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El tormento de Ron por Rolinkro

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Notas del fanfic:

 Los personajes de Harry Potter no me pertenecen... (por que si fuera así seria slash del bueno xD... na mentira o.o) le pertenecen a Jk Rowling... a quien amare y odiare (por la creación y muerte de Severus Snape xD) por el resto de mi vida xD

Notas del capitulo:

Los personajes de Harry Potter no me pertenecen yo solo juego con ellos xD 

Aqui el primer capitulo de mi primer fic. Espero les guste =)

El Tormento de Ron

1-

La guerra había terminado, el mundo mágico intentaba lamer sus heridas, tanto las materiales como las humanas. Estas últimas eran las que más sentían los magos sobrevivientes, entre ellos Ron Weasley, el último de los hijos varones de Arthur y Molly Weasley, había perdido a uno de sus hermanos, Fred, y a muchos de sus amigos. Si bien se encontraba feliz del triunfo de Harry sobre Voldemort (si, después de mucho tiempo, lágrimas y sangre ya no temía llamarlo por su nombre), no era suficiente para hacerlo sentir mejor, Harry y Hermione no pasaban tanto tiempo con él como lo hacían en el pasado, si bien durante la guerra él y la castaña habían mostrado interés romántico el uno por el otro, no paso tanto mucho tiempo para que se dieran cuenta de que no era más que el miedo a morir sin haber tenido una pareja por la que sintieran amor verdadero, aunque en su caso era amor fraternal, también ayudo el que Harry se diera cuenta que a quien amaba en realidad era a la de cabello enmarañado y no a la pelirroja. Como consecuencia ese par de amigos se volvieron pareja dejando un poco de lado al miembro restante del trio de oro, haciendo que la pérdida que sentían por la muerte de sus amigos y las propias heridas y traumas de la guerra fuera llevadero. Pero para Ron, que se había quedado solo, la mayor parte del tiempo, los traumas, heridas y pérdidas sufridas en la guerra estaban pasándole la cuenta.

 

Caminaba por las orillas del lago en el que sería su último año en Howarts, Minerva McGonagall había permitido que todo aquel que hubiera perdido el año por la guerra pudiera recuperarlo, no pensaba en nada o al menos eso era lo que intentaba lograr, acallar las voces que lo atormentaban, las imágenes y los pensamientos fúnebres que lo acechaban pero solo lo lograba por segundos, unos cortos y etéreos segundos que desaparecían ante los horribles y grotescos recuerdos de la guerra. Se dio por vencido y dejo caer su cuerpo en el pasto a las orillas de aquel lago en el que habitaba el calamar gigante, que si hubiera sido en años anteriores ya estaría molestando con piedras, pero ya no, las ganas de ver como ese ser se retorcía en las aguas lo habían abandonado en el momento en el que la guerra había desatado su lado más cruento. Así que ahí se mantenía con la vista fija en las distintas formas que lograban las nubes en el cielo, sin darles mayor importancia o formas lógicas.

 

No quería recordar, pero era inevitable que llegaran a él aquellos momentos en los que se separó de sus amigos, si hubiera sabido lo que le ocurriría jamás se hubiera separado de ellos aunque eso significara luchar contra el mismo señor oscuro y morir en el intento, nunca les dijo lo que había pasado en realidad en esos días ni pensaba hacerlo, eran recuerdos demasiado dolorosos y no quería que sus amigos cargaran con algo más que lamentar en sus vidas, pero era demasiado para sobrellevarlo él solo y no podía evitar, como en esos momentos, que el dolor lo embargara y llorar echo un ovillo abrazado a su cuerpo, los gemidos y gritos que soltaba cuando el dolor llegaba a ser insoportable estremecerían hasta al más frio de los mortífagos.

 

Habían pasado horas o al menos así lo sentía, desde que el dolor había tomado hasta el último rincón de su cuerpo y mente, el llanto había cesado pero la sensación que le quedaba cada vez que tenía alguno de estos ataques perduraba, el sentimiento de estar sucio, asqueado de sí mismo y del resto, de odiar a quienes podían soportar el dolor de forma más llevadera y de anhelar como nunca antes alguien que fuera capaz de recoger los pedazos en los que se había convertido. Sin dudas este había sido la peor crisis que había tenido hasta ahora.

 

Se puso de pie con dificultad, tenía en sus piernas la molesta y a veces dolorosa sensación de cosquilleo por haber estado tanto tiempo en la misma posición. Tenía que apurarse, se había saltado DCAO pero la clase de ahora era pasiones y a esa no podía faltar, el profesor Snape, que a duras penas había salido vivo luego de la mordedura de Nagini, no perdonaría la falta del pelirrojo.

 

Cuando sus piernas al fin le respondieron como debía las clases ya habían comenzado así que corrió como solo durante la guerra había hecho para que el retraso no fuera tanto, no le importaban los puntos que le podían quitar ni lo mordaces que fueran los comentarios del pocionista pero no quería bajo ninguna circunstancia quedar en detención ese día, el dolor que traía en el cuerpo era demasiado como para soportarlo por tantas hora

 

A pesar de todo lo que había cambiado durante la guerra seguía siendo un gryffindor que actuaba antes de pensar en lo que hacía, así fue que con el impulso de la carrera abrió la puerta y entro hecho un cohete, casi cae al suelo si no fuera por el hombre de túnica negra de quien se afirmó como si su vida dependiera de ello.

