Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El Demonio Del Amor por Escritora-Kun

[Reviews - 50]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

-Aahh~ Que dia tan pesado...-Estiro sus brazos y bostezo lleno de cansancio. Ese dia habia sido agotador, incluso mas que cualquier otro. -Malditos infelices, si ya saben que su relacion no va a durar, ¿Por que no simplemente se evitan la molestia y nunca se vuelven a ver?-

Se dejo caer en una especie de sillon color carmesi, decorado con bonitos encajes dorados, mientras miraba el techo, de donde colgaba un gran candelabro con incrustaciones de preciosas gemas.

Cerro sus ojos pesadamente, esperando quedarse dormido, pero los abrio rapidamende al sentir un peso extra encima de el, mientras unos brazos lo abrazaban con cariño. Suspiro y rodeo con sus brazos al pequeño cuerpo que se encontraba encima suyo.

-Tarblee-Lo llamo, mientras lo movia un poco. -Ya te he dicho que no me gusta que te subas a mi estomago-Llevo una de sus manos a la mejilla de su hermano menor y la apreto ligeramente.

-Es tu culpa por siempre tirarte en el sofa justo cuando yo quiero venir a recostarme...-Undio su cabeza en el pecho del mas grande. -Ademas, tu eres muy suavesito-Lo abrazo con mas fuerza, para despues levantar la mirada para ver el rostro de su hermano mayor. -Luces cansado-Solto el abrazo, acerco sus manos a las mejillas del azabache y las apreto un poco.

-Fue un dia muy dificil-Confeso con un tono realmente cansado, mientras se quitaba el antifaz dejando ver sus preciosos ojos color oscuro. -¿Y a ti que tal te fue Tarble?-

-No tuve mucho que hacer, ademas... No logre deshacer a una pareja...-Susurro sintiendose desepcionado de si mismo, mientras escondia su rostro en el pecho de su hermano y lo abrazaba con fuerza.

-Vamos hermanito, no te pongas asi-Lo abrazo con cariño, y acaricio su cabello, intentando calmarlo. Sabia como se ponia su hermano por esas cosas, sabia lo mal que lo ponia no poder hacer su trabajo.

Bueno, el tambien se pondria algo triste o desespcionado por no poder cumplir con sus obligaciones. Pero lo que a el mas le preocuparia, y seguramente a Tarble tambien, seria la furia de su padre al saber que no hacia apropiadamente su trabajo.

-¡Ey, no llores!-Intento no reirse al sentir como su pecho era mojado por las calidas lagrimas de su hermanito. -Jejeje, oye lloron, ¿Que dices si vamos a comer algo?-Levanto el rostro del mas chico y le seco sus lagrimas, no le gustaba ver de esa manera a su querido hermano menor.

-Snif... Esta bien-Acepto con una ligera sonrisa, olvidando el apodo con el que lo habia llamado su hermano.

Ambos se levantaron del sofa y se dirigieron a la cocina.

Cuando los dos hermanos habian llegado a la cocina, el menor se sento en la mesa, mientras que el mas grande se quitaba la parte superior de su elegante traje negro.

-Vegeta...-Lo llamo su hermano menor, haciendo que este lo volteara a ver.

-¿Que sucede Tarble?-Se acerco al mas chico de los dos mientras que se levantaba las mangas de su camisa blanca, no queria ensuciarla ya que era la que usaba cuando hacia su trabajo.

-Tu... ¿Tu crees que nuestro padre me castigue si no ve mis tatuajes?-Bajo su mirada, al mismo tiempo que jugaba con sus dedos, sintiendose nervioso al recordar lo que le habia pasado a uno de sus muchos hermanos cuando su padre se habia dado cuenta de que no cumplia con su deber.

Vegeta miro detenidamente a su hermano, sabia lo asustado que se debia de sentir en ese momento y su deber como hermano mayor era hacerlo sentir mejor.

-Tarble-Se acerco hasta quedar a su lado. -Mientras este contigo, no permitire que nuetro padre te haga algo, ¿Okey?-Le regalo una sonrisa llena de cariño, esa hermosa sonrisa que solo se la habia mostrado a su preciado hermanito menor.

-¡Okey!-Sonrio entusiasta, sintiendose protegido. Adoraba eso de su hermano mayor, lo tierno, protector, atento, cariñoso y considerado que era con el. Incluso el pensaba que con esa clase de trato solo lo estaba malcriando, pero eso no le importaba ni mucho menos le molestaba.

Vegeta solo sonrio, era increible lo rapido que cambiaban las expresiones de Tarble, eso le daba ternura.

