Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

The city of the dead por Demonio_Nocturno

[Reviews - 87]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola al leer el capitulo anterior para ver siertas cosas me di cuenta que en vez de describir a Poseidon describi a Julian y como el tambien aparecera lo cabie en fin bueno abajo les dejo de donde tome las apariencias de Poseidon y Zeus a y me disculpo por no actualizar la semana pasada

La mañana llego y de a poco los habitantes de la casa junto a los nuevos integrantes, fueron despertando aunque debido a que muchos tuvieron que dormir en el suelo, cubiertos solo con una sábana, tanto la espalda como el cuello y una que otra parte del cuerpo les dolía pero no podían quejarse ya que al menos tenían un lugar seguro donde dormir, por ahora.


−Me duele todo el cuerpo –dijo Minos sobándose específicamente el cuello, que era lo que más le dolía.


−Deja de quejarte y da gracias de que no te dejaron botado, aunque eso hubiera sido la mejor opción dado que sería una boca menos que alimentar y escuchar –regaño Afrodita, quien iba bajando las escaleras .


−Es mejor que te calles florecita, ya que tu no tuviste que dormir en el suelo debido a lo frágil que eres –ataco burlonamente mientras doblaba la cobija con la cual se había tapado la noche pasada.


−Más vale que dejes de llamarme así porque soy capaz de sacarte a la calle ahora mismo y para tu información también tuve que dormir en el suelo.


−Ya paren ustedes dos, no ven que todavía hay personas que duermes así que mejor guarden silencio –regaño Aiacos cubriendo a Orfeo quien había decidido dormir junto a él compartiendo incluso la misma sabana para que alguien más utilizara la de él.


Después de esa pequeña discuta ambos chicos guardaron silencio e incluso se pusieron a preparar el desayuno juntos, aunque de vez en cuando se insultaban en voz baja para no volver a ser regañados ya fuera por el peli azul o por algún otro adolescente. En una habitación de arriba, para más específicos, la de los gemelos, Kanon se encontraba despertando de su largo sueño y por un segundo olvido lo que horas antes le habían informado acerca de Saga, pero lamentablemente al levantarse recordó y eso lo hizo bajar corriendo, yendo directamente con su amigo Ikki para pedir, más bien rogarle, que salieran a buscar a su hermano ya que él no aceptaba el hecho de que su hermano y amante estuviera muerto. Él sabia, algo le decía, que Saga estaba vivo y que tenía que buscarlo o esa suposición se aria realidad.


−Ikki, Ikki tienes que ayudarme a encontrarlo, no puedo abandonarlo sabiendo que esas cosas asechan las calles –suplico con lágrimas en los ojos el menor de los gemelos.


−Es muy arriesgado que salgamos, no te lo he dicho pero dentro de dos días partiremos de aquí e iremos a un refugio que está a las afueras de la ciudad para embarcarnos con rumbo a una isla donde se ha controlado la infección –informo tratando de hacerse del tono más calmado y amable que tenía para que su amigo no amenazara con lanzársele encima pero eso de poco sirvió ya que recibió una mirada que nunca antes le había visto y que no podía descifrar con claridad ya que estaba compuesta por varios sentimientos, tales como la ira, la tristeza y sobretodo la decepción.


−Cómo puedes siquiera decirme eso justo ahora, cuando pido tu ayuda para encontrar a la única familia, que se con certeza−recalcó lo último−, me queda con vida.


−No puedes estar seguro de que Saga siga vivo, abre los ojos, sé que te duele tanto, no, incluso más que a nosotros pero debes seguir adelante.


−Eso lo dices porque no eres tu quien está sufriendo esto−grito llamando la atención de los que en ese momento se encontraban en la sala, donde estaban discutiendo−, dime que arias tu si fuera Shun el que estuviera allá afuera perdido ¿Apoco lo abandonarías solo porque los demás te dicen que lo hagas? –pregunto dejando escapar un sollozo mal reprimido.


Ikki no supo que responderle dado que si el estuviera en esa posición también aria lo que Kanon, e incluso más y por ese lado no podía contradecirlo, pero también estaba el hecho de que si acertaban y Saga hubiera sido mordido, para ese entonces ya estaría rondando por las solitarias calles y eso era un dolor que no quería que su amigo pasara. El ver a su propio hermano y amante, convertido en uno de esas cosas, sería un dolor inimaginable y si eso pasaba, Kanon se volvería loco de dolor y quizá hasta podía atentar contra su propia vida.


