Iba caminando hacia la escuela, una institución en Seúl, cuando de pronto escuche el sonido de piel chocando con piel luego un quejido, me asome por suma curiosidad.
Pude percibir como dos chicos golpeaban a uno que se encontraba tirado en el suelo, y no pude evitar intervenir, no me gustan las peleas, y no es por presumir pero se me dan bien, ahí del porque no me gustan, pero esto era diferente era injusto.
-¿que están haciendo?- pregunta a los dos chicos, y estos se voltean enojados para replicarle que no se meta, pero quedan estáticos al ver de quien se trata.
-eh preguntado que es lo que esta sucediendo?- vuelve a repetir..
-el se lo busco- se atajo el otro chico.
-no es verdad! Ustedes me atacaron, solo por como luzco!- grito el chico de cabellos dorados que se encontraba tirado en el suelo.
Jimin le dedico una mirada, era realmente bonito, se dijo
Pero justo en ese momento ambos lo patearon, y ese rostro bonito se contrajo de dolor.
-es todo, no lo vuelvan a tocar- dijo Jimin y tomo el cuello de las chaquetas de sus uniformes y los llevo hacia atrás, uno lo intento golpear, pero Jimin es mas rápido, y logra golpearlo en el rostro haciendo que su nariz sangre.
El otro chico que en ese momento estaba distraído, sintió un fuerte golpe por parte de Jimin en el estomago, uno tras otro, hasta que cayo al suelo junto a su compañero
Ambos se levantaron a como pudieron, salieron lejos de la iracunda vista del chico.
Jimin pronto se giro para ver al muchacho de cabellos rubios levantarse a duras penas del suelo, lo vio tambalearse y con un rápido movimiento lo sujeto de sus caderas, el chico solo siseo de dolor.
Jimin pudo estudiar su rostro mas de cerca, y por favor bonito era quedarse cotos. Aun con el labio partido y un ojo hinchandosele se veía realmente bello.
El chico lo aparto de su camino e intento irse hacia el lado por el cual Jimin había llegado, pero no llego a dar mas de unos paso antes de caer al suelo inconsciente
No había llegado a tiempo a su lado por lo que el chico impacto su cabeza contra el suelo, Jimin solo lo sujeto en brazos y lo llevo a su casa, que suerte que vivía cerca, porque no sabia si las fuerzas le iba a dar a mas!!
Al llegar a su casa dio gracias a los cielos por que sus padres ya no estaban mas y entro con el cuerpo inerte.
Lo coloco en el sofá y procedió a traer el botiquín de primeros auxilios que estaba en el segundo piso cerca de su habitación.
Cuando estaba por bajar las escaleras decidió cambiar de dirección y procedió a dejar la caja en su habitación, bajo hasta el sofá y volvió a cargar al chico hasta colocarlo suavemente en su cama.
Abrió la caja y saco apósitos y banditas, un algodón y anticepticos y comenzó a limpiar las heridas de su rostro..
Pasada media hora el chico comenzó a despertar, y se encontró en un lugar que no conocía, se sobresalto y se sentó de golpe en la cama, se arrepintió de inmediato, pues su vientre le dolía horrores! Justo en ese momento Jimin iba entrando en la habitación y lo vio retorcerse del dolor, en una mano llevaba un baso de agua y se lo tendió junto a unas pastillas para el dolor, que el chico tomo gustoso.
-como te llamas?- Pregunto el dueño de la cama.
-soy Suga- contesto este.
-bonito como tu rostro- contesto Jimin.
En ese momento,Suga lo ve extrañado "A quien dice bonito?Como se atreve? El era cualquier cosa menos bonito,era tan macho que no le podían decir eso"
-No soy bonito.-Le dijo
-Si,si lo eres.-Le respondió Jimin
-No me interesa lo que tu pienses. Que hago aquí?- Le pregunto
-Te has desmayado y te golpeaste la cabeza,te he traído hasta mi casa espero no te moleste.-Le contesto Jimin
-Es por eso que te he traído a mi casa, no te podía dejar tirado sin mas- le contesto Jimin sin mas.
