Era la peor persona, ¿como pudo a ver olvidado una fecha importante?, no, simplemente no tenia cabida este chico, justo en la mañana al encontrarse con su pequeño novio fue que entro en pánico, el pequeño castaño le esperaba sonriente en su salón, con un pastel y una gran bolsa de regalo, por mas que el moreno intento recordar que fecha importante había olvidado no daba, justo al ver los ojos del mas bajo, mirándole con tanta alegría fue suficiente para sentirse deprimido, fue por eso que apenas terminaron las clases salió corriendo al centro comercial, buscando algo para no sentir tanta culpa de siempre olvidar todo.
-¿Qué puedo comprarle? –su mirada se paseaba por todas las tiendas, sin aun tener en mente que regalarle a su niño entro a una tienda de música. Camino por los extensos pasillos de esta, buscando algo que le gustara a Kyung, pero nada era lo suficientemente perfecto.
Mas que decepcionado salió de la tienda entrando esta vez a una dulcería, contemplo todos esos dulces tan apetitosos, pero no era lo suficiente para recompensar lo que el menor le había regalado, se quedo congelado frente a esos estantes con montones de deliciosos dulces, el pastel y la bolsa de regalo… ¡las había olvidado en el salón! O si, Jongin era un mal novio, ni siquiera se había despedido de su novio, había salido corriendo apenas dieron el toque de salida.
-me muero… me muero… -la gente que pasaba a su lado le miraba raro, no todos los días se ve a un chico guapo golpeando su frente contra la pared- ¿Ahora que hare?
-Kai, ¿eres tú? –el nombrado le regreso a ver algo ido por los golpes, se quedo serio mirando a su amigo Xiumin- ¿Viniste con Kyungsoo? -esa era la respuesta, Xiumin le podría salvar, casi tira al chico cuando lo tomo de los hombros.
-¡tienes que ayudarme! Olvide una fecha importante con Kyungsoo, y ahora no sé que regalarle –su cara reflejaba todo el estrés que le causaba su descuido.
-ah… pero yo no se… ¿Por qué no le regalas flores, una caja de chocolates o un gran oso de peluche? –el pequeño chico de adorables mofletes solo quería ayudar, pero a Jongin esas ideas no le parecían suficiente, es que D.O. se merecía todo, y por eso era que todo le parecía insignificante.
-no puedo regalarle eso… -y nuevamente el moreno estaba haciendo una escena rara en publico, ahora hecho bolita frente a los estantes, mirando la pared como si esta fuera a darle la solución a su estupidez.
-Kai… todos te miran raro… -si bien, a Kai parecía no importarle hacer el ridículo a Xiumin si, como pudo saco a rastras a su amigo de esa dulcería- Mira, como somos buenos amigos te acompañare hasta que encuentres algo que regalarle a D.O.
En esos momentos se sintió tan aliviado el chico alto, pero conforme pasaba el tiempo y quedaban menos tiendas que ver su animo decaía nuevamente, ahora se encontraba forcejeando con su amigo, quien quería impedirle que saltara por el barandal del 5to piso de ese centro comercial.
-¡déjame morir! –ya tenia medio cuerpo fuera porque el de lindas mejillas seguía aferrado a sus piernas.
-¡no! ¡Tu estas loco Jongin! –y en un ultimo gran esfuerzo logro tirar al moreno en el piso junto a él, respirando los dos agitadamente debido al cansancio.
-soy un mal novio… no le compre nada a mi pequeño niño –mientras el chico de piel canela lloriqueaba Xiumin se desesperaba al no saber que hacer con la situación, su amigo era un completo dramático.
-¿Por qué no simplemente le preguntas a Kyungsoo que es lo que quiere?
-no puedo hacer eso, se dará cuenta que me olvide de la fecha –el mas alto estaba abatido, el de piel clara suspiraba derrotado.
