-¿Se puede saber que estabas haciendo?
-Se te olvido el “hyung” V.-contesto molesto Jimin mientras azotaba la puerta de su habitación tras él.
Recién regresaban de una fiesta de la TS Ent. A la que habían sido invitados por los miembros de B.A.P y estaban pasándola de maravilla, hasta que TaeHyung pudo observar como Jimin se acercaba sensualmente al vocalista de los Matokis y comenzaba claramente a seducirlo, ante esto el menor estallo en celos y fue en búsqueda de YoungJae. No sabía porque había buscado a Jae, si para que separe a Jimin de DaeHyun o para besarlo desaforadamente en la barra mientras sus manos viajaban hasta debajo de la remera de la segunda vos de B.A.P; aparentemente la segunda opción le pareció la más valida ya que fue lo que hizo toda la noche.
-y a ti la dignidad… ¿Cómo es posible que te acostaras con él?- respondió V enfadado, mientras se sentaba bruscamente sobre la cama. Jimin examino la expresión del contrario con una ceja levantada y enseguida una sonrisa socarrona se asomó a sus labios.
-no me acosté con él...-respondió casi inaudiblemente-, además… tú te acostaste con YoungJae, mira-dijo aproximándose a él y señalando una roja marca sobre el cuello del otro. Tae se paralizo.-y dejo pruebas para que nadie dude.
-¡NO SABES NADA!-exclamo furioso y se levantó de la cama.
-¿Qué es lo que no se, TaeHyung? ¡Dime!
-yo no quería acostarme con el… -hizo una pausa y sus lágrimas fluían de los ojos hasta las mejillas, Jimin hizo una mueca de disgusto, se acercó a él y comenzó delicadamente a secarle las lágrimas.- hyung, no me caracterizo por ser el tipo de persona que se acuesta con alguien que tiene pareja, pero la situación me supero y no lo pude evitar.
-Tae Tae…- susurro y beso su frente.- ¿por qué lo hiciste entonces?
-¡PORQUE ES TU MALDITA COPIA Y TU COQUETEABAS DESCARADAMENTE CON “SU NOVIO”!- las palabras salieron filosas y abruptas de su boca.- sé que ya no somos nada, pero te necesito como el primer día.
Ninguna otra palabra fue pronunciada, Tae se aferró a la espalda del más bajo y lo beso con desesperación como hace meses no lo hacía. Las manos de ambos rápidamente buscaron, con una desesperación única, contacto con la piel del otro. Jimin coló sus manos por debajo de la camiseta del menor que olía a YoungJae, pero en ese momento poco le importo.
TaeHyung rápidamente le saco la camiseta al mayor y comenzó a besarle todo el cuello mientras lo recostaba bruscamente en la cama y él se posicionaba arriba, con una pierna a cada lado del otro, siempre besándose. Cuando la camiseta empezó a incomodarle se la quitó y siguió besando los adictivos labios del mayor mientras movía su pelvis de forma tal que los miembros ya erectos de ambos se rozaran logrando que ambos gimieran, Tae acelero el ritmo de sus “embestidas simuladas” y cuando creyó no poder aguantar mas, de un solo movimiento desprendió el cinto de su pantalón y habiendo bajado solo un poco los mismos, saco su miembro y comenzó a masturbarse mientras seguía besando a Jimin con desesperación.
Jimin, por su parte solo podía sentirse cada vez más y más caliente, Tae era un dios griego a la hora de mover su pelvis, ni los integrantes de INFINITE con el baile de “Paradise” podrían moverse de esa manera. Cuando noto que el menor había sacado su miembro de los boxes, se separó rápidamente y en un hábil movimiento tumbo al menor sobre el colchón y le bajo aún más sus pantalones, se aproximó al miembro ajeno que palpitaba por un poco de atención y se lo metió entero en su boca. Lamia toda su extensión y en el glande se detenía y daba pequeños mordiscos.
Cuando el alíen sintió que no iba a poder aguantar mucho más tiempo, dejo nuevamente a Jimin debajo de él, pero esta vez totalmente desnudo y con la hermosa vista de su entrada. No pudo controlarse más y lo penetro suavemente sin haberlo preparado. Jimin grito de dolor. Las embestidas comenzaron seguidamente, lentas pero precisas y luego más rápidas y bruscas. Cambiaron de posición al menos tres veces, hasta que ninguno logro soportarlo más y llegaron al tan ansiado orgasmo (“el último de la noche”, pensó Tae).
Sus cuerpos sudorosos quedaron extendidos a lo ancho de la cama, sus respiraciones se fueron regulando paulatinamente… y volvieron en sí. Ninguno de los dos se atrevía a hablarle al otro, hasta que el mayor rompió el abrumador silencio:
-¡JAJA TU TAMBIEN ERES SU MALDITA COPIA!- grito y le siguieron las fuertes risas de ambos.
Fin...