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Solo Por Ti (HunHan) por Lady Sess

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Notas del capitulo:

Les gusto el prologo? espero que si ^^


Aqui seguimos fentejando el cumple de nuestro ciervito y el de mi adorada Laulau (suelta papelitos en forma de corazones)

 

Este es su regalo y me alegra compartirlo con ustedes.

 

gracias por haber leido aunque no comentaron ^^

esperemos que se aumenten con el siguiente capitulo

sin mas preambulos les dejo el primer capitulo

buena lectura…

Solo por ti

 

by Angie

 



Capitulo Nº1 - Encuentro…. Casualidad o destino…

 

Hace más o menos 14 meses antes...

 

Ese día apenas había llegado (luego de una largo tiempo fuera de lo que el consideraba su hogar). El bendito viaje a Rusia fue exitoso (como siempre); la puerta del despacho se abrió dando paso a un joven de apariencia seria, enfundado en un elegante traje a medida, su cabello negro lustroso y bien peinado. El hombre joven observó lo que era parte de su hogar, el único que conocía, lleno de cosas tan personales que en ocasiones lo agobiaban, pero en ese momento era otra cosa lo que tenía de mal genio al dueño de aquella mansión.

 

Acababa de llegar de un viaje y lo que más ansiaba en el mundo era un baño, una buena cena y dormir por más de 6 horas seguidas. Si requería que ser sincero el hombre pensaba que su vida no era completa-mente buena, pero no se quejaba abiertamente de eso, siempre había sido así desde que tenía memoria. La única diferencia era que antes era más llevadera gracias a su hermano ZiTao, que siempre estaba al pendiente de sus sentimientos y preocupaciones.

 

Luhan bufo molesto con su tonto hermano, ese chico panda debería haber estado allí en ese lugar, dirigiendo, guiando a su gente y obviamente lidiando con esa bola de vejestorios de mierda que no se cansaban de joderle la existencia. Si los hechos trágicos no hubieran pasado, nada hubieran cambiado y él estaría “libre” de todo aquel mausoleo molesto que siempre intentaba morderle el traseros con sus exigencia.

 

Xiao se pregunto que estaría haciendo en este momento, si Tao estuviera al mando y él fuera solo Luhan el hermanito del gran líder...

 

La verdad era que se imagino a si mismo cámara en mano fotografiando las maravillas del mundo, viajando y disfrutando de mucha mas libertad. Pero el tonto Panda no estaba, hacía más de cuatro años que tuvo que abandonar esos sueños de libertad y abocarse a sus responsabilidades de mantener segura a personas que ni conocía, todo era tan diferente. Porque ahora, a sus 23 años, llevaba una vida demasiado compleja, con las manos manchadas de sangre.

 

El hombre de traje suspiro mientras observaba sus manos pálidas y delicadas, alguna vez soñó que aquellas manos harían cosas maravillosas y únicas, que maravillarían al mundo. Irónicamente si maravillaba con sus logros, pero sólo eran notadas por quienes leían sección policial de cualquier diario, a sus ojos la vida no era justa, pero no se quejaba solo maldecía a su tonto hermano por irse tan pronto y dejarlo a él a cargo.

 

Aunque él era joven se impuso con carácter (y violencia por que no decirlo) creo su propio camino a fuerza de golpes y estrategia bien pensadas. Aunque, aun ahora, siempre estaban intentando fastidiarlo y eso que hacia cinco años de su primer encuentro pero ellos.

 

Los vejetes de mierda, eran tan jodidos y manipuladores que se enfermaban de solo saber que “el” respiraba su mismo aire y no se rendían. Luhan sabía que ellos se regodearían en su propia felicidad si por esas casualidades el joven Xiao consideraba ceder a su agobio.

 

Pero él logro lo que se proponía por que, por más de tres años mantuvo la paz entre los diversos clanes que manejaba, siendo él quien los dirigía y cuidaba, era complejo pero algo que debía ser, por ser quien era o tal vez solo para fastidiar a esas momias engreídas.

 

Pero a pesar del tiempo transcurrido y las diferentes dificultades a las que se había enfrentado y salido victorioso, aun había quienes alimentaban la esperanza de tomar su lugar (como era de esperarse). Pero Luhan no los dejaría, él jamás permitiría que la empresa familiar terminara en manos de esos malditos ancianos. Aunque eso implicara sacrificar más de lo que quería, Luhan lo haría.

