En una hermosa y bien cuidada mansión en el centro de la ciudad se encontraba un pequeño peliverde despertando de un sueño tranquilo observando su nueva habitación aún seguía sin entender cómo es que termino viviendo con el que se había convertido en su nuevo señor.
-Sigo sin entender que hago aquí, lo irónico de la situación es que en esta casa me siento más tranquilo, cómodo y querido, que en la casa de la que se supone era mi amiga casi hermana, jejejeje pronto te veré destruida y Athenea te juro por mi nombre y estrella guardiana que te arrepentirás por tu trato hacia mi persona.
En el transcurso de la mañana en la Mansión Kido a las afueras dela gran casona se encontraba un joven observando al interior de la construcción murmurando:
-Ummmmm así que aquí es donde vives, ehhh querido es una casa inmensa, ahora entiendo porque actúas así en el recinto de nuestro señor al quedarte solo.- Al terminar de decir esto el joven desapareció del lugar sin dejar rastro para que los integrantes de esa casa que se empezaban a reunir en el comedor no lo descubrieran esperando poder empezar con aquel plan trazado por el joven tan peculiar que su amo recibió entre sus filas y al cual consiente demasiado.
En el comedor de la mansión todos los integrantes ya se encontraban dispuestos a disfrutar de su desayuno uno de esos comensales, un caballero noto cierta ausencia y se lo hizo saber a su diosa y a todos los que no lo habían notado aun.
-Oigan donde se encuentra nuestro querido y buen amigo Shun.-
-Es cierto Seiya, tiene razón hay que saber dónde está en todo momento.-
- Shiryu tiene razón es importante que sepamos donde encontrarlo para no cometer ninguna indiscreción, con respecto a su situación ante nosotros.- Comento Hyoga y justo en ese momento entra al comedor con el desayuno el fiel mayordomo de la señorita Kido y esta le pregunto:
-Tatsumi ¿Dónde está Shun?-
-Señorita, el joven salió muy temprano pues tenía unos asuntos importantes que atender.-
-Sabes a qué hora vuelve.-
-No lo dijo señorita.- Con esta última contestación el mayordomo se retiró a seguir con sus labores.
Mientras en Japón esta situación con la Diosa Athena se llevaba a cabo en un barco con destina a la Tierra del Sol Naciente, una joven se encontraba tranquilamente leyendo un libro en la cubierta, disfrutando de la suave brisa marina, levanto la vista para posarla en su acompañante, el cual miraba distante y perdido en sus recuerdos el gran e inmenso océano, recordando que pronto muy pronto todo daría inicio y aquellos que lo lastimaron y traicionaron llorarían lágrimas de sangre, al pensar en lo que le acontecería a aquellas pobres y desgraciadas almas que serían atormentadas por él sonrió de manera sádica, saliendo de sus pensamientos al escuchar la voz de su acompañante.
-¿En qué piensas?-
-en nada que deba interesarte querida, recuerda que la curiosidad mato al gato, solo limítate a cumplir con lo que se te ha ordenado.- Comento el joven de manera seca y dura sin pizca de aquella calidez a la que la joven estaba acostumbrada.
-Que fue lo que te hicieron para que actúes de esta manera.- Con esto último dio por finalizo la conversación al ver que ya no tendría oportunidad de conversar aún más con aquel joven al que ella consideraba un amigo.
-Una mejor pregunta sería que no me hicieron y eso querida amiga no lo puedes saber.- Y con este último murmullo el joven desapareció así como llego desapareció de la cubierta para regresar con aquel al que había llegado a considerar un padre.
De regreso en la Mansión Kido todos siguieron con sus actividades mismas que eran observadas por aquella sombra que custodiaba aquella casa donde vivía el ser que cautivo el corazón de su señor, mientras Radamanthis vigilaba los movimientos de Saori Kido, otro ser totalmente distinto a este espectro también se encontraba vigilando la casa donde vivía la nueva gema esmeraldina de su señor aquel ser tan puro que muchos habían lastimado.
-Así que no soy el único cuidando aunque aún quiero saber qué interés tiene el poderoso Dios del Inframundo en esta casa para mandar a uno de sus más fieles espectros a vigilar esta casa.- Al terminar de decir esto siguió con su tarea.
Las semanas pasaron muy rápido y por fin un barco proveniente de alguna parte del océano Índico llego al puerto de Japón del mismo bajo con sumo cuidado una hermosa joven y murmurando se fue alejando del puerto.
-Ya he llegado y podre poner en marcha tu plan no te decepcionare mi señor.- “Eso espero si no ya sabes cuáles serán las consecuencias” fue lo único que escucho en su mente antes de subirse al taxi que la llevaría al que sería su hogar en esos meses.-Lléveme a la mansión Kido.- Y con su destino dicho solo espero para llegar y poner en practica aquello que le fue encomendado.
El taxi se detuvo en la entrada principal de la mansión y por el intercomunicador anuncio su llegada a aquel mayordomo que la recibió entre sorprendido y molesto al tener alguien más a quien atender, la condujo al estudio de su señora la cual al verla llegar sorprendida le pregunto:
-¿Qué haces aquí amazona?