-pero él te quiere mucho, seguro que no se molesta, además a él le gusta cualquier cosa que venga de ti, si hasta aun conserva la estampa que le pegaste en la frente, y eso fue hace casi un año –un poco mas tranquilo y pensando en lo que le había dicho se decidió a entrar a una joyería.
No tenía mucho dinero, pero si lo suficiente para comprar un lindo anillo para su pequeño, cuando le entregaron el anillo lo metió en su bolsillo y se hecho a correr, apenas despidiéndose del menor que estuvo soportando su crisis nerviosa. Corrió hasta la parada de autobuses, apenas logrando alcanzar al que ya se iba, le toco ir de pie, pero no le importaba, él quería llegar a casa de su dodo lo más pronto posible. Cuando se bajo en la parada indicada choco con varias personas que también querían salir, incluso una señora que cargaba bastantes bolsas lo termino tirando al suelo, pero ni así se detuvo, adolorido por la caída llego corriendo a la casa de su novio, toco el timbre y solo le quedo esperar a que alguien fuera a abrirle la puerta, por suerte el que le recibió fue su pequeño, que al verlo tan maltratado se preocupo y lo hizo pasar hasta su sala.
-espera aquí, te traeré un vaso con agua –ni bien dio un paso el de ojos grandes cuando la mano de Jongin lo detuvo- ¿Sucede algo?
-Kyungsoo, lo lamento tanto, lamento a ver olvidado la fecha de hoy, y lamento aun mas no poder recordar que era lo que celebrábamos hoy –Kai estaba atento a las expresiones de su novio, y por eso se preocupaba al verlo tan serio- Por favor perdóname, incluso te compre algo –metió su mano a su bolsillo buscando el anillo, pero palideció al no encontrarlo, no podía ser cierto.
-¿Qué pasa? –D.O. miraba a su novio buscar con desespero algo en sus bolsillos.
-yo… no lo encuentro, creo que se me cayo en el autobús –nuevamente el mayor quería echarse a llorar- Kyungsoo, por favor, pídeme lo que quieras, pero no estés molesto conmigo.
-Jongin… ¿en serio no recuerdas que día es hoy? –bien, el moreno podría sentirse peor, no lograba recordar, así que solo negó bajando su rostro realmente triste.
-no… pero por favor, no me vayas a dejar, pídeme lo que quieras y te lo daré Kyungsoo, por favor –aun con la mirada gacha Kai sentía sus ojos humedecerse de apoco, mas al escuchar como el menor se alejaba, bien, eso era todo, su pequeño niño no lo iba a perdonar, bien merecido se lo tenia por ser tan descuidado, cubrió su rostro con sus manos cuando las lagrimas comenzaron a escurrir por sus mejillas.
-entonces sóplale a las velitas –se sintió desconcertado al ver al menor frente a él, con el pastel que había olvidado en la escuela pero ahora con unas cuantas velitas encendidas, no comprendía, y la sonrisa divertida que veía en los carnosos labios de D.O no ayudaba- Jongin, eres tan descuidado, hoy es tu cumpleaños tontito.
Y no pudo sentirse aun mas idiota, ¿eres su cumpleaños?, ¿Cómo pudo olvidar su cumpleaños? Pues al parecer solo él podía olvidar ese día, avergonzado a mas no poder se acercó a su novio y apago las velitas, este dejo el pastel en la mesa de la sala y se lanzo a besar a su novio, rodeando su cuello con sus brazos, separándose unos segundos después para sonreírle.
-creí que había olvidado nuestro aniversario… -el de piel canela formo un puchero viendo a quien tenia ahora entre sus brazos.
-eres tan distraído, solo tu puedes olvidar tu cumpleaños –el menor reía con ganas de lo despistado que podía ser su novio- Pero aun así te amo Kim Jongin, feliz cumpleaños –y volvió a unir sus labios en un largo beso.
En definitiva, Do Kyungsoo amaba tanto a su olvidadizo novio como sabia que este lo amaba, aun cuando anduviera perdido y hecho un desastre por ser tan descuidado.