  

El teléfono vibró en su bolsillo y con un suspiro tomó la llamada, aunque ya sabia quien era y odiaba con cada fibra de su ser al maldito hombre.

 

-Xiao - magulló en un tono neutro, escucho por un momento - ¿cuando debo partir?...- su cuerpo se tenso al oírlo la rasposa voz en la línea - Bien – afirmó mientras apretaba el puño hasta dejar sus nudillos blancos, escucho como su fax se ponía en marcha y los datos comenzaron a llegar - si esta entrando la información – confirmó en el mismo tono frío que siempre usaba cuando se comunicaba con aquellos sujetos fastidiosos. De repente y de la nada surgió una idea más que tentadora, en un nanosegundo la acepto y la trasmitió sin dudarlo.

 

-Luego de este trabajo me tomare unas semanas – su semblante frío comenzó a cambiar un poco ante la idea de los rostros de aquellos vejestorios al enterarse de su decisión - y no estoy pidiendo nada que no me merezca - gruño ante las primeras protestas que sabía se avecinaban - les enviare un mensaje informándoles mis resultados y luego despareceré unos días – anuncio, sin más de inmediato separo el aparato de su oído y dejo que la otra persona se calmara, tardo mas de la cuenta pero al fin dejo de gritarle.

 

-La verdad es que NO te estoy pidiendo autorización, les estoy informando; NO me presiones más de la cuenta, porque si me cabreo - su voz bajo unas octavas - todos ustedes terminaran jugando porque con el diablo y ni cuenta se darán cuando, ni como paso – espeto sin tapujos - y SI los estoy amenazando – agregó en un tono que casi irreconocible - hace mas de tres años que no tengo descanso – Le recordó con enojo – he estado viviendo mas en un avión que en "MI" casa, ahora informales mi decisión y que no se les ocurra mandar a nadie a vigilarme porque de verdad no volverán a verlo jamás – sentenció - sabes que yo no amenazo inútilmente,  ahora corto me tengo que ir - sin esperar respuesta corto la llamada y se puso en pie estaba muy cabreado.

 

Los ancianos estaban abusando de su posición (como era de esperarse, al considerarlo alguien demasiado joven e inexperto para el puesto de cabeza de la familia incluso a pesar de todos sus logros) por supuesto intentaban en el proceso hacer que renunciara a la empresa familiar, pero él no haría eso, era demasiado cabezota para hacerlo, a pesar de todo era un Xiao y eso era mucho decir.

 

Pero en este momento él estaba sumamente cansado y necesitaba un poco de espacio, porque sino los mataría a todos (la idea se hacía cada vez mas fuerte en su cabeza), seria mas sencillo y quizás lo indicado, pero eso fracturaría las zonas e iniciaría una guerra interna entre pandillas y era lo que menos necesitaba. Él, en este momento, solo precisaba tiempo para relajarse  un poco; cargar pilas para volver a enfrentarlos y que mejor lugar que París para conseguirlo...

 

Con esa nueva apreciación en mente, entro a su cuarto dónde aun tenía la maleta armada, chasqueando la lengua pensado que necesitaría comprar un nuevo atuendo de trabajo y otras cosas, pero no había problema ya estando en el aeropuerto podría revisar las tiendas cercanas y ver que podía adquirir.

 

Se cambio presuroso con algo mas cómodo pero no menos elegante, al salir del cuarto recogió la información  engancho su maleta con su laptop a su hombro y se despidió nuevamente de su hogar para cumplir con los caprichos de aquellos hombres arrogantes…

 

*

París en otoño... simplemente hermoso.

 

Esa fue a primera impresión que tuvo el hombre de apellido Xiao mientras caminaba por aquellas calles, había llegado apenas hacia unas horas y ni bien se había registrado en el hotel salio a recorrer los alrededores cámara en mano como cualquier turista.

 

Aunque sabía que debía comenzar con su "trabajo" decidió observar un poco primero y esperar el momento idóneo para realizar el encargo...

 

Llego a una plaza tranquila y llena de esculturas, sonriendo cual niño se dejo entusiasmar por la magia del lugar mientras tomaba fotos y también apreciaba la belleza simple de una tarde de otoño, el viento jugaba con varias hojas arremolinándolas.