−Creo que deberían dejarlo ir a buscar a su hermano –intervino Hilda con voz cálida−, si yo estuviera en su lugar y mi hermano fuera quien estuviera afuera quizá vivo, quizá muerto, me gustaría comprobarlo con mis propios ojos.


−Pero es tonto salir cuando las calles están repletas de infectados –interrumpió Milo calmadamente.


−Aun así, el no saber si tu hermano está bien o no, es un martirio te lo digo porque cuando te fuiste de casa, sentí que moría y supongo que Kanon se siente mucho peor –agrego la peli gris.


−Ya sé que esto que está pasando es devastador pero lo sería más si también perdiéramos a Kanon, suficiente tenemos con que Saga este desaparecido y muy posiblemente muerto.


−Ikki, deja de decir eso, yo puedo sentirlo –puso su mano derecha sobre su pecho, del lado del corazón−, aquí siento que mi hermano sigue vivo, esperando a que lo encuentre y ni tu ni nadie me ara cambiar eso.


El peli azul no agrego nada, solo se limitó a meditar las cosas y sabía que aunque encerraran e incluso encadenaran al ahora dueño de la casa, este encontraría la manera de escapar y eso sería más riesgoso así que con todo y todo decidió dejar que su amigo fuera en busca del suicida e idiota de Saga pero no iría solo, él lo acompañaría y dejaría el mando de las cosas a Camus y a Dohko para que tuvieran todo listo para cuando regresaran y así poder largarse en busca de ese dichoso refugio.


−Kanon, sé que por más que te diga o te grite, no cambiaras de parecer y seguirás con la estúpida idea de salir importante un comino lo que yo te diga y por eso he decidido ayudarte pero con la condición de que si en dos días, contando desde hoy, no lo encontramos –tomo aire para proseguir−. Debemos regresar sin importar nada ya que no podemos retrasarnos debido a que en tres semanas el barco se ira y perderemos la única oportunidad que tenemos de salvarnos.


El otro solo asintió y subió de nueva cuenta para su habitación para bañarse y cambiarse además de que guardo algo de medicina en una mochila y cuando bajo se encontró con Ikki para irse aunque lo vio en la cocina metiendo un poco de comida en su mochila a la vez que hablaba con su hermano así que no quiso interrumpir y espero en la sala, donde ya Camus y Dohko estaban poniendo al tanto a los demás sobre la salida que tendrían los dos peli azul.


 


−Nii−san ten cuidado –dijo Shun con lágrimas en los ojos pero no se permitía el lujo de dejarlas salir.


−No te preocupes, mejor prométeme que te cuidaras tú y que no aras nada peligroso además de que ayudaras en todo lo posible.


−Está bien pero promete que volverás sano y salvo –pidió el peliverde lanzándose a los protectores brazos de mayor escondiendo su cabeza en el pecho contrario tratando de lo más posible de no llorar.


−Nunca te dejare solo Shun, volveré junto con Kanon y traeremos a Saga con nosotros.


−Está bien, aunque espero Kanon no lo mate antes de tiempo –dijo mientras soltaba una pequeña risa y se separaba del peli azul para regalarle una sonrisa.


−Eso esperemos –le devolvió el gesto y luego añadió−. Si necesitas algo ve con Shaka, sabes que él te tiene un gran aprecio y no te dejara solo, el será quien te cuide en mi lugar.


−No te preocupes nii−san, mejor concéntrate en encontrar a Saga y regresar con bien.


−Claro pequeño –le revolvió los cabellos y beso su frente para ir a buscar a su amigo y así partir.


Camino siendo hasta la sala seguido por Shun y a primera vista no encontró a su amigo así que decidió preguntar sobre su paradero pero logro visualizarlo antes de acercarse a alguien siquiera. El peli azul estaba yendo a la puerta para salir a ver si algún infectado rondaba cerca pero la voz de su amigo lo interrumpió.


− ¿Qué haces Kanon? –pregunto Ikki preocupado al ver que el contrario tenía la intención de salir solo y le paso por la mente que quizá se habría hartado de esperarlo y quisiera irse antes.