-hubiera sido mejor- le contesto suga.
-me permites ver bajo tu camisa?- pregunto Jimin.
-para que? Es una invitación indirecta?- pregunto suga con un tono burlón.
-si quieres que lo sea. Pero es para ver tus moratones- les contesto Jimin.
Suga se lo permitió, pero no se desprendió el los botones, si no, que dejo al chico de cabello negro que lo hiciese, y este a paso tortuoso, fue desabrochando botón a botón la camisa del contrario.
Suga era tan blanco, su piel tenia un aspecto tan suave..
Pero todo eso quedo a tras en el momento en el que el pelinegro vio los horrendos manchones violaseos que iban machando su abdomen.
Sin mas se levanto y fue hacia la caja que había dejado sobre su escritorio y de allí saco una crema. Se sentó al lado del rubio nuevamente, y abriendo el pote de crema, lo paso por sus heridas no sin antes decir un "dolerá un poco". Que sin dudas era cierto por como suga puso una mueca de dolor.
Jimin una ves termino con su tarea no resistió a tocar la suave piel de suga, era tan suave, y el era tan hermoso.
Por su parte suga no se esperaba ese contacto repentino, pero la sensación le había gustado y soltó un suspiro involuntario.
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Y para Jimin ese fue un sonido de lo mas agradable, y quiso mas de donde había salido ese, así que simplemente reemplazo sus manos por su boca, y comenzó a darle suaves besos por todo el abdomen, haciendo que suga comenzara a soltar mas suspiros, pero esos no eran los sonidos que Jimin quería oír.
El quería oír en su totalidad al chico que estaba acostado en su cama, dejo lo que estaba haciendo y lo miro.
Pudo apreciar sus hermosos ojos color chocolates y esos labios tan antojables, suga simplemente le sonrió, y Jimin jura que vio lujuria en esa sonrisa.
No sabe porque, pero presiente que esta sera la primera de muchas sonrisas así..
No le da demasiada importancia y continua con su regadera de besos. Pero algo le llama la atención, porque el chico no dice nada por lo que están haciendo?
-estas seguro de querer llegar a mas?- Pregunta Jimin.
-Si, pero debo admitir que es mi primera vez, nunca he estado con nadie antes- confiesa suga, y un rubor crece por sus mejillas.
-como es eso posible?- pregunta un poco incrédulo Jimin.
-es entendible que no me creas, no me conoces, pero yo si a ti.- dice suga sorprendiendo al otro chico.
Y justo cuando Jimin iba a decir algo en protesta, suga toma su virilidad en sus manos y ambos sueltan un suspiro.
Jimin por lo duro que esta ya que su miembro duele por estar en esa prisión que son sus pantalones, y suga por sentir lo grande que es la polla del menor.
Ambos no resisten mas y se funden en un beso, un beso hambriento, de esos que son tan necesitados que a la hora de juntar los labios también actúan los dientes y la lengua, un beso fogoso que deja a ambos sin aliento en poco tiempo.
Jimin quita la camisa de suga, lo hace con suma delicadeza y luego procede a quitarle los zapatos y la media, para ir lentamente pasando sus manos por encima del pantalón, iniciando en la pantorrilla y subiendo hasta sus muslos, y rozando su pene por encima de esa tortuosa tela.
Suga se resurte de placer, esta anticipando algo que va a ser sumamente bueno, y mas si es viniendo de su menor.
Suga se había perdido en sus pensamientos que a muy duras penas se percato de que Jimin ya había retirado sus pantalones y bóxer y admiraba su erecto pene que se doblaba en una hermosa curva hacia su abdomen.
No sabia porque pero la mirada del contrario estaba causando estragos en su ser, por lo que con un sonrojo demasiado notorio se permitió ver el hermoso rostro de la persona que en breve quitaría su virginidad..