 

Luego de un rato se quedo sentado mirando el esponjado cielo nublado, disfrutando de aquel momento de calma, hasta que una pelota cayó justo en su regazo asustándolo un poco, gracias al cielo la cámara estaba bien guardada y colgando de su cuello. Al ver a los pequeños dueños acercándose les devolvió la pelota con una sonrisa, ellos se lo agradecieron y se alejaron ya iniciando otra gresca por el esférico elemento.

 

En aquel momento Luhan decidió que era momento de volver a su hotel, las horas de viaje y el cansancio que llevaba encima comenzaba a pasarle factura, suspirando comenzó el retornó. Mientras se ponía en marcha sintió una especie de estremecimiento, que  lo puso alerta, escaneo rápidamente a su alrededor y lo único que llamo su atención fue una figura alta que desapareció casi como un fantasma.

 

Xiao estuvo tentado de perseguir y cazar a ese maldito que osaba acosarlo, pero simplemente decidió que estaba demasiado agotado para un enfrentamiento con un acosador ocasional. Se dijo que si volvía a sentir lo mismo era probable que terminara eliminándolo y listo. De igual modo volvió al hotel  en estado completamente alerta, por si había que  actuar rápido.  

 

Ya estando en la cama se durmió pensando que cuanto más rápido se encargara de su pendiente más pronto podría hacer lo que le diera la gana en sus merecidas vacaciones (forzadas) pero vacaciones al fin de cuentas. Con eso en mente se durmió, había puesto el despertador temprano para poder hacer ejercicio y mantenerse en forma, era una rutina que pensaba mantener.

 

8 AM y el pelinegro apenas podía moverse, aun así se bajo de la bicicleta fija,  Luhan se pregunto si debía seguir con aquella rutina tan exigente, haciendo una mueca se dirigió al área de la piscina, se alisto  para nadar y cumplió con el circuito auto impuesto. Luego de mas o menso una media hora decidio que  era el momento de  tomar un buen desayuno. Acababa de salir de la piscina, aun chorreaba agua e intentaba secar su cabello cuando vio a un alto sujeto pasar junto a él.

 

El maldito hombre en verdad debía llevar un cartel de advertencia, lo mas increíble es que miro a Luhan con una ardiente inspección color chocolate que lo dejo completa mente cautivado (diciéndolo de modo elegante). Lo vio alejarse y en verdad tuvo toda la intención de seguirlo. Pero recordó que antes que la diversión estaba el trabajo, suspirando observo su reloj aun tenía tiempo se coloco la bata y camino hacia su habitación, tomó el ascensor y espero que la puerta se cerrara, con el rabillo del ojo noto algo que lo hizo sonreír.

 

La puerta del cubiculo se abrió y él salio camino tranquilamente por el pasillo,  estaba justo frente a la puerta de su habitación cuando la puerta del ascensor se abrió de nuevo y vio salir aquel sujeto quien ahora también estaba cubierto con una bata celeste semi abierta, el alto hombre con tranquilidad paso junto al pelinegro quien no dejo de observarlo mientras sonreía de una manera que  aceleraría el pulso hasta de un maldito cadáver.

 

La tensión que había entre ellos era innegable, especialmente cuando el sujeto rubio le hizo un guiño osado antes de entrar a su cuarto al final del corredor, Xiao se obligo a entrar a su cuarto. No era la primera vez que intentaban seducirlo, pero si era la primera vez que todo su cuerpo reaccionaba a la sugestiva mirada de un extraño. Pero no negaría que el chico era sexy, aunque bastante joven tal vez entre los 19 y los 20, rubio y dueño de un trasero demasiado tentador. Meneando al cabeza, Luhan; se exijo a relajarse e ir a cumplir con su encargo, luego si aun lo volvía a verlo intentaría hincar-le el diente a esas Donas.

 

Xiao se carcajeó de su propia ocurrencia, luego al cruzar hacía el dormitorio su semblante volvió a ser serio; entonces se comenzó a preparo para su cometido. Según el informe previo que había leído solo tendría una oportunidad, sonriendo de lado observo el traje que había adquirido, lindo en verdad, lastimosamente no lo volvería a usar jamás después de esa noche.

 

Chequeo un par de detalles en su portátil luego cerro su computador y se encamino al baño debía alistarse. Mientras terminaba de arreglarse repasaba paso a paso su cronograma, Xiao era muy detallista porque de eso dependía su éxito.