−Solo quería ver que tan mal nos iría allá afuera –respondió con voz apagada.


Ese tono de voz junto con su mirada apagada y sin brillo, fue el cambio más notorio en el gemelo menor, que siempre era activo y andaba de un lado para el otro pero que ahora parecía más un fantasma.


−No deberías salir así tan desprevenidamente –se escuchó la voz de Shaka quien se acercó a ellos intentando darles una sonrisa pero solo logro hacer una mueca debido a la preocupación que sentía al saber que sus amigos o más bien amigo y amor platónico, saldrían por dos días completos a la inseguridad de las calles.


−Como dije, solo quería ver que nos esperaba afuera –repitió sin emoción alguna.


− ¿Entonces es enserio que irán a buscar a Saga? –preguntó el rubio sabiendo la respuestas a su pregunta.


−Tenemos que buscarlo, yo sé que él está allá afuera y que está bien –respondió el gemelo.


−Yo también lo creo, Saga es alguien muy inteligente además de fuerte y no dudo que se encuentra bien –apoyo Shaka intentando alentar a los dos chicos para que no se dieran por vencidos.


−Gracias –dijo Kanon con una sincera sonrisa que pocas veces mostraba ya que la mayoría de las veces mostraba una arrogante y burlona.


Después de despedirse, ambos peli azul salieron de la casa que les brindaba seguridad para ir a buscar al mayor de los gemelos y así poder irse a buscar el refugio que les habían dicho, los salvaría. Caminaron primero con dirección a donde vieron que Saga de había ido para empezar a buscar desde ahí pero la posibilidad de que hubiera tomado después otra calle era muy grande y a la vez muy pequeña y eso complicaba la búsqueda pero no por eso se darían por vencidos tan fácilmente al contrario se esforzarían el triple para poder encontrarlo.


Fueron caminando por cada calle que estuviera libre de infectados para no tener que arriesgarse a enfrentarlos pero a cada minuto que pasaba, esa misión se les hacía más y más pesada debido al cansancio que sentían y a la falta de pistas o indicios que le dijera que Saga había tomado tal camino o tal calle y eso desesperaba a ambos adolescentes.


−Deberíamos descansar un rato porque si tenemos que correr no tendremos fuerzas –dijo Ikki parando repentinamente al haber escuchado un ruido preveniente de la ventana de una casa que desde afuera se veía abandonada.


−Tienes razón –suspiro− ¿Qué tienes? –pregunto al darse cuenta de que su amigo se había detenido y miraba detenidamente la casa que esta frente a ellos y que tenía indicios de haber sido abandonada quizá un poco antes de que la infección empezará.


−Escuche un ruido proveniente de la casa, no estoy seguro que sea pero debemos estar atentos –respondió llevando su mano a la bolsa de su pantalón donde tenía guardada la pistola.


−Pero y si es mi hermano –pregunto sin despegar la mirada de la ventana más alta y justo iba a decir algo mas pero el ruido de una moto lo interrumpió.


Ambos chicos voltearon a ver y notaron que una chica con una moto se acercaba y detrás de ella venían otros dos chicos.


− ¿Quiénes serán? ¿Y qué hacen afuera sabiendo que corren peligro? –interrogo Ikki desconcertado.


−No tengo la mínima idea pero debemos estar alerta porque con el ruido de las motos pudieron haber atraído a los infectados.


Justo cuando se disponían a marcharse los chicos de las motos empezaron a dar vueltas a su alrededor impidiéndoles avanzar.


La chica era de cabellos lilas y largos y ojos verdes, de piel clara y de estatura media además de que parecía ser la líder. El siguiente era un chico con un tono rojo oscuro tirándole al violeta, ojos castaños casi rojizos de tez clara y alto. Por ultimo estaba el que parecía ser el menor de los tres, un chico de tez morena clara, cabello rubio castaño y ojos verdes.


−Vaya, vaya no pensé que podrías escapar y por lo que veo trajiste a un amigo –dijo la única mujer del grupo.


− ¿De qué demonios hablas? –pregunto Kanon con clara confusión ante lo que esa mujer de no más de 24 años les había dicho.