-Nada señorita Kido he venido para visitar a mi querido amigo Shun después de todo tiene mucho tiempo que no lo veo y quisiera comentarle algunos logros que se han presentado en la Isla de Andrómeda.
-Pues lo esperaras sentada June Camaleón pues él no se encuentra en este momento en la casa.
-Y eso señorita, ¿A qué se debe que él no se encuentre aquí?
-Asuntos relacionados con la escuela es por eso que no se encuentra en esta residencia.-
-Ummmmm entonces supongo que no le molestara el que lo espere aquí en su casa todo el tiempo que sea necesario.-“Así que no sabes dónde está, hay querida la que se te vendrá encima al enterarte que el ya no está aquí en esta casa sino que se encuentra en un lugar donde lo tratan como el niño mimado que es, te deseo toda la suerte que se puede desear a una vil y traicionera mujer como tú”.- bien si me disculpa me retirare a instalarme en una habitación.
-Claro puedes retirarte.- Esto fue lo último que se dijeron en todo lo que resto de día, mientras ellas llevaban a cabo su “amistosa” charla, los santos restantes de bronce se reunían en una habitación que desde hace 10 días se encontraba vacía y eso los deprimía mucho pues no sabían dónde se encontraba aquel pequeño rayito de esperanza.
-¿Dónde estás hermanito?-
-Cálmate Ikki todos queremos saberlo pero no podemos identificarlo a través de su cosmos es como si se lo hubiera tragado la tierra.-
-Ya lo sé Seiya pero sigo preocupado es mi pequeño hermanito.-
-Todos te entendemos pero si queremos que la Señorita no sospeche que ya no la apoyamos debemos seguir con esta farsa.-
-Todos tienen la razón pero lo que más me molesta es que desde la desaparición de Shun Shaka se regresó al Santuario para poder estar con Mu y así poder seguir burlándose de nuestro querido amigo.- Al comentario de Hyoga se le unieron muchos murmullos acerca de lo malo y cruel que era el caballero dorado de Virgo por prestarse a realizar semejante bajeza pero que era aún más cruel la que se supone es su Diosa por proponer semejante trato sabiendo que estaban jugando con los sentimientos de alguien muy inocente y carismático.
-Bien dejemos de lamentarnos hay que encontrarlo, pues sino la que se nos va a venir encima.- Mientras ellos platicaban en una habitación algo apartada de todas las demás se encontraba una joven rubia hablando por teléfono con su señor.-
-Claro que sí, mi señor todo el avance que se logre en el plan lo mantendré informado, además sé que Hiroshi estará rondando la mansión para decirte lo que se me escape.- solo logro escuchar un “Ten más respeto por tus superiores niña” antes de que la llamara se cortara de golpe.- Claro que lo tengo pero lamentablemente para ti él es mi amigo, que tú ahora lo mimes y trates como un hijo es otra cosa sin mucho sentido que digamos, después de todo el sigue siendo un simple mortal que pronto perecerá.-
-Deberías hablar con más respeto de aquel que te salvo la vida, no lo olvides tu vida le pertenece en el momento que el considere que ya no le eres útil tu simplemente desaparecerás de este mundo sin dejar rastro.-
-Y tu deberías controlarte mejor y continuar con tu tarea, además el jamás podría hacer algo para lastimarme.-
-Y lo hago no se te olvide que puedo estar en muchos lados a la vez y nunca digas nunca querida creo que ese jamás estuvo demás pues si a esas vamos que crees que pasaría contigo si él fue capaz de dejar a su familia solo para obtener aquello que más anhela desaparecerte de este mundo sería pan comido para el después de todo cuenta con todo el poder que tiene nuestro señor.-
-Ya lo sé, como también sé que es necesario que esto sucediera para que a él se le cayera la venda de los ojos, lamentablemente su golpe fue demasiado duro contra el asfalto de la cruel realidad.
-Bien me retiro a seguir con mi misión.- Y así sin más se retiró para cumplir con aquello que le fue encomendado.
El tiempo es algo que corre rápido y para otros muy lento después de todo ya habían pasado dos meses desde que el joven Shun Kido desapareciera de la vida de sus seres queridos y estos recién dieran a conocer su desaparición en los medios pues estaban “desesperados” por encontrar al joven, en un gran salón de una elegante mansión se encontraba dicho joven observando divertido el noticiero donde dieron la tan triste noticia y el aviso de su búsqueda.
-Jejejejeje dos meses tuvieron que pasar casi 61 días para que se dieran cuenta jajajaja que divertido es esto querida Athena que harás ahora se te viene tremenda guerra encima.-El joven dejo de murmurar al ver entrar en la sala a aquel hombre que él consideraba un padre junto con su esposa que era una madre para él y el resto de su familia.