 

Solicito un taxi y bajo al Hall del hotel, sintió sobre el las miradas (él sabia que eso pasaría pero no podía evitar llamar la atención) pero como de costumbre ignoro todo lo que lo distrajera de su objetivo, enfocándose solo en el plan. Al salir su taxi ya lo esperaba dio la dirección y guardo silencio repasando cada movimiento, observo su reloj digital, todo iba bien, estaba a tiempo. El auto se detuvo pago la carrera, bajo del vehiculo y se quedo un momento ahí parado frente a la majestuosa vista, una obra maestra de la arquitectura teatral del siglo XIX.

 

Frente a él se encontraba el gran teatro el Palais Garnier, sustrajo de su bolsillo interno un ticket que había adquirido previamente. Sabía que el sujeto en cuestión asistiría a ese evento (pura fachada para sus asuntos sucios) pero él no estaba para juzgar, por él de momento, era un simple ejecutor.

 

Caunto mas caminaba adentro de aquel recinto mas deseaba haber traido su camara, tantas cosas bellas que el necesitaba recordar, pero sabia que tal vez no volveria a pisar ese lugar; Sacudio aquello de su cabeza y termino de subir las escaleras. Tomó su lugar en uno de los palcos justo en frente del de su objetivo y espero el interludio para tomar su posición ideal y ejecutar su plan.

 

El sonido de una maravillosa pieza comenzó a inundar el lugar, se dedico a escuchar con calma y paciencia disfrutando del entretenimiento, el momento se acercaba inexorable pero nada le impedía de recrearse del espectáculo en si.

 

El momento llega de forma irremediable y Luhan salió sigiloso de su puesto, con habilidad neutralizo y tomó el lugar del mozo asignado, para ese palco tan exclusivo sin problema y llevo la charola con copas. Sirvió con cautela y se retiro presuroso, intentando no llamar la atención de nadie.

 

El trabajo esta hecho, porque Xiao no falla jamás, entonces volvió a su lugar observo la escena que siguió. El tipo (un maldito pederasta organizador del evento además) bebía su copa mientras charlaba amena-mente con la que era su esposa -una lujuriosa sádica- que alimentaba las pasiones de su consorte con jovencitas incautas que podía conseguir en el mercado negro de personas)

 

Cuando aquel hombre de gruesa figura sintió el primer espasmo de dolor en su pecho, Luhan no pudo evitar sonreír complacido, es que la neurotoxina (química-mente alterada) que había utilizado era la mejor y efectiva al 100%. Además no había forma que descubrieran aquellos químicos, porque simplemente, se confundía con los glóbulos rojos del torrente sanguíneo borrando cualquier signo o posibilidad de ser descubierto...

 

Su objetivo cayó en el piso, haciendo añico todo a su paso y el escándalo se instalo en aquel reducido espacio, llamando la atención de los demás concurrentes al evento de caridad. A los gritos la ambulancia fue llamada - "inútil" - aseguro mentalmente el hombre chino desde su puesto que no se perdía detalle imaginando lo que la droga estaba haciendo en el sistema nervioso de la victima.

 

Los para-médicos llegaron rápido pero nada pudieron hacer el gran barón estaba muerto aparentemente "ataque cardiaco” Luhan se movió con sigilo y elegancia escuchando lo que dijeran los médicos confirmando lo que ya sabía.

 

Su encargo estaba hecho, el blanco eliminado, envió un mensaje guardo su celular. Sintió que llegaba una respuesta no la miro simplemente salio a la calle y comenzó a caminar ajustándose el abrigo protegiéndose de la brisa nocturna.

 

-Vacaciones... - murmuro el pelinegro mientras se alejaba. A sus oídos aun llegaba el aullar de las sirenas lo ignoro todo, ya no era su asunto.

 

Cerró los puños que estaban en los bolsillos de su elegante saco. Ahuyentando la sensación de culpa que siempre lo acosaba luego de cumplir con su trabajo, sus manos estaban manchadas, no de sangre literal-mente hablando, porque él era un experto en matar sin siquiera estar cerca de sus víctima.

 

Fue criticado por sus técnicas, más él se mantuvo firme en su postura. El, Luhan, no empuñaría un arma; no porque no supiera manejarlas sino porque no era su estilo. Eso de andar cargando algo tan pesado y preocupando se por ser incriminado por algún error, su manera era sutil y precisa.