−Saori ya te diste cuenta que su herida no está, es como se hubiera curado mágicamente aunque eso es imposible –dijo el menor aunque a lo mucho se llevaban quizá por uno o dos años a los otros dos quienes aparentaban casi la misma edad.


−No digas tonterías Jabu quizá solo este fingiendo estar bien –corrigió el otro chico.


−Tampoco creo que pudiera soportar el dolor así que tu deducción es algo tonta Zeus


−No importa cuál sea el caso pero debemos atraparlo para poder llevarlo, ya saben cómo se pone cuando no le llevamos a mas candidatos y no hemos podido encontrar a alguien más así que no nos arriesguemos y agárrenlo –hablo la chica de cabellos lilas.


Los dos hombre se bajaron de sus motos y fueron directo hacia los peli azules quienes intentaron correr para evitar ser capturados pero los mayores fueron más rápidos y sin que se dieran cuenta ya estaban contra el suelo.


−Se buen chico y no forcejees tanto –dijo Jabu intentando mantener quieto a Ikki quien soltaba puñetazos y patadas para que lo soltaran.


−Creo que me pase un poco con este –soltó Zeus viendo que por la fuerza ejercida al momento de derribar a Kanon este se pegó en la cabeza y quedo inconsciente.


−Espero que no le pase nada grave o tu ocuparas su lugar –regaño Saori bajando de su moto y entrando a la casa que anteriormente Ikki y Kanon habían estado observando.


−Ya me arte –grito el castaño soltándole un puñetazo al peli azul y dejándolo en un estado de semi inconciencia haciendo que dejara de pelear y así pudo cargarlo.


Detrás de él iba Zeus con un inconsciente Kanon en brazos y al estar adentro Saori cerró la puerta y los dos chicos subieron a sus víctimas al cuarto de arriba pero grande fue su sorpresa al ver que su anterior víctima no había escapado sino que en vez de uno eran dos.


−Saori ven a ver esto –grito Jabu dejando a Ikki en un rincón mientras Zeus aun llevaba al otro peli azul en brazos.


−Ahora que quieren –pregunto irritada la chica y al ver lo que los otros dos le querían mostrar se sorprendió.


El la única cama que había en la habitación se encontraba un chico inconsciente muy parecido al chico que el pelirrojo cargaba.


− ¿Saga? –pregunto Ikki levantándose de golpe para acercarse al adolescente que estaba tumbado en la cama.


−Así que son gemelos, valla sorpresa esto es mejor de lo que esperábamos –hablo la peli lila sonriendo.


− ¿Qué le hicieron? –grito el único de los adolescente que estaba despierto, al notar como su amigo tenía una herida en el lado izquierdo de su abdomen.


−Él no quería cooperar así que tuvimos que hacer que se calmara –respondió Jabu.


−Son unos malditos –gruño mientras los miraba con odio.


Ninguno de los mayores le prestó atención y simplemente dejaron a Kanon donde Jabu había dejado a Ikki anteriormente para luego salir de la habitación cerrando la puerta con candado.


−Saga, Saga despierta –decía Ikki mientras zarandeaba al mencionado intentando despertarlo.


Después de un par de intentos más los ojos de otro se fueron abriendo poco a poco.


− ¿Ikki? –pregunto incorporándose trabajosamente debido a la herida que tenía− ¿Qué haces aquí?


−Vine a buscarte junto a Kanon –informo y en ese instante se acordó del otro gemelo que aun yacía inconsciente donde anteriormente había estado el−, es cierto Kanon esta inconsciente debido a un golpe que recibió –se levantó y fue a ver a su amigo siendo seguido por la mirada de Saga.


− ¿Cómo que inconsciente por un golpe? –pregunto viendo como Ikki trataba de hacer reaccionar a su hermano pero no tenía éxito.


−Saga ayúdame, está sangrando, tráeme la mochila que está cerca de ti ahí tengo algo de vendas y alcohol.


El otro se levantó cuidadosamente y le llevo la mochila a su amigo para que pudiera curar la herida que Kanon tenía en la cabeza, consecuencia de la caída. Después de terminar con eso lo subieron a la cama y seguido de eso le indico a Saga que le mostrara su herida.