...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-

-Al fin, este dia termino...-Bostezo lleno de sueño, mientras subia las escaleras hasta llegar a su habitacion. -¿Por que no elegi una habitacion de las de abajo?-Se quejo en voz baja, recordando que le habian dado la opcion de dormir arriba o dormir abajo. -Ah, cierto, porque queria "privacidad"-

Los ultimos escalones le parecieron muy largos, como si el cansancio los hubiera alargado hasta el punto de que tenia que separar sus piernas para poder llegar al otro escalon.

Cuando al fin llego al segundo piso, entro a su habitacion y se encerro. Comenzo a quitarse todo su traje, incluyendo sus zabatos y sus guantes. Pero con cada roce que hacian sus dedos sobre su piel, sentia un fuerte ardor que lo molestaba bastante.

-¡Ah, estupidos tatuajes!-Miro todo su cuerpo, en donde se encontraban multiples marcas de color negro, las cuales recibian el nombre de "tatuajes".

Siempre que separaba a una pareja y se llevaba el alma de alguno de los dos pasaba eso. El alma se volvia cenizas y esas cenizas iban a dar directamente a su cuerpo, convirtiendose en marcas oscuras que atravezaban su piel y se quedaban ahi para siempre, eran como una prueba de que habia cumplido con su trabajo.

El tenia muchas, le faltaba poco para alcanzar a su padre, sin embargo el ni siquiera sabia para que los necesitaba, simplemente le lastimaban la piel y le daban mas años de vida. Y como el ya era un demonio, uno de clase alta catalogado como Principe, los demonios son inmortales porque ni siquiera tienen un alma, no podian sufrir daño de ninguna clase. Entonces ¿Para que necesitaba mas años de vida inservibles?

Bueno, todo podria sufrir daño, desconocia si los demonios que se dedicaban a separar personas tenian una clase de debilidad o si podian hacerles daño.

-Hm, como si me importara saber esa estupidez-Se tiro boca arriba sobre su cama y coloco sus manos como almuhadas. Cerro sus ojos y en milesimas de segundo se quedo profundamente dormido.

...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-

-Vegeta... Vegeta-Mostro una mueca de disgusto al ver que su hermano le contestaba con un "Mm". -¡Vegeta!-Lo sarandeo con algo de rudeza. Pero como respuesta Vegeta se cubrio todo el rostro con su cobija de color negro. -¡Hermano!-Se subio encima de su abdomen, retiro con rapidez la cobija que cubria su cara y comenzo a estirar la piel de sus mejillas.

-Tarble...-Hablo con dificultad al mismo tiempo que habria con pesadez sus ojos, encontrandose con la mirada molesta de su hermano menor. -Okey, tu ganas, estoy despierto-Se enderezo y quedo sentado, dio un largo bostezo mientras se tallaba sus ojos. -¿Que pasa? Aun es muy temprano-

-Lo se, incluso yo me enoje cuando me levantaron a esta hora de la mañana-Rasco su mejilla y, al igual que su hermano, dio un largo bostezo lleno de cansancio. -Pero me despertaron para decirte que "El" Te buscaba, no me preguntes para que porque eso no me lo dijeron-Se levanto y se encamino hacia la puerta, pero antes de irse volteo a ver a Vegeta quien igual se levantaba de la cama. -Nos vemos despues hermano-Y dicho esto salio, dejando solo a Vegeta.

Se estiro, relajando cada musculo de su cuerpo y se dirigio a su guardaropa. Esa mañana curiosamente estaba fria, asi que no le apetecia darse una ducha, solamente se cambio de ropa por una mas abrigada. Cuando termino salio de su hogar, aun todo se veia oscuro, de seguro eran menos de las 6 de la mañana.

-Ese maldito-Lo maldijo en voz baja, siempre que le llegaba la "inspiracion" para un nuevo proyecto, o "juguete" como el solia llamar a los cosas que hacia, lo hacia sin importar la hora que fuera. Esta bien, eso no era lo que le molestaba, lo que realmente le molestaba era que a el siempre era el primero a quien le enseñaba sus nuevas creaciones y eso en horarios que interrumpian las actividades de Vegeta (Con actividades se refiere a dormir y a comer :v)

...

Camino por todo el lugar, todo se veia como una foto sacada de algun paisaje sombrio. El cielo permanecia nublado, los arboles tenian flores pero todas eran negras, siempre se encontraba neblina por las calles y almas vagando por ahi lamentandose, lo normal. Al principio le parecia algo perturbador ver ese lugar, despertar todos los dias y ver lo tenebroso del mundo en el que tenia que vivir, pero despues de unos cuantos años mas ese ambiente le parecia lo mas relajante del mundo. No habia ningun ruido que lo molestara, y el lugar era perfecto para pensar.

-Auch...-Un quejido salio de su boca al sentir como su frente chocaba contra una superficie de madera. Sin darse cuenta ya se encontraba en la entrada de la casa de dicho lunatico. Abrio la puerta y, sin siquiera pedir permiso, entro al lugar encontrandose con un millon de herramientas para trabajar y muchos trabajos terminados, o sin terminar, por el suelo.