 

El siempre se ha encargado de hombres ruines y malvados (siempre encubiertos bajo la mascara de la aristocracia) aun así su conciencia suele castigarlo severamente. En ocasiones Xiao siente que esta en el camino equivocado, pero meneando la cabeza se sacude la idea, su trabajo era y será importante ya que había demasiadas personas bajo su protección. Chasqueo la lengua con disgusto por la simple idea de dejar que los ancianos hicieran lo que les plazca con ellos.

 

Caminar siempre lo ayudaba a digerir esas sensaciones que lo aquejaban y dada la distancia a la que se encontraba su hotel seria bueno para él; porque esa fría noche ayudaría a calmarse. Sus pasos lo llevaron hacía la plaza donde había estado unas horas después de llegar, se sentó en la misma banca y allí se quedo hasta que dejo de sentir su propio cuerpo, era cociente que debía moverse antes de que pagara caro las consecuencias de su desanimo. Resoplando se puso en marcha, llego al hotel se dirigió al ascensor entre presiono el botón de su piso sin mirar se giro y apoyo su espalda en la pared del cubículo, cerro los ojos cansado, pero al oír alguien entrando al ascensor volvió a su postura elegante. Grande fue su sorpresa al observar disimulada-mente la figura enfundada en cuero.

 

Xiao detallo entonces aquel chico de anchos hombros y cintura estrecha debía tener  1, 80 más o menos ya que le llevaba algunos centímetros, su cabello rubio, ahora estaba peinado con rebeldía. Cuando el mas bajo se detuvo en aquellos ojos color chocolate se dio cuenta que había estado bajo el mismo escrutinio y sin poder evitarlo sonrió, el gesto fue imitado por el otro hombre. Un sentimiento cálido lo envolvió y ni cuenta se dio que el ascensor se había detenido. Entonces hizo algo que quería hacer desde el primer momento en que lo vio.

 

-Luhan - extendió su mano que fue recibida por un cálido apretón.

 

-¿Solo Luhan?- cuestiono curioso el más alto.

 

-Es mejor así por el momento – aseguro el de traje mientras se dejaba abrazar por el contacto calido de aquella extremidad.

 

-Si usted lo dice...- accedió el rubio - me llamo Sehun - respondió el más alto - Un placer.

 

-Tal vez...- murmuró Xiao mientras sostenía la diestra sin querer soltarla.

 

Ambos salieron del ascensor cuando este comenzó a chillar ya que aun tenía la puerta abierta. Ya estando fuera del cubículo ambos se percataron que aun seguían tomados de la mano, fue el más alto quien se soltó. Caminaron en silencio por el pasillo hasta que el chico llamado Sehun hablo.

 

-¿Te parecerá atrevido pero quisieras tomar un trago conmigo? - consulto - ¿Tal vez comer? - insistió al no tener una respuesta.

 

-Eres muy amable pero ahora no - rechazo Xiao - ¿que tal mañana? – pregunto esperanzado.

 

-¿Desayuno? - consulto con premura el mas alto haciendo reír al pelinegro - perdón ¿es pronto?

 

-No... No - murmuro Luhan, entre risas, dado que se había dado cuenta que no era el único ansioso - el desayuno esta bien - acepto por fin mientras abría la puerta de su habitación - ¿9 am?

 

-¿cerca de la piscina?

 

-hecho - sonrió Luhan - Buenas noches Sehun

 

-Buenas noches Luhan

 

Xiao entro a su cuarto, al cerrar la puerta se apoyo en ella e intento controlar sus pulsaciones. El hombre era osado y eso le gusto mucho.

 

Se separo de la puerta y camino al baño, se quito el traje con cuidado, ya que en el atuendo aun quedaban restos de la neurotoxina que había utilizado (no mucho pero el suficiente para arruinarte el momento), gracias al cielo Sehun no había insistido para que lo acompañara y le dio el tiempo de deshacerse de su "ropa de trabajo”.

 

Se dio una ducha y al salir enfundado en su bata de baño fue directo a su cama y se tiro en ella, la tensión le estaba pasando la cuenta, cerró los ojos y allí se durmió. Unas horas después Luhan se despertó por completo luego de tener una de esas pesadillas, que lo sacudían de vez en cuando. Con resignación se salio de la cama, luego se enfundo en una ropa deportiva y bajo al gimnasio a darse una buena ración de ejercicio para relajar un poco la tensión de su organismo.