−No es muy grave pero creo que se está infectando y por eso duele tanto –dijo Ikki mientras sacaba lo que necesitaría para curar al mayor de los gemelos.


−Fue un regalo del pelirrojo –aclaro el chico que estaba siendo atendido.


− ¿Cómo fue que terminaste aquí y en este estado?


−No te are la historia muy larga así que solo diré que cuando corría para esconderme aparecieron con sus motos y me trajeron aquí, al principio pensé que me ayudarían pero empezaron a decir que me llevarían con quien sabe quién y al intentar irme ese tal Zeus me lo impidió así que trate de golpearlo pero fue cuando sacó una navaja y me hizo este corte –tomo aire− ¿Y ustedes como me encontraron?


−Kanon al enterarse de tu estúpida y heroica acción, se puso mal y trato salir a buscarte sin importarle nada pero logramos detenerlo y lo cedamos –suspiro−, hoy fue a rogarme que lo dejara buscarte y al final accedí pero caminamos por horas y cundo íbamos a descansar nos detuvimos frente a esta casa y ellos aparecieron –rio bajito−, los idiotas pensaron que Kanon era tú y que había escapado al principio no entendíamos pero entre más discutían eso lo captamos y aquí nos tienes.


− ¿Quieres decir que se dejaron atrapar apropósito? –pregunto intrigado por la locura que habían hecho solo por encontrarlo.


−Sí, pero nuestro querido amigo uso fuerza de mal y dejo fuera de combate a tu hermano.


Los dos voltearon a ver al inconsciente chico que yacía en la cama y pocos segundos después vieron como empezó a abrir los ojos lentamente hasta que logro enfocar a los dos chicos que se estaban acercando a él.


− ¿Qué paso? –pregunto mientras se incorporaba para quedar sentado y agarrarse la cabeza la cual le punzaba por el golpe.


−Te taclearon y quedaste inconsciente por un rato –respondió Ikki.


− ¿Te encuentras bien? –pregunto Saga haciendo que su gemelo subiera la mirada hasta toparse con los ojos idénticos a los de él.


− ¿Saga? ¿Eres tú? –pregunto sin poder creer que realmente tenía a su hermano frente a él.


−Veo que estas bien –fue su respuesta.


El mayor de los gemelos iba a decir algo cuando sintió como le daban un puñetazo que lo hizo caer al suelo y eso dejo sin habla tanto a él como a Ikki quien fue de ver a Saga para ver a Kanon quien tenía lágrimas en los ojos y se veía furioso pero aliviado.


−Eres un idiota, como te atreves a preocuparme de esa forma te odio –grito con voz entrecortada por el llanto.


De un salto Kanon se fue contra Saga pero contra todo pronóstico en vez de volverlo a golpear, lo abrazo mientras dejaba que las lágrimas recorrieran sus mejillas.


−Te odio, te odio –decía una y otra vez.


−Yo sé que eso no es verdad –dijo Saga mientras devolvía el abrazo.


 


Después de aclarar lo sucedido e informar a Saga sobre el refugio se quedaron en silencio meditando como podían escapar pero en ese momento alguien entró a la habitación sorprendiéndolos y haciendo que se pusieran en guardia.


−Hola niños ¿Cómo están? –pregunto Zeus sonriendo burlonamente.


− ¿Qué quieres? –pregunto Ikki sin expresión alguna.


−Solo vine a ver como se encontraban además de que vine por a verificar si no mate a tu amigo –respondió refiriéndose a Kanon a quien miraba con lujuria y eso fue evidente para los tres chicos.


−No tienes tanta suerte –gruño el chico que tenía la vendada la cabeza.


−Qué bueno porque vendrás conmigo –se acercó y lo tomo del brazo.


−Suéltalo –intervino Saga mirándolo enojado.


−Si no quieres que los mate a los tres aquí mismo mejor ven conmigo.


−No te atreverías, nos necesitas –dijo Ikki retándolo.


−Eso dices tú pero a mí nadie me manda así que ven o te atienes a las consecuencias.


Kanon  no dijo nada y simplemente lo siguió aunque su gemelo trato de detenerlo pero siguió caminando hasta que se perdió del campo visual de ambos peli azules dejándolos intrigados y preocupados por lo que le pudiera hacer.

Notas finales:

Poseidon y Zeus


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).