿Por qué quieren volver a ser Santos?


—No es volver, señor Tenzin, desconfiamos de los dioses, quienes siguen su divino capricho, Abel y Hades fueron crueles y revivieron santos caídos para que lucharan contra la diosa, causando más dolor, no querremos volver a ser santos, queremos defendernos de los dioses— explico Saga con autoridad.


— ¿Dice algo más?


—Solo historias de la gente del poblado, relacionado con el abandono a la creencia de la diosa, de que cada doscientos años uno o dos niños nacían para morir en una guerra santa.


—Hemos venido aquí para nada.


Todos miraron decepcionado ante lo escuchado, Mu no soltó a su padre buscando calmar sus sollozos, quien ante lo leído y ante lo que había vivido, se arrepentía de haber buscado que sus hijos fueran santos de Athena.  Ryuho miro desolado hasta que su mente una idea cruzo, miro con entusiasmo y le susurro algo a Haruto, quien solo asintió.


—Quizas sea cuestión de entrenar en un lugar donde el cosmos se encuentre explotando en cada aspirante y santo presente—dijo con emoción el pelinegro.


—El santuario no es opción, ningún ser humano que no allá despertado el cosmos puede pasar.


—Pero existe un lugar que si— sonrio Haruto y miro a Raki—. Pequeña, traspórtanos a todos.


—Pasemos por mi abuelo y el señor Shion, ellos también quieren recuperar el cosmos.


Sin explicar a nadie el plan, Raki trasporto a todos hasta la vieja torre, donde Shion leía algunos antiguos pergaminos y Dohko tomaba una taza de té, sin decirles nada los interrumpieron y se los llevaron sin ninguna otra explicaciones. Raki paso por Argentina para llevarse consigo a Kanon, quien dormía en ese preciso instante y sin previo aviso fue despertado y llevado contra su voluntad, despertando justo cuando cayó al suelo.


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Un bosque frondoso rodeaba el lugar elegido, parecía un lugar muy tranquilo, los árboles se mecían al compás del viento, un rio tranquilo se escuchaba no muy lejos.


—Estoy seguro que recuperaran su cosmos— exclamo Ryuho con emoción.


—Satisfacción garantizada o pueden darme dinero— exclamo una voz acercándose, Ryuho y Haruto la reconocieron.


—Es el lugar más seguro sobre la faz de la tierra— una voz apareció, por lo que todos quedaron estupefactos.


—Es un lugar tranquilo para pensar, estudiar y fortalecerse— acoto una segunda voz.


—Seguro se van a divertir— se escuchó una tercera a lo lejos.


—Koga— grito Ryuho al verlo acercarse y bien acompañado—. Aioros de sagitario, Padrino.


—Ryuho, Soma— señalo estupefacto el caballero de Pegaso mirando a todos los reunidos—. ¿Esos quiénes son?


—Aioria de Leo y Shaka de Virgo, los encontré en el paso el señor…ese me dijo dónde encontrarlos– señalo el león menor.


—Hola– saludo el anterior santo de oro de leo, mirando con una grata sonrisa a sus antiguos camaradas.


—Veo que todos tuvimos la misma idea, pero la mía fue para protegerlos.


—Señor ese ¿Cómo que señor ese mocoso?— exclamo Death Mask acercándose a darle un coscorrón a Soma—. Trata con respeto a tus superiores.


—Yuna— sonrió Raki corriendo a abrazarla—. Tengo mucho que contarte.


—Y nos volvemos a reunir, después de tanto tiempo—exclamo la joven de Aguila sonriendo—. Edén no creí que vendrías.


—Debía traerlos, lo necesitaban.


—Solo falta Aldebarán y estamos todos— sonrió Aioria con picardía.


—Yo puedo traerlo, solo díganme donde está.


—Niños ¿Cuál es su plan?— pregunto Kiki mirando a los nuevos santos legendarios.


—El mejor lugar para entrenar Santos— presento Koga.


—Donde no necesitas cosmos para poder entrar desde las bajas en la guerra contra Marte— continuo Soma.


—Un refugio seguro contra cualquier ser malvado— continuo Yuna sonriendo.


—Un lugar para el aprendizaje sobre uno mismo— comento Ryuho con emoción.


— Habido para pensar— interrumpió Edén.


—Bienvenidos a Palestra— dijeron Koga, Ryuho, Soma y Yuna a la vez.


Continuara…

Notas finales:

Espero les allá gustado, ya saben cualquier cosa en Reviews ¿Les gusta la vuelta del Fanfic? Para algunos estaba por terminar pero con esto les digo falta un poco más ¿Qué tal la actuación de los chicos de bronce de Omega? ¿De mal a peor o están pasables? Y tal como cada uno presento la escuela ¿Qué creen ustedes? ¿Todos van por los mismos motivos?

Bueno, esto responde un poco quienes fueron a visitar a los protagonistas del capítulo pasado, pero ojo, no fueron solo, Edén fue acompañado de alguien y ese alguien ayudo que Camus y Milo lo siguieran, lo mismo con Aioros y Shura que vienen con Koga ¿Quiénes creen que fueron tan convincentes para acompañarlos? A ver, adivinen.

Sigue la pregunta vigente, quiero escuchar sus opiniones ¿Creen que todos quieren volver a recuperar sus cosmos? Recuerden, para que todos recuperen su cosmoenergia deben estar todos de acuerdo en proteger a la diosa nuevamente.

Dejen su respuesta en Reviews y nos leemos en el próximo capítulo.


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