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Caminar y respirar. por Teddy_Freddy

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Notas del fanfic:

Es la segunda vez que escribo sobre estos niños, los adoro. Son muy lindos!

 

¿Algun fan de esta pareja? -se escuchan grillos.- :D ok...

 

Espero que les guste. 

Caminar y respirar.

 


Como se esperaría de ti estabas poniendo atención en la clase de historia, a pesar de que todos se estaban durmiendo -o estaban ya dormidos. -Incluso el profesor recitaba todo lo que leía de una manera monótona y aburrida que no hacia que eso fuera menos aburrido, aun así estabas tomando notas por si acaso.

Mientras estabas escribiendo un destello al lado de la ventana te sorprendió, dejaste tus apuntes un momento y te volteaste a ver realmente curioso. Tu corazón casi se detuvo al ver lo que había provocado ese destello, se trataba de el carruaje de Tomas. No pasaron ni dos segundos cuando el demonio de cabello color salmón bajo de el carruaje, se quito sus extrañas gafas -para tres ojos- y miro en tu dirección como si supiera que estabas justo allí. Te lanzo una mirada encantadora que hizo que su piel se erizara, de inmediato te giraste para ver a Star si ella se enteraba que Tom estaba allí empezaría a hacer muchas preguntas y tu aun no estaba seguro de tener respuestas para ellas.
Por suerte la rubia estaba profundamente dormida -al igual que el resto de la clase. Seguramente ya que era de Mewni poco le importaba la historia local.- Te levantaste levantando la mano, la mirada del profesor se desvió medio segundo de el libro para verte.

—¿Puedo ir al baño? -preguntaste con una sonrisa nerviosa, sin detener su lectura el profesor te dio el pase para ir al baño. Lo tomaste y saliste corriendo de inmediato, obviamente no ibas a ir al baño. Mientras ibas por el pasillo resbalaste con el piso mojado que dejaban siempre junto a los bebedores, ibas a caer contra el suelo pero algo de detuvo, ese algo era el demonio de cabello rosado. Las manos pálidas del demonio te sostenían por la cintura, la postura un poco inclinada de ambos hacia parecer la escena sacada de una tonta película para chicas.

—Vaya, justo a tiempo. ¿Esto de caer en mis brazos se te va a hacer una costumbre? -Pregunto el demonio con una sonrisa amplia, a lo que se refería con eso era que en el baile de la luna roja -donde se suponía que ibas a salvar a Star - por un descuido terminaste en los brazos del demonio justo en la misma pose que se encontraban ahora.

—En tus sueños. -gruñiste frustrado por no poder decir nada mordaz. Tus manos se posaron en el pecho de Tom y cuando lograste ponerte de pie correctamente lo alejaste un poco. —¿Que se supone que estas haciendo aquí? Si Star te ve no dudara en atacarte.

—Ah, no quiero un encuentro con Starship en serio. -aseguro el demonio con una sonrisa, sin embargo no estabas muy convencido de eso. —Vine a verte a ti.

—Pues mas te vale que te olvides de ella po... ¿he? -enarcaste una ceja mientras pensabas en lo que en verdad podía significar eso. Retrocediste un poco al recordar cierta visita de el demonio. —¿P-perdiste tu objeto de la ira de nuevo?

Recordar lo que el demonio podía hacer para "controlar su ira" sin tener a su conejo -usándote como un objeto- Bueno... eso hacia doler tus caderas. Y hacia que la vergüenza se apoderara de ti.

—No, no es eso. Simplemente quería venir a ver como estabas. He estado sintiéndome mejor desde nuestra... terapia. - y dijo la palabra con un tono tan sugerente que parecía sugerir otra sesión igual que esa.

No pensabas permitir que se repitiera, menos ahora que la rubia había regresado a tu casa. Esta vez si que podías resistirte en caso de que el demonio quisiera obligarte. Sin embargo había algo que no te dejaba de molestar de todo y eso era la manera en la que Tom te veía. No parecía querer atacarte, mas bien parecía complacido de estar allí simplemente viéndote-
Escuchaste la campana sonar indicando el final de las clases, eso te sobresalto un poco. Star seguro había despertado con el campanazo, si veía a Tom allí...

—Tienes que irte, no quiero que Star te vea cerca de mi. -dijiste empujándolo hacia la salida, el pasillo se estaba llenando de estudiantes y solo esperabas que entre ellos no estuviera la princesa de Mewni.