Si, hermoso era quedarse cortos, Jimin era un dios para los ojos de suga, lo había sido desde la primera vez que lo había visto, cuando aun tenia su cabellos rojizo, sus ojos rasgados con un iris de un hermoso color café lo tenia perdido, y sus labios, Oh esos labios! Tan rosados como una frambuesa, de contextura suave y carnosos lo atormentaba día y noche..
El problema era que Jimin nunca lo había visto, no le había prestado atención en lo mas mínimo desde que ingreso al colegio, y ahora, justo ahora, lo veía como la manzana prohibida del heden, una manzana que se veía sumamente deliciosa, porque si, Jimin lo estaba viendo con hambre, en sus ojos se reflejaba la lujuria pura, y para Suga eso era verdaderamente satisfactorio.
Jimin con su gran y habida lengua comenzó a rozar los labios ajenos, y desplazándose comenzó a darle pequeños lenguetazos en la mandíbula, cuello y bajo hasta unos de los pezones del chico, dio pequeños mordiscos y así logro arrancar un verdadero gemido por parte de los labios de Suga.
Luego, se concentro en trabajar en el siguiente pezón, y bajando una de sus manos alcanzo el miembro del chico, que automáticamente arqueo la espalda de placer y propinó unas palabrotas, Jimin estaba mas que duro y pronto ya no aguantaría tanto, su miembro dolía horrores, pero por el momento solo le interesaba el chico que se encontraba bajo su cuerpo.
Eso a ojos de Suga resulto de lo mas placentero y lujurioso, pero nada se compara al placer de sentir la boca de Jimin sobre su duro miembro.
Con mano habida, volvió a agarrar ese pedazo de carne en su mano y con un movimiento subió y bajo por el falo, con el dedo pulgar toco la hinchada punta rosada que ya comenzaba a acumular liquido pre-seminal, llevo ese mismo dedo a su labio y saco su lengua probando la amarga esencia.
Jimin lo miro de una manera penetrante mientras subía y bajaba su cabeza por el falo de este, y de un momento a otro Suga sujeto sus cabellos de una manera un tanto brusca, cosa que hizo poner cachondo al menor, que ahora movía su cabeza a la voluntad del rubio.
En un momento sintió como se tensaban los músculos de este haciéndole saber que pronto llegaría al orgasmo, y fue ahí cuando Jimin retiro el pene del chico de su boca, ganándose un gemido de desaprobación.
-que sucede?- pregunto suga.
-mi turno, esta es la mejor parte- le dijo Jimin quitándose su camisa y revelando sus bien marcados y definidos músculos abdominales.
Jimin se levanto de la cama y fue hasta su mesa de luz, extrajo de allí un preservativo y un pote de lubricante, procedió a quitarse los pantalones y el bóxer, todo eso bajo la atenta y penetrante mirada del rubio.
Decir que Suga se babeo un poquito es quedarse cortos, digamos como que derramo medio océano en la cama, Jimin era perfecto, desde su persona hasta su físico, le encantaba todo de el..
En cuanto el menor llego hasta la cama, se metió entre las piernas del rubio, lo beso con fuego en los labios, se separo para así tomar aire y se llevo 3 dedos a la boca impregnándolos con sus saliva, cuando estos ya estaban lo suficientemente húmedos los retiro y coloco a Suga en 4 girando fuertemente su cuerpo para que pudiera tener su perfecto y suave culo frente a sus ojos. Perfectos, pensó una vez lo vio, y sin miramientos le propino una fuerte nalgada logrando que enrojeciera en el lugar afectado, el chico tenia la piel tan nívea que un simple rose le dejaba marcas rojas.
Jimin acarició una de sus nalgas y paseo uno de sus dedos pobremente lubricados sobre la entrada del chico.
Lo presiono levemente pero no se lo hundió, en cambio abrió la tapa del lubricante y se colocó abundante liquido en su mano, y llevando un dedo a la entrada del rubio y delineando con esta un circulo llenándolo del frió liquido.
-nghh, esta frió- se quejo el rubio.
-no es nada- dijo Jimin aprovechando la distracción del otro y enterrándole el primer dedo.