Vegeta busco con la mirada al culpable de interrumpir su tan anhelado sueño. Y lo encontro, sentado en una silla de trabajo, recortando y tejiendo tela, ¿Ahora que clase de invento se le habria ocurrido a ese hombre?

-Oye, tu maldito-Se acerco hasta quedar en frente de aquel hombre que, aun escuchando la voz enojada de Vegeta, no levanto la mirada de lo que estaba haciendo. -¡Te dire algo, tal vez tu no duermas, adefecio, pero YO si necesito dormir!-Golpeo la mesa con las palmas de sus manos, al mismo tiempo que lo miraba con todo el coraje del mundo.

-Buenos dias, mi principe-Lo saludo con toda la naturalidad del mundo, tal parecia que para el ya le era normal que Vegeta llegara reclamandole y siempre de mal humor. -Disculpa que siempre perturbe tu sueño. Pero recuerda que mis juguetes siempre te terminan siendo muy utiles-Le sonrio ladinamente, mientras se retiraba sus lentes.

-Supongo que tienes razon-Suspiro cansado, se sento en el lugar frente al escritorio y coloco sus piernas encima de este mismo. -¿Y? ¿Que se te ocurrio ahora, Nappa?-Finalmente se atrevio a preguntar. Ciertamente, las cosas que hacia ese sujeto siempre le resultaban de gran ayuda. Su padre era el Rey del lugar, pero si algun dia llegase a morir (Lo cual es imposible, bueno, excepto por una cosa) Le gustaria que Nappa fuera el nuevo Rey de ese infierno, despues de todo el es como la mano derecha de su padre.

-Bueno, aun es un prototipo y aun no lo he puesto en practica, pero mira-Tomo en ambas manos una especie de muñeco de trapo, era totalmente blanco, sin cara, sin ropa, nada. -Desde que invente los tatuajes he recibido muchas quejas-Se levanto de su lugar, solo para dirigirse a la ventana y mirar atravez de esta. -Muchos me dicen que es demasiado doloroso y tienen razon, poseer a una nueva alma cuesta toneladas de dolor, por eso yo...-Se volteo para mirar a Vegeta, mientras mostraba una sonrisa. -He inventado algo muchisimo menos doloroso que los tatuajes-Señalo al muñeco sobre la mesa.

-¿Un muñeco de trapo?-Se sintio extrañado, lo miro por un par de segundos para despues tomarlo. -Pero ni siquiera tiene rostro, simplemente es una muñeca hecha a base de tela y rellena de felpa-

-A simple viste luce como un muñeco sin nada de especial. Pero...-Se le acerco a Vegeta hasta quedar a su lado. -Cuando ya separaste a una pareja, este muñeco se convierte en quien debes de tomar el alma, asi no tendras que decidir tu y cuando te la lleves, esa alma no se convertira en un tatuaje, sino que permanecera como muñeco-Sonrio satisfecho. Mientras que Vegeta se sentia mas desubicado que antes.

-En pocas palabras, este muñeco sera la nueva prueba de que de verdad cumpliste con tu trabajo, ¿O me equivoco?-Miro a Nappa, con el muñeco en brazos y con una mirada seria.

-Asi es, esto les evitara el dolor ademas de que tendran una bonita coleccion de muñecos de trapo-Solto una ligera risa, y se volvio a sentar en su lugar. -Ese es el primero. Cuando haga mas, estos muñecos apareceran sin la necesidad de llamarlos-

-Entonces, ¿Me puedo quedar este?-Se levanto de su asiento y se dirigio a la salida, ya sabia de sobra que Nappa siempre le regalaba los prototipos de sus nuevos artefactos. Nappa solo asintio con una sonrisa. -Gracias viejo loco, nos vemos mas tarde-Se despidio con una sonrisa burlona, aunque ya conocia a Nappa y sabia que eso no le molestaba.

-Hasta luego, principe-

...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-...-

-Aahhh~ Ese idiota, ahora no podre reconciliar el sueño-Suspiro enojado, mientras caminaba sin prisa alguna por las calles abitadas unicamente por las almas que solo servian para retorcerce en su miseria. -Hmp, papa deberia encerrar a sus almas, dejarlas aqui afuera como perros es molesto-Se quejo en voz baja, aunque no le servia de nada quejarse consigo mismo, y quejarse con su padre sobre ese asunto no era una opcion.

Estaba algo adormilado aun pero algo lo hizo despertar por completo. Una pequeña llama de color negro se aparecio en frente de el y al desvanecerse dejo una hoja de papel con una direccion escrita.

-Bueno, es hora de poner en practica esta cosa-Sonrio con burla tomando la hoja de papel en sus manos.

CONTINUARA...




Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).