-Supongo que ya sabes que la guerra que se aproxima será la más cruel a la que Athenea, Hades, Zeus, Poseidón y los demás dioses se hubieran enfrentado antes, por eso pregunto ¿Qué es lo que quieres hacer?-
-Lo se padre, tengo claro que si no hacemos algo la destrucción de este mundo será inminente, sin embargo mi deseo es que no nos involucremos a menos que sea absolutamente necesario, aunque odie y deteste a Athenea eso no quiere decir que ocurra lo mismo con los otros dioses ellos no merecen desaparecer solo por un capricho mío así que simplemente se les dirá la información que ya se tiene de este nuevo dios y con la misma rapidez desapareceremos quiero vera el menor tiempo posible.-
-Si eso quieres eso se hará recuerda que tus deseos son ordenes tanto para tu madre como para mi.-
-Jejejeje ya quiero ver la cara de mis hermanos cuando te vean papa yo sé que se preguntaran como fue que te saliste de las profundidades del tártaro.-
-claro jamás esperaran verme de nuevo con un cuerpo de carne y hueso aunque quien los manda a confiarse después de todo Yo soy el dios original soy Chronos Dios del tiempo y padre de los tres principales olímpicos, además de ser Allen Diersen empresario de gran renombre estoy seguro que esto le dará en el orgullo a esa mimada de Athenea.
-Ya quiero ver esa situación, promete que será muy entretenida.
-Claro que si mi pequeño y de verdad espero que pronto encuentres alguien que te amé.
Mientras que en la Mansión Diersen se llevaba a cabo esta conversación en tres lugares muy lejanos entre si tres hermanos compartían un mismo sueño un sueño lleno de dolor, muerte y sangre que no los dejaba descansar tranquilos.
Sueño
Los tres hermanos se encontraban en la mansión de la prestigiosa familia Kido escuchando lo que la Gran Athenea tenía para decirnos, las reacciones no se hicieron esperar y mientras ella explicaba lo que había hecho con su caballero de Andrómeda un ataque sorpresa se dejó caer sobre la gran casona, en este ataque todos los dioses pudieron sentir un cosmos muy conocido para los tres principales olímpicos, los cuales salieron de sus pensamientos y recuerdos al escuchar:
-Jejejejeje así que esta es la famosísima orden del Zodiaco aquella orden de la cual a sus integrantes denominan los asesinos de dioses.- Comento una voz burlesca haciendo referencia a la hija predilecta de Zeus.-
-Así es pero dime Athenea que se siente saberse una inútil que no pudo proteger a su planeta.-
-¿Quién eres tú? Muestra tu cara cobarde.- Exigió la diosa muy enfadada pues este simple dios la había dejado en ridículo delante de todos los demás dioses olímpicos.-
-Modera tu boca jovencita sino quieres que te arranque esa lengua viperina que posees.- Esta amenaza calo hondo en la joven que valorando un poco más su vida volvió a cuestionar.- ¿Qué es lo que deseas de mi planeta? ¿Qué quieres obtener de mí?-
-Jejejeje no seas ilusa diosecita de cuarta lo que yo quería de ti ya lo obtuve gracias a tu acción y a la traición que cometiste yo me encuentro aquí, simplemente pase a saludarte y a mostrarte el cruel destino que te espera en mis manos porque si te tendré en mis manos y rogaras por tu patética vida Athenea pero tu destino ya está escrito y tu final está en mis manos nos veremos para la otra querida Athenea.-
Después de esto los dioses presenciaron como este ente maligno destruía la tierra ya su diosa, obtenía lo que quería y sumía a la tierra, los cielos, los mares y el infierno en un caos total para entregarle la cabeza de la diosa de la sabiduría a otro ente con un cosmos igual o más peligros que el suyo propio y lo último que los olímpicos lograron escuchar antes de sumirse en la total oscuridad del olvido fue:
-Como te lo prometí aquí tienes su cabeza mi pequeño.-
-Gracias por darme el gusto de ver como la torturabas y matabas, como lo prometí ese día que descubrí tu traición tu cabeza es mía por fin Athenea.- Murmuro la joven voz con marcado recelo y odio en su mirar todos pudieron notar entre la oscuridad antes de sumirse en la inconciencia unos ojos verdes fríos cual dagas que sonreí burlón ante la trágica muerte de la que era una diosa inmortal y a la cual ni toda su divinidad logro salvar.-
Fin del sueño
Los tres dioses despertaron exaltados y como uno solo murmuraron:
-La próxima guerra que se aproxima será el ocaso de los dioses pronto todos pereceremos por las acciones de Athenea.- Con esto último dos de los tres hermanos intentaron conciliar el sueño sin embargo el dios del Inframundo se quedó pensativo a la hora de recordar el sueño que tuvo.
-“Eso quiere decir que la traición que realizaste a tu Caballero de Andrómeda será la que desencadene esta destrucción y lamento decirlo pero esto lo pagaras con sangre has cavado tu propia tumba querida Athenea”.- Con este último pensamiento el dios de los Infiernos cayo profundamente dormido sin siquiera saber que muy pronto volvería a ver a su amor solo que esta vez su pequeño no estaría solo pues se había conseguido un protector demasiado poderoso.