 

Llevaba más de una hora corriendo en la cinta mientras observaba por la ventana como amanecía, cuando se detuvo su cuerpo se quejo bastante así que decidió tomar un relajante baño en el jacuzzi enorme que había visto en el área de las piscinas. Observó su reloj y se percato que aun faltaba bastante para su cita con aquel chico sexy, camino a los vestidores y se puso un traje de baño nuevecito que compro en la tienda de deporte porque no quería subir a su cuarto. Ya listo observo el lugar que estaba completamente vacío, le encantaba eso, porque no tenía que estar alerta todo el tiempo. Sin más se quito la bata y se sumergió en el jacuzzi, dejo que la burbujeante agua hiciera su trabajo.

 

Abrió los ojos cuando escucho el escándalo de un grito seguido del sonido de un chapuzón, con cautela se acerco al borde y se asomo sólo para ver aquel rubio adonis emerger y luego nadar vigorosamente de una punta a la otra con diferentes estilos. Cierta mente el hombre llamado Sehun no tenía desperdicio podía ver como se movía cada músculo según el estilo con el que decida a nadar.

 

El sonido de una alarma detuvo el movimiento de Sehun y lo obligo a salir de la piscina. Se seco presuroso y como si esperara ya preparado tomó la llamada que acababa de entrar, Luhan no pretendía espiar al hombre así que regreso a su posición inicial y cerro los ojos unos diez o quince minutos después el sonido de alguien sentándose junto a él lo obligo a volver a la realidad.  

 

-Hola... – saludo Xiao apenas controlando el estremecimiento que el causo un pequeño rose de aquella piel.

 

-Buenos días - saludo el recién llegado.

 

-Despierto desde temprano - señalo el más bajo.

 

-Usted igual caballero - comento  Sehun, hubo un largo silencio hasta que el mas alto hablo otra vez - ¿Puedo preguntarte algo?

 

-De acuerdo - acepto el pelinegro incorporándose.

 

-¿Que edad tienes?

 

-¿Y tu?

 

-YO pregunte primero - se quejo el rubio.

 

-Pero seguramente soy mayor que tu así que merezco respeto - dijo sutilmente restándole importancia al tono de reproche del alto.

 

-No es cierto - señalo Sehun - ¿que edad puedes tener? - caviló el rubio -17... 19 máximo - comento con seguridad.

 

-Bueno yo también daré mi opinión sobre tu edad - lo miro detalladamente - Mmmm pensé que eras mayor pero ahora que te veo de cerca... Tienes 18 máximo y se que no tienes mas de eso - afirmo el mas bajo mientras se incorporaba para salir de aquel lugar.

 

-Aun no me dices tu edad - señalo el más alto imitándolo.

 

-Bueno, a mi favor diré que no puedo concentrarme si te tengo alado sin ropa en sima  - aclaro el pelinegro mientras se colocaba la bata y caminaba hacia el lugar donde tomaría  un masaje.

 

-Señor Luhan es usted muy atrevido - dijo el rubio siguiéndolo.

 

-¿Te  molesta? - consulto Luhan, desde la puerta.

 

-No, es refrescante.

 

-Bien joven Sehun -lo miro de arriba abajo - lo veré en 55 minutos en... - miro el área de desayuno junto a la gran piscina - la mesa cerca de las palmeras – sugirió.

 

-¿Y luego me dirá lo que quiero saber?

 

-Ya lo veremos - murmuro Luhan provocando un estremecimiento en el mas alto.

 

 

*

 

Desayunaron juntos, Sehun intentando sacar información que sutilmente Luhan no respondía casi nada. Bueno eso no es exacto ya que al final el más bajo gano la apuesta porque descubro que era mayor que el jovencito Sehun (18 años). El asombrado menor  no creía que el otro tuviera 23 años, provocando muchas risas por parte del pelinegro.

 

También no fue difícil deducir su procedencia; ya que uno era coreano y el otro chino. Más allá de eso todo era una incógnita que los mantenía alertas y ávidos el uno por el otro. Así tuvieron un desayuno entretenido, ambos parecían olvidar todo lo demás. Después del desayuno decidieron pasear como turistas cámara en mano se sumergieron en la vorágine de aquella cuidad.

 

Cuando las luces del atardecer tiñeron los cielos ellos no lo vieron ya que estaban enredados en un beso demasiado apasionado, las acciones y deseos eran tan naturales; como si aquello fuera lo correcto...

