Pov Alois~
Me levante con el característico dolor de caderas de una noche salvaje. Reí por lo bajo. Mire la hora y eran las 12:00 am. Vaya que dormí, no vi a Claude. Pero lo que si vi fueron 3 botellas de wiski que nos empinamos anoche. Me duele la cabeza, ¿dónde estará Claude?
Demonios, no recuerdo nada de mi primera vez con él. Se supone que sería una bonita anécdota para nuestros hijos. Intente levantarme pero me fue imposible... Me preguntó ¿Cómo se la habrá pasado Ciel? ¡Ja! Con lo tsundere que es seguro mando a Sebastián a dormir en mi cuarto.
¿Cuánto duramos? ¿Que hicimos? ¿Qué tan bien o mal nos fue? Mi cabeza da mil vueltas, vomitare.
Me arrastre hasta el baño, demonios, estoy desnudo... Bueno, eso significa que me divertí. Comencé a devolver todo ese alcohol, mi cabeza duele demasiado y mi aspecto no es el mejor.
Vi que en el cajón había cepillos de dientes desechables. Claude es tan atento. Me lave la boca y de paso mi cara. Sentí que alguien golpeaba la puerta, aunque se sintió como si golpeara a mi cabeza.
- Alois, amor.- Kyaa es hermoso.- ¿Te sientes bien?-
- Ahora que lo mencionas, estoy limpiando mi estómago, tengo dolor de cabeza... Y de trasero.- Escuche a Claude reír.- Lo digo enserio, quisiera que te den a ti para que veas lo que se siente.- Reproche.
- Lo siento.- Seguía riendo.- Cuidare de ti hoy... Después de todo es mi culpa.-
- No te culpes tanto Claude.-
- Bien, en realidad estoy orgulloso, ese dolor dice que te di bien.-
- ¡Claude!- Le regañe, no es tan divertido cuando te está doliendo.
- Bien, lo siento de nuevo.- ¡PERO AUN RÍE!- Abre la puerta, te pasare tu ropa para que te duches.-
- Claro.- Abrí leve la puerta y saque una mano para que me diera mi ropa, pero el abrió toda la puerta... Sin embargo conozco estos trucos.- Jaque mate.-
- Debes ser un experto.- Traía una toalla de baño cubriéndome por completo ¿de dónde sacan toallas tan grandes? Sabía que quería verme desnudo.
- No tanto, solo que eres algo obvio.- Reí por lo bajo.- Ya dame mi ropa.- Me la dio y prácticamente le cerré la puerta en la cara.
Me metí a la bañera con agua tibia, relajando mis músculos para que dejaran de doler. Estoy crudo... Bien, después de un baño reconfortante me puse mis tratamientos de rostro, así es, los traje. Salí tan brillante como acostumbro, con un shorts negro, una camisa blanca, un suéter morado, calcetines largos y unas botas cafeces. Mi estilo es muy revelador, pero no lo uso para ir a clases.
Baje las escaleras para buscar a Claude, quien tenía los audífonos puestos, llevaba una camisa manga larga pero remangada hasta sus codos color gris, un pantalón de mezclilla azul oscuro y unos tenis del mismo color que se camisa. Claude estaba cocinando, se metió un poco de pan tostado a la boca y cuando volteo y me vio se le cayó de los labios, me miro babeando, con un brillo en sus ojos... Me alegra que le guste.
- Buenos días.- Le hable acercándome.- …l se quitó sus audífonos y me tomo de la cintura.
- Buenos días, bello durmiente.- Me beso profundamente y al separarnos, nos sentamos a desayunar.
- Wow, eres muy bueno en la cocina.- Todo estaba demasiado delicioso.
- No quiero ser arrogante, pero sí, soy bueno.- Sonreí, amo su personalidad.
- ¿Crees que Sebastián y Ciel... Hayan tenido "eso"?-
- No recuerdas nada de anoche ¿verdad?-
- No...-
- Pues Ciel soltaba unos gritos que casi decía que era virgen.- Claude y yo reímos a carcajadas.
