Era una fresca mañana en una isla pequeña con un pueblo pequeño, un hombre guapo se encontraba en una joyería viendo el estante lleno de anillos mientras una pelea mental se presentaba en su cabeza, “ese está bien”, “pero este resalta el color de sus ojos”, “oh este combina con su cabello”, “el brillo de este me recuerda a su personalidad”, “pero…..” ninguna es suficiente. La imagen de su pareja llego a su mente y una pequeña sonrisa se formó en su rostro, ¿Cuánto llevaban juntos?, 5 hermosos años juntos y siempre le daba motivos para enamorarse más. Mientras el hombre veía el estante, algunas mujeres lo veían maravilladas y muchos murmullos se hicieron presentes, “oye mira, es guapo”, “tendrá novia”, “pero está viendo anillos de compromiso”, “ahh que suertuda”. Después de algunos minutos debatiéndose en cual encajaba mejor en su pareja, opto por una hermosa piedra roja, la argolla dorada combinaba con sus hermosos ojos castaños, un brillo espectacular al igual que su sonrisa, delicada como su piel, y esa potente aura que decía “perfecta”, una pequeña sonrisa se formó en sus labios si bien él no era de los que sonríen mucho, desde hace 5 años descubrió cosas nuevas (como no siempre se debe estar solo), antes de empezar su relación, era una persona solitaria, si bien tenia algunos conocidos jamás llego a pasar tiempo con ellos lo suficiente como para llamarlos amigos, pero todo cambio ese hermoso día, recordó todo, cada expresión, cada movimiento que hizo cuando se le declaro y el no pudo ser más que feliz. Cerro la cajita y siguió caminando hacia su barco, debía apurarse si no llegaría de ultimo, pero empezó a escuchar la plática de unos piratas de cuarta “¿has escuchado?” “si sobre él” “si, si, dicen que ha perdido un brazo” “¿qué bestia ha podido causarle eso?” “no lo sé, pero eso prueba que no es tan fuerte como dicen” “eso le debe dar una gran desventaja, vamos tras él, aprovechemos que esta indefenso” “¡si, si, vamos por su cabeza!” “¡nos volveremos ricos!” “¡por la cabeza de Akagami Shanks!”, grito a lo último, el hombre quedo estático, había escuchado bien, Shanks había perdido el brazo, era imposible, los dos piratas pasaron frente a él con determinación, querían la cabeza de Shanks, querían ser ricos, después de todo Akagami era alguien muy buscado, el hombre como instinto tomo el hombro del pirata con rudeza.
- Dime si lo que han dicho es cierto – la voz del otro sonó fría y tensa
- Ehh – el pirata hizo un gesto de enojo había girado levemente sobre su hombro, pero no fue capaz de ver con claridad el rostro del otro, el hombre apretó más el agarre
- Dímelo… ahora – su voz fría y llena de enojo
- Tch – el pirata chasqueo la lengua enojado, ese enano no era nadie para mandarlo y mucho menos para tocarlo – quita tu asquerosa mano de encima – dijo con una vena sobresaliente en el rostro, pero el contrario ni se inmuto, enojado por ser ignorado tomo su espada girando de golpe para cortar la cara del otro - ¡ QUE QUITES TU ASQUEROSA MA – la palabra murió en su boca al ver los ojos del otro, esos ojos amarillos tan penetrantes y fríos, esos que ningún pirata con cordura retaría, los ojos por los que aquel hombre había recibido su apodo – Dracule Mi-Mihawk – el otro pirata solo tembló ante la mirada del espadachín, Dracule Mihawk conocido como Taka no me, el mejor espadachín, de una estatura normal, piel blanca, pelo negro y ojos amarillos como los de un halcón, vestía un pantalón negro con dos pequeñas correas negras en su muslo derecho, una camisa blanca con las magas en los codos y su espada negra en su espalda – y-yo es-este – el pobre pirata estaba más que asustado
- Dímelo ahora – sentencio con una mirada seria y voz profunda el pirata retrocedió un poco y cayo sentado
– es-está bien – el otro pirata simplemente se sentó junto a el – si es verdad – el de tez pálida lo vio fijamente para que siguiera - el otro día un barco pirata vio a la tripulación de Akagami iban a atacar pero el miedo los invadió cuando el barco de Akagami se alejó un poco mas uno de los tripulantes vio a al barco y principalmente al capitán y se dieron cuenta que no tenía camisa eso ayudo a ver con claridad que no tenía su brazo derecho, iba a atacarlo pero ya se había alejado, desde entonces se extendió el rumor de que Akagami no tiene un brazo y está débil, muchos otros piratas están yendo tras él y p-pues – el pirata estaba nervioso, temía por su vida, el oji-amarillo se voltio y siguió su camino – t-tu ¡TAMBIEN VAS TRAS EL! ¿VERDAD? – el contrario se detuvo escuchando el grito del pirata, quería pelear junto al azabache, así nadie los molestaría -¡YO TE PUEDO AYUDAR! ¡UNA ENVOSCADA SERIA MEJOR! ¡QUE DICES TAKA NO ME! – una sonrisa se formó en su rostro, ayudaría al espadachín, lo haría confiar en él y luego lo mataría - ¡ACEP – no pudo terminar por que cayo inconsciente al suelo con un charco de sangre en él, su compañero volteo a ver al de ojos de halcón quien había blandido su espada haciendo un corte discreto y profundo, guardo su espada y se dirigió a su barco, necesitaba llegar antes que él, necesitaba sabes si era cierto, “espero que no” una voz dentro de él no quería que fuera cierto pero…. ¿Por qué?
Había llegado a su hogar, esperaba que antes que él, bajo de su barco y camino un poco, sentía la presencia de los Babuinos, como si lo quisieran atacar pero se detuvieran, alejo eso de su mente y se volvió a centrar en la misma pregunta de antes, ¿Por qué esperaba que no sea cierto?, en un momento del viaje pensó que era por el bien del moreno, pero no era así, era otro sentimiento, no era protección, era otro y creía saber que no era bueno, pero ¿Por qué?, la misma pregunta de antes. Llego aun sumido en sus pensamientos, entro al castillo y dio unos pasos, primero se bañaría para refrescar su mente, al parecer él no llegaba aun, a unos cuantos metros de la escalara algo lo tumbo, cayó sentado en el suelo con algo o más bien alguien encima, alzo la vista, ahí estaba con esa sonrisa tan hermoso que siempre tenía, una sonrisa se formó en su rostro y lo abrazo ocultando su rostro en el hombro del pelirrojo.
- Que sucede Mihi, ¿me extrañaste? – pregunto con alegría Akagami
- No me llames así – alzo su rostro y vio a su pareja quien hacia un puchero – claro que te extrañe, llevo 6 meses sin verte – dijo depositando un beso en su mejilla mientras sus manos rodeaban la cadera del otro – no sabes cuanta falta me has hecho – dijo viéndolo a los ojos
- Mihi – el pelirrojo hablo con dulzura – yo también te he extrañado Mihawk – dijo acariciando su mejilla
- ¿Tienes hambre? – el pelirrojo asintió con felicidad – te traeré algo – se levantó seguido del otro – siéntate ahora regreso – dijo para perderse en la cocina, por la mañana había preparado un poco de carne con acompañamientos, sabiendo de su visita, acomodo todo en una bandeja, pero recordó “su brazo” no se había fijado, salió de la cocina con la bandeja de comida y su vista se fijó enseguida en el pelirrojo que veía todo el lugar con una sonrisa, pero llevaba un abrigo un poco más grande que el encima cubría sus hombros y siendo más grande no dejaba ver nada
- Me muero de hambre – dijo viendo la comida con un brillo
- Come, iré por algo de vino, ¿gustas? – el contrario se negó y él se fue, busco por la cocina pero no lo encontró tardo unos 10 minutos hasta que lo encontró, regreso con la copa y el vino, para llevarse la sorpresa de que el pelirrojo había acabado sin dejar sobras – sí que tenías hambre – el otro rio
- Llevaba viajando dos días y se me acabo la comida ayer por la tarde, siéntate junto a mi Mihi – el azabache no respondió y se sentó a su lado, platicaron de cosas triviales como la tripulación del pelirrojo que era bien reconocida, no dudaría que en algún momento este al nivel de un yonkou, pasaron un poco más de media hora hablando – Mihi hace poco fui a una isla fuera del Grand line con mi tripulación al east blue a un pequeño pueblo llamado “villa fucsia”, en eso lugar pasaron muchas cosas – el oji-amarillo lo vio y puso su dedo índice en sus labios
- Lo importante es que estar aquí sano y salvo, Te amo, se como sea, siempre lo hare –