 

De regreso en el hotel ambos subieron al su piso tomados de la mano, observándose con una anhelo casi demasiado palpable. No hubo palabras de más solo las exactas preguntas entre besos y la respuesta afirmativa de la otra parte mientras lo guiaba al interior de su departamento.

 

Aquella primera noche se convirtieron en amantes, fue una sorpresa de sensaciones para ambos. Hubo una lucha de dominación con cada beso y caricia osada, al final fuera Luhan quien tomara la iniciativa y el mando. Si bien Sehun había tenido relaciones, nunca fue el pasivo, ceder el control fue mejor de lo que imagino jamás; aquel pequeño hombre sabía muy bien lo que hacía.

 

La noche fue caliente llena de experiencias nueva para ambos ya que Luhan acepto (en algún punto del encuentro) ceder el control una par de veces; deleitándose con la actitud agresiva de su joven amante. Mientras que Sehun se dejo guiar por aquel hombre experimentado que lo llevo a sentir cosas que de ningún modo creyó sentir.

 

Se durmieron abrazados como viejos amantes que se hubieran reunido luego de una larga separación, sus cuerpos solo se quedaron quietos cuando estuvieron satisfechos el uno del otro.

 

Cuando Luhan despertó un par de horas después no reconoció el cuarto, extrañado enfoco a su alrededor y se percato que estaba durmiendo en la habitación de alguien mas; el peso extra sobre su cuerpo le dijo que no estaba solo y los recuerdos lo invadieron. Sonriendo intento incorporarse pero solo pudo hacerlo un poco y allí noto aquel joven que literalmente dormía sobre su cuerpo.

 

Xiao debería estar molesto, el muchacho dormía sobre su pecho y cubría su propio cuerpo con toda su longitud; mas allá bajo las mantas destacaban aquellas preciosas Donas que había saboreado a gusto. Solo por eso no se quejo y decidió quedarse quietito a ver si conseguía despertar al pequeño bello durmiente antes de que le diera un calambre o en su defecto sus piernas murieran por la falta de circulación. Luhan era un tipo fuerte, el podría soportar cualquier cosa, menos la sensación de hormigueo que en este momento comenzaba a sentir.

 

Hundió su diestra en aquella mata rubia e intentando despertarlo, pero el chiquillo era duro de despertar. Bien debería hacerlo antes que comenzara a chilar como niña eso no era sexy. Tuvo que usar un poco de fuerza pero al final consiguió escapar de aquel feroz agarre. Al incorporarse hizo un ridículo bailecito debido al hormigueo de sus piernas mientras maldecía en su idioma natal y luego se fue al baño a pegarse una buena ducha.

 

Se entretuvo por un momento pensando seriamente en que se supone haría ahora, se dijo que eran vacaciones y él debía divertirse, después pensaría en lo demás; así que ya teniendo un plan en mente; mas relajado salio a ver a ese chico dormilón. El muy bello durmiente seguía en la misma posición, lo pensó un momento y tomó una decisión salio del dormitorio  debía organizarse.

 

Mientras pedía el desayuno ordeno unas cosas más que tenía pendiente por el teléfono del cuarto, cuando el desayuno llego unos 15 minutos después, dio una propina al botones volvió al cuarto y le dejo una nota a su amante justo sobre la mesita de noche salio de allí. Había tomado la iniciativa y no iba a detenerse ahora, así que volvió a su propio cuarto donde puso todas sus maletas en orden. Bajo a la recepción para pagar la cuenta, también solicito dejar algunas de sus cosas en una caja de seguridad del hotel hasta que volviera a su país. Cuando estuvo en recepción consulto horarios, caminatas a la campiña y otros paseos famosos mientras esperaban sus recibos ya que el pago fue en efectivo.

 

Al terminar con ese asunto, muy animado se encamino hacía el ascensor con su bolso pequeño y la mochila en la espalda. En el momento en el que subió al ascensor estaba pensando seriamente en que seria bueno alquilar un auto para moverse libremente sin horarios.

 

También creía que fue muy torpe al no averiguar cuanto tiempo estaría Sehun en el país, porque pensaba invitarlo a compartir sus vacaciones, le gustaba mucho su compañía. Sonriendo ante esa atrevida idea salio del elevador y se encamino por el pasillo hasta la habitación marcada con el numero 563, donde seguramente aun dormía aquel muchacho endemoniadamente sexy.