- Pues sí, Ciel era virgen.-
- Pues mi hermanito corrió con suerte.- Terminamos de desayunar y ayude a Claude a levantar el desorden, aunque el insistió en que no lo hiciera. Es tan caballeroso.
POV CIEL~
Desperté con un horrible dolor en mi entrada y caderas, Sebastián no estaba a mi lado, ¿qué hora es? ¿¡La 1:30 pm!? Wow, es tarde. Era obvio que no iba a esperar hasta que yo me digne a despertar.
Levantarme me fue imposible, tuve que arrastrar mi cuerpo desnudo hasta el baño, espero que estés sufriendo lo mismo Alois. Abrí la llave del agua caliente y espere hasta que este medio llena para abrir la del agua fría. Así quedo tibia.
Me metí a la tina, relajándome. Tome mi patito, mi cocodrilo y mi barquito y comencé a jugar. Tonto ¿verdad?
- Lamento interrumpir capitán, pero quisiera saber cómo se encuentra.- ¡SEBASTIAN!
- ¿¡Que haces aquí adentro!?- Oh por dios, es tan sexy, lleva puesta una camisa negra sin mangas, unos tenis negros con cuadritos rojos, unos jeans negros y su cabello amarrado con una coleta y unos pequeños cabellos rebeldes salen de ella dándole un look muy sensual y casual ¿lo admire demasiado?
- Bueno, veo que tienes la costumbre de dejar la puerta abierta.- Se burló de mí.
- Y~yo creí que ya te habías ido.- Me sonroje.
- Eres tan tierno, aun juegas con muñequitos de baño.-
- ¡Cállate y vete!-
- Solo contéstame, ¿tu cuerpo está bien?- Se arrodillo al lado de la tina, me dio tanta vergüenza que me hundí en el agua.- Vamos Ciel, no seas tan berrinchudo.- Dijo riéndose. Saque mis ojos del agua y el aún me miraba lascivamente.
- ¡Deja de verme así!- Le reproche sacando mi cara entera del agua.
- Bien, lo lamento.-
- Mi cuerpo está bien... T~tu lo preparaste b~bien.- Me estoy muriendo de la pena.
- Me alegro.- Se acercó y me beso.- Claude dice que Alois ya viene para acá, deje tu desayuno en el microondas, asegúrate de que no explote ¿bien?-
- Ya entendí.- Hice un puchero y logre que se sonrojara.
- Bien, te llamare más tarde. Te amo.- Me volvió a besar y yo me hundí de nuevo, estaba todo rojo, la espuma me protegería.
- T~tambien yo... Vete a c~casa- Se levantó, me guiño un ojo y se fue.
¿El me hizo mi desayuno? De verdad, es buen chico.
Pov Sebastián~
¡Oh dios! ¡Me dijo que me ama! Okey, parezco una colegiala estúpida con estos pensamientos pero no creí que lo hiciera, de verdad pensé que se haría más el difícil pero ¡No! Estoy tan feliz.
Llegue a casa con una sonrisa de idiota, vi a Claude y a Alois en la sala plácidamente platicando pero estoy tan feliz que iré a molestarlos.
- Hola Sebastián ¿por qué tan rojo?- Se burló Claude, yo solo seguía con mi sonrisa y tome un cojín después se lo avente a la cara y abrace a Alois. - ¡¿Qué demonios?!-
Claude iba a arrebatarme a Alois, pero término siento parte de mi rudo abrazo con mi sonrisa en el rostro.
- Jeje, ¿Paso algo?- Alois esta incómodo.
- Me dijo que jhwsoqnoa.- Comencé a reír como idiota, esos dos me miraron como si estuviera loco.
- Sebastián comienzo a preocuparme.- Hablo Claude.