Ambos gimieron al mismo tiempo, Suga gimió por el dolor de la penetración y Jimin por ver lo estrecho que este era.
-tranquilízate, dentro de poco no dolerá- le dijo el menor.
Y así comenzó a meterle y sacarle el dedo del ano, Suga solo podía suspirar en demasía, primero por el dolor causado por la intromisión y luego ya de placer.
No mucho después comenzó a penetrarse solo contra el dedo de Jimin, y este pudo ver que ya era momento de ingresar otro dedo, y así pronto ya abarcaba 3 de los dedos del menor en su ano, dedos que entraba y salia de su apretado agujero trasero.
Fue en el intermedio de adentrarle los tres dedos a Suga, cuando Jimin ya no pudo aguantar mas, y sin previo aviso retiro los dedos del cuerpo del chico y abriendo el lubricante se coloco en abundancia sobre su pene, giro al rubio colocandolo de espaldas a la cama.
En ese momento Suga pudo ver que el pende del menor había crecido aun mas desde la primera vez que lo había visto, y en ese momento supo que le dolería una vez todo el falo hubiera ingresado en su nunca estrenado culito.
Jimin se posicionó entre las piernas del rubio y acerco su hinchado pene a la entrada de este, lentamente comenzó a meter la punta, viendo en todo momento el bello rostro del rubio para ver si lo lastimaba, como no vio ningún cambio negativo, se fue adentrando lentamente dentro de este hasta haberlo llenado en su totalidad.
-Oh por favor! Que apretado estas!- le dijo
Jimin
-y tu eres ngh tan grande nghdjnj- le respondió suga entre gemidos.
Jimin vio esta oportunidad como señal para que comenzara, fue retirándose de a poco para luego enterrarse de lleno nuevamente, así repitió las estocadas una y otra vez.
-mas, ngdgj, mas fuerte, kshdk- pidió suga entre gemidos.
Y Jimin mas que complacido cumplió la petición del rubio, aumentando el ritmo de las estocadas.
-Oh por dios Jimin! Nahdhg, Esto se s siente genial, ngshkjs, mas por favor, mas fuerte- pidió nuevamente el rubio.
Y Jimin no era quien para negar tal pedido y comenzó a ir cada vez mas y mas fuerte, hasta que en la habitación y probablemente toda la casa se escuchaba el sonido de piel chocando contra piel, y sonidos de quejidos y gemidos por parte de ambos.
-Oh, estas tan apretado- dijo Jimin.
Y tras eso pudo sentir como su escroto se contaría indicándole que pronto llegaría al clímax, por lo que con una mano tomo la cintura del rubio y con la otra comenzó a masturbar su pene al ritmo de cada estocada.
Y ambos expulsaron sus eyaculaciones al mismo tiempo, Suga impregnó con su esencia la mano de Jimin y este mancho todo el ano de Suga con la suya.
-creo que he olvidado de colocarme el preservativo- dijo algo apenado Jimin estando aun adentro del rubio.
-no importa, de todos modos tu te haces cargo del bebe luego del parto- contesto Suga con una sonrisa gatuna dibujada en sus labios.
-supongo que así tendrá que ser- le respondió burlón Jimin.
-en que curso vas?- le pregunto luego cuando ambos se tumbaron uno al lado del otro en la cama.
-Voy un año mas que tu- le respondió Suga.
-y como es que nunca te vi?- le pregunto el menor.
-suelo pasar desapercibido, antes no tenia este aspecto- le contesto.
-que quieres decir con eso?- pregunto Jimin.
-te confieso que te eh estado acosando desde el año pasado.- le confeso así sin anestesia el rubio.
-eso escalofriante, pero es bueno- dijo Jimin tomando de sorpresa al mayor que creyó que este se enojaría.
-no te enoja?- pregunto algo sorprendido el rubio.
-para nada, ya sabia quien eras, y a demás es bueno tener un stalker tan hermoso como tu.- le dijo Jimin tomando por sorpresa al mayor, que solo sonrió en respuesta.
Si que en este loco mundo, nada es lo que parece, pensaron ambos chicos..