 

Para ese momento Xiao se había dado cuenta que el rubio le gustaba, pero Luhan no era tonto; no vivía en el país de las maravillas, tampoco planeaba la vida entera y el final feliz. Porque no sabía que le depararía su futuro (teniendo encuentra lo que le esperaba a su regreso a sus responsabilidades) por eso decidió pensar solo en el ahora.

 

El quería vivir solo el momento actual y si era en compañía del joven Sehun mejor. El chico era lindo, apasionado y lo deseaba. Se dijo que sus vacaciones serian excelente en su compañía.

 

Se paro frente a la puerta, entonces se debatió en llamar y despertarlo o idear la forma de entrar por si sólo. Pues bien no pensó mucho cuando vio a la camarera acercarse con el carrito de la limpieza, actuó de un modo encantador con ella y le pidió unas servilletas extras y entonces con un hábil movimiento extrajo la llave maestra la apoyo en el lector y la puerta; esta se abrió sin problema de forma deliberada se agacho dejando caer la tarjeta magnética luego llamo a la señora y le entrego la llave... Ella estaba muy agradecida y se lo demostró con un efusivo beso en la mejilla. Luhan la despidió sonriendo y agitando una de sus manos de manera casi infantil.

 

Ya resuelto el asunto de como entrar la vio desaparecer y suspirando entro a la habitación, dejo caer el bolso sobre el sillón y estaba apunto de deshacerse de la mochila cuando escucho un ruido fuerte proveniente del cuarto que hizo que un preocupado Xiao apresurara el paso a ver que estaba pasando. No alcanzo a llegar al cuarto cuando vio salir a un despeinado rubio con la ropa mal puesta y descalzo.

 

¿Que sucede? - consulto el mayor. Sehun se quedo parado en su lugar, pestaño un par de veces (como si no creyera que estaba allí parado) antes de acercarse al mas bajo y abrazarlo con fuerza.

 

-Luhan- murmuro y comenzó a temblar.

 

-¿que sucede? Sehun me estas preocupando - aseguro el pelinegro apretando el abrazo con sincera preocupación.

 

-Pensé que te habías ido, que me habías dejado - confeso el mas alto sin disolver su agarre.

 

-Te deje una nota avisándote que volvería luego de terminar con unos tramites - aseguro el mas bajo sin soltarse- ¿No la viste? - consulto mas relajado, Sehun meneo la cabeza.

 

-Me desperté y no estabas, te busque y no estabas- relato acongojado - como no sabía tu numero de celular llame a recepción para que me comunicaran con tu habitación y me dijeron que habías cancelado y te ibas... yo... yo iba ir a buscarte...

 

-Tranquilo - susurro el mayor acariciándole la espalda como a un niño pequeño - si cancele mi cuenta - dijo - Pero fue porque no le vi el caso de tener dos habitaciones si planeo dormir contigo.

 

-¿Te quieres quedar conmigo? - pregunto Sehun al fin separándose un poco para mirarlo - ¿De verdad?

 

-Por supuesto - sonrió - ¿que creías que haría?

 

-No lo se... yo nunca había estado con alguien como tú… - señalo Sehun - me gustas – declaro sin más.

 

-Esa es una declaración seria...

 

-¿No me crees?

 

-Yo creo que ambos nos atraemos mucho el uno al otro y seria bueno conocernos mejor - razono el mas bajo - ¿quieres pasar conmigo lo que quedan de tus vacaciones? - consulto.

 

-Si

 

-Que bueno que dijiste que si

 

-¿Y si me hubiera negado?- quiso saber el rubio.

 

-Te habría seducido hasta que me dijeras que si- declaro Xiao sin tapujos.

 

-Demonios debí decir no – magullo el más alto.

 

-Quien sabe tal vez – ronroneo el pelinegro -  después de desayunar estaba pensando en  seducirte para  que me acompañes a un paseo.

 

-Oh... tal vez pueda convencerte de que nos quedemos aquí...- contesto en el mismo tono.

 

-Puede ser si te esfuerzas quien sabe – murmuro el pelinegro pegándose mas al mas alto...

 

Oxoxoxoxoxoxox

Notas finales:

O..O OMG! que opina?

 


ya es el cumple de mi amada Laulau!!

 


espero que el guste este mi primer Hunhan/ Hanhun XD

 

Ya es tarde y yo aun sigo aqui

 

pero debo cumplir.

 

bueno nos vemos mañana con otro capitulo

 

Saludos mi corazones!!!

 


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