 

Señor Weasley – escucho que decían cerca de su oído de forma amenazante, trago en seco mientras sus piernas amenazaban con fallarle – llega tarde, no tiene la decencia de tocar antes de que se le permita entrar y para colmo ataca a un profesor durante clases

Ron que hasta ese momento seguía fuertemente afirmado al amplio pecho de su profesor al tiempo que lo utilizaba de escondite para su rostro reacciono soltándolo de inmediato, por un segundo casi cae pero una rápida acción con su mano derecha logro impedirlo al sujetarse de la persona que se encontraba sentado a su lado y a quien soltó de inmediato al reconocer, Blaise Zabini, una de las serpientes seguidoras de Malfoy. Ron esperaba las risas y burlas de los slytherin y los gritos e insultos del profesor pero nada pasaba, paso su mirada por el salón y noto como todos tenían la mirada en él, en su rostro, sus amigos lo miraban preocupados, las serpientes con curiosidad y algo de lo que no estaba seguro que era y Snape parecía que quería descubrir el secreto del mundo en él, lo estaba analizando con esa mirada fría y calculadora que solo aquel ex-mortifago tenía. No hay que mencionar que se sentía completa y absolutamente como un animal en uno de esos zoológicos muggles que Harry alguna vez había mencionado.

 

Pro... ¿Profesor? – pregunto dubitativo, mientras concentraba su mirada en el oscuro hombre. ¡Demonios!, era su idea o ¿la persona que tenía enfrente era más alto que la última vez que lo vio? – la… lamento el retraso… - continuo hablando ante la falta de respuesta Snape soltó una especie de gruñido mientras que con su varita hacia aparecer un pupitre cerca de su mesa – Siéntese ahí y no haga ruido – ordeno a un confundido pelirrojo que como reflejo, en su nerviosismo, paso una de sus manos por su cabello que por un segundo le pareció más largo, iba a repetir la acción cuando la demandante vos del mayor lo saco de su transe – espera a que le envié una invitación?... veinte puntos menos para usted y detención conmigo, lo espero en mi despacho a las seis

 

Con eso dicho el menor de los Weasley casi corrió a sentarse en ese solitario puesto mientras el profesor continuaba con las clases. Terminaron normalmente sin que hubiera otra interrupción más que las miradas furtivas que los alumnos dedicaban al pelirrojo de vez en cuando cosa en la que el chico ni reparo.

 

Se puso de pie con la intención de recoger sus cosa he ir a la sala común a descansar hasta su detención pero antes de que lo lograda se vio rodeado por sus amigos que lo miraban como si tuviera las respuestas a los próximos exámenes de transformaciones.

 

¿Chicos? – pregunto con algo de miedo en la vos logrando que al menos Harry dejara su escrutinio mudo. - ¡Ron!... ¿Qué demonios te ocurrió?... ¿Quién te hizo esto?... Dios… si te ves tan…

 

Tan... tan... ¿tan que, Harry? – pregunto el pelirrojo empezando a asustarse, ¿le habían lanzado un hechizo sin que se diera cuenta?, ¿se había manchado con alguna poción mientras iba por los ingredientes que necesitaba?, ¿acaso se había acostado en algún desecho de los animales de Hagrid, mientras estaba en el lago?, ¡¿Qué demonios pasaba?!

 

Wow, Ron, no sé cómo lo has hecho pero ese cabello largo, esos ojos rojos y el que seas más bajo te hacen parecer una chica “una comestible chica” – interrumpió Dean Thomas la conversación entre los dos amigos

 

¿Qué?.... ¿de qué demonios hablas, Dean?- comenzó a contestar enfadado el pelirrojo -... yo no tengo el pelo largo, mis ojos son azules y siempre eh sido más al…- (…to que tu) quiso decir pero su vos no pudo terminar la frase al darse cuenta que para mirar a sus amigos tenía que levantar la mirada, no era mucho lo que tenía que levantar el rostro,  pero todavía recordaba el dolor de cuello que le daba tener que mirarlos hacia abajo al hablar con alguno de ellos por mucho tiempo. - ¡ey!... ¿¡qué diantres han comido para crecer así!?– pregunto exasperado y toralmente confundido por la situación.

 

No son ellos, Ron – decidió interferir Hermione antes de que las cosas se pusieran más confusas – no sé como pero te has encogido, tu pelo a crecido y tus ojos son rojos… Dios, Ron, solo hay una criatura que tiene estas características…. Pero… es imposible, se dicen extintas… las Hadas están extintas…

 

Notas finales:

Bueno aquí el primer cap. de esta historia descabellada creada por esta mente enferma xD, mi primer fic, espero les guste... dejen sus opiniones... ah! casi lo olvido... todavía no se con quien se podría quedar Ronnie así que hacepto sugerencias xD


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