- Claude, hermano. Alois, cuñado. Llámenme el hombre más feliz de todos.-
- ¿Que tanto hicieron?-
- ¿Anoche? De todo. Pero hoy... ¡Me dijo que me ama!- Abrace un cojín imaginando que es Ciel, Alois se quedó boquiabierto. Claude tenía una expresión extrañada y yo soltaba brillitos.
- ¡Mientes!- Exclamo mi rubio amigo.
- No, él me dijo que me ama cuando estaba en la bañera.-
- ¡¡No lo creo!! Kyaaa dios ¿es en serio?- Alois estaba fascinado, no esperaba tanto de Ciel.
- Te lo juro.- Asegure.
- Bien, me tengo que ir. ¡Adiós!- Alois beso a Claude en los labios en forma de despedida y a mí en la mejilla.
Pov Alois ~
En cuanto salí del apartamento de los Faustus Michaelis corrí como loco hasta el cuarto de Ciel, quien estaba poniéndose la camisa.
- ¡Ciel!- Me abalance a él y se quejó.
- Auch, mi cadera.- Me reí, eso significaba que mi niño ya no era un bebé.
- ¿Qué tal tu noche?- Le dije con una mirada pervertida.
- P~pues... Fue...- Estaba sonrojado, pero Ciel no me guarda secretos.- Fue maravilloso.- Tomo una almohada y hundió su cabeza en ella.
- Awwws, mi pequeño ya no es virgen.- Hundió mas su cabeza.
- C~calla... Alois... Le dije a Sebastián que lo amo.- Entonces fue real, me siento tan feliz que podría llorar.
- Ciel, si de verdad lo sientes no hay problema.- Lo abrace, es como darle consejos de amor a mi hermano pequeño.
- S~si, así lo siento... Pero tengo miedo, de que nos pase como la vez anterior.- No me recuerdes eso...
- No pasara... Lo prometo... ¿Sabes? Sebastián estaba que lanzaba brillitos de felicidad, llego a presumir el amor que te tiene.- Si Ciel hunde mas su cabeza en esa almohada o se va asfixiar o la va a romper.
- ¿De verdad?- Le quite la almohada.
- Así es, me dio tanta ternura.-
- ¿Y tú? Supongo que te fue mejor.-
- No lo sé... No recuerdo nada.- Ambos reímos.
- ¿Tomaron?-
- Al parecer solo yo, Claude estaba como nuevo en la mañana, y yo con dolor y crudo.- (N/A: Crudo: con resaca, con caña)
- Entiendo lo del dolor, seducir a Sebastián suele ser peligroso.- Volvimos a reír. En fin, Ciel bajo y saco el desayuno de el microondas, que al parecer Sebastián cocino, también me conto que Sebastián había limpiado. Ese par son un sueño.
Pov Ciel~
Dieron las 6:00 pm y escuche mi teléfono sonar. Ilusionado fui a responder.
- Hola.-
- Hola cariño.- Esa voz no era la de Sebastián... Era...
- Drocell.- Me aterre. No pensé que me encontraría tan rápido.
- Mi muñequito, muñequito ¿a dónde te has ido?-
- Lejos de ti.- Hable desafiante.
- Oh, mi lindo muñequito, no tienes porque ser insolente.-
- Cállate. No soy tu muñequito, así que déjame en paz.-
- Oye Ciel, ¿Qué quieres cenar?- Entro Alois.
- ¿Así que mis pequeños títeres están juntos? Gracias muñequito, me será más fácil entonces.- Alois vio mi expresión de miedo e impotencia. Hizo que se alarmara.
- Ni creas que volveremos a ser tus juguetes.- Alois capto quien era, vi cómo le daba un escalofrió.
- Eso lo veremos. Hasta pronto, mi pequeño muñequito zafiro.- Colgó. Alois, comenzó a temblar, solo lo abrace... No dejare que nos pase lo mismo otra vez.
- Ciel... Vendrá por nosotros.- Dijo llorando.
- No digas eso, no pasara, lo prometo.- Comencé a llorar junto con Alois recordando todo lo que paso en nuestros ayeres.
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español