Empujaste a Tom hasta donde lo esperaba su carruaje y le dijiste lo mismo que Star le dijo la primera vez que se apareció en la escuela.

"Vete de aquí, llévate tu carruaje, tu fuego y tu caballo muerto" El caballo lloriqueo por tu comentario y el demonio frunció el ceño.

—Él ya había superado eso. -No pudiste evitar gruñir frustrado. Empujaste al demonio dentro de su carruaje y después saliste corriendo de el lugar, bien si quería hablar con Star ya no tendría que usar tontas excusas. Solo querías quedarte fuera de todo eso -ademas tu amiga sabia defenderse de un demonio.-

Ni siquiera estabas caminando con sentido a tu casa, estabas simplemente corriendo sin dirección aparente. Hasta que llegaste a un nuevo lugar -no estabas perdido, sabias como regresar.- Te sentaste en la banqueta frente al local de comida china, estabas pensando si entrar o no. Con la mirada fija en una goma de mascar pegada en el pavimento como si fuese la cosa mas interesante del mundo, aunque en realidad tu mente estaba en esa noche... Cuando la luz de la luna roja brillo sobre los dos, el momento en el que viste al demonio justo a los ojos y sentiste tu corazón latir como loco.

¿Que significaba eso?

Bueno, te dio un susto de muerte así que seguro era por eso. Algo te decía que debías voltear hacia cierto lugar y lo hiciste. justo en el momento en el que Tom aparecía. Tu corazón empezó a latir como loco cuando tuviste que levantarte para seguir corriendo de él.

Escuchabas sus pasos detrás de ti y un susurro -que parecía mas un seceso.- "Caminar y respirar" Con ese tono demoníaco con el que hablaba Tom cuando estaba molesto.
Eso te daba menos razones para dejar que te atrapara.

Pero en algún momento dejaste de escuchar sus pasos detrás de ti, te giraste para darte cuenta que no estaba detrás de ti y cuando regresaste la vista al frente allí estaba. Le diste un golpe de Karate -mala elección, cuando se trataba de un demonio iracundo y estabas lejos de casa, Star o de alguien que fuera testigo de tus últimos minutos de vida.-

Tom frunció el ceño, sus ojos volviéndose rojos por la ira.

—Caminar y respirar, caminar y respirar. -se repitió tomándote por la muñeca. Sus ojos aun brillando por la furia.caminando mas cerca de ti mientras tu retrocedías. En un momento el pelirosa te jalo hacia él, abriste los ojo con sorpresa al sentir sus labios sobre los tuyos.
Rompiste el beso de inmediato dando un paso hacia atrás, entonces Tomas volvió a susurrar "caminar y respirar" antes de volver a besarte. No dejo de caminar aun durante el beso pero, ¿donde quedaba lo de "respirar"?

Se te había olvidado como hacerlo. Finalmente sentiste como tu espalda chocaba contra algo y fue allí donde se termino la caminata. No pudiste evitar un ligero gemido que escapo de el fondo de tu garganta, en el acto Tom se alejo. Repitiendo su mantra una y otra vez mientras te encargabas de regresar todo el aire a tus pulmones.

—No se supone que deba... no quería hacerte daño pero tu... -sus ojos brillaron de nuevo mientras veía hacia ti.-

—Lo siento. -dijiste sin saber muy bien porque, de inmediato los ojos de Tom volvieron a la normalidad. Te veía como debatiéndose en decir algo y tu lo veías, simplemente porque no podías dejar de verlo.

Y unas ligeras gotas cayeron sobre sus cabezas, gotas tenues que rápidamente se volvieron en una fuerte llovizna.
Corriste al primer lugar que te podía resguardar de la lluvia -lo cual era un juego infantil que parecía un gran queso. Tom te siguió de cerca.

Un largo silencio incomodo se formo entre ambos, daba un poco de miedo el pensar que cualquier cosa que dijeras podría enfurecer a Tom -y no querías morir debajo de un juego infantil con forma de queso.-

—Lamento si te lastime...hace un momento. -El demonio dijo rompiendo el silencio, no pudiste evitar sentirte sorprendido. -y un poco avergonzado ya que ese no había sido un gemido de dolor.

—Antes dijiste que... "no se suponía que debas" ¿A que te refieres?

—Te lo dije esa noche. ¿No lo recuerdas? -negaste de inmediato. —Cierto, no me dejaste terminar. Todo esto es por el baile de la luna roja, cuando la luna brillo sobre nosotros... Se supone que nuestras almas se unieron esa noche, la luna nos eligió para toda la eternidad.

