A lo largo de mi vida he escuchado todo tipo de estilos musicales, tantos que me es imposible nombrarlos. Y ahora, con 18 años, admito que me he traumado un poco con el género del kpop.
Tan sólo escucho la música de todos los idols y me divierto viendo todo tipo de programas de variedades surcoreanos, nunca he querido ir a dicho país como la mayoría de las chicas, ni fantaseo con casarme con algún chino o cosas por el estilo.
Pero ahora, al enterarme sobre un concurso para ganar un viaje a Corea, debo de admitir que siento curiosidad por visitar el país y más si es en compañía de BTS. Y repito, no tengo fantasías capopers sobre casarme con uno de ellos ni eso, pero no perdía nada con participar en el concurso, con la suerte que siempre cargo no creía ganar.
Así que sin más decidí participar con un mini webtoon, no dibujaba tan mal y había ido a clases de coreano anteriormente por lo que no se me dificulto mucho el hacerlo.
Tan sólo hice aquello porque no tenía nada más que hacer y, con un poco de suerte tal vez podría ganar alguno de esos premios de consuelo que daban semanalmente.
Así que cuando me llegó un correo de la KBS notificandome que había ganado y que grabaría un tipo de programa con BTS, me caí del asiento, y me quedé mirando la pantalla de mi laptop por tres horas sin poder creerlo, no salí de mi estupor hasta que mi madre entró a mi cuarto amenazandome con una chancla para salir a comer.
-¿Qué haces en el suelo? Llevó años llamándote, la comida esta lista. Sal a comer.
-Mamá, yo gané. Gané y aún no puedo creerlo. Oh por dios, Ana me va a matar. - dije para posteriormente ponerme a gritar como desquisiada.
Cuando logré calmarme, y un regaño por gritar más tarde, me dispuse a darle las buenas nuevas a mis mejor amiga. Fangirleamos por teléfono cerca de tres horas, y mi vida siguió siendo normal.
Y ahora, a un mes después de eso, de mi ciudad tuve que viajar a Los Ángeles para poder transbordar a un avión rumbo a Corea del Sur. Y miles de años más tarde (tiempo que tomó el vuelo desde mi perspectiva) el avión por fin había aterrizado en tierra surcoreana.
Minhee, la grandiosa chica que iba a cuidar de mi en mi estadía, me había dicho que me iba a estar esperando con un cartel con mi nombre, así que después de ir por mis maletas, entre un mar de gente pude distinguir a una chica delgada junto a un chico un poco más alto y robusto y, justo en las manos de este, un cartel con letras descuidadas donde se leía ¡_______,bienvenida a Corea!
Con mucho entusiasmo me acerqué a ellos.
-Houla. Nos alegrra muchio tenerrte con nosotrosus. - hablo el chico con un pésimo intento de español, de cerca se veía algo mayor, tal vez de 34 o 35 años.
-¡Hola! Y puedes hablarme en coreano, no tengo algún problema con ello.- le hable en su idioma natal y le sonreí, pareció más aliviado al saber que podíamos hablar el mismo idioma.
-¡Cariño, que bueno que llegaste a salvo!- habló Minhee y me abrazó- Este es Haejoon, mi esposo y mánager de BTS. Por los dos meses que estarás aquí vivirás con nosotros, nuestro departamento queda cerca del de Bangtan, por cierto. - digo con tono sugestivo. Yo sólo reí a ello.
-Bueno, señoritas. Será mejor que nos vayamos ahora o habrá demasiado tráfico.
Asenti con la cabeza y caminamos hacia el coche de la pareja. El camino en coche fue muy ameno y divertido, hablamos de todo un poco para conocernos y alrededor de una hora después llegamos a un bonito departamento y comimos algo de la deliciosa comida que preparo Minhee.
-Será mejor que descanses por hoy, mañana comenzará tu aventura.- Minhee me llevó a una pequeña habitación.
-Si, gracias. Hasta mañana.- le sonreí y ella se retiró.
Después de arreglar mi ropa en el closet y llamar a mi familia y a Ana, mi mejor amiga, para contarles todo lo que había hecho, me dispuse a dormir ya que el cambio de horario en verdad me había afectado y me sentía agotada.
Minhee tenía razón, a partir de ahora viviría una aventura y debía estar preparada para ello.