- Mihi – el pelirrojo se aventó al azabache y lo beso, el beso fue suave y tierno, disfrutando de cada momento, después de todo tenía tiempo que no se veían, en poco tiempo se volvió mas apasionado, el pelirrojo se subió a las piernas de su pareja mientras el azabache deslizaba levente el abrigo del otro – te he extrañado tanto Mihi – dijo en un jadeo, el azabache beso su cuello, mientras deslizaba el abrigo pero pronto quedo helado, había dejado de besar al moreno, quien al sentirlo lo vio con duda, Mihawk se separó de él y deslizo más su brazo viendo atento su pareja lo veía confundido, cuando por fin cayo el azabache quedo estático, Shanks tenía una camisa blanca donde en su brazo izquierdo se veía perfectamente pero el derecho había un nudo, el pelirrojo lo toco con una triste sonrisa
- Quien te lo ha hecho – dijo enojado
- Nadie –
- Como te ha sucedido –
- Un rey marino –
- Como has dejado que lo haga – el pelirrojo se sentía confundido, por que Mihawk estaba enojado
- Mihi es solo un brazo –
- Dime por lo has dejado –
- Porque si –
- Esa no es una respuesta – el pelirrojo se enojo
- Que tiene que no este, que importa si lo he perdido y como lo he hecho, ¿porque te enojas? –
- ¡NO DEBISTE DEJARTE, AHORA YA NO LO TIENES! – grito enojado haciendo enojar igualmente al pelirrojo
- ¡Y QUE IMPORTA ES SOLO UN BRAZO! –
- ¡POR QUE LO HAS HECHO! –
- ¡LO HE DADO EN SACRIFICIO DE LA NUEVA ERA! – el azabache calló
- Que has dicho –
- Que lo di en sacrificio de la nueva era – dijo firmemente, eso enojo más al contrario
- ¡POR LA NUEVA ERA! ¡QUE TE OCURRE! ¡ESO NO VALIA TU BRAZO! -
- ¡SI LO VALE! – grito
- ¡NO! ¡AHORA POR CULPA DE ESO, ERES INUTIL, INDEFENSO, RARO Y….y! - se dio cuenta de lo que decía, cuando vio las lágrimas salir de esos hermosos ojos cafés
- ¿Feo? ¿un fenómeno? – el pelirrojo estaba llorando
- N-no, espera no quería de –
- ¡Pero lo has hecho y si lo hiciste es porque lo crees! – dijo con la voz entrecortada – c-creí que me amabas…. – dijo entre leves sollozos y con tristeza
- N-no Shanks, si lo hago es so – el pelirrojo lo vio con ira
- Al parecer solo te interesan las apariencias – dijo volteándose y tomando su abrigo, camino hacia la entrada y abrió la puerta – sabes que Dracule Mihawk ¡VETE A LA MIERDA! – grito con furia - ¡NO ME VUELVAS A BUSCAR, TERMINAMOS! – grito para cerrar la puerta con brusquedad, dejando un eco por todo el lugar “¡terminamos!” era la palabra que rondaba la mente del de ojos de halcón, reacciono como 10 minutos después, abrió la puerta y salió en busca del pelirrojo
- ¡SHANKS! ¡SHANKS! –grito su nombre por todo el bosque, tardo como media hora buscándolo pero era imposible, no sabía dónde había desembarcado y hacía más de media hora que se había ido del castillo, cayó al suelo tomando su cabeza con su manos – soy un idiota ¡SOY UN IDIOTA! – grito, pequeñas gotas saladas caían por sus mejillas, ¿Por qué lo dijo? ¿eso era lo que tanto pensaba en el camino?, no, no podía ser posible, él amaba y ama a Shanks no importa que, ¿pero porque reacciono así?, saco la pequeña cajita de su bolsillo y la abrió viendo el anillo adentro, mas lagrimas salieron de sus ojos amarillos, había sido un completo idiota, había terminado una hermosa relación de 5 años por su idiotez – maldita sea – dijo apretando la cajita entre sus mano – ¿por qué?, y-yo, ¿por que reaccione así?– su corazón estaba roto, ¿Qué haría sin el moreno?, hacia 5 años que estaba con él, hacia 5 años que no estaba solo, desde hace 5 años su vida está llena de alegría, ¿ahora?, ahora estaría solo como antes…… totalmente solo.