—¿Es por eso que has estado tratando de... hacer "esas cosas" conmigo? -preguntaste enarcando una ceja.

—Al principio, pero últimamente. Te deseo cerca, te necesito. -no pudiste evitar sonrojarte, escuchar algo tan directo de Tom. —Es por eso que he estado tratando de ser paciente contigo, pero eres el humano mas testarudo que he conocido! -y sus ojos brillaron por un segundo antes de que empezara a contar hasta diez. —Es difícil contigo atacándome a cada segundo...

"Lo siento" susurraste,acercándote un poco. -ese lugar era muy pequeño para alguien de su estatura- preguntaste unas cuantas cosas sobre la luna roja. Así que la luna unía dos almas aun si estas no estaban de acuerdo. Estabas seguro que Tom se sentía igual de frustrado que tu.
Y ese nerviosismo que sentías al tenerlo cerca, ese cosquilleo que te producía en el estomago cuando pensabas en lo que Tom había hecho esa noche... ¿Todo eso también era por la luna?

—¿Entonces estamos "unidos" por la eternidad? -preguntaste moviendo los dedos nervioso. Tom tomo tu mano para gruñir un "Si". Sentías un calor agradable allí donde sus dos cuerpo se juntaban, era una agradable sensación que te hizo decir en voz alta algo que se tenia que quedar en tu cabeza.

—Tal vez también te necesito...

 

 

 

Era una situación incomoda, ese lugar era demasiado pequeño pero en la posición en la que estabas parecía perfecto. La cercanía de sus cuerpos mientras abrazabas a Tom, sus labios besándote de manera algo ruda. -arrancando de tu boca suaves jadeos. ¿Eran sus besos o la manera en la que te empujaba hacia arriba?
Estaban haciéndolo dentro de un juego infantil, eso te avergonzaba hasta el punto de querer desaparecer.

Todo había empezado de manera casi inocente, cuando él te había dado un beso ligero. Habias correspondido dándole uno igual, pero parecía que algo se había encendido en el demonio que casi de inmediato empezó a besarte de manera apasionada, no había nada inocente en la forma en la que te jalo sentándote en sus piernas y mucho menos en la forma en la que a medida que intensificaba el beso empujaba sus caderas contra las tuyas .-pero Tom era un demonio, era obvio que no era nada inocente.-
Una cosa había llevado a otra y allí estabas... jadeando su nombre mientras lo sentías empujándose dentro. Era un gran alivio que estuviera lloviendo fuerte, al menos así tenias la seguridad de que nadie ira a ese parque mientras estaban haciendo algo como eso debajo de un juego infantil.

Afuera no se escuchaba nada mas que la lluvia caer contra el suelo, el bullicio del viento y algunos truenos.

—To-Tom... -jadeaste su nombre con fuerza apretándote contra él, al parecer eso no le molestaba en lo absoluto. No podías pensar en nada, era como si todo no importara mas que Tom. Comenzaste a mover tus caderas al ritmo impuesto por el pelirosa, despacio arriba abajo y de pronto profundo.

"Ahh, mm ngh.. Tom. No pue..."

Al alcanzar el clímax ambos dejaron escapar un jadeo que se interrumpió con un largo beso, cuando rompiste el beso pasaste tu lengua por tus labios. Tom te veía fijamente haciéndote sonrojar mas de lo que ya estabas. La luna se había equivocado al elegirlos.

 

 


Con la ropa puesta y una vez que paro de llover ambos salieron de aquel lugar. Tom amablemente -después de burlarse un poco.- Te llevo a tu casa. Le agradeciste a su caballo muerto el viaje -y no le recordaste de nuevo que estaba muerto para no hacerlo sentir mal de nuevo.-

—Tienes que irte ahora, si Star te ve...

—Lo se... -te dio un ultimo beso y te dedico una sonrisa encantadora. —Vendré a verte de nuevo.

—Recuerda caminar y respirar... -dijiste con una sonrisa, el guiño uno de sus tres ojos antes de que su carruaje se cubriera en fuego y desapareciera.

Soltaste un largo suspiro viendo el lugar donde se había ido. Aun estabas seguro que la luna se había equivocado, pero una parte de ti empezaba a pensar que no era tan malo.

Notas finales:

Espero que les guste.

 

Y si les gusto comenten, subiere mas cosas de ellos pronto.

